0° Pérdida

Màu nền
Font chữ
Font size
Chiều cao dòng

Al intentar contemplar las flores desde su torre, ella podía ver a los hombres correr en busca de refugio, podía ver sus pieles negruzcas y rostros llenos de desespero por una cura y explicación, esa magia negra ya había penetrado sus cuerpos y empezaba a dejar marca de la muerte cercana, a diferencia de aquellos soldados, ella si conocía lo que sucedía, pero aun tras decirlo mil veces nadie quería creerle, temían sus palabras.

La guerra había durado más tiempo del debido y las tierras agonizaban desesperadas por lo que perdían a cada minuto, aquella magia de dolor se esparcía cual plaga que amenazaba con consumirlo todo, las vidas de los guerreros, de ambos bandos, corría riesgo y con tal pisar tierras sufrirían cualquier efecto negativo. Aquel castillo lleno de flores y árboles, cultivos y animales, había sido remplazado por senderos marrones, tierras quemadas y muros improvisados de defensa, la vida que todos admiraban se perdió al ver a la guerra, entre pisadas y explosiones todo quedo hecho un caos, y gracias a esa magia… los soldados y trabajadores, todo aquel viviente, comenzaba a decaer lentamente.

Días antes la comida comenzó a escasear por la falta de siembra o lo imposible que resulto dar caza a los animales desaparecidos, el rey había ordenado traer comida de otras partes pero el camino se volvió cruel e inseguro como para que simples soldados o campesinos lograran llegar sanos y salvos. Aun en ese día su gente solo había comido un trozo de pan y algo de agua, la mayoría estaba contaminada y hasta eso tenían que racionar.

La mayoría de las casas hechas de madera estaban cayendo a pedazos comidas por termitas o simplemente volviéndose negras hasta romper, las de piedra fueron destruidas en batallas difíciles, los pocos lugareños que quedaban habitaban en el palacio mientras esperaban la victoria que no parecía llegar. Aunque a ella esa idea no le agrado mucho desde un principio, tanta gente unida atraería más a esa magia maligna, sabía que si los dejaban por su cuenta sufrirían más, había sido ella quien comento esas medidas y el rey acepto gustoso con tal proteger a los suyos.

Aquella princesa se alejó de la ventana dejándose caer de rodillas frente a esta, la luz de la luna se colaba entre el vidrio limpio iluminándola y brindándole cierta paz que solo ese lugar poseía, era su escondite preferido entre todos los rincones de ese castillo. Ella cerró sus ojos y respiro profundamente mientras dejaba su mente liberar aquella energía, proteger era su mayor deseo y principal prioridad… sabía que al paso en el que iban todos habrían desaparecido en días. Gracias a aquella protección ancestral del lago donde su magia se había creado ella aún estaba ilesa y podía hacer que todos pudieran aguantar un día más, reestablecer el necesario equilibrio para que todo siguiera igual.

A pesar de todo era frustrante ver como todo seguía igual aun cuando ella daba su tiempo y vida para evitarlo, su energía quizá no podía detener aquello que los agobiaba pero lo frenaba, mientras el lago la alimentara de fuerzas y salud, ella podría ofrecer su energía cambiante a la tierra para evitar tomara otra. Pero aun así gente perecía entre miedo y dolor, la tierra se manchaba de sangre innecesaria e inocentes eran mandados a aquella guerra tan extraña, su reino perecía con lentitud hasta quedar en cenizas… nada volvería a ser igual si eso seguía por otro par de meses. Ella no podía salvar lo que más quería ni protegerlos por mucho.

Oro a los dioses implorando ayuda, aun cuando sabía que nadie la escucharía, pidió a la luna esperanza y a las estrellas que la guiaran, a las nubes que lloviera y a las plantas que aguantaran, aunque ninguno lo haría. Dejo ir su energía, su magia y vida a las profundidades de la tierra alimentando las tierras furiosas, Gaia la usaría mejor y le brindaría otro día de vida, dejo fluir otro poco a las corrientes de agua, ríos y lagos cercanos que la exigían.
Minutos en los que sus púas aclarecieron y emitieron un leve brillo, donde su mirada torno más emotiva y pura, donde su mente pudo aprender más y su corazón se arrugo dudoso de que hacer. Minutos en los que cayo inconsciente sin aguantar más esa sensación de vacío.

¿como ver la luz si la oscuridad me consume?

Bạn đang đọc truyện trên: Truyen2U.Pro