Día 10...

La noticia ya se había dispersado, Yuri Lebedev asesinado en un callejón a manos de un empleado molesto por ser despedido.

La noticia claramente fue alterada por el empleador del joven quien no podía estar más complacido con los resultados, con Yuri Muerto las acciones de Dive solution serán distribuidas entre sus accionistas, a quienes el inframundo ya tiene con correa al cuello.

—"Eso debería tenerlos satisfechos por un tiempo — medita el joven cerrando una llamada —Ahora el problema es Senna, si las noticias dicen la verdad, ella está perdida, es solo cuestión de tiempo para que Volgogrado quede reducida a ruinas..., ¿ruinas?"

Rápidamente el Joven, con una buena idea de la ubicación de Senna, tomó su abrigo, e intenta salir de su habitación, llevando todas las armas a su disposición, cuando nota algo sobre la cama de la habitación de Piper, una caja de madera con una nota escrita encima.

—"Debes de hacer lo que tienes que hacer, lo sabes mejor que nadie... (;P)."

Al abrir la caja lo inundan un grupo de emociones confusas, felicidad de este útil regalo, enojo porque claramente Piper nunca confió en que podría hacerlo desde un principio, tristeza porque sabía exactamente qué debía hacer, y duda pues no sabía si tendría el valor para hacerlo.

El joven salió de la habitación, con gran velocidad corre a su motocicleta y acelera, debía ser rápido y preciso porque no se sabía de cuánto tiempo disponían.

A las afueras de la ciudad la temperatura empezaba a aumentar, mientras un miasma teñía el cielo en un tono amarillo, El vehículo de AJ empezó a fallar conforme que una gota de sangre brotaba de su nariz, esto solo significaba que estaba muy cerca.

El joven aparcó su vehículo y siguió su trayecto a pie, mientras que empezaba a acercarse a su objetivo.

En las puertas del cementerio se podía contemplar el Cadillac robado por Senna, sus ruedas estaban fundidas y su motor en llamas, junto a él un camino de hierbas muertas marcando el suelo que conducía al interior del cementerio.

AJ cruzó el umbral del enrejado del cementerio, viendo en el suelo dos cuerpos carbonizados, debían tratarse del cuidador y su hija, al menos parece que murieron de forma instantánea, pero era prueba suficiente de que Senna ya no estaba en control de sí.

Con un arma en mano el joven avanzó al igual que la primera vez que puso un pie en aquel lugar.

Conforme seguía adelante el rastro de muerte se volvía más amplio, las plantas en el lugar habían cambiado su tonalidad verde a una marrón grisáceo, y en el centro de todo, al igual que la primera vez que la vio estaba ella, rezando a una tumba sin nombre.

—Hola Senna —espeta sin respuesta de ella —Si puedes oírme necesitas ayuda, lo que sea que te haya prometido no vale la pena...

—Alec, no puedo hacer esto más... —aclama sin mirarlo a los ojos —Yo..., te mentí sabes, cuando venía aquí no rezaba por las almas en estas tierras, rezaba por la mía, yo... tengo miedo Alec.

La joven se retira los guantes de cuero, y desabrocha los botones superiores de su camisón, dando a relucir su piel ante el joven, estaba llena de manchas rojas y de erupciones de un aspecto doloroso y desagradable, pero a pesar de todo eso el joven no pudo apartar la mirada de sus ojos llenos de lágrimas.

—Alec.... No quiero morir —Espeta llorando con una sonrisa en el rostro, y la mitad de su rostro cubierto de venas negras.

Durante su vida el joven había visto a muchas personas inundadas por el miedo, personas que harían o dirían lo que sea para seguir viviendo, pero había algo en sus palabras.

Como si lo que dijo y como lo dijo hubiera detonado un recuerdo en él, un recuerdo en el que no había pensado en bastantes años.

—El me comprende, porque él también teme a la muerte, incluso más ...tras haberla experimentado —murmura en un tono más sombrío.

—No lo escuches, todo lo que te dice es una verdad alterada, puede que salve tu vida, pero devorará tu alma en cuanto lo dejes entrar, los Wraiths no son de fiar...

—Al igual que tú... —afirma callando al joven —Él me contó muchas cosas, él me dijo la razón por la que me sigues, nunca fue por mí, fue por el corazón.

—Senna, por favor debes entender que no fue mi intención....

—Y él también me dijo que tu acusas a quienes portan un corazón de Wraith, cuando tú también tienes uno —revela provocando que la expresión del joven cambie —Pero te perdono, porque te entiendo, los humanos somos seres endebles y no es pecado hacer lo posible para sobrevivir.

Senna le extiende su mano, su mirada estaba llena de preocupación mientras se acercaba al joven quedando cara a cara, quien por un segundo considero corresponderla.

—Solo vámonos de aquí Alec, por favor... —le espeta tocando suavemente los dedos de su mano cerrada, pero el joven se negaba a abrirla.

—Sí, tienes razón, al igual que tu poseo el corazón de un Wraith, pero también al igual que a ti no me dieron opción, y por eso puedo decirte que la fortaleza mental necesaria para mantenerlo controlado exigirá todo de ti, hasta el punto de sumergirte en la locura —exclama apretando su agarre —Criaturas como nosotros nacemos humanos, pero no podemos vivir con ellos.

—Entonces solo seamos nosotros dos...

—No..., Senna, tu no debías tener una vida larga, pero debiste tener una vida feliz pese a las circunstancias —expone el joven —pero ahora, pese a estar en este estado aun deseas vivir, eso es lo que nos diferencia, eso... es lo que te vuelve demasiado peligrosa para este mundo.

AJ tras ese comentario dio dos pasos hacia atrás, fuera del tacto de la joven.

Las palabras de AJ rebosaban de verdad, así como de pasión, pero lamentablemente cayeron en oídos sordos, al verlo en este estado, una larga y amenazante sonrisa se dibujó en el rostro de la joven quien apenas era capaz de sostener una carcajada.

—¿Entonces, soy peligrosa? —ironizó con una mano en los ojos —¿Entonces debería rendirme?, ¿dejar que seas tu quien me mate?, tonterías..., estoy harta de que otros me digan que hacer y en qué pensar, quizás... —Levanta la mirada revelando un par de ojos negros con irises naranjas como el magma —Quizás son ellos los que deberían arder.

Venas negras empiezan a cubrir el cuerpo de la chica, conforme las manchas en su piel desaparecen frente a sus ojos, este debía ser el poder de regeneración de Wu Kong, ella está empezando a sucumbir, si el Wraith la domina, destruirá la ciudad y a todo el que viva en ella.

De un rápido movimiento Senna saltó hacia él, extendiendo su mano tratando de agarrar su rostro, rápidamente AJ la esquiva, pero en el proceso vio como un solo roce de sus dedos con su abrigo lo cubrió de llamas naranjas.

AJ tomó su distancia mientras se quitaba la chaqueta dando a relucir que bajo ella él estaba fuertemente armado, dos revólveres a cada lado del cinturón, dos cuchillas medianas en sus costados, una cuchilla larga en su espalda, y tras él una katana corta o "tanto" envainado.

AJ dispara contra ella, pero las balas al acercarse se fundían en el aire, Senna empezó a perseguirlo arrasando con todo a su paso, los niveles de radiación del lugar estaban por las nubes, hasta el punto de que el joven empezó a lagrimear sangre.

Las balas se agotan y la joven extiende su mano al aire frente a él.

De un movimiento de su brazo lanza una onda de radiación tan densa que hacía vibrar el aire entre ellos, el joven saltó a un costado, mientras veía como todo dentro de la onda era incinerado en el acto.

AJ se recompuso y siguió avanzando mientras que, tras él Senna lo seguía de cerca.

El joven buscaba algo, necesitaba ganar tiempo hasta poder encontrarlo, pero su tiempo se estaba agotando, quedando acorralado contra una de las criptas del cementerio, la joven arremetió nuevamente contra él, destrozando la puerta de la cripta, dejando caer sobre ella una gran cantidad de agua.

Ya en el pasado se ha habido registros de edificaciones antiguas expuestas a la intemperie inundadas por el agua tras el paso de un par de décadas.

Era una apuesta arriesgada, pero el joven tenía evidencias sólidas, manchas de humedad en la zona, y la vasta población de insectos indicaba que había un lugar donde el agua de lluvia y nieve se estaba estancando.

30 años de aguas almacenadas habían caído sobre ella, descargándola solo lo suficiente, para que él se acercara.

Con la cuchilla larga AJ arremetió a gran velocidad, apuntando al corazón, pero ella lo detuvo, ubicando su brazo en el trayecto, desviando el curso de la espada solo por unos centímetros, pero en el proceso perdiendo la extremidad y dejando la cuchilla quedo incrustada en su hombro.

Por su cuenta, ella se retira la cuchilla, mientras que la herida alrededor empieza a regenerarse al igual que su brazo.

En un estado bestial arremetió nuevamente contra él, pero en esta ocasión AJ sacó el pequeño "tanto" de su vaina, y de un rápido movimiento cortó el vientre de la joven.

Senna quedó paralizada, mientras el área alrededor del corte empezaba a brillar al rojo vivo.

En sus manos el filo del "tanto" presentaba un color rojo característico del oricalco, un mineral especial cuyas propiedades eran eficientes para dañar a los Wraiths, al igual que aquellos vinculados con estos.

La herida en el vientre de la joven en lugar de regenerarse empezó a abrirse más mientras su sangre teñía el suelo de rojo, y así Senna cae de espaldas.