Peter x Karen Starr

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Spidey había tenido un día largo de patrullaje siendo se quito la parte superior y la máscara, noto que su novia: Karen Starr no estaba, soltando un suspiro fue hacia su cuarto para buscar algo de ropa. Encontrándose una escena que lo dejo sorprendido era la rubia usando una lencería roja con blanca.

-¿Te gusta lo que ves?-pregunto con una voz sensual, se levanto acercándose a su novio-Se que has tenido un día largo, déjame hacerte sentir bien

Sus labios chocaron contra lo de sus novios, el beso era apasionado y lleno de hambre, fue cargada por el castaño hasta que se separaron por la falta de aire. Un hilo de saliva que los unía.

-Peter quítame este sostén quiero que lamas, apreste mis grandes tetas-el castaño la dejo sobre la cama, quitándole el sostén empezando a lamer y apretar los enormes melones de Karen, quien empezaba a suspirar y gemir de placer.

El castaño mordía esos duros pezones y masajeaba el seno derecho, le encantaba mucho a la rubia quien le acariciaba el sedoso y lacio pelo del castaño. Peter empezó a besar el abdomen plano de Karen, cada beso baja más hasta que llego a su zona inferior le quito la tanga.

Dándole una larga lamida que le hizo tener una corriente eléctrica a la mujer, sintiendo como la lengua de su amado entro empezando a moverse, por todos lados ya entendía porque hacia tantos chistes le funcionaba perfectamente para complacer a la rubia. Hasta que logro encontrar el punto G.

Se corrió y él se trago todos los jugos vaginales de la mujer, quien respiraba agitada pero sentía como la lengua de su amado seguía adentro moviéndose pero esta vez a más velocidad, los gemidos de placer aumentaban. Agarro por la nuca a su novio para no dejarlo salir quería sentir más.

-Peter... tu boca... ahh~...ohh~....me... ahh~..encan...ahh~..ta-gemía la mujer, el castaño seguía moviendo su lengua por las paredes vaginales.

El castaño seguía comiéndose la vagina de la mujer, le encantaba su sabor era dulce y apenas estaba comenzando metió dos dedos causándole un gemido sonoro a Karen, quien no se esperaba eso para nada y quien era ella para quejarse, hace tiempo que no recibía unos orgasmos así. Se volvió a correr, sus piernas temblaban.

Aun no han terminado siendo que los dedos del castaño seguían adentro de la mujer, empezando a moverse a toda velocidad, los gemidos de la mujer se escuchaban en todo el edificio agradecían que no estaban algunos de sus vecinos. Para que no se quejaran.

-Ahh~...me encanta ahhh~...sigue mi amor...ahh~... -el castaño empezaba a besar el cuello de la mujer, dejándole chupetones marcándola como suya y de nadie más.

-Apenas estamos comenzando y ambos tenemos que quitarnos mucho estrés de encima-besaba los pechos de Karen.

El castaño chupo con fuerza el seno izquierdo y luego volvió a encontrar el punto G de la rubia, haciendo que se corriera de nuevo, la respiración era agitada. Se estaba desesperando cuando seria su turno de complacer al castaño.

-Cuando... será... mi turno?-preguntaba viendo el bulto de los pantalones del arácnido.

-Pronto por el momento quiero hacer sentir muy bien, quiero hacerte solo mía y escuchar tus gemidos-parlo el castaño mientras besaba los muslos cremosos de Karen, haciendo que le diera algunos escalofríos.

Karen se empezaba a desesperar necesitaba chupar el miembro de su amado, así que paso su mano derecha por el pantalón masajeándolo, ya estaba semi-erecto y lamiendo sus labios rojos estaba lista para chuparlo.

Esto le saco algunos suspiros de placer y se empezó a quitar la parte inferior de su traje, teniendo unos bóxers del mismo color de su traje. Sacándole unas risas a Karen le quito el bóxer a su hombre viendo su falo totalmente erecto; 22 centímetros y 4 ancho, la mujer estaba sorprendida.

-Sin duda pasara bastante placer con el ¿Cuántas rondas podremos tener? ¿Cuánto puede disparar?-pensaba para sus adentros, mientras masturbaba el pene del castaño-Me gusta lo que veo

-Pues te va a encantar cuando lo hagamos, ahora quiero que uses esas tetas para hacer una rusa-la rubia acostó a su hombre sobre la cama, rodeo con sus suaves pechos el miembro erecto comenzando a moverlos de arriba y abajo.

Escuchaba los gruñidos de placer, ella lamia y besa la punta viendo como el arácnido se estaba perdiendo en el placer, aumento la velocidad sacándole más gruñidos. Ella esperaba que saliera todo ese seme para tragarlo y saborearlo, hasta que todo el cuerpo de Peter se había tensado estaba listo para disparar su carga.

Un gemido ronco que parecía más a un gruñido, dejo salir todo su exquisito semen que fue tragado por la rubia; era delicioso y espeso , algunas gotas cayeron sobre los senos de la rubia. Ella con su mano derecha lo volvió a probar se volvería adicta al semen de Peter, limpio el falo dejándolo como nuevo viendo como se volvió a poner duro.

-Tu sabor es exquisito creo que me volverá adicta a el, porque mejor no empezamos con la acción-se puso en la posición de perrito, mostrando su enorme trasero meneándolo.

Peter sonrió agarro con su mano derecha su falo pasándola, por la hermosa vagina de su mujer haciéndola gemir de desesperación, quería ya tenerlo adentro y sentirlo en su calidez entre sus paredes vaginales, hasta que lo metió.

-Apenas ha entrado la mitad-esto sorprendió a la rubia, hasta que sintió como entro por completo dándole suaves embestidas para que se acostumbrar al tamaño.

Karen Starr gemía eróticamente, mientras sentía como se movía ese miembro en su interior y el castaño aprovecho esto para apretar las nalgas de la rubia, sacándole más gemidos. Luego las penetraciones se hicieron un poco más fuerte, las bolas de Peter chocaban en los muslos de la mujer. El castaño por su parte gruñía debido que las paredes vaginales de su novia apretaban justamente su miembro.

Era increíble siendo que la mujer sintió como apretaban sus pechos, el castaño jugaba con ellos siendo que sus embestidas aumentaban, ella gemía en alto; cosa que excitaba a Peter, siendo que llevo más a profundidad su miembro haciendo que ella se volviera a correr. Esto apenas estaba comenzando, el castaño la cargo ella enredo sus piernas en la espalda. Peter decido profundizar más las estocadas.

Karen agarro el rostro de Peter, atrayéndolo hacia un beso apasionado y que estaba lleno de hambre, gimiendo ahogado y las estocadas se volvieron más fuertes hasta que el falo del castaño, sintió que iba a salir, dejo salir de nuevo su semilla en el interior de Karen.

Ella separo del beso, gimiendo en alto, se escurría bastante y apenas estaban comenzando. Sin duda quería tener más rondas.

-¿Lista para la siguiente ronda?-pregunto con una sonrisa, la rubia asintió.

Fin del Lemon

No me vayan a juzgar es mi primera vez haciendo esto.

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