Capítulo 34 🥀🖤

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•Fin de la espera•

Eran días de invierno, el clima frío se había hecho algo normal, las calles de Seúl habían sido cubiertas por una capa de nieve. Si hay algo que todos amaban en estas fechas era quedarse en casa, refugiados entre sábanas, con chocolate en mano, ¿y porque no? Tu pareja a la par, brindandote de su calor. 

Era sábado por la mañana, Yoongi no se presentaría a trabajar, lo que era mejor para él, así pasaba todo el día en la casa, cuidando de Dahyun y pasando más tiempo con Jimin. 

Terminó de vestir al omega, solo por esta vez no quiso que fuera Baekhyun quien lo hiciera. No, solo por hoy quería hacerlo él, el omega no le vio nada malo después de todo era su esposo, los dejó solos para que el alfa se sintiera más cómodo. 

Unos pantalones de chándal, un suéter blanco que por cierto le quedaba bastante grande debido a que pertenecía al alfa, se encargó de impregnarle su olor con la esperanza de que el omega pudiera sentirlo, y por último un gorro en su cabeza para protegerla del frío. 

Lo observó con clara añoranza, se miraba bastante lindo y apretujable, con sus mejillas y nariz sonrosadas a causa del frío, su cabello un poco revuelto y largo, sus ojitos cerrados y sus pestañas largas y abundantes, sin olvidar sus labios color cereza, su lobo no tardó en aparecer. 

"Miralo, es tan bello, dan ganas de protegerlo"

Si es verdad, era un omega hermoso, lastima que haya sido tan lento para darse cuenta, aún era el Jimin de hace seis años, ese que lo había cautivado en ese parque aquel día de primavera, aunque haya sido tarde agradecía que la venda que tenía en los ojos haya desaparecido, porque así tenía el privilegio de apreciar su belleza. 

Tan lindo y delicado que como el alfa había mencionado, despertaba un enorme sentimiento de protección, porque él merecía ser protegido de todas esas personas que lo habían lastimado, de las cuales él era el principal. 

Tonto, inbésil, idiota, ciego, estúpido y muchos insultos más, era la manera en la que se llamaba a el mismo, por no haber sabido apreciar lo que tenía, un omega envidiable y admirable. 

Sintió sus manos picar, quería tocarlo y acariciarlo, recordar cómo se sentía su suave piel entre sus manos. 

El deseo y el anhelo pudo más, sintió como su lobo movía su cola y levantaba las orejas, cuando su mano tocó la abultada mejilla de Jimin, es verdad que muchas veces lo había tocado, pero esta vez era distinta, esta vez lo hacía con devoción y delicadeza, como si hubiera esperado esto por años y después de una tortuosa espera por fin lo estuviera haciendo. 

Su piel siempre había sido tan suave y cálida, sus manos se aventuraron un poco más hasta llegar a sus belfos gruesos y rosados, acarició con su dedo índice su labio inferior, probablemente cuando Jimin despertara ya no pudiera tocarlo, tal vez Jimin ya no se lo permita, por eso trataba de grabarse en su mente y corazón lo maravillosa que se sentía su piel. 

Lo acariciaba con parsimonia y anhelo, llegó a su cuello donde aún lucía su marca, la cual hace más de un mes había sido renovada, ese mismo día cuando Jimin entró en celo. Ahora aplaudía la valentía y determinación de su lobo, si tan solo hubiera tenido su mismo coraje. 

Tomo sus manos y beso sus nudillos, estas se encontraban tibias a pesar de la temperatura, se sentía tan pleno y reconfortante, que incluso su lobo estaba tranquilo y agusto. 

Un beso en su cien que demostraba lo mucho que lo extrañaba, otro en su mejilla donde daba a entender el gran cariño que le tenía y le seguiría teniendo siempre, uno en su nariz agradeciendo las muchas bendiciones que había traído a su vida, y por último uno en sus labios donde sin necesidad de palabras le dijo que no importa lo que pasará en el futuro para él siempre sería su omega. 

Después de unas horas salió de la habitación del omega, y camino hacia la Sala donde se encontraba Seungwan junto a Dahyun, la omega ayudaba a la cachorra con sus deberes. 

─ ¿Cómo van? ─ se acercó a la mesa para dar un vistazo a lo que hacían. 

─ Muy bien Señor Min, esta bebé es bastante inteligente, aprende bastante rápido ─ soltó con una gran sonrisa, no era novedad que Dahyun era una buena estudiante, Yoongi sabía muy bien eso. 

─ Mi cachorra, eres una genio ─ sonrió con orgullo mientras le acariciaba la cabeza, agachándose para quedar a su altura. 

A Dahyun le gustaba recibir mimos, mas si estos venían de sus padres por algo bueno que había hecho, la sonrisita inocente y el débil ronroneo demostraba lo feliz que estaba. 

─ Dahyun ¿porque no le muestras a tu padre el dibujo que hiciste para tu papi omega? ─ 

La pequeña se ruborizó, porque le daba pena que su padre alfa viera su dibujo, aún no estaba terminado, y sentía bastantes inseguridades. 

─ ¡En serio! ¿Podrías mostrarle a tu padre? ─ La sonrisa del alfa le trajo seguridad a la cachorra, tal vez no era mala idea mostrarle su dibujo, quizá y hasta reciba más mimos como recompensa. 

Abrió su libro y entremedio de las páginas había una hoja suelta, se la entregó a Yoongi y este la tomó, inmediatamente mostró sus encías en una cálida sonrisa, sin duda su cachorra era talentosa, se podía ver el gran amor que había puesto en el dibujo. 

"Owww"

Había dibujado a Jimin, sonriendo y bastante animado, no dejaba de ser un dibujo de una niña de cuatro años, con muchos garabatos y algúno que otro manchón, pero eso no quitaba el hermoso gesto que había tenido la pequeña infante, al siempre recordar a su papi. 

─ Quielo dalselo cuando papi despielte ─ aún le faltaba colorearlo. 

─ Estoy seguro que a tu papi le encantará, y lo pondrá muy feliz cuando se lo des ─ volvió a entregárselo a la cachorra, esta lo puso de nuevo en el libro para que  no se arrugara. 

No logra comprender en qué momento dejó que dos omegas más aparte de los que ya estaban en casa llegaran y se adueñaran de esta como si fuera su propia propiedad. 

Tae y Jin habían aparecido con bolsas en mano, con la intención de visitar a Jimin  y de paso preparar el almuerzo, ahora solo observaba en silencio como Seungwan y Tae preparaban la comida, mientras que Jin jugaba con Dahyun. 

Está bien, no se queja, son buenas personas y a su hija le hacía bien estar rodeada de buena compañía. 

─ ¡Hey intento de alfa! ─ el grito de Taehyung llamó su atención ─ ¡Ya no hay carne! ─ lo observo parado mientras mantenía el refrigerador abierto, buscando con la vista la dichosa carne. 

Recordó que hace dos días habían hecho lo último que quedaba de carne, y desde entonces no había hecho las compras que hacían semanalmente. 

─ Señor Min si gusta puedo ir rápidamente a comprar la carne ─ Seungwan se acercó al alfa. 

─ Descuida, iré yo en el coche ─ se puso de pie y tomó las llaves, se acercó a su hija para despedirse ─ vuelvo en un momento, pórtate bien ─ acarició su cabeza antes de salir y tomar su auto, mientras manejaba rumbo al supermercado. 

Las calles estaban casi desiertas, solo un loco saldría con este clima, sin embargo él era la excepción, amaba los días de invierno, era cuando más le gustaba salir, pues es cuando todo se sentía más tranquilo y solitario, una combinación que le agradaba. 

Estacionó el carro en el estacionamiento, camino hacia los interiores del local e inmediatamente buscó el área de las carnes, tomo lo suficiente para que el molesto de Taehyung no lo vaya a estar fastidiando después. 

Lo llevó a la cajera, después de haber pagado regreso hasta su auto, poniéndose en marcha nuevamente. 

Su casa no quedaba muy lejos tal vez unos quince minutos si se apresuraba, sin embargo esta vez no se apuro, quería disfrutar del viaje.

Una llamada lo hizo detenerse, tomó su móvil dándose cuenta que se trataba de Taehyung, todo los ojos en una clara expresión de molestia, no era una novedad que ninguno de los dos se caían bien, a pesar que se conocían de años nunca habían entablado esa amistad. 

Sin embargo decidió contestar, seguramente necesitaba algo más, aprovecharía que no estaba tan lejos del súper, ya después no tendría ganas de volver. 

─ Bueno ─ contestó de mala gana. 

─ ¡¡Yoongi tienes que venir pero ya!! ─ había emoción en su tono, Yoongi no entendía a qué se debía eso. 

─ Voy en camino, deja de joder ─ 

─ ¡¡No me entendiste alfa tonto, de verdad tienes que apurarte, Jimin a despertado!!  ─ 

Fue en ese momento donde todo se volvió blanco en la mente del alfa, sin saber que decir, que pensar y cómo reaccionar. 




¡Llegamos a los 30k! ¡Gracias Gracias! ❤💗

Bueno el Jimeno despertó, ahora se viene lo que todos ustedes esperaban,  jsjsjs ¿Cual creen que será la reacción de Jimin cuando vea al Yoongis?

Gracias por sus votos y comentarios ❤

Añioo.




 

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