JiMin río suavemente entre sus bocas por las manos frías que tocaban su espalda e iban levantando la tela de su camisa disimuladamente. El alfa estaba empeñado en morder sus labios mientras sus lenguas se tocaban y sentían la pasión elevarse en sus cuerpos e ir sucumbiendo ante ella para dejarse llevar en ese limbo de placer.

Las manos del omega se metieron en su camisa, subían hasta su nuca y jalaban algunas veces su cabello provocando que sus bocas se separan levemente de su contacto y así tomar un poco de aire también. Para JiMin fue un poco vergonzoso sentir que ya tenía una leve erección asomada sobre la ligera tela de su pijama, al parecer YoonGi noto su timidez y le sonrió tomando con su mano la mejilla rojiza y acariciarla con suavidad.

—No te preocupes, es normal estar así, Mimi.

Las palabras dulces y roncas de su alfa le hicieron sentir seguro, aunque eso no evitó sorprenderse cuando YoonGi había tomado su mano y llevarla a su entrepierna para que viera que ambos estaban de la misma forma, deseando su contacto con ansias y sus cuerpos siendo demasiado evidentes.

No era como si su vida sexual no se mantuviera activa, sin embargo muchas veces posponían sus encuentros ya que el cansancio por sus trabajos consumía gran parte de su energía y solo podían llegar a ducharse y entrar a la cama para fundirse en la calidez de su pareja.

—G-gigi... —lo llamo bajito por los dedos que ahora estaban cerca de su cintura, dudosos de meterse en la tela de su pijama por la forma en que YoonGi solamente los movía en esa zona. Se sintió un poco desesperado por la acción así que lo separó un poco de él para cambiar sus lugares y dejar ahora a YoonGi sentado sobre la orilla de la mesa y él entre sus piernas jugando con el interior de sus muslos.

—¿Puedo? —YoonGi asintió al entender la indirecta por las manos de JiMin muy cerca de su miembro, así que se dejó llevar mientras lo observaba bajar hasta quedarse de rodillas y elevar su mirada cuando comenzó a bajar el pantalón junto a su ropa interior que ya tenía una muy ligera mancha de pre-semen mojando la tela.

El alfa suspiro fuertemente con las pequeñas manos que tomaron su miembro por la base y comenzaron a acariciar solamente esa zona con el aliento de JiMin chocando contra su glande al estar tan cerca pero haciéndole sufrir un poco para esperar por la cereza del pastel.

—Mimi, y-yo... Carajo —su voz salía ronca e instintivamente llevo sus manos al cabello dorado para jalarlo suavemente, no quería apresurar a JiMin para que tomara su pene entre sus labios, pero sentía que sus pequeñas manos quemaban su piel y podría derretirse solamente con sus toques y esa mirada que podía dejar de ser tierna para convertirse en un total felino al ataque por su presa.

Al parecer su omega se dió cuenta de sus ansias por él y entre sus labios tomo el miembro erecto, rozando tan suavemente que los ojos del alfa se tornaron oscuros y lo observo jadeando por las caricias a su intimidad. Enredo sus dedos entre el cabello de su pareja para acercarlo un poco más, no tardó en sentir la calidez de su boca comerlo hasta donde la boca de JiMin soportaba. Se aseguró de dejarlo ir a su ritmo aunque deseaba ansiosamente follar su boca, pero la neblina de placer en sus ojos solo podían darle extrañas corrientes de placer que desahogaba en gemidos roncos y apretando con sus manos el cabello suave de JiMin.

—Mi-Mimi... —su cuerpo sintió un subidón de excitación cuando la mirada de su omega se elevó para verlo, sus ojos conectados decían mucho más de lo que querían, pues en el rostro rojizo de JiMin solo pudo encontrar el placer que se estaba desbordando. Gimió al darse cuenta que JiMin tenía una de sus manos en su entrada, preparándose a sí mismo para el encuentro mientras disfrutaba de oír a su alfa gemir por sus acciones.

El alfa sonrió de lado y empujó levemente sus caderas viendo que JiMin cerraba sus ojos con fuerza y la mano en su trasero se movía con un poco más de fuerza, le parecía increíble la dualidad de su omega aunque él tampoco podía quedarse atrás cuando parecía ser otra persona y JiMin lo notaba claramente pues YoonGi siempre era suave cuando el sexo iniciaba y solo iba aumentando su ritmo cuando el calor en sus cuerpos era sofocante.

Un gemido salió de la boca de JiMin cuando el alfa lo separó de él y sus labios mojados fueron atrapados una vez que estuvo de pie junto a él. YoonGi lo besaba con necesitad, con fuerza y sus manos tocando la zona que antes preparo.

Parecía que todo se volvía más nublado porque su conciencia se tambaleaba con los dedos que ahora se movían en su interior con la fija mirada de YoonGi en sus expresiones, eclipsado en la forma en que sus ojos se cerraban y su boca se abría para gemir y jadear con cada empuje a su interior, el sudor que resbalaba por su cuello y se perdía en sus clavículas o ese etéreo arco que formaba su espalda producto del placer al sentir como su interior era profanado por los largos dedos de su alfa.

No dejaba de sorprenderle esa nueva faceta de YoonGi, así que se sintió cohibido cuando fue puesto sobre la mesa con las piernas abiertas sin darse cuenta cuando su pantalón desapareció junto a su ropa interior, era tan excitante sentirse así de expuesto estando en la cocina con su alfa, por lo que decidió no pensar más y sucumbir ante la lujuria que sentía correr por su cuerpo.

—¡Yo-Yoon! —Sintió que su lubricante se esparcía en su zona por la lengua que ahora penetraba su interior, llegando tan profundo como podía y chupar su borde mientras sus manos se mantenían por debajo de sus rodillas para elevar sus piernas y tenerlo a su disposición.

El omega no tenía nada a su alrededor para desquitar su placer así que solo atinaba a retorcerse cuando no podía quedarse quieto, el alfa gruñó aún con su boca jugando en su entrada y la vibración le provocó un gemido fuerte que le llevo a sentir como el espiral en su estómago lentamente se formaba con cada empuje de su lengua y los dedos que rozaban su entrada al mismo tiempo.

—Gi... por favor —gimió con los ojos llorosos y la voz temblorosa por sus gemidos. El alfa lo miro sin detenerse y contrario a detenerse sus dedos se adentraron junto a su lengua y los movió de adentro hacia afuera con su músculo húmedo lamiendo cada parte de él y llevándose el lubricante natural a su boca.

Sintió que JiMin apretaba sus dedos y el orgasmo lo atacó por la forma en que su cuerpo reaccionó y las manos que se aferraron a su cabello sin saber de dónde más sostenerse sin sentir que podría deshacerse en ese mismo instante.

Se alejo de su entrada y JiMin se rió al ver su boca húmeda, así que sin importarle que su lubricante este manchando la mesa se sacó la camisa y con ella limpio el rostro de su pareja para luego acercarlo a él y besarlo tocando el pene de su alfa en medio del encuentro de sus bocas.

—¿Estás listo? —Susurró el alfa sobre sus labios, el omega sintió el roce de su miembro contra su entrada y antes de asentir se levantó para ir a la habitación rápidamente y traer con él una tira de condones.

—No queremos otro accidente, ¿verdad?

Rieron juntos y le dió su tiempo al alfa para ponerse el condón adecuadamente, suspiro al sentir sus caricias otra vez y cerró sus ojos cuando lentamente sintió que iba entrando en él. El alfa jadeó sobre su cabeza al sentir que JiMin mordisqueaba la zona donde estaba su marca, jugó con esa parte hasta que sus colmillos se enterraron suavemente junto a los empujes de YoonGi que eran un poco rápidos contra él.

El omega miro satisfecho su marca renovada y paso sus brazos por el cuello de YoonGi para luego acostarse sintiendo el peso del cuerpo ajeno sobre el suyo junto a sus empujes duros. Era delirante la forma en que sentía cada empuje, la forma en que se deslizaba y como lo tomaba de las caderas mientras mordía su cuello jadeando y gimiendo roncamente.

No supo cuando tiempo se mantuvieron en esa posición, tal vez una media hora con YoonGi moviéndose y jugando con su cuerpo hasta que el límite se presentó en ambos y JiMin abrió más sus piernas para darle más movimiento. El alfa enderezó su espalda y alzó las piernas de su pareja, penetrando con fuerza sin llegar a ser rudo y admirando las expresiones de su rostro contraído de placer.

—Yoon... Yoon —lo llamo y el alfa lo entendió cuando sus caderas se movían casi desesperadas, así que sonrió burlón poniendo las piernas de JiMin sobre sus hombros y sus manos a los lados de su cintura empujando más fuerte que antes. El omega cerro sus ojos y solo estiró sus manos para acariciar el torso de YoonGi, tocando sus pezones y su cuello sin saber donde detenerse.

Su mirada brillosa conecto con la de YoonGi, sintió un remolino en su estómago y lo atrajo con necesidad hacía él para besarlo, gemía entre sus bocas por el orgasmo que amenazaba su cuerpo, el alfa estaba igual que su pareja así que sintiendo que más lubricante salía entendió que JiMin estaba cerca, su rostro también estaba más rojo y temblaba repetidamente cuando sus paredes se sentían más sensibles y cada movimiento en su interior era como sentir un millón de mariposas en su vientre.

Sin querer mordió el labio del alfa cuando su semen los mancho a ambos y el alfa se quejó bajito con el sabor de la sangre entre sus bocas, su pene dolía mientras JiMin lo apretaba por su orgasmo hasta que el propio lo alcanzó y solo cerró sus ojos gimiendo sobre la boca de JiMin.

Se apoyó contra el pecho del omega y respiraron tanto como podían, JiMin acariciaba con parsimonia la espalda lechosa de su alfa con los besos suaves que YoonGi dejaba en su cuello hasta que pudo dejar de sentirse cansado y se levantó para quitarse el condón y tirarlo a la basura.

Antes de regresar por JiMin se detuvo a mirarlo y su gatito le hizo sentir tan orgulloso por la imagen que lo admiro un momento más. JiMin estaba acostado sobre la mesa, sus piernas seguían un poco abiertas y veía el lubricante resbalar por su piel y un poco sobre la mesa, sus manos estaban extendisas hacía arriba y respiraba pausadamente con tranquilidad tocando su cabello algunas veces.

Se acercó a él y beso su mejilla pasando su mano con debajo de su cintura y sus rodillas, lo cargo hacía el baño con JiMin diciéndole que se había sentido muy bien. Cuando el agua estaba lista se metió con JiMin entre sus brazos y lo dejo descansar mientras su cuerpo se mojaba en la tina y le ayudaba a limpiar su cuerpo manchado.

—¿Podemos sacar más tarde a Holly? Me siento cansado, Gi.

El alfa asintió con JiMin sobre su regazo mientras él tallaba su espalda con una mano y la otra acariciaba su pierna.

—Ahora solo termina de bañarte y más tarde podremos salir.

Lo besó una última vez disfrutando de su compañía, ya después podría limpiar la cocina, por el momento solo le importaba su omega y que siguiera así de cómodo entre sus brazos. 

Primera vez en toda esta saga que hago un smut explícito del YoonMin sjsj.

¿Parte favorita?

Los amo bebés. 💜