Epílogo

Màu nền
Font chữ
Font size
Chiều cao dòng

Jimin dio un giro sobre uno de sus pies y sonrió ampliamente al mirar su reflejo en el espejo, vestía una jardinera de mezclilla sobre una camiseta blanca, al igual que sus tenis, con delicados movimientos ordenó su cabello rosa y tomó su mochila de tonos pasteles antes de salir de la habitación.

—Buenos días, Jiminie —saludó su madre, acomodando las tostadas en la mesa.

—Buenos días. —Jimin dejó la mochila en el asiento de un lado y se sentó a desayunar. Sus padres no tardaron en notar su felicidad, hacía tiernos sonidos al comer, la pareja se miró con complicidad y el hombre limpió las comisuras de sus labios con la servilleta antes de hablar.

—¿Emocionado? —preguntó el señor Park, dirigiéndose a su hijo.

Jimin bebió un nuevo sorbo de leche, dejó el vaso sobre la mesa, masticó el trozo de tostada que tenía en la boca y con las mejillas llenas de comida les sonrió tímidamente a la vez que asentía con la cabeza.

Al salir de casa, colocó la mochila en la canastilla de su bicicleta y pedaleó hasta la universidad, llamando la atención de algunos estudiantes en el campus, estaba emocionado y no podía ocultarlo, encontró la facultad de artes y se sumergió en la gran casa de estudios.

"Les damos la bienvenida los nuevos estudiantes que formarán parte de nuestra universidad, esperamos que tengan una excelente semana y no olviden verificar sus salones de clases en el horario, si tienen alguna pregunta no duden acercarse a informaciones, estaremos encantados de brindarles nuestra ayuda."

Jimin escuchó los parlantes y de la mochila que llevaba colgando en su hombro sacó el horario para buscar su salón de clases, el cual no tardó en encontrar, eran cerca de veinte estudiantes, entró en silencio bajo desconocidas miradas que hicieron sonrojar sus mejillas, avanzó entre sus pupitres, buscando uno vacío para él hasta que una chica de cabello largo y oscuro levantó su mano, llamándolo.

—Hola —saludó alegremente—. Soy Nayeon, un gusto.

—Jimin —se presentó el pelirosa, sentándose junto a la amable chica que no dejaba de mover sus dedos sobre la madera del pupitre.

—¿Estás nervioso?

—Un poco —respondió Jimin, ella parecía más nerviosa que él.

—Yo también.

Pocos minutos después una mujer de aproximadamente cincuenta años entró al salón de clases, llevando libros y cuadernos entre sus brazos, los dejó sobre el escritorio y acomodó sus anteojos mirando a cada uno de los estudiantes—. Buenos días.

—Buenos días —saludaron al unísono, unos pocos alumnos entraron corriendo y buscaron un lugar.

Al iniciar la clase, Jimin sacó un cuaderno de su mochila que posteriormente dejó colgada en la silla, también un afelpado estuche del cual sacó diferentes bolígrafos y marcadores con los que comenzó a realizar sus apuntes, los utilizaba con destreza al hacer títulos grandes y llamativos con detalles como pequeñas estrellas y destellos, no se esforzaba mucho en la letra, era una perfecta caligrafía manuscrita.

—Jimin —lo llamó Nayeon, ocultando su cuaderno con los brazos.

—¿Sí?

—¿Luego me enseñarías a utilizar esos marcadores como tú lo haces? —preguntó la chica—. Lo he intentado en vacaciones, pero soy un desastre. —Avergonzada, permitió que viese su cuaderno, Jimin bajó la mirada hacia la hoja de papel y luego volvió a mirarla a los ojos para asentir haciéndola sonreír—. Gracias.

Durante la clase no sólo conoció a Nayeon, también a Jihyo y Daniel, conversó con ellos en los recesos de la mañana y a mediodía educadamente rechazó su invitación a la cafetería, diciéndoles que había quedado en almorzar con su novio, así que tomó su lonchera y caminó hasta la facultad de química que quedaba al otro lado del campus.

Yoongi había dibujado un mapa después de ir a dejar los documentos para su beca, eran sólo líneas porque ni siquiera él conocía el edificio, pero lograron llevar a Jimin a un mágico lugar, uno que al verlo sólo pudo pensar en él, y el menor lo encontró sentado en una banca, cerca de un frondoso árbol, con la cabeza hacia atrás. Avanzó por el césped recién cortado y las comisuras de los labios de Yoongi se elevaron al escucharlo.

Por detrás, unos conocidos y rosados labios tocaron los suyos, abrió los ojos y su corazón se volvió tan loco como el de Jimin.

—Ahora confiesa, ¿me extrañaste en el salón de clases? —preguntó Jimin, tomando un trozo de zanahoria de los recipientes que tenía frente a él.

Yoongi tragó la comida que tenía en la boca y asintió—. ¿Y tú?

—¿Yo qué? —Se hizo el desentendido.

—¿Me extrañaste?

—Un poco —respondió, obteniendo la atención del mayor—. Un poquito. —Agitó sus pestañas, haciendo sonreír a Yoongi y rápidamente se acercó a él, abrazándolo por los hombros—. Mucho —admitió, haciendo un puchero.

Con delicadeza, Yoongi levantó el mentón del pelirosa, mirándolo a los ojos—. Te quiero —dijo en voz baja de manera íntima, rozando su nariz con la del pequeño.

—Te quiero. —Deslizó la punta de sus dedos por el cuello de Yoongi hasta llegar a su pecho, sintió unas suaves caricias en su mejilla y cerró los ojos al ver como el mayor se inclinaba hacia adelante para unir sus labios.

Fin

Última nota larga (perdón si es mucho texto, pero siempre me extiendo cuando termino una adaptación):

Hemos llegado al final, y mis sentimientos se dividieron en felicidad de al fin terminarles a ustedes esta adaptación, pero tristeza de que ya no podré actualizarla, que bien podrían darse cuenta en las notas, soy muy fan de esta historia. Me prometí terminarla antes del 2022 (en mi país, por lo menos), y lo cumplí, no sé qué tan bien está el hecho de que haya publicado más de diez capítulos en menos de una hora o si Wattpad me desordenará todo por hacerlo, pero quería cumplir eso.

Espero lo hayan disfrutado, deleitado de los momentos tiernos, causado ternura con las citas, abrazos, los besos y la manera en la que descubrían poco a poco sus sentimientos. Pudo ser un desarrollo un tanto lento, pero a mí me gusto eso de la historia, y espero que a ustedes también.

La autora original hizo una pequeña aclaración a lo último que me tomo el atrevimiento de colocar aquí casi de manera textual: La historia se desarrolla hace algunos años atrás, por esa misma razón es que salían hasta tarde de casa solo volvían a ella caminando, sin tantos peligros como en la actualidad. También por ello es que Yoongi y Jimin jamán hablaron por teléfonos o mensajearon, si se extrañaban o solo se querían ver, iban hasta el otro sin olvidar que la distancia es importante, por lo mismo la autora original mencionó el viaje de Jimin con sus padres y Yoongi sólo diciéndole "Diviértete" y no "No olvides llamarme". Reitero, esto es dicho por @GaabbyKookie y me pareció tan bonito que quise colocarlo; sin duda, amo sus historias y la recomiendo, la amarán mucho, se los aseguro.

No hay mucho más que decir que terminamos esto con más de 16k leídas y 3.5k votos¡! Aunque ya veo el spam entre estos días de Pink boy por las actualizaciones de hoy, será emocionante leerles (siempre leo lo que comentan, aunque no responda muchos, es divertido ver las anécdotas).

Pregunta del capítulo: ¿Les gustó esta adaptación?

Lo último: ¡Gracias por leer y llegar hasta aquí!

Bạn đang đọc truyện trên: Truyen2U.Pro