Excursiones...

Eran todo un tema decidir cuáles harían y dónde...

Luego de andar mucho, ya tenían todas las opciones para elegir.

- Yo iría al cañon del anuel. — Pronunció JiMin muy confiado.

—Atuel, JiMin. — Le corrigió YoonGi.

—¡Si, si, como sea! Me gustaría ir al cañón del ano de no sé quién.

— ATUEL, JIMIN.

—Ya YoonGi, relájate...

— Bienvenidos, ¿Qué puedo ofrecerles?

— Solo pan por favor, del que llevan los abuelos siempre.

El matrimonio Min era muy conocido en el lugar, todos querían a esos viejitos tan lindos.

— Si, con gusto. Y díganme, ¿Ustedes son matrimonio?

JiMin dudo, por más tiempo que hiciera que ambos estaban juntos, la palabra "marido" le sonaba muy rara a sus 24 años.

— S....si...algo así.

Y eso fue suficiente para que YoonGi le mirara de una manera muy oscura.

La compra termino muy rápido y el moreno siguió caminando rápido.

—¡Yooon, espera! ¡No me digas que te enojaste!

JiMin no podía contener la risa.

—¿Es en serio JiMin? ¡Dudaste! ¡Hace 3 malditos años que vivimos juntos! ¿Qué somos? ¿Amigos? ¿Porque cojones piensas que te traje a la casa de mis abuelos entonces?

—¡Bueno, ya, si quieres ser mi marido entonces, ¡Cásate conmigo!

Yoongi le miró entre cejas.

— ¡JiMin, mis padres no están legalmente casados y lo mismo "son un matrimonio", ¿Sabes qué? Que otro te pague las excursiones...

— ¡Yoooooooon espera!

La palabra indignado le quedaba chica, y rencoroso también a lo que era su YoonGi, pasarían 20 años y seguiría reclamandoselo.