—Recapitulemos— digo moviendo el lápiz entre mis dedos. Jasper frente de mi asiente— Los vampiros son criaturas de sangre fría, con aspecto pálido, ojos rojos o dorados- dependiendo de su alimentación-, su piel es dura como roca, aparte de que poseen dones que se conectan a sus personalidades como humanos. Solo se les puede asesinar arrancando su cabeza y corazón.

Con un subrayador rojo marco las partes de alimentación y como acabar con ellos.

—Y para transformarse se necesita que otro vampiro lo muerda, dejando que el veneno recorra todo su cuerpo, pero si dejara de respirar antes de que el veneno logré su cometido, no habrá nada que se pueda hacer.—completa Jasper.

Asiento y tomo una pequeña cámara instantánea. Jasper sonríe levemente y deja que yo tome la foto.

Una vez esté lista la pego en la hoja de mi libreta.

—¿Ya me dirás para que es eso?— pregunta señalando la libreta entre mis manos.

—Documento todo lo especial—guardo mis cosas y junto al rubio nos ponemos de pie para entrar a la escuela.

—¿Con que propósito?- Jasper me pasa uno de mis lápices que había caído al suelo, al tomarlo rozo ligeramente su mano, que a comparación con sus hermanos, no me trasmitía aquel frio característico. 

— Conocer— respondo con simpleza.

Al entrar a la escuela vemos a Bella hablar con Alice y Adrián, y por la cara de la Swan puedo ver que no tiene muchas ganas de estar ahí.

—Ya te vi abrirlo y te encanto, lo usaras esta noche— es lo primero que escucho de parte de Alice—porfa nos vamos a divertir— en ese momento lanza una mirada significativa a Jasper quien rápidamente entiende que quiere decir.

—Esta bien, claro—Acepta Bella relajada.

—Perfecto te veo a las 7—dice Alice dando saltitos de alegría antes de tomar mi mano y jalarme lejos de ellos

—¡Jasper!—reclama Bella al darse cuenta de lo que acaba de suceder—no es justo que controles el estado de animo.

—Lo siento Bella, feliz...—se detiene al ver la mirada de Bella sobre el—olvídalo.

—Hey— Alice y Adrián se paran delante de nosotros y me tienden un envase rectangular.

—Es de Esme— me explica Adrián al ver mi rostro confundido.

Abro el envase y veo un pequeño pastel de chocolate decorado con la palabra "tu puedes".

—Sabemos que hoy tendrán sesión con la psicóloga. Es un pequeño detalle— dice Alice sonriente.

Los abrazo sintiendo mi corazón latir con fuerza.

Me sentía bien. Eso es bueno, ¿No?

Aliso mi vestido y acomodo mi cabello.

Acomodo las cosas entre mis manos y como puedo toco la puerta.

La puerta se abre Esme, quien al verme me sonríe.

—Querida estas preciosa— me alaga haciéndose a un lado para que pase.

—Gracias Esme, usted igual— la abrazo brevemente antes de tenderle una bolsa— no es tan significativo cómo lo que usted me dio, pero espero le guste.

Ella niega manteniendo su sonrisa en el rostro. Esme Cullen sin duda es una mujer muy hermosa y amable, aquella sonrisa que daba me recordaba a la mirada maternal de la señora Weasley.

—No te hubieras molestado— dice sonriendo, ella toma mi mano y la aprieta ligeramente, como un gesto cariñoso y lleno de aprecio. 

Insisto y ella abre la bolsa dejando ver un dibujo.

—Es más regalo de Teddy que mío.— explique ligeramente divertida— le he hablado de ustedes y bueno... Creo que se ha inspirado bastante.

El dibujo era uno extenso, en dónde estaban todos los Cullen, Teddy y yo.

Esme admiraba aquel dibujo como si fuera el diamante más grande del mundo. Paso sus dedos por el rostro de cada integrante, admirando los trazos desalineados y los colores que se salían del borde. Para Esme aquella obra maestra era única. 

Me vuelve a mirar y me abraza agradecida, tratando de expresar toda su gratitud atreves de un abrazo.

Juntas caminamos hasta la sala, en donde estaban todos.

Empiezo a admirar toda la casa cuando veo unos platos con comida en la mesa. Una gran variedad expuesta única y exclusivamente para las únicas dos personas que podían comer en toda la cada. Aquel detalle hizo que mi corazón saltara con cariño.

Camino hasta Jasper quien me pasa un vaso con refresco. Me ofreció una sonrisa amistosa, encantando por verme nuevamente. El se acerca mas hacia mi y sin dejar su aire tranquilo habla.

—¿En qué momento del cumpleaños nos escapamos?— susurra como si eso fuera suficiente para que los vampiros no nos escucharán — me enteré que estrenaron una nueva película de Piratas del Caribe.

Lo miro cómplice, compartiendo por unos instantes aquella mirada de diversión y travesura, que sin darme cuenta hice después de tanto tiempo.

— Parten el pastel y huimos— me guiño un ojo y chocamos nuestros puños sellando el trato. Aquel acto se sintió correcto, natural, aquello me hizo sentir una paz que hizo que quisiera aferrarme al momento lo mas que pudiera.

Por la puerta entran Edward y Bella.

—Lamento todo esto, no pudimos controlarla—dice el patriarca Cullen al ver a la cumpleañera.

—Como si eso fuera posible—siguió su esposa para luego abrazar a Bella— feliz cumpleaños Bella.

—Gracias—sonrió agradecida para luego ser envuelta entre los brazos de su pareja, pero la luz de una cámara hizo que gire un poco la cabeza para ver a Alice.

—Lo siento, lo encontré en tu bolso. ¿te molesta?—pregunta Alice con una sonrisa tímida, aunque era obvio su entusiasmo, Bella niega.

Eso fue señal suficiente para que ella empezara a tomar fotos a todos nosotros. Llego un punto en donde había visto mas de cinco fotos mías y de Jasper.

—Saliendo con alguien mayor...que sexy—dice Emmet bromando. 

Edward mira a su hermano incrédulo pero divertido.

De repente Adrián se gira hacia mi.

—Amelia nunca nos dijiste cuando tu cumples años—habla Adrián amigablemente. Nunca había podido entablar una larga conversación con el, pero eso no quitaba que lo apreciaba y se me hacia un vampiro muy interesante.

—Ah, cumplo el 27 de julio—me encojo de hombros quitándole importancia.

Alice suelta un quejido, como si la hubiera golpeado.

—¿Por que no dijiste eso antes? pude haberte comprado algo—se queja Alice.

—Alice no es necesario, enserio—la detengo entretenida por su reacción.— un simple "felicidades" basta.

Confesar que mis cumpleaños no me traían una alegría especial iba a dañar el ambiente de la sala, por lo que preferí ir quitándole importancia poco a poco. Jasper a mi lado, seguro atento a mis emociones me dio un suave codazo para que notara su sonrisa de animo.

—Si bueno... eso no va a pasar— niega Alice sonriente—para tu suerte existen los no cumpleaños— alzo una ceja— si piensas que lo acabo de inventar estas equivocada y aunque me gustaría tener una discusión de si es real o no, debemos entregar unos regalos.

Ruedo los ojos divertida. Si bien es cierto que no me atraía la idea de un cumpleaños, no quería quitarle la ilusión a alguien como Alice, por lo que estaría dispuesta a un no cumpleaños por ella.

Miro al vampiro a mi lado.

—¿Tienes regalo?—pregunto curiosa. Jasper rápidamente ríe nervioso y empieza a ver en todas las direcciones posibles.

—Que lindo está el piso hoy, ¿No crees?— dice bajando su cabeza.

Suelto una pequeña risa negando.

Alice y Rosalie se acercan a Bella con una caja amargada. La rubia se lo da sin muchas ganas.

—Es un collar, Alice y yo lo escogimos— dice mirando hacia otro lado.

—Gracias—agradece Bella apenada.

—Este es de Emmet—Alice se lo pasa y ella lo sacude pero no suena nada.

—Ya lo instale en tu camioneta—dijo divertido—al fin un equipo de sonido decente para ese montón de chatarra.

—Oye, no insultes al camión— dice fingiendo indignación.

Me acerco a ella dándole una caja.

—Espero te guste. Es de parte mía y de Jasper— al abrir la caja se topa con una gran paleta de pinturas y pinceles.

—Son preciosas Amelia, gracias—sonríe. Jasper a mi lado frunce el ceño, sin estar enojado mas bien curioso por mis palabras, me encogí de hombros y no dije nada mas.

—Ahora abre el de Esme y Carlisle—le extiende un sobre delgado.

—Algo para iluminar tu día—dice el doctor. 

Bella tuvo dificultades para abrir el sobre, pero de un momento a otro se corta con una esquina del papel haciendo que una gota pequeña de sangre caiga al suelo.

Y ahí todo se fue al infierno...

Edward volteo para ver a Jasper y Adrián quienes miraban a Bella con sus ojos negros. Empujo a Bella para que no la atacaran pero no midió su fuerza y la estrello contra la pared hiriéndola mas.

Por instinto saco mi varita pero al ver a Jasper la vuelvo a guardar. No iba a herirlo y se que el no haría eso conmigo. Confiaba en el mas de lo que admitía.

—Jasper, soy yo, mírame— camino hacia el con lentitud. El veía a Bella como una presa y el como un animal por mucha sed de sangre— no dejes de mirarme.

Los ojos oscuros de Jasper me miraban fijamente, con una intensidad que provocaba que quisiera apartar la mirada , pero notaba como su cuerpo temblaba tratando de resistir, así que nunca deje de verlos incluso cuando sus colmillos relucían en su dentadura. Lleve mis manos a sus hombros y le deje un suave apretón acompañado de una sonrisa.

En menos de un segundo sentí como sus brazos me rodearon y como llegamos a su habitación alejándonos de todo el caos que estaba causando Adrián queriendo atacar a Bella.

Nos quedamos en silencio. Parados uno frente al otro. El ruido seso y reino una calma abrumadora.

Jasper miraba al suelo. No debía tener su habilidad para suponer como se sentía, podía notarlo avergonzado y bastante apenado.

—¿Puedo...?

—¿Puedes?— le insisto a terminar la oración. Tomo su mano dando un suave apretón, queriendo trasmitirle mi apoyo.

—¿Puedo abrazarte?— pregunta con temor. Temor a que Amelia Lupin le tema.

Amelia se acercó a él y lo abrazo.

El vampiro escondió su rostro en el cuello de la bruja.

—Lamento que veas el monstruo que soy.

Amelia soltó una carcajada.

—He visto muchos monstruos Jasper, y tú no te eres como ellos.

Yo lo escribí, pero amo como se apoyan entre ellos jajs.

En la versión pasada colocaba memes, y bueno no quiero quitarlos, así que, disfruten...

Xoxo.