Contiene spoilers

<>

Aun se sentía culpable, aunque la clase A se había llevado la victoria, se había vuelto completamente loco con su black whip, había dañado a muchos de la clase B, pero sobre todo...

...Había lastimado a Uraraka...

Lastimó a su heroina, quien había arriesgado su propia seguridad por el más de una vez, hirió a su amiga, que tantas veces lo había apoyado,  su compañera, a quien sin dudarlo haría todo por el... a la dueña de su corazón, aquella que con solo una sonrisa hacia dar vuelta su cabeza y su corazón.

Abrazo la almohada, dejando caer una vez más sus lágrimas y preguntándose  porque era tan inútil que no podía proteger a su princesa. Pero de pronto sus pensamientos fueron opacados porque alguien llamaba a la puerta de su habitación, estaba algo malhumorado así que solo lo ignoro, no iba a enojarse con otro cuando el problema era suyo, los golpes siguieron y el solo los ignoro.

- " si no respondo dejará de llamar pensando que estoy dormido " - pensó sonriente, pero entonces la puerta se abrió y se cerró de golpe levantándolo - Pero que... - se sonrojo cuando vio que la castaña que le robaba el sueño lo miraba sonriente y con una bolsa grande en las manos -

- Deku-kun después de lo que pasó hoy pensé que ibas a sentirte mal por haberte descontrolado así - Admitió sonriente - entonces compre algo de helado de fresa que se que es tu favorito y te traje

Era un ángel que había caído del cielo, se limpió la nariz y sonrió débilmente.

- Odio cuanto me conoces Uraraka -

- Lo se - río y se sentó junto a él en la cama notando , aún en la oscuridad , los enrojecidos ojos de su mejor amigo - Deku-kun...

- Mmh?

Ella lo sorprendió abrazándolo, el se apoyó en su hombro y las lágrimas inundaron sus ojos. Aunque su idea original era no dejarlas salir en cuento la castaña comenzó a acariciar sus rizos las lágrimas salieron, mientras se descargaba ella le regalaba caricias y pañuelos. Dioses si que amaba a esa muchacha, más que a nada en este mundo.

- Deku-kun

El nombrado respondió a su llamado aferrándose a la cintura de ella.

- se que no fue tu intención lastimar a otros con su kosei - el sollozo mientras negaba con la cabeza - Es normal, como cuando te rompias los huesos... - Izuku se separó de Ochako y la miró enojado -

- Pero al romperme los huesos no hería a nadie - argumento enojado -

- Si que lo hacías! - respondió enojada y elevando su tono de voz -

- Ah si? A quien?!

- A mi grandísimo idiota! - respondió y al instante se tapó la boca -

El pecoso se sentía peor que antes, tomo de la hombros a la de ojos chocolate que miraban hacia abajo y con sumo cuidado levantó el mentón de esta obligándola a verlo.

- Lo lamento Uraraka - Dijo sinceramente - Lamento preocuparte tanto y además haberte gritado hace un momento - ella nego y acarició sus pecosas mejillas -

- Yo lo lamento tampoco debí gritarte - Admitió sonriente -

Ambos se abrazaron y al separarse se miraron a los ojos. Tantas veces Ochako había mirado esas preciosas esmeraldas y Izuku tantas veces había admirado encantado aquellos ojos chocolate. Uniendo fuerza el de pelo verde hizo algo que tal vez se valla a arrepentir más tarde, pero tomo las mejillas de la castaña y besos aquellos suaves labios. La nombrada se sorprendió, pero no tardó en contestar y profundizar el beso. Se sentían tan felices, la boca del otro le daba tanta felicidad y curiosidad al mismo tiempo. Jadeantes los aprendices se separaron y se miraron a los ojos sonrojados.

- wow - pronunció Ochako en cuanto se separaron -

- Que beso mal? - pregunto algo nervioso el aprendiz de héroe -

- Por supuesto que no! Todo lo contrario - admitió sonrojada -

- entonces que somos?

- Que tal tu mi novio y yo tu novia? - Pregunto la castaña sonrojada -

- Uraraka que galán - Río Deku y la tomo de la cintura acercándola a el - Acepto Ochako

El corazón de la castaña dio un vuelco cuando el de ojos verdes pronunció su nombre de pila, sonrió y dejó un suave beso en aquellos labios.

- Puedes explicarme cómo rayos eres tan lindo? - pregunto y le dio un beso en la mejilla y luego otro en la nariz -

- Tal vez porque una bonita heroina saca lo mejor de mi - 

Aquella lluviosa tarde se la pasaron comiendo helado de fresa y menta. Mientras que se daban besos y compartían caricias.

Ese día Izuku aprendió que llorar solo era malo, que sí tenía un problema tenía una linda castaña que siempre se iba a preocupar por su seguridad y además que Ochako Uraraka besaba increíblemente bien.

<>

Hey~

Se que estoy actualizando a las 5 pm (horario Argentino) pero esto se me ocurrió y me gustó muchísimo cómo quedó

Les gusto?