Capítulo III

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En otra ocasión, maldición. Terminó con BaekHyun reiteras veces en su cama por lo que fueron unos tres meses o más. Lo hicieron en la cocina, en el salón y hasta en las escaleras de caracol. A veces pedían cosas para comer y otras tantas cocinaban o se emborrachaban, pero los dos primeros meses fue una avalancha de sexo total que ChanYeol hasta se sintió renacido, como si todo el estrés se hubiese drenado. Lo albergó un aire jovial y alegre, aunque no supo si fue por su nueva pareja sexual o por el sexo mismo.

Le encantó incluso cuando BaekHyun llegó una tarde calurosa a su casa y pareció salir recién del trabajo a las diez de la mañana. Se veía agotado a morir, pero le recordó que se comprometió el día anterior a quedarse el fin de semana con él y que ya pidió permiso en el trabajo, aunque de seguro por eso lo hicieron trabajar de más. De igual forma el más bajo se duchó en su casa, pidieron comida y vieron películas durante lo que restó de día.

ChanYeol lo notó cansado y a pesar de que BaekHyun no se lo dijese directamente no era un bastardo que pensaba con el pene, así que simplemente se entretuvo con el otro, casi como dos mejores amigos prepubertos.

Ya entrada la noche le hizo un masaje en la espalda y no pasó nada más porque BaekHyun se durmió apenas le puso una mano encima y despertó a medio día. No obstante, ChanYeol se la pasó con el chico durmiendo entre los brazos mientras escribía la letra de una canción como si hubiese recibido un rayo del cielo con inspiración y cuando el otro despertó pareció saldar lo pasado con una disculpa sincera, un beso en los labios y la invitación a una pizza con queso extra. Esa noche tampoco tuvieron sexo porque vieron películas de terror y a ambos les dio miedo, así que se apegaron por debajo de las mantas, bromearon un rato y se quedaron dormidos. Al otro día el rubio se fue. Y lo sucedido fue sorpresivamente suficiente para ChanYeol.

Síp, aquel encuentro no fue para nada sexual a pesar de que consiguió el número del otro exclusivamente por ese motivo, pero no le importó. Más bien aprovechó su contacto directo para hablar con él de todo y nada a la vez, a veces le pedía recomendaciones de cómo vestirse para las reuniones en la universidad y después terminaba preguntándole si estaba de acuerdo con la industrialización.

Jamás en su vida se hubiese imaginado que conseguiría algo así en una aplicación gratuita y somera, donde el setenta por cierto de los registrados vendían droga y los otros se prostituían. Sin embargo, apareció BaekHyun en su vida gracias a eso y estaba bien, era realmente cómodo para él. Pensó que lo mejor que podría conseguir en ese sitio sería sexo insatisfactorio o acompañantes con infecciones de transmisión sexual.

Lo sucedido era digno de debatir porque aún habían posibilidades de que haya algo oculto detrás, pero la confianza fue automática, casi innata, y fue justamente por eso que su corazón dio un vuelco extraño cuando llegó a su casa ya bien entrada la noche y vio que la entrada al lugar no estaba igual que siempre.

—¿Baek? —Con el ceño fruncido miró al pequeño bulto que parecía estar en la oscuridad. ChanYeol se sintió idiota al reconocer sus costosos zapatos de vestir.

—¡ChanYeol! —El rubio se puso de pie y caminó hasta él para estrecharse con su cuerpo, dándole un abrazo—, m-me dijiste que nos encontr-raríamos a las nueve.

No tenía ni idea de qué hora era. Se olvidó esa mañana de ponerse el reloj de muñeca y su celular se quedó sin batería pasada las siete de la tarde, así que supuso que las nueve no eran. Pensó en cómo disculparse y explicar lo sucedido, pero solo entonces notó a BaekHyun temblando, abrazándose a sí mismo y con la frente sudándole de forma evidente.

—¿Te sientes bien?

El chico negó con la cabeza y le susurró a modo de lamento—: Te... Tengo f-frío.

Apegó al contrario a su cuerpo y así avanzó hacia la puerta de su casa para buscar las llaves en sus bolsillos, desesperándose en el proceso porque ya notó que el más bajo tenía mayor sensibilidad al frío y temía que le diera hipotermia o algo parecido.

Una vez que abrió la puerta empujó esta y tiró el bajo dentro de su estuche sobre el sofá junto a su mochila para luego concentrarse en BaekHyun, a quien sentó y se movió para buscar algo con que taparlo.

—No... —mencionó el otro casi sin voz cuando lo vio llegar con una manta y se puso de pie de forma temblorosa.

—Mierda, Baek. ¿Estás enfermo de algo?

Maldición, si ChanYeol solo andaba con sudadera y sin camiseta debajo. No hacía tanto frío según él.

—A-Agua... —El rubio se dio vuelta y avanzó hacia el baño, aunque terminó tropezándose con uno de los sofás y apenas logró estabilizarse gracias al agarre sobre uno de los muebles.

ChanYeol se dio cuenta entonces que era grave, así que abrazó al chico por detrás y lo guió al baño, una vez ahí cerró la puerta junto con la ventana y encendió la ducha con el agua caliente mientras se apresuraba en quitarle la ropa al chico. Le hubiese encantado detenerse a mirarlo como siempre hacía, pero BaekHyun no dejaba de abrazarse a sí mismo, temblar y jadear, como si no pudiese respirar.

Una vez que el rubio estuvo desnudo lo ayudó a ingresar a la bañera y lo dejó ahí de pie, aunque el contrario seguía temblando y le chicharraban los dientes aún cuando estaba debajo del chorro de agua. Él se planteó seriamente el ingresar junto al otro, pero el contrario lo llamó por su nombre al ver que tuvo intenciones de sacarse la sudadera.

—E-Estaré bien dentro... de unos minutos. N-No te preocupes.

Suspiró y asintió, aunque no supo qué más hacer—. Te traeré algo de ropa.

El rubio le asintió y le dio una pequeña sonrisa inestable. Quiso besarlo y hacerlo sentir tranquilo, especialmente porque parte de la culpa la tenía él —o puede que toda, en realidad—, aunque aún no sabía bien qué sucedía realmente.

Corriendo por dentro de su pequeño hogar fue a buscar ropa para el chico y rebuscó entre los muebles con la finalidad de sacar las mantas que tenía guardadas, aunque dejó eso a medias y volvió al baño. Notó que BaekHyun temblaba ligeramente, pero al menos sus dientes no castañeaban y parecía mucho más lúcido, ya que no se veía en la necesidad de afirmarse de las paredes para mantenerse estable debajo del chorro de agua.

—Cariño —lo llamó y mierda, se le pasó el apodo, pero al contrario no pareció importarle porque se concentró en él con los ojos cristalizados por el miedo—, ven aquí.

Rápidamente enchufó el secador de cabello y envolvió al contrario con la toalla cuando este apagó la ducha. Como niño pequeño lo agarró envuelto en la tela delgada para sacarlo de la bañera y le pasó el secador encendido para concentrarse en secarlo con rapidez con la tela.

—Levanta los pies —pidió con una rodilla sobre la alfombra del baño y los bóxers en las manos. Le hubiese gustado sacarse una foto en ese momento para reírse unos años después de lo ridículo que debía verse.

—ChanYeol, n-no es necesario...

—Ya estoy acá abajo —se burló y miró hacia arriba, encontrándose a BaekHyun con el pelo goteándole sobre la frente y tuvo una contradicción tremenda porque lo vio sumamente sensual y tierno a la vez—. ¿Quieres que te pida matrimonio?

—Pesado.

El chico le hizo caso y no le importó subir la ropa interior que era suya —o que en algún momento lo fue—, hizo lo mismo con los pantalones y luego se concentró en ponerle unas calcetas gruesas que no usaba ni en invierno porque se jodía de calor.

Se alzó y se encontró al contrario secándose el pelo, ya sin la toalla a su alrededor y con el pecho desnudo. Sin embargo, tenía mayor agilidad a pesar del ligero temblor de su cuerpo.

—Yo lo hago. —Con cuidado le quitó el aparato al contrario, ya que no quería parecer brusco, y omitió el pelo ligeramente seco para dirigirse hacia el cuerpo, sorprendiendo al contrario—. La toalla te seca, pero esto te hará entrar en calor.

Sumado al aire caliente pasó la mano por el pecho y espalda del rubio para encontrar las zonas mojadas.

Estaba preocupado, maldición, pero la cosa no le pudo parecer más ridícula cuando se tropezó con el pezón erecto del contrario y este se estremeció de forma evidente, contrastando con su temblor constante.

—¿Te excitó? —preguntó de pura curiosidad y volvió a tocar para tomar nota de ser algo que le gustase al otro, ante lo que recibió un ligero jadeo y un golpe en la mano.

—¡Ya, Yeol!

Rio y dejó el secador apagado a un lado para tomar la camiseta de manga larga y ponérsela al contrario. Luego de eso procedió con la sudadera más abrigada que encontró, una que casi no usaba porque pesaba como el demonio de lo gruesa que era y BaekHyun pareció hasta perder altura con ella.

—Parezco rapero de los noventa —se quejó el otro viéndose al espejo.

Él se apresuró en darle un beso en la mejilla—. Te ves guapísimo. —Tomó al chico por los hombros para ponerlo frente a él—. Vamos.

—¿A dónde?

—Arriba mío, ven. Vamos. —Estiró los brazos hacia el contrario y el rubio frunció el ceño, así que alzó un poco la voz la siguiente vez que habló—: ¡Salta!

El rubio algo asustado le hizo caso y terminó con las piernas enrolladas en su cintura y con los brazos alrededor del cuello, así que de ese modo se encaminó hacia las escaleras para subir estas con rapidez. Ya en el segundo piso dejó al chico con cuidado en el suelo y le hizo un gesto para que se metiera a la cama mientras él terminaba de sacar las mantas, las cual tiró todas sobre el colchón de forma tan acelerada que por un momento se le olvidó que dejó a BaekHyun ahí.

—¿Cariño? —preguntó suavemente y quizás con un poco de miedo, atreviéndose a usar el apodo porque le gustó después de todo.

Para su sorpresa vio la mano del chico moverse por entre las telas y luego escuchó su voz ahogada—. Acabo de morir.

Rio e hizo las mantas a un lado, encontrándose a un despeinado BaekHyun que se sentó sobre la cama y le dio un fugaz beso en los labios junto a una sonrisa aniñada.

—Gracias, ChanYeol. —El contrario le acarició el cabello y luego la mejilla, pero él aún no terminaba con todo, así que tomó la mano que lo tocó para darle un beso superficial antes de ponerse de pie.

—Haré sopa. Mientras tanto pon Toy Story que quiero ver la tres.

BaekHyun solo rio y le dio un sonido de garganta afirmativo. Luego él se apresuró en bajar al segundo piso a hacer lo que prometió, aunque terminó tardándose más de la cuenta y cuando volvió a subir se encontró al chico acostado en la cama abrigado con una de sus chaquetas impermeables que le quedaba ridículamente grande, incluso el más bajo metió las piernas al interior de ellas.

—Baek —lo llamó suavemente y el otro se sobresaltó, sacándole una sonrisa, gesto que de inmediato imitó y con cuidado dejó la bandeja en el suelo—, come un poco.

El rubio se deshizo de la chaqueta que era más estorbosa que otra cosa y ChanYeol le acercó la mesa que solía poner cuando comía en la cama.

Cocinó varias cosas porque si vio al rubio ahí sentado frente a su puerta quería decir que estuvo un rato esperándolo y hambre debía tener, así que preparó la mayor variedad de cosas para ofrecérsele al chico, quien comió sin dejar de mirar la película reproduciéndose en la televisión.

Con el tiempo supo que BaekHyun era fanático de las películas infantiles y que no, el primer día que lo vio no fingió inocencia, sino que sencillamente así de tierna era su persona.

Aquel día durmieron juntos y no tuvo relaciones sexuales con su acompañante a pesar de que este se lo insinuó, pero lo cierto era que temía que aún se encontrase débil, por lo que solo arropó al chico entre sus brazos para mantenerlo en calor y se dijo a sí mismo que debía comprarse una estufa. Y claro, lo hizo, por supuesto.

De hecho, aprovechó ese viaje para ver a JongDae al trabajo con la intención de contarle todo lo que sucedió durante ese último tiempo. Resultaba hasta extraño teniendo en cuenta que se trataba de su mejor amigo, pero después de todo el otro acostumbraba a estar ocupado con el trabajo y él se concentró tanto en BaekHyun durante el último tiempo que se saludaron unas cuantas veces para luego preguntarse cosas específicas, al menos hasta ese momento.

—¿No dijiste que no buscabas novio? —chilló JongDae cuando finalizó con su relato y él solo intentó esquivar su mirada porque también estuvo pensando mucho en todo aquello—. Si querías un novio me hubieses dicho y encontraríamos a alguien mejor.

Frunció el ceño con cierta molestia—. BaekHyun no está mal...

—¿O sea que sí te gusta?

—No dije eso.

—¿Entonces qué?

Se encogió de hombros como si el tema no le importase y optó irse por lo más sencillo—. Me lo hace rico y ya. Eso me gusta.

—¿Entonces me puedes recordar por qué está invitado a nuestra junta del sábado? Se supone que será algo pequeño para celebrar el cumpleaños de Min, no una orgía.

Bufó y puso los ojos en blanco. Se sintió ligeramente enfadado—. ¿Te molesta que lo haya invitado?

—No conozco al chico, así que mucho no puedo decir, pero te la pasas hablando de su culo y yo más culos no quiero conocer. Gracias.

—Bien. Entonces no irá. —JongDae pareció sorprendido ante su seguridad y ChanYeol se apresuró en agregar—: Y yo tampoco iré.

—¿Qué? ¿Me dices eso porque no va el 'culo bonito'?

—No le digas 'culo bonito'.

—Perdón. ¿Cómo se llama?

—BaekHyun —zanjó e incluso apretó los dientes, cosa que hizo que el otro lo mirara con las cejas alzadas y luego se largara a reír.

—Maldición. Te gusta.

—Claro que no.

—Échate un ojo. —La expresión del otro fue extrañísima, pero le entendió.

Se sintió confundido por lo que comentó su mejor amigo. Él no quería tener pareja y supuso que BaekHyun tampoco porque nunca le habló de ello durante todo ese tiempo. Solo eran ellos dos felices haciéndose compañía y ya, sea con o sin sexo de por medio.

—¿Nos encontraremos en el cine? —le preguntó el rubio a través de la llamada y él hizo un sonido de garganta a modo de afirmación. La verdad era que después de lo que dijo JongDae ya no se sentía muy seguro de lo que hacía con el chico—. Nos vemos a las seis entonces. Besos.

Soltó el aire con fuerza por la nariz y alejó el celular de su oreja para mirar el aparato. Tenía agregado al chico por su nombre; sencillo y conciso. Sin embargo, sabía que BaekHyun le acortó el nombre y le puso un emoji de animal, aunque no recordaba cuál.

Antes de llegar al cine compró unos dulces de chocolate por costumbre más que por cualquier otra cosa. A BaekHyun le encantaban y generalmente se antojaba de ellos, así que siempre le sacaba sonrisas cuando le daba alguno de sorpresa. Era algo tonto, sí, ChanYeol no debería ocupar su memoria en cosas tan banales e idiotas, especialmente en ese momento que acaba de conseguir trabajo como maestro, ya que por fin pudo presentar la tesis oficial y logró titularse.

—¡Yeol! —La mano del rubio se alzó y el chico se acercó con una sonrisa antes de plantarle un beso ligero en los labios. ChanYeol no se dio cuenta hasta ese momento que se besaban a la hora de saludarse—, ¿cómo estás? ¿Todo bien con las clases? —Asintió y el otro frunció ligeramente el ceño—. ¿Te sientes bien? Estás demasiado callado.

Asintió nuevamente, aunque acabó sacudiendo la cabeza porque no podía seguir así de idiota toda la vida—. Claro. Perdón. Pensaba en la próxima evaluación. No sé muy bien cómo estructurarla.

—¿A qué respecta?

El contrario pareció interesado en sus temas, como siempre. BaekHyun era muy bueno escuchando, opinando, entreteniendo, sonriendo, en el sexo, en el dominó... Maldición. Era bueno en todo. Se interesaba por sus cosas y a ChanYeol le gustaba aquello, que valoraran lo que era, en lo que escogió convertirse. Además, el rubio también entendía rápido que no debía entrometerse en algunas cosas o que no era momento para hablar de ciertos temas, incluso lo hacía rabiar menos que JongDae, a quien conocía de toda la vida y juraba que lo hacía "sin querer".

Fue luego de unas dos semanas de aquello que se dio cuenta que invitaba a BaekHyun a su casa muchas más veces de las que en un paso consideró recomendable, pero en algún punto le dio igual porque el chico lo hacía sentirse bien, era una buena compañía en todos los sentidos de la palabra y probablemente por ello pensó en él cuando uno de los alumnos de la que alguna vez fue su facultad le pidió que le devolviese un gran favor.

—Me gustaría que fueras mi modelo. —Elevó una ceja con el rostro serio, creyendo imposible lo que el otro decía—. Por favor. Necesito hacer algo así como un catálogo a modo de tesis y necesito un macho alfa con mucha testosterona. —Su amigo elevó ambas cejas de forma sugerente y él junto las suyas en un ceño fruncido—. ¿Qué me dices?

—No lo sé, Xing. Nunca lo he hecho y no creo que sea bueno para ello.

—¡Pero tienes el cuerpo que necesito! —Crispó los labios y el otro rio al ver su expresión—. Hablaremos sobre 'las nuevas masculinidades'. De verdad te necesito ahí.

—¿Y yo por qué?

—Porque eres el típico homo con pinta de hetero.

Quiso regañarlo por la asociación estúpida, pero el chico siguió moviendo las cejas de forma sugerente una y otra vez, así que acabó suspirando, al menos optando por no matarlo ahí mismo y escucharlo primero.

—Además... —El contrario movió las manos, como si quisiese darle más misterio al asunto—, tienes novio.

Frunció el ceño—. No tengo novio.

—¡Sí! Vi una foto de ustedes por ahí y JongDae me lo confirmó. —Se llevó la mano a la frente y cerró los ojos antes de suspirar—. ¡¿Ves?! ¡Tengo razón! —celebró el chico y él nuevamente pensó en qué hacer para no matarlo—. ¿Qué me dices? ¿Podrías conversarlo con él?

—¿Qué quieres hacer exactamente?

Convencer a ChanYeol no era cosa fácil, por lo que le sorprendió todos los argumentos sin ningún tipo de base que le dio YiXing, pero acabó guardándose sus ganas de mandarlo a la mierda , ya que el chico lo ayudó a pasar el jodido ramo de historia de la música asiática que no podía dejar de reprobar antes de ponerse a hacer la tesis porque toda la puta información estaba en chino y él no entendía una mierda, así que sí, le debía una por traducirle los libros, explicarle y hacerle la vida más fácil.

—Baek —lo llamó suavemente para no sobresaltarlo.

Ambos se encontraban en su casa como acostumbraban. Estaban desnudos porque tuvieron sexo durante un buen rato, ya era tarde por la noche y observaban una película de acción que ChanYeol insistió en ver, pero que no resultó tan buena como pensó mientras que BaekHyun se metió demasiado, a tal punto que se sintió celoso al ser dejado de lado.

—Bebé —insistió al ver que el otro seguía metiéndose trozos sushi a la boca sin siquiera mirarlos antes.

El rubio estaba con la espalda contra la pared, cubierto con una sudadera negra con cierre que tenía abierta y con la cual se veía increíblemente atractivo. Sus pierna estaban tapadas con las mantas y ChanYeol estaba ahí, con la cabeza apoyada en el cojín que se ubicaba sobre el regazo de BaekHyun, perpendicular a él y dejando que sus pies sobresalieran de la cama.

—Baek, cariño. —Acercó la mano al contrario para tomarlo de la muñeca antes de que se llevase el trozo de sushi a la boca y recién ahí el contrario pareció despabilar.

—Dime. —El otro le pasó las manos por el pelo para acariciar la zona y volvió a concentrarse en la película.

Él suspiró porque BaekHyun ni siquiera sabía qué hacía con las manos y ChanYeol vio que el otro estuvo cerca de dos minutos con los dedos dentro del bol con salsa de soya por estar más atento en descubrir quién mataba a quién dentro de la televisión.

—Lindo, préstame atención —insistió con suavidad y recién el otro lo miró, dándole finalmente un puchero.

—Perdón. Es que me distraje cuando el francotirador se escondió y ahora no sé dónde está. —Maldición, y el chico se lamentaba por ello.

Se apoyó sobre sus codos para acercarse al contrario y este le entendió de inmediato porque restó el espacio que los separaba para dejarle un rápido beso en los labios. Por suerte luego de ello quedó atento a él y dejó la película de lado.

—Dime. —La sonrisa ajena se mostró preciosa y él sonrió también.

—¿Tienes libre mañana por la tarde?

El contrario asintió—. Sí, pero entro a las diez a trabajar.

—¿Quieres pasar la tarde conmigo?

—¡Claro! Necesito ver la segunda película. —El rubio apuntó hacia la televisión y él crispó los labios antes de suspirar.

—Mañana vendrá un amigo. ¿Te molesta?

Era la puta primera vez en su vida que preguntaba algo como eso y BaekHyun de seguro se imaginó que así fue porque lo miró con los ojos grandes y le dio una sonrisa nerviosa.

—¿Por qué me preguntas? Es tu casa. —Nuevamente las manos con salsa pasaron por su pelo, pero no pudo quejarse porque el otro era tan bonito que quería apretarle las mejillas—. Mañana estaré aquí para el almuerzo.

—No te moverás de aquí de igual forma —se burló y el rubio fingió una mueca, aunque acabó riendo risueño—. Deberías traer más camisas. Es un desgaste pasar a tu casa para que tengas que cambiarte antes de ir a trabajar.

—Lo sé, pero no puedo traer todo aquí, Yeol —le dijo el otro con suavidad, al parecer perdiéndolo de nuevo porque le dispararon a alguien en la televisión.

Le dio vueltas en la cabeza aquello que dijo su acompañante y pensó a profundidad en lo que involucraba tener las cosas del otro en su casa. No le molestaba, para nada. BaekHyun era limpio y ordenado, de esos que usaban los pantalones limpios media hora y al sacárselo ya iban a la lavadora. Además, hizo que todo tuviera muchísimo más color y no hablaba solo de la ropa, ya que el rubio incluso le regaló una maceta con un frondoso árbol de interior de tronco delgado, alegando que le frustraba no ver algo vivo dentro de la casa.

Bueno. Junto a ello llegaron más cosas a modo de regalo, según le reiteró. ChanYeol no dudaba de sus buenas intenciones y generalmente llevaba cosas necesarias o que se rompían, ya que el rubio era buenísimo para quedarse pegado en la tele y terminaba rompiendo alguna que otra taza cuando lavaba la loza, así que ya tenían prácticamente un zoológico gracias a todas las tazas con formas de animalitos que compró el otro.

—Estoy ansioso —le dijo su amigo y él solo le sonrió de vuelta antes de tomar una de las cajas.

No supo si YiXing durante todo ese tiempo se volvió un profesional en la fotografía o si estaba exagerando, pero la cantidad de cosas que llevó equipadas en maletas era increíble.

—Espero caerle bien a BaekHyun.

Frunció el ceño ante el comentario y rio—. Estoy seguro de que no habrá problema.

—Es el primer novio que te conozco después del imbécil de tu ex, ChanYeol. Es digno de lo cual preocuparme si quiero seguir aprovechándome de ti en un futuro —bromeó y él solo soltó una risa.

BaekHyun no estaba en casa porque fue a comprar unas cosas para cocinar. Le comentó que quería comprar algo para ofrecerle a su amigo y así aprovechaba de buscar ingredientes para prepararle la cena. ChanYeol insistió en que no era necesario, pero el rubio era increíblemente testarudo con los temas que requerían ofrecer de sí mismo, así que simplemente se quedó en la casa para esperar a YiXing mientras el otro iba a comprar. De igual forma, el chico no se tardó mucho en llegar. Sin embargo, el estudiante pareció tener un escenario fotográfico inflable porque metió todo dentro de la casa y lo montó en cosa de pocos minutos. ChanYeol no tuvo ni tiempo para hacer una introducción acorde cuando BaekHyun tocó la puerta con una sonrisa y cargado de bolsas. Le quitó unas cuantas para ayudarlo y ambos ingresaron a la casa, encontrándose con YiXing de pie en el salón y sonriendo hacia ellos.

BaekHyun le envió una rápida mirada con una sonrisa y no entendió por que. Quizás se le hacía agradable ver a alguien más en su casa o algo así.

—Soy YiXing, amigo de ChanYeol.

—BaekHyun. —El aludido solo hizo una venia llena de sonrisas y él empezó a sentirse un poco extraño porque la primera vez que conoció al chico no fue así de sonriente con él—. Dejaré esto en la cocina y vuelvo en un momento.

El rubio alternó la mirada entre ambos y se fue hacia el final del lugar para pasar por un lado de la península e ingresar a la cocina. Él lo siguió para dejar las bolsas que le quitó al otro y se detuvo un momento para ayudar a BaekHyun a ordenar las cosas para picotear.

—No sabía que tenían pensado hacer algo en específico —le comentó el chico por lo bajo junto a una risilla—. ¿Dónde se ubicarán puntualmente? Para así quedarme en otro lado y no estorbar.

Quiso regañarlo por su comentario, pero en vez de eso se aprovechó de la situación para reírse un poco—. Te necesitamos, Baek.

—¿A mí? —El chico se apuntó a sí mismo sorprendido y le dio una rápida mirada a las maletas cerca de la puerta—. ¿Qué harán?

Aprovechó que estaba cerca del contrario y lo tomó por la cintura con una sola mano para apegarlo a sí. El chico de primeras tuvo intenciones de alejarse, de seguro porque se sintió incómodo con YiXing a tan solo unos metros, pero se detuvo al darse cuenta que él se acercó a su oreja porque planeaba decirle algo.

—¿Te gustaría hacer un trío? —susurró con voz ronca.

Se alejó solo un poco para ver cómo BaekHyun abría la boca con asombro y fruncía el ceño. Quiso reírse de entrada, pero el contrario pareció salir de su estupor más rápido de lo que pensó, aunque no por eso no lo afectó lo que dijo.

—Eh.. ¿Tú...? ¿Tú, YiXing y...? —El rubio tomó aire, siendo consciente de que no se le entendía ni una mierda debido al tartamudeo, aunque ChanYeol estuvo dispuesto a quedarse todo el día ahí a ver cómo boqueaba y sus mejillas se sonrojaban—. ¿Nosotros tres?

—Ujum. —Asintió con la cabeza y dio una sonrisa—. ¿Qué opinas?

Para su sorpresa BaekHyun se quedó mirándolo unos segundos que sintió eternos y todo pareció irse a la mismísima mierda cuando al chico le brillaron los ojos de forma distinta, acuosa.

—No —susurró el otro casi sin voz y negó con la cabeza suavemente—. Lo siento, pero no. Yo... me iré...

Se apresuró en tomar al otro por la cintura cuando pasó por su lado, pero el rubio insistió en soltarse y él se asustó, así que llevó ambas manos hasta las mejillas del chico para sujetarlo ahí y obligarlo a que lo mirara a los ojos. BaekHyun aún no dejaba caer ninguna lágrima, pero parecía tener muchas ganas de hacerlo.

—Bebé, es broma —soltó atropellándose al hablar, urgido por resolver el cagazo que se mandó—. Perdón. Me pasé.

El más bajo no le respondió y solo lo miró con el ceño fruncido, aunque después este fijó los ojos en el otro chico que estaba en el salón, quien recién les prestó atención, al parecer porque estaba mucho más entretenido con su cámara.

—¿Qué? —preguntó YiXing algo asustado y los ojos del contrario se fijaron en ChanYeol—. ¿Qué le dijiste? —Como no obtuvo una respuesta de su parte el chico elevó el objeto entre sus manos—. Solo vengo a sacar fotos. Le pedí a ChanYeol que fuesen mis modelos para un trabajo que tengo que entregar en la universidad y...

—¡Ay! —BaekHyun le dio un golpe en el brazo.

—Nunca antes golpeé a alguien, pero te lo merecías —soltó el otro demasiado alto y apoyó ambas manos en la mesa para recargarse ligeramente, tranquilizándose al parecer.

—Perdón. Solo fue una broma.

El rubio pareció estar conteniéndose o algo así y ChanYeol no lo vio con aquella confianza desde que lo conoció. Se le hizo raro porque estaba acostumbrado al BaekHyun tierno y sencillo, pero al ver el ceño fruncido del otro tuvo miedo al cuestionarse con quién se estuvo acostando.

—Eh... ¿Chicos? —Ambos se enfocaron en YiXing, quien elevó ligeramente la mano para llamar su atención—. ¿Les molesta si se acercan para explicarles a qué me refiero?

Cuando su amigo le habló acerca del proyecto lo comentó de una forma sumamente superficial, por lo que obviamente estaba interesado en saber en qué consistía todo eso, pero al parecer no fue el único porque BaekHyun se apresuró en caminar hasta el salón para tomar asiento en el sofá más grande, justo frente al computador que YiXing puso sobre la mesilla de centro. ChanYeol, algo atontado por la actitud del rubio y con miedo de haberla cagado a lo grande se dirigió al sitio par sentarse a un lado de su amante.

YiXing les mostró una presentación en el computador que supuso que eran para la universidad por todas las formalidades y datos extras, pero tenían muchas imágenes que de seguro pensaba usar como referencia.

—Así como le comenté a ChanYeol, seré el fotógrafo de un pequeño estudio acerca del 'hombre' con todo lo que conlleva. Se publicará a modo revista y...

—¡¿Se publicará?! —preguntó urgido y BaekHyun se giró a mirarlo confundido, probablemente porque nunca antes reaccionó de esa manera.

YiXing asintió con lentitud—. Te lo comenté antes, ¿no?

—No, bastardo.

—Yeol... —regañó el rubio por lo bajo y él crispó los labios.

—Perdón. —No era propio de él disculparse tan rápido después de insultar y probablemente su amigo lo notó porque apretó los labios para no reírse.

YiXing apuntó a ChanYeol—. Tú nunca has modelado y ¿tú? —Se dirigió a BaekHyun y este asintió, sorprendiendo al estudiante—. ¿En serio? ¿Para algo en específico?

—Marca de ropa —susurró el rubio y él elevó las cejas sorprendido antes de girarse para verlo, pero el chico no reparó en él o fingió no hacerlo porque perfectamente pudo ver sus mejillas sonrojadas—. No fue algo muy relevante. Solo ayudé a un amigo.

—¿Hicieron alguna presentación en la que usaron tu nombre? —El más bajo asintió—. ¿Alguno en específico o el tuyo propio?

—El mío en coreano, aunque en la versión angloparlante salió en inglés.

ChanYeol jadeó y se dejo caer en el respaldo del sofá.

¿Con quién mierda se estuvo acostando? ¡De nuevo!

—Es para poner tus créditos como modelo, por eso pregunto. —YiXing sonrió ampliamente y BaekHyun solo asintió mientras que él estaba ahí, medio aletargado, como si le hubiesen dado en la cara con algo—. Continúo con esto entonces. —El chico cambió la página de la presentación y apuntó a la pantalla—. Estoy colaborando con la carrera de antropología, así que ellos se encargan del texto, pero el enfoque va dirigido hacia la masculinidad en la actualidad, es decir, ¿cómo vemos a los 'hombres' y qué entendemos por la propia palabra?

—Que genial —susurró el rubio interesado y ChanYeol frunció el ceño al verlo apoyado sobre sus rodillas, inclinado hacia adelante para prestarle atención al fotógrafo.

Tuvo unas ganas idiotas de tomarlo por la cintura y apegarlo a su cuerpo, pero eso era de imbécil Neardental, así que en vez de eso se acercó al chico, apoyando una mano detrás de él y mirando por sobre su hombro para dirigirse hacia la pantalla.

—Nuestra idea es centrarnos en torno al sexo biológico masculino, no obstante, todo lo otro que respecta al género varía y es en ello en lo que nos queremos enfocar. —El contrario presionó sobre la pantalla, mostrando a una serie de fotografías de personas, una al lado de la otra—. Es decir, transgénero, travestis, homosexuales... —El chico se encogió de hombros—, "hombres" que van más allá del "hombre promedio", si es que hoy en día se puede llegar a considerar así.

—Me gusta —musitó BaekHyun y por primera vez lo miró—. ¿Tú qué opinas?

Asintió sin mucho empeño—. Claro, el tema está genial, pero ¿cómo se harán las fotografías?

—Pues... —YiXing sonrió ampliamente y se enderezó sobre el sofá—. Les expliqué todo esto porque, como pueden ver, nos interesa juzgar la visión que tenemos del 'hombre' y para ello necesitamos verlo en su forma más sencilla. —El fotógrafo se detuvo un momento y les sonrió aún más ampliamente si es que aquello era posible—. Los quiero desnudos.

| ••• |

¿Qué opinan de esta pareja, una fusión rara de un ChanYeol intenso y un BaekHyun demasiado tierno? 👀🤣

La historia está algo así como "basada en hechos reales". O sea, no el cuento entero, pero una vivencia propia me llevó a estructurar la historia.

Espero que disfruten mucho de ella, a mí me está encantado escribirla. 🙈✨

Pensaba hacer solo 5 capítulos, pero ya voy escribiendo el octavo. 🤦🏻‍♀️😂
Espero quedarme solo con 10 capítulos como máximo, ya que fue hecho como especial y no fic como tal.

Muchas gracias por leer, votar y comentar.
Saludos y besos, Ary. ♥️

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