La muerte nunca es una buena decisión
para arreglar los problemas,
solo es una desición cobarde.

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Algo no handaba bien. Cuando ayudó a Jimin bajar del auto junto a Soobin. Su amigo vino corriendo hacia él.

-¡Joder, por fin! -dijo un aliviado Taehyung. Los dos chicos miraron confundido al menor.

-¿Qué sucede?

-Qué tu padre está en la cárcel, Jeon. -

Jungkook abrió los ojos por la noticia. Rápido volvió a abrir el auto y miró a Jimin.

-Ve. -le dijo JiMin sonriendole. Se acercó y le beso para despedirse. Tenía que ir a ver a su padre.

Condujo lo más rápido posible. Cuando llegó a la comisaría pudo observar al abogado de su familia hablar con lo que parecía ser un agente policial pero no dudo en acercarse, el abogado al verlo dio por terminada su conversación y miró a Jungkook.

-¿Qué pasó? -le preguntó cuando se acercó a él rápidamente.

-Lo siento, Jungkook. -le entregó una carpeta. -Hace dos años tu padre hizo un movimiento muy peligroso con su socio Lee. Pero al parecer este le descubrió y le amenazó por haberle robado una gran cantidad de dinero.

-¿Mi... Mi padre hizo e-eso?-Dijo confundido, vio los papeles y se dio cuenta de unas cuentas que no daban, a simple vista se podía ver la perdida de dinero y realmente se preocupo por ver aquello. Eran evidencias.

-Si, joven. El señor Lee lo demandó, ganó la demanda. Su padre ganó cuarenta años de prisión. Pero al parecer su padre hizo un trato con Lee y aplazo todo hasta ahora.

-Dios... -se sentó, tanta información que de una le mareo. Toco su cabeza, ¿que iba a hacer? Su padre estaba encerrado por fraude y robo.

-No se debe preocupar demasiado. El señor Lee quiso encargarlo pero el señor Jeon fue más inteligente así que Lee no pudo tocar su dinero. -El abogado suspiro y miró con tristeza a Jungkook quién ahora estaba perdido en sus pensamientos. -El dinero de su padre y de su familia está intacto así que podrá recibir aún más sin tener miedo de que se lo roben.

-¿Cómo quiere que no me preocupe cuando mi padre va a estar cuarenta años encerrado? - Dijo con tristeza.

-Su padre quiere verlo... -Le informo el abogado. Jungkook asintió, ahora lo que más quería era ver a su padre.

Antes de entrar su móvil empezó a sonar. Con molestia por tan insistencia contestó.

-¿Qué pasó, Kim?

"¿Aún no sabes la noticia?"pregunto el otro con una voz un tanto extraña.

-¿De mi padre? Si. -dijo de mala gana.

"Lamento eso, pero no esa noticia..."dio un suspiro al darse cuenta que en efecto como pensó, Jungkook no sabía nada.

-Kim mi cabeza va a explotar, mi padre está encerrado, quiero verlo y tu lo unico que haces es impedirmelo así que se claro que no tengo todo tu tiempo.

"Jungkook... Suran esta muerta."

Jungkook se tenso al oír aquella noticia. Tenía que hacer una puta broma porque eso no podía ser cierto.

Aún procesando la noticia se dejó recostar en la pared con cansancio que sintió de la nada, el dolor de cabeza aumentó aún más. Suran estaba muerta y es que puede que nunca se llevaron bien pero convivió con ella por dos años y no verla le era imposible.

Tenía que ser un broma... Hizo una mueca por el dolor que se aumentaba aún más. Tantas noticias de una era horrible.

-Joven, Jeon. ¿Se encuentra bien? -pregunto el abogado al ver al menor. Este asintió aún con la mueca.

Volvió a posicionar el móvil en su oído.

"Lo siento tanto."

-Esto...e-esto es increíble... Te juro que no puedo con tanto, Kim

"Jungkook el verdadero problema es Lee. La chica se suicidó, se corto las venas de su brazo y antes de eso dejó una carta. Esta jurando tu muerte, Jungkook. El te hecha la culpa por que su hija se suicidó por que nunca le correspondiste."

Tenía que ser una broma, diablos, no, no. Ahora entendía todo el comportamiento tan pasivo de Suran, lo había estado planeando desde un buen tiempo y solo quiso dejar las cosas bien para después acabar con su vida. Ahora se sentía culpable de hacer que ella llegara hasta esa decisión.

-Dios...

" Solo te pido que tengas cuidado. Lee es peligroso y va a hacer de todo para, según él, hacer justicia por su única hija."

Un mareo le atacó. Con ayuda del abogado pudo ponerse de pie. Pero el dolor de cabeza fue peo y de la nada se sintió muy débil. Tanto que cayó al suelo y escucho un" ¡joven Jeon! " muy lejos, después vio todo negro.