Bill.

—¿Entonces yo sere el que tome el puesto de Mariette?— Pregunte en la oficcina, mientras el encargado me entregaba una carpeta.

—Asi es, ya que pudiste conseguir el trabajo. Seras el remplaso de Mariette, ella atendia a los que estan en esa carpeta, tienes que tenerles mucha paciencia, en especial a ese chico. — Me comento mientras cellaba otros papeles, pasaba hoja por hoja.

—¿Ese chico? — Me llene de curiosidad, el solo suspiro.

Se acomodo las gafas, detuvo el cellado, coloco el cello de lado de los papeles, tomo todos los acomodo, se levanto y camino hasta uno de los cajones de aquel loquer — No se tiene permitodo reverlar las cosas de doctor a paciente, esta fuera de las reglas. Si quieres saberlo averigualo tu mismo, y recuerda...te tengo vigilado. Una falla y te largaras de aquí. Podras ser un suplente, pero son vidas las que nos confian...

—S-si señor...— Conteste, aprete el agarre de la carpeta y me marche, suspire. Mi turno habia terminado, así que fui el cuarto de empleados, entre a los baños y ahí me cambie, una vez ya cambiado guarde mi ropa en mi mochila, mientras que la acomodaba vi de reojo aquella carpeta negra, es grande y contiene muchos papeles importantes, tengo que aprenderme todo para poder ayudar a mis futuros pacientes, bueno...sere un enfermero...pero aun así.

Caminando a casa veía aquel cielo estrellado convinado con azul marino y un negro hermoso, la luna iluminaba en si, con esa hermosa luz blanca, que en realidad si la ves detalladamente con los ojos entre cerrados puedes ver al rededor de esta un pequeño arcoiris que la rodea.

Cuándo era más pequeño, como a la edad de ocho o nueve años, mi hermano menor Will, era un niño con problemas de salud muy graves, el esta enfermo del corazón siempre que queria acercarme no me lo permitian, queria jugar...y no podia...queria reir con él...y no podia...se enfermaba una pequeña calentura...y siempre quedaba al borde de la muerte...me dolia tanto verlo así, aun me duele, pero por suerte se que podre....si me esfuerzo lo suficiente si doy todo de mi...podre cumplirle su sueño.

"—B-bill...Mamá ya...s-se fue...—Hablo entre suspiros, con una sonrisa que jamas se le borraba — P-puedes salir...

Sali del armaria donde habia entrado rapido, pues mamá no me permitia entrar en aquella habitacion, tanto así que la llamaba " Habitacion prohibida". En esta no habian ventanas, era solo un cuarto con las paredes blancas, sabanas azules, la de la cama y la que tapaba a mi hermano, y un aire acondicionado. Desde que Will nacio...jamás a salido de ahí. Y eso me dolia mucho.

—Will...¿Quieres jugar? — Le dije alegre, el correpondio con otra sonrisa.

—C-claro...¿A-a qué?...—Pregunto sonriente.

—Mmm....¿Que te parce...a....? — Me quede pensando.

—¿Q-qué...o-ocurre? — Me vio un poco desanimado.

—Es que...no puedes salir del cuarto...no te puedes levantar...y yo no te puedo cargar...no podemos cantar...correr...porque...p-podria matarte...casi c-como la ultima vez...— Baje la mirada.

                             (...)

Ahh...la ultima vez ese recuerdo me sigue persiguiendo, yo era muy terco no entendia porque mi hermano no podia salir a jugar conmigo, cuando mamá estaba distraida entre a la habitacion, el me vio y no dijo nada — H-hola — Me sonrio, era como la tercera vez que nos veíamos, yo acaba de cumplir los ocho (o nueve), le sonrei y camine hasta él.

—¿Quieres jugar? — Le sonreí — Siempre estas aquí encerrado, es injusto que no te dejen salir ¡vamos! — Lo tome de la mano, estaban frias, eran fragiles y pequeñas.

—N-no, no puedo...mamá...no me deja...

—Pero, no tengo con quien jugar anda, vamos.

—P-pero...no p-puedo levantarme...— Gruñi un poco enojado, pense que no queria jugar o que me estaba haciendo lo mismo que mamá, mirarme de forma cruel, ignorarme y gritarme siempre que lo queria ver.

Lo jale solo un poco, se empezo a asustar al sentir el borde de la cama, la maquina que estaba conectada a él comenzo a sonar deseseperadamente, la respiracion de mi hermano se acelero demasiado comenzaba a sustarme, estaba brincando un poco de pecho. Le llame a mi mamá con un grito, al verlo se alarmo y corrio hasta él, llamaron a un dorctor el cual vino a la casa, mientras atendian a mi hermano yo esperaba fuera de la habitacion estaba preocupado, asustado.

Mi madre salio, se veía enojada —¡¿Qué fue lo que le hicistes?!—Me grito furiosa, asustandome demasiado, por ese grito mis ojos se cristalizaron y se me formo un nudo.

—Y-yo...solo queria jugar...— Dije con temor, recibi un cachetada que me tumbo al suelo, me levante un poco y toque mi mejilla me ardia me dolia, comence a llorar.

—¡¡Eres un idiota!! —Me grito nuevamente — ¡¡Por tú culpa tu hermano casi se muere!!!

—Señora Cipher —Salia el doctor de la habitacion — Ya esta estable, ahora esta dormido, tiene que relajarse.

—Si doctor, gracias. Lo acompañare...—Ambos se marcharon, al ver que estaban ya lejos y al no ir sus pisadas, me levante y entre lentamente a la habitacion de mi hermano, pero aun estaba en la puerta. Estaba dormido o esa parecía.

Camine hasta su cama y me inque en la orilla tomando su mano — P-perdoname....n-no quise...hacerte daño....— Dije entre sollozos.

                            (...)

Vi como empezaba a entristecerse — ¡Tengo una idea! — Hable un poco fuerte, al darme cuenta baje la voz.

—¿C-cuál?...

—Haremos nuestro propio juego, asi podras divertirte tu también — Le sonreí, note como esa emocion iba llegando a él mostramdome nuevamente esa sonrisa.

Después de jugar, el estaba tan feliz.

—S-sabes Bill...C-cuando sea grande...y deje de...estar enfermo...Q-quiero convertirme en doctor...Quiero salvar vidas...— Me dijo mirando al techo — ¿Si me curare...v-verdad?...

Me dieron ganas de llorar — Cla...¡Claro que si! ¡Seras un gran doctor, salvaras a muchas personas!.

Después de que se enterara de que jamas se iba a curar...me dolio tanto verlo así...Que deje de soñar para mi, deje de pensar en que queria ser, decidi el hacerme un doctor, y lo estoy logrando poco a poco...Subire de puesto, dejare de ser suplente, luego dejare de ser enfermero para por fin ser un doctor.

Y con eso yo sere feliz.

Entre a mi hogar, corri hasta aquella habitacion y entre — B-bill...v-volviste...— Me dijo sonriente, dejando ese libro en su mesita.

—S-si...volvi...¿Estuviste bien, Will? ¿Te dieron tus medicamentos? ¿Si vino ella a darte de comer? ¿Te cambio el suero?.

—S-si, Bill. Pero...dice que ya consiguio u-un t-trabajo...a-asi que solo v-vendra mañana por ultima vez...

—¿Qué...?

Que hubo, espero les haya gustado nos vemos en la proxima actualizacion adios
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