En toda mi vida nunca pensé que una mujer me haría sentir de esta forma.

Me hace reír, me hace enojar...

Me hace darme cuenta que quizás no he tomado las decisiones correctas.

El día que entro por la puerta de mi oficina, fue el mejor día de todos.

Pero si ella me conociese como soy y las cosas que he hago.

¿Aún me amaría?

—bitácora de Kiril Kincade, 2 de agosto de 2030

En un lugar y tiempo indeterminado...

AJ estaba atónito ante la imagen frente a él, era como ver a un fantasma, no obstante, ella no tenía el mismo sentimiento hacia él, ella lo observaba como si apenas lo conociese, como a un extraño.

—Oye no sé cómo conoces mi nombre, pero creo que hubo un malentendido —espeta quitando sus manos de sus hombros —¿Yo te conozco?

AJ rápidamente recuperó la compostura, se había emocionado de sobremanera, no obstante, solo se habían conocido por un periodo tan breve como una semana, bien no sería extraño que hubiese olvidado su rostro o su voz, pero ella lo veía como si no lo conociese en lo absoluto.

—Sí, creo que quizás me confundí de persona, lo siento —espeta disculpándose.

—Descuida no es como si me hubieses hecho algún daño, lo normal sería presentarme, pero parece que ya conoces mi nombre, ¿y el tuyo? —pregunto amablemente.

—AJ Graham —responde.

—Olivia Ortega —responde de vuelta —Esto sonará extraño, pero ¿de casualidad sabes jugar póker?

—¿Póker? —pregunta confundido —Supongo que lo he jugado antes.

—Eso es excelente —responde con alegría —Jugar solos es muy aburrido.

—¿Solos? —pregunta —¿Hay más personas aquí?

—Sí, además de ti somos tres... —repentinamente una fuerte migraña empieza a inundar su cabeza.

—¿Oye estás bien? —pregunta con preocupación.

—Sí, descuida —responde —¿De que estábamos hablando?

—De las otras personas —Señala.

—Cierto, además de ti somos dos personas —responde contradiciendo su respuesta anterior.

—¿No habías dicho antes que eran tres?

—Estoy segura de que no...

—¿Y quién es la otra persona?

—¿No la habías visto? Si está atrás de ti...

Repentinamente AJ siente como el cuchillo que cargaba, era arrancado de su abrigo donde lo escondía, mientras una persona tras él con mucha destreza lo sometía en el suelo colocando el arma en su cuello.

—¡¿Tú...?! —exclama alterado al ver a esa persona.

Ciudad Hélix, año 2057...

La noche era oscura mientras una fuerte lluvia empezaba a manifestarse, el cielo rugía como una jauría de leones y la lluvia golpeaba la ciudad como disparos a quemarropa.

Pero nada de eso cruzaba por la mente de Ken en el momento, pues no era capaz de apartar la vista de la joven quien apuntaba una estaca de hielo contra su cuello.

—Te lo preguntaré una vez más, ¿quién demonios eres tú? —pregunta mientras Ken analizaba la situación internamente.

—"¿No sabe quién soy?, pues claro que no, sin tomar en cuenta la extraña cirugía, nunca entablamos una conversación directa" —monologa internamente —Llámame Ken, mi apellido no es importante.

—Ya sé que tu nombre es Ken Kincade, me lo dijo tu amiga cuando la despedí por la puerta —expone —Es asqueroso saber que me he vuelto el fetiche de canallas como tú.

—¿Me creerías si te dijera que fue cosa de una sola vez? —responde en tono de burla solo provocando que lo golpeen nuevamente —¡¿Quieres dejar de hacer eso?!

—Escucha atentamente, probablemente crees que soy la delicada princesa de las noticias, pero la realidad es que puedo ser una persona muy impaciente, así que así funcionara esto yo preguntare y tu responderás sin rodeos —exclama amenazándolo directamente —Me entendiste.

—Sí, comprendo —responde con una sonrisa sarcástica.

Winnyfer Wagner es un arma en todo el sentido de la palabra, su apariencia es perfecta en todo el sentido de la palabra como una diosa venus, tiene el amor y apoyo de toda la ciudad a su disposición y lo más importante es una usuaria considerada como una de las más poderosas en su elemento a su edad.

Más que venus es como la diosa Tetis hundiendo los navíos en el mar.

—El mural de las paredes ¿lo hiciste tú? —pregunta.

—Sí, lo he hecho yo...

—¿Cómo conseguiste esos datos...? ...

—Realizando una exhaustiva investigación, admito que he usado algunas fuentes algo reservadas con sus identidades, así que no puedo darte nombres —responde.

—¿Qué sabes sobre AJ Graham? —pregunta

—Eso depende, ¿cuánto tengo que saber para que no me mates? —responde recibiendo un golpe en el estómago —Bien todo, excepto su ubicación actual.

—Entonces no me eres útil —reclamó levantándose del lugar.

—¿No vas a matarme? —pregunta confundido.

—No soy una asesina, voy a entregarte a la policía, la información robada que posees seguro te llevará a una prisión de mínima seguridad, puede que salgas en 15 años por buen comportamiento —espeta dejando el lugar.

Esta situación era bastante problemática, Ken no podía permitirse ser arrestado, un chequeo policial revelaría los rastros de la cirugía, con un equipo forense apropiado revelaran su identidad y sus perseguidores lo matarían antes de entrar a una patrulla.

Era necesario actuar...

—¡Espera! —grita a la joven antes de que se vaya —No sé dónde está Graham pero creo saber cómo encontrarlo. —La joven se detiene al escuchar esas palabras.

—¿Cómo sé que no estás mintiendo? —pregunta.

—Junto a ti hay un escritorio con un gabinete que necesita pintura, ábrelo —Exclama mientras ella sigue sus instrucciones —¡Espera! El gabinete tiene una bomba de tinta, presiónalo hacia adentro hasta escuchar un clic después ábrelo.

—¿Por qué tanta seguridad? —pregunta desbloqueando el gabinete tal y como se lo instruyó.

—La información en el mural me daría 15 años de cárcel, pero la del gabinete me daría la pena de muerte —responde —Abre la carpeta que dice Roxanne Van Helsing, página del 29 de mayo del 2058.

En la carpeta se es capaz de apreciar una fotografía, de Roxanne hablando con alguien envuelto en una capucha negra.

—La imagen es justamente 30 días después de que su traslado fuese interrumpido, la fotografía fue de una cámara de tránsito y está borrosa, pero es mi única pista de Graham a la fecha, si es él el de la foto entonces ella sabrá dónde está —Expone.

—Tomaré la carpeta, pero eso no evitará que vayas a prisión —responde.

—Bien, puedes llevarte la carpeta, pero sería inútil, pues ahí no está la ubicación actual de Van Helsing —espeta llamando la atención de Wagner —El único registro de su ubicación está en mi cabeza. Y estarás pensando "puedo contratar a un ejército de detectives mejores que él", pero te harán preguntas que seguro no querrás responder.

—¿Crees que me tienes? Eres un hombre peligroso hay quienes te matarían solo por mencionar la información que aquí tienes. —reclama ante su afirmación cerrando la carpeta y formando una leve sonrisa —Parece ser que buscamos a las mismas personas.

Los grilletes de hielo que sujetaban sus brazos se deshacen en el acto mientras ella camina hacia él ayudándolo a levantarse.

Desde la perspectiva de ambos estaban haciendo un pacto con el diablo, pero si querían llegar al fondo de esto necesitaban ayudarse mutuamente.

—¿Y bien? ¿Dónde está Roxanne? —pregunta.

—Déjeme preguntarle, ¿qué tan bueno es su italiano? —responde con una sonrisa.

Mientras tanto bajo la lluvia en el exterior del edificio, se erigió una figura sombría que observaba hacia el interior del departamento, tomando fotografías de Ken y Winnyfer.

Ciudad de Roma, 2 días después...

Una ciudad llena de arte, los aromas, la cultura, todo en ella un tesoro del viejo mundo restaurado cuidadosamente tras la guerra.

A pesar de que la nación fue totalmente diezmada hace 30 años durante la gran guerra del pacifico, es casi como si este pequeño espacio del mundo hubiese quedado intacto.

En el interior de un taxi que viajaba hacia la presunta ubicación de Roxanne se encontraba Ken vistiendo un saco negro sin corbata, solo en la parte de atrás del vehículo, más contra lo que el aparentaba mostrar no iba solo.

—No era necesario que vinieras conmigo, era perfectamente capaz de hacer esto yo solo —espeta hablando con alguien.

—Aún no me has generado la suficiente confianza para dejarte esta tarea, además conozco a Roxanne, aunque es poderosa también es muy tímida si se siente amenazada escapará —exclama la voz de Winnyfer en la cabeza del detective.

—¿Estás consciente de que es una persona y no un cervatillo? —espeta sarcásticamente —De cualquier forma, no podríamos hablarlo cara a cara esto es muy extraño y llama la atención.

—Al menos no eres tú quien está debajo de esta camisa sudada —responde con disgusto.

Ken se desabrocha la camisa y saca un pequeño pendiente con la forma de una Cruz plateada, que rodea su cuello...

—Si llegan a tomarme una foto fuera de la ciudad ahora, la prensa me comerá viva —espeta Winnyfer desde la diadema.

—¿A todo esto, como hiciste para escapar de Lector? —pregunta

—Dejé un doble —responde.

—¿Un doble? Supongo que es una ventaja que hagan mercadotecnia tuya —espetó con sarcasmo nuevamente.

—¿A dónde estamos yendo ahora?

—Iremos al vaticano.... —Ken empieza a explicar la situación mientras paralelamente iniciaba un monólogo interno.

—"Roxanne Weaver, Antes conocida como Rita Van Helsing es la hermana gemela de la líder de uno de los carteles más grandes de toda Europa, aunque no parece estar consciente es vigilada en todo momento por los agentes del Grupo Lantrosu, aparentemente buscan algo llamado La herencia de la fundadora; no sé qué relación tenga con Roxanne, pero hasta el momento no parece ser una amenaza, de hecho es justamente lo contrario, ella es..."

—¡¿Activista?!! —grita Winnyfer con asombro sobresaltando al detective.

—No activista propiamente, parece que se está ocultando en un grupo en post de la preservación del patrimonio cultural italiano —responde.

—No esperaba que Roxanne tuviera tales intereses —espeta sorprendida

—Teorizo que solo lo hace porque uno de los miembros tiene una granja propia de cannabis y provee a todo el grupo de hierba —responde aclarándole.

—Eso sí suena más como Roxanne...

Winnyfer Wagner siempre fue conocida por tener una habilidad social magnética provocando que quien la conociera la adorara, en consecuencia rara vez podía tener una conversación con otra persona sin que ésta se perdiese en su imagen.

Pero entre los pocos casos de personas quienes son naturalmente sinceras con ella se podía mencionar a Roxanne.

Después del incidente en Alaska las dos estuvieron forzadas a compartir habitación de hospital por 2 semanas, en un principio fue irritante para ambas, pero con el tiempo llegaron a entenderse y hasta encontrar temas en común.

Incluso después de ser dadas de alta mantuvieron el contacto, pero tras la desaparición de AJ Winnyfer se desconectó de todas las redes y eventualmente perdió su rastro, aparentemente hasta ahora.

Al bajarse del taxi quedaron frente a la reconstruida ciudad vaticana, 45 kilómetros cuadrados de roca reformada para conservar el aspecto de su época de oro, también hogar de cientos de obras de arte del viejo mundo restauradas y en algunos casos recuperadas.

Su destino la necrópolis vaticana, una profunda e intrincada red de túneles subterráneos, algunos de ellos aún intactos después de tantos años.

El grupo al que seguían protestaban por el intento de demoler una sección de los túneles para abrir una tubería de gas natural, en ese lugar es donde encontrarían a Roxanne.

Al llegar al lugar se podía apreciar un grupo de camionetas almacenando insumos y desmontando un campamento, por sus rostros afligidos debía tratarse del grupo de preservación que aun con sus arduos intentos parece ser que no fueron capaces de completar su cometido.

Ken se acerca al líder del grupo para platicar...

—(Mi scusi, potrei avere un minuto del tuo tempo) —Espeta en italiano.

—¿Acaba de pedirme que le preste un minutero de mi reloj? —responde en español.

—Perdone, parece ser que hablamos el mismo idioma —señala avergonzado —Estoy buscando a un miembro de su grupo, creo que debería conocerla como Roxanne.

—Roxanne —Afirmo exaltado —¿Es acaso de la policía?

—¿Policía...?

Ken y Winnyfer quedaron exaltados ante la afirmación, << ¿Qué cosa pudo haber hecho para que la policía tenga que involucrarse? >> pensaron; pero rápidamente reformularon la pregunta en sus mentes; << ¿Qué de la larga lista de cosas que pudo haber hecho, hizo para que la busque la policía? >>

—No soy policía, pero ¿por qué debería serlo?, ¿acaso se metió en algún problema? —pregunta Ken.

—No es nada de eso, ayer por la tarde ingresó en las catacumbas de la ciudad, nadie se lo pidió simplemente lo hizo, después de eso no volvió a salir —responde a la pregunta —Tratamos de mandar grupos a buscarla, pero conforme oscurecía existía el riesgo de perder a más gente.

—¡¿Y pretendían irse dejándola ahí dentro?! —Reclama Winnyfer siendo solo Ken el único en escucharla.

—¿Y van a irse sin saber si está a salvo? —pregunta de una forma más tranquila.

—Soy el responsable de estas personas, la compañía de gas ya tiene los derechos de la tierra y comenzaran la excavación mañana, el asunto ya está fuera de nuestras manos —responde con mucha pena terminando la conversación.

La situación era bastante seria, el escenario más probable era que había quedado atrapada en una de las catacumbas caminando sonámbula.

Roxanne es demasiado fuerte y terca como para dejarse morir, pero si la excavación provocaba un derrumbe en las cámaras continuas, podía llegar a ser un problema.

—¿Qué opinas Wagner? —pregunta.

—Opinó que debemos entrar por ella —responde.

—No es como si tuviésemos otra opción, pero la necrópolis es un laberinto sin fin no la encontraremos antes de mañana —afirma con dudas.

—Tienes razón, pero olvidas algo muy importante, tú me tienes a mi... —responde con soberbia.

Rápidamente los dos caminan hasta la entrada de las catacumbas cuando Ken Nota algo en el suelo.

Una maleta abierta y olvidada de la que se podía relucir una de las cartas del tarot en ella, Ken levanto la carta del suelo cuando tras él una joven lo sorprende.

—Disculpe, pero esa que tiene es mi mochila —espeta la joven

—Lo siento no fue mi intención...

—Descuide —responde mientras le entrega la carta que había sacado —Esto se cayó de ella.

—Gracias —responde —Y parece ser que hoy será su día de suerte.

—¿En serio?

—Es el Hierofante invertido, una carta que representa la inteligencia y sabiduría, significa que un guía se presentara ante ti que lo guiara hacia lo que quiere.

—¿Lo que quiero? —espeta internamente.

La joven toma la carta y se aleja junto al grupo que deja el lugar con rapidez, dejando a Ken parado en el lugar solo y recapacitando.

—No sabía que fueses de esos que creen en el Tarot... —señala Winnyfer

—La fe solamente está para consolar a las personas en un mundo injusto —responde mientras monologa internamente —"Además en este momento no podría estar más cerca de lo que quiero, Roxanne Van Helsing y Winnyfer Wagner frente a mí, alguna de ellas tiene que saber seguramente que fue lo que ocurrió con Olivia, pero lo mejor será tener cuidado al hacer la pregunta, pues no se si son testigos o cómplices de su desaparición"

Ken ingresa en el interior de las catacumbas hasta dónde llega la luz.

Una vez estando ahí una esfera de agua se forma en el pecho del detective y Winnyfer retoma su forma humana con una sonrisa arrogante, no obstante Ken no es capaz de apartar la vista de los guantes de cuero rojo en sus manos que no se había quitado desde que se conocieron.

—¿No hace demasiado calor para usar esos guantes? —pregunta —¿O es que tratas de ocultar algo?

—Nunca le hagas preguntas como esa a una dama, ¿acaso creciste con animales...? —responde sin deshacer su sonrisa

—Bien, claramente estas emocionada por mostrarme algo —Señala al ver su reacción.

—Radiestesia, mi querido cómplice —exclama arrogantemente.

—¿Cómplice...? ... —reclama ofendido por el título —No sabía que fuiste niña exploradora.

La radiestesia, una técnica utilizada por los antiguos exploradores para encontrar depósitos de agua subterráneos usando un par de barras especiales.

También se usa para encontrar anormalidades en el líquido espinal, todo siguiendo el campo estático generado por la fricción del líquido comprimido con su ambiente.

Winnyfer Wagner al ser una usuaria del elemento agua, es una barra de radiestesia viviente, encontrando hasta la gota más pequeña de agua en un desierto.

Con dicha habilidad fue capaz de encontrar personas perdidas en derrumbes, rastreando el agua de sus cuerpos en sus años como agente de la alianza.

—De esta forma encontrar a Roxanne no nos tomará ni un par de horas —exclama arrogantemente.

6 horas después...

Tras varias horas de caminar en círculos chocando con callejones sin salida la moral de los dos estaba por los suelos.

Aunque una vez más poseer visión nocturna resultó ser útil, esta vez para ambos, evitando en más de una ocasión que cayesen en una de las docenas de fosas y trampas que llenan los pasillos.

Repentinamente se detuvieron ante un muro...

—Otro callejón sin salida —espeta Ken disgustado.

—Esto no tiene sentido, estoy bastante segura de que hay una persona unos metros más adelante

—¿Sabes qué? Te creo —Afirma sorprendiéndola por su cambio de actitud —Mira.

En el suelo frente a la pared se podían apreciar marcas de rodamiento, lo que significaba que debía ser una puerta oculta, una que claramente se había abierto recientemente por el polvo dispersado alrededor.

—Wagner ayúdame a empujarla —solicita.

Ambos se colocan a un extremo de la puerta moviéndola con gran facilidad.

Mientras la abrían se podía contemplar una larga serie de seguros que habían sido fundidos a la fuerza, era evidencia de que Roxanne había pasado por aquí.

Al cruzar la puerta sólo había oscuridad, mientras una serie de mecanismos se activaban encendiendo antorchas e iluminando el lugar, y frente a ellos estaba Roxanne en una situación algo... complicada.

—¿Quién encendió las luces? —pregunta confundida y sorprendida —Wynn, ¿eres tú?

—Roxanne, estás... bueno... ¿como...?

—Creo que lo que Wagner trata de decir es: ¿Cómo llegaste ahí arriba? —pregunta al ver el hecho de que Roxanne estaba sentada justo sobre el techo de la catacumba como si su gravedad se hubiese invertido.

—Si lo supiera, ¡no seguiría aquí...! —responde.