»68. Quiero disculparme«

Jungkook agradeció en voz baja cuando el mesero colocó el platillo de entrada frente a él, había pedido unos raviollis rellenos, era una de sus comidas extranjeras favoritas y a su vez una de las pocas que conocía.

"¡Mmh!" Gimió el castaño en apreciación a la comida, Taehyung rió al verle tan contento mientras alimentaba a Yeontan. Había ordenado para sí mismo espaguetis con vegetales bañados en pasta blanca y para Yeontan sopa de tomate, la cual era su usual merienda en casa del mayor.

"Por lo que veo, estás disfrutando tu comida adecuadamente" Dijo el pelinegro, intentando sonar lo más amable y educado que podía, no perdiendo detalle de la forma en la que Jungkook masticaba con alegría, el castaño asintió, dando pequeños saltitos y aplausos desde su asiento frente al mayor.

"Muchas gracias por traerme aquí, hyung" Murmuró Jungkook, verdaderamente agradecido, sus ojos brillando en sinceridad -incluso considerando las diferencias que existían entre Taehyung y él- El pelinegro negó, sorbiendo un poco del vino frente a él.

"Era lo menos que podía hacer para...disculparme" Taehyung frotó sus manos contra su pantalón, éstas estaban temblando y no lo dejaban concentrarse por completo, el castaño frente a él ladeó su cabeza, extrañado con su actitud, ¿Taehyung estaba bien?. "Yo-yo quiero disculparme por la forma en cómo actué, no debí ser tan rústico contigo aquél día al hablarte de esa manera, tú no te lo merecías, y lo único que hiciste fue encontrar a Yeontan y-y mantenerla a salvo, por eso estoy muy muy agradecido contigo" La declaración del pelinegro terminó en un susurro, con él mirando hacia al suelo. Jungkook sonrió, enternecido, él tenía razón, Taehyung no era como él pensaba.