No creo en la magia, en destino, en las supersticiones, en la brujería y en muchas de esas cosas magníficas que algunas personas creen que existe. Pero el hecho de que no crea, no significa que no puedo ser arrastrado a todo aquello, porque ahora mismo estaba sucediendo.

Mi mejor amigo, Kim Taehyung, es fanático de que alguien lea su mano, para así saber lo que le prepara el futuro. Cosa que me parece algo ingenuo de su parte y malo de parte de las personas que hacen aquello, pues no está bien engañar a las personas. Él cree que todo lo malo que sucede en mi vida o en la de él, es producto de suerte, envidia o brujería. Por esa razón nos encontrábamos en un pequeño local donde hacen "hechizos o limpian tu alma"

-          ... Veo un gran futuro querido. El amor va a llegar a tu vida y se quedará por mucho tiempo.-  La mujer que él frecuentaba a menudo, estaba vestida de un estilo algo gitano y tomaba la mano de mi amigo mientras deslizaba sus dedos por su palma.- No sufrirás económicamente y tu familia va a crecer.

Taehyung sonreía muy emocionado con todas las palabras de la mujer y yo solo esperaba sentado a su lado rogando que termine rápido, pues soy una persona muy ocupada que debe trabajar para comer, porque si no come, no vive y listo.

-          Eso es todo lo que veo por ahora.- Finalizo.- Ahora es tu turno.- Dijo mirándome directamente.

-          ¿Qué?... Oh, no gracias, prefiero no saber sobre mi futuro.

-          ¿Estás seguro Jimin?- Pregunto Taehyung.

- Muy seguro.- Respondí.

-          Está bien que no quieras saber sobre tu futuro, pero puedo ayudar a mejóralo.- Ofreció la mujer.- Puedo ver que llevas una vida un tanto aburrida y que no te va para nada bien en el amor.- Si, bueno, hasta yo puedo ver a un hombre millonario en un yate y decirle que lleva una vida llena de lujos. Y respecto al amor, a muchos les pasa.- Sé que quieres cambiar un poco aquello y tengo algo que es perfecto para ti.- Ella se levantó y caminó hasta un estante, donde se objetos algunos objetos como calaveras, pulseras, una especie de pata de pollo y muchos frascos llenos de líquidos coloridos. Volvió a su sitio y me entregó uno de los frascos. Tanto yo como Tae mirábamos expectantes.- Bébelo.

-          No es necesario.

-          Hazlo, Jimin, no se te quita nada.- Intervino mi mejor amigo.

Suspire rendido porque sabía que Taehyung seguiría insistiendo, así que lleve el pequeño frasco hasta mi boca para dar un gran sorbo al líquido rosa.

No está nada mal, es más, creo que es jugo de fresa. Y si el jugo de fresa puede cambiar la vida de las personas pues lo bebería todos los días.

-          Cierra los ojos.- Pidió. Lo hice y sentí como tomaba mis manos por encima de la mesa para después recitar algo en otro idioma. Me puede estar insultando  y yo ni cuenta.- Listo, es todo.- ¿En serio?... ¿Y dónde está la vida extraordinaria y mi nuevo novio? Pues yo no veo nada de esas cosas.

-          Gracias por todo, nos vamos.- Se despidió Taehyung levantándose de la silla y yo de igual manera.

-          No es nada.- Contestó la mujer y comenzó a buscar algo entre otro estante lleno de libros.- Esto es para ti.- Me entregó un libro de pasta café y con líneas doradas en los bordes; lo abrí y cambien las páginas pero no había nada, es un simple libro en blanco.- Cuando te sientas confundido con todo lo que pasa a tu alrededor, léelo.- ¿Y cómo se supone que leo un libro que no tiene ni una sola palabra?- Sé que no tiene nada escrito aún, pero luego entenderás... Ahora pueden irse.

Salimos de la pequeño local, Taehyung con algunas sales de baño en la mano que había comprado y yo con el libro en blanco, que por lo menos me serviría para mis apuntes en el trabajo.

• ☾ •

-          ¿Pollo frito o pizza?- Le pregunte a Taehyung por teléfono.

-          No lo sé, lo que quieras.- Respondió.

-          Está bien.- Corte la llamada y seguí caminado por el centro de la ciudad.

El cielo ya se encontraba oscuro e iluminado por estrellas y una resplandeciente luna llena. Yo recién salía del trabajo y me dirigía hacia el pequeño departamento que compartía con Tae, pero antes de eso debía dirigirme hacia la pizzería más cercana; no tenía tantas ganas de hacer la cena y mucho menos la haría Tae, pues él no sabe ni hervir agua.

Observe a unos cuantos metros la pizzería y me dirigí hacia allá. Camine por una avenida no tan frecuentada; comencé a cruzar la calle y cuando estuve en medio de la calle, un dolor fuerte golpeo  mi cabeza. Mi vista comenzó a nublarse rápidamente hasta que todo se convirtió en negro. Intente caminar lo poco que me quedaba para llegar al otro lado, pero se me hizo imposible; simplemente todo mi cuerpo perdió fuerza y mi cabeza golpeó contra el pavimento.

Lo último que pude escuchar fue el sonido de un claxon.

Hola!!!

Bueno aquí tienen mi primera historia con mucho del género omegaverse.

Y nada, a ver cómo nos sale esto.

Gracias por leer ( ˘ ³˘)❤