Enfrentando a Missingno

Màu nền
Font chữ
Font size
Chiều cao dòng

Missingno irguió su cabeza orgullosamente y observó a los cientos de pequeños seres que estaban a sus pies. Para él los humanos y los pokémon no eran más que insectos insignificantes que ni siquiera valía la pena mirar, estaban ahí para ser destruidos y eso era lo que pensaba hacer. Luego de tantos siglos sellado y sin energía suficiente ni para pestañear, planeaba disfrutar de su nueva libertad acabando con cuanto ser viviente pudiera. 

De pronto fijó sus ojos sangrientos en la jaula de gastly que flotaba en el techo y sobre todo en la rosada criatura que yacía dentro de ella, tenía al frente al único pokémon capaz de luchar contra él, pero este estaba encerrado en una prisión de la que no podía salir. Le hubiera gustado asesinar a aquella criatura, pero sabía que si hacía eso otra más aparecería para reemplazarla, así estaba estipulado. Era mejor tenerla cautiva hasta que acumulara suficiente poder para no ser derrotado, pero los gastly que la mantenían encerrada, al ver a su amo caer entraron en pánico, estaban a punto de romper su formación, de todos modos ahora que Noxor había muerto ya no era necesario seguir sus órdenes. 

Los pokémon gas estaban a punto de escapar cuando un rugido de missingno los detuvo paralizándolos del miedo, el malévolo pokémon les dio a entender que si dejaban ir a mew ellos serían los primeros con los que acabaría.

Dentro de la jaula mientras tanto, los ojos de mew comenzaron a empaparse de lágrimas, estaba desesperado y no sabía qué hacer, Spooky que estaba dentro con él trató de animarlo

-Ánimo mew, saldremos de aquí, los demás lograrán ayudarnos.

-No creo que haya tiempo para eso.

-¡Si lo habrá! Ellos distraerán a missingno mientras nos liberan...

-¡No lo digo por eso! ¡Quiero ir al baño! ¡Ya no aguanto más! –Dijo sujetándose la vejiga.

-¡¿Qué?! ¿En serio ya te haces? ¡Por favor aguanta un poco más!

-¡No puedo, me voy a hacer aquí mismo! ¡AAAAAAAAHHH!

-¡No no, espera! ¡No lo hagas! ¡Te sacaré de aquí!

Spooky desesperado por liberar a mew y por ahorrarse algo que no quería ver, juntó todas las energías de las que disponía y comenzó a evolucionar. Su cuerpo brilló intensamente y su forma cambió, aparecieron un par de manos flotantes y perdió el manto venenoso y etéreo que lo cubría, así fue como Spooky se convirtió en un haunter y con su nueva apariencia, lo primero que hizo fue cubrir su mano con una aura morada y arañar con todas sus fuerzas a los gastly que formaban la jaula, además, gracias a su tipo veneno no fue dañado por el gas que rodeaba el ambiente. El ataque que hunter había utilizado era garra umbría, lo había aprendido de la sableye de Gray por imitación, le asombró bastante que le resultara al primer intento, además de que fue sumamente efectivo por ser de tipo siniestro. Los gastly se debilitaron y cayeron dejando el camino libre para que mew saliera, este por supuesto no desaprovechó la oportunidad, agarrándose la vejiga salió volando rápidamente.

-¡Esperen! ¿Ese no era mew? –Gritó el hombre de la capa negra –Se supone que ese es el pokémon legendario que debería luchar contra missingno ¿A dónde va?

-Creo que fue al baño –contestó Gray –. Habrá que resistir hasta que vuelva, de todos modos no creo que tarde mucho.

-Esto debe ser una broma.

Mientras esperaban a que mew regresara, los demás se dispusieron a luchar contra missingno. Decenas de hombres y mujeres encapuchados se lanzaron a la batalla seguidos de sus fieles pokémon y de los pokémon del ejército de celebi que aún estaban en condiciones de batallar. Gray y Bridan vieron con alegría aparecer a Shell, Geralt y July, cada uno con sus propios pokémon, pero también entre ellos aparecieron la beautifly, la munna y el gardevoir de Carmín, quienes en cuanto vieron a su entrenadora corrieron a recibirla. 

Jim que estaba con ellos tenía su voluntad algo dividida, durante muchos años sirvió fielmente a Carmín, pero en su corazón su verdadero entrenador siempre fue Bridan, este lo tranquilizó con una mirada indicándole que fuera donde Carmín, después de todo, él también tenía a su propio equipo pokémon que llegó junto con el pelotón para apoyarlo.

Y comenzó la gran batalla, todos contra missingno. A pesar del abismal poder que poseía este y de su monstruoso tamaño, nadie se acobardó ni se echó hacia atrás, todos fueron a luchar con su corazón puesto en ello.

Los glaceon fueron los primeros en atacar, todos utilizaron sus rayos de hielo hacia las patas de missingno con la esperanza de dejarlas congeladas y así limitar su movimiento, la estrategia resultó pero sólo durante unos momentos, pero esto fue suficiente para que los demás arremetieran contra él atacando a distancia. Los pokémon eléctricos utilizaron el ataque trueno y los de fuego lanzallamas, los sylveon también ayudaron lanzando extraños gritos que correspondían al movimiento voz seductora, froslass al ver esto también decidió unirse al ataque y utilizó canto helado.

Missingno furioso se las arregló para romper la prisión de hielo que mantenía a sus extremidades presas, luego de eso lanzó un espeluznante grito, un ataque alarido tan potente que afectó a todos los pokémon de la sala. Fue una contra ofensiva eficaz que detuvo a todos sus atacantes al instante, pero luego de eso mostró un breve momento de debilidad mientras recuperaba el aliento. 

Los ataques de sonido la verdad sí le habían afectado un poco  y se encontraba un tanto aturdido, los pokémon tipo normal y otros más aprovecharon para realizar ataques cuerpo a cuerpo, numerosas criaturas se lanzaron contra el monstruo embistiéndolo, algunos arañándolo, pateándolo o golpeándolo de cualquier manera posible, pero estos ataques eran como picadas de pulga para él, con un sacudón se quitó a todos sus atacantes de encima y los pateó causando estragos en ellos, algunos de los afectados por este movimiento luego no se pudieron mover por el dolor que sentían.

Missingno viendo a todos aquellos enemigos imposibilitados de continuar no dudó en matarlos, corrió hacia ellos para aplastarlos con sus enormes garras cuando un dolor agudo en su costado derecho lo detuvo, se giró para ver a su atacante y se encontró con un missingno pequeño que lo estaba mordiendo. El missingno original se puso furioso al ver esto, entonces abrió sus fauces y mordió a su oponente en el cuello, este comenzó a ahogarse y se vio obligado a soltar a su presa y a regresar a su forma original, el pequeño missingno brilló momentáneamente y se encogió hasta convertirse en un ditto, sólo así pudo zafarse de su captor. La diminuta masa rosada cayó pero fue recibida por Bridan en su brazos, Green miró a su entrenador angustiado, pero este lo calmó

-Tranquilo Green, copiar a un pokémon como ese es muy difícil, por no decir imposible, hiciste lo que pudiste, jamás podrías igualarlo en tamaño o poder.

Un estruendo sonó a sus espaldas,  missingno estaba furioso. Se había sentido muy ofendido de que un pokémon tan insignificante como aquel ditto se atreviera a copiarlo y aún más, a atacarlo bajo su forma, estaba decidido a matar y a devorar a aquellos atrevidos, pero primero los carbonizaría. 

Abrió sus grotescas fauces y un fuego verde y pestilente brilló dentro de ellas, estaba a punto de utilizar su aliento de dragón, el cuál sería más poderoso que el de cualquier pokémon tipo dragón que se conociera. Las llamas verdes crepitaban en su boca y crecían cada vez más, hasta que finalmente las liberó y dirigió su ataque a todos los pokémon que estaban a sus pies, pero antes de que el mortal ataque pudiera alcanzarlos, una enorme bola rosada resplandeciente que correspondía a una esfera aural chocó contra este anulando su efecto.

Missingno cada vez más enojado alzó la vista y contempló al creador de aquella esfera, era ni más ni menos que mew, quien ya había regresado de atender sus asuntos personales y llevaba un trozo de papel higiénico pegado en la pata derecha como muestra de ello. Todos los pokémon lanzaron gritos de júbilo recibiendo a su salvador, aunque los humanos se preguntaban como aquella pequeña criatura rosada podría hacerle frente al gigante que era missingno, pero la respuesta no tardaría en llegar. Mew era el único pokémon junto a ditto que podía utilizar la habilidad transformación y convertirse en cualquier pokémon, el cuerpo de mew comenzó a brillar y a crecer hasta un tamaño colosal, le salieron cuernos, su cola se engrosó y aparecieron unas monstruosas garras, se transformó en un monstruo idéntico tanto en tamaño como en poder al original, la única diferencia eran sus dulces ojos azules, tan distintos de los orbes sangrientos de su enemigo.

El pokémon maldito miró con odio a su oponente y sin más preámbulos se lanzó contra él en una embestida, mew transformado no dudó en responder intentando golpearlo con su cuerpo, las cabezas de ambos pokémon chocaron con un ruido sordo, pero no se detuvieron ahí, comenzaron a empujar tratando de hacer que su rival retrocediera, era algo semejante a un combate de cabras. Mew y missingno empujaban con todas sus fuerzas a su respectivo rival, ninguno quería ceder, por momentos parecía que missingno tomaba la ventaja empujando a mew algunos metros, pero este no se dejaba vencer y aplicaba más fuerza contrarrestando el movimiento, la tensión en el ambiente era absoluta, nadie se atrevía a mover un solo músculo o a emitir algún sonido, sólo había ojos para ver el combate del destino.

Blue miraba la escena impotente, su carácter especial hacía que se le hiciera incómodo quedarse quieto observando la pelea sin poder ayudar, pero no podía hacer nada, era un combate de gigantes, era un insecto al lado de ellos, todo lo que podía hacer era observar, pero no pensaba quedarse callado

-¡Um um! ¡Umbreon um um! (¡Vamos mew! ¡Tú puedes vencerlo!)

El umbreon shiny comenzó a dar ánimos a mew, gritando con toda la voz que le daba la garganta, en medio del silencio su voz sonaba fuerte y clara haciendo eco en las paredes y su entusiasmo se transmitía claramente, resonando en el corazón de aquellos que lo oían. Los demás pokémon al escuchar sus ánimos comenzaron a emocionarse también y a gritar apoyando a mew, todos fueron contagiados por la energía de Blue y hasta los más tímidos terminaron haciendo barra a su héroe, hasta los humanos se sumaron a aquella tarea.

A mew se le hizo un nudo en la garganta al sentir aquellos centenares de voces que sonaban por él, que lo animaban y apoyaban, de reojo pudo ver incluso a un grupo de baile compuesto por sableye haciendo barra, definitivamente no podía decepcionarlos. Mew empujó con el tañido de las voces de sus amigos latiendo en su corazón, empujó con fuerza, con la fuerza que le brindaba la confianza que se depositaba en él y consiguió hacer retroceder a su oponente hasta dejarlo acorralado contra la pared, empujó aún más e hizo que missingno perdiera el equilibrio cayendo estrepitosamente. Irguiéndose sobre su adversario mew abrió su boca en la que se pudieron ver llamas verdes crepitando, atacó a corta distancia con aliento de dragón generando un daño considerable en el pokemon, pero aún así esto no fue suficiente para derrotarlo por completo.

La bestia se puso de pie y miró a mew con odio, el pequeño gato psíquico le estaba dando una paliza, pero él contaba con un recurso que mew no tenía, podía absorber la energía de los seres vivos que había a su alrededor y así recuperarse, por supuesto no planeaba desperdiciar esta habilidad. Lanzó un gruñido espeluznante que retumbó en las entrañas de todos los pokémon y los humanos que lo escucharon, estos sintieron un frío atroz y una debilidad creciente comenzó a consumirlos.

-¡Mew! (¡No!)

Misingno reía macabramente disfrutando de la expresión de dolor que tenía mew, la fuerzas de sus compañeros estaban siendo mermadas y seguramente esto seguiría hasta que murieran.

-¿Qué pasa mew? ¿No que eras el pokémon más poderoso de la creación? ¡Ja! ¡Estás acabado! ¡Yo recupero mi energía drenando la de tus amigos! ¡Mientras más me dañes más los dañarás a ellos! ¡Estás acabado! Parece que no eres nada sin meloetta, pero ella no está aquí para ayudarte ahora, ya no habrá ninguna estúpida canción que interfiera en mi camino

¡Canción! Esta palabra resonó en el cerebro de Gray y las ideas y recuerdos que vagaban por su mente comenzaron a conectarse unos con otros. Primero vino a su mente el recuerdo del grabado en la piedra que estaba en el palacio de hielo en la montañas Fugaces, meloetta aparecía allí, estaba puesta junto a mew y a las tres aves legendarias aticuno, moltres y zapdos luchando contra missingno, pero tal como había dicho la doctora Susu, meloetta no estaba luchando, simplemente cantaba, pero relacionando eso con lo que missingno acababa de decir, al parecer la canción era importante, la clave de la victoria, pero ahora el problema era qué canción era la que cantaba meloetta.

Noxor había borrado toda pista sobre la forma de derrotar a missingno, había roto la pared donde se explicaba cómo, incluso había intentado borrar todo registro de su existencia escondiendo la habitación del palacio donde se hablaba de él. Seguro que además se habría encargado de destruir aquella canción... ¿O tal vez no? Pues si se hablaba de canciones misteriosas, la canción más extraña que conocía era la que estaba escrita en clave en la enciclopedia pokémon que había perdido, entonces tal vez... ¡Esa era la canción que necesitaba! Y si era así tenía sentido, pues cuando aquella pieza musical fue interpretada completa aparecieron dos magmortar con intenciones de destruir todo rastro de aquella música, seguramente por órdenes de Noxor.

Entonces todo cobró sentido, aquel libro provenía del futuro y le fue entregado a él específicamente para que aprendiera la canción y pudiera tocarla en aquel momento, una vez que hubo memorizado la pieza musical, el libro le fue arrebatado y luego de ciertas conclusiones que sacó, dedujo que el responsable de todo ello era el mismísimo Capa Gris. Él era quien se había encargado de que el señor Braum le regalara una pokeflauta y le enseñara música para pode tocar la canción, pero si el libro le pertenecía a Capa Gris, entonces seguro que él también venía del futuro.

De pronto recordó lo que le había dicho Bridan, que él era Capa Gris y que venía del futuro para ayudar. Entonces una emoción infinita invadió su ser, todo eso, todo lo que estaba viviendo, cada cosa que había pasado era un gran plan hecho por él mismo, por lo tanto, ahora ya sabía lo que debía hacer, confiaría en el juicio de su futuro y enfrentaría su futuro. 

Gray sonrió de forma tranquila y extrajo de entre sus ropas la pokeflauta que por alguna razón siempre llevaba consigo, acercó el instrumento a sus labios y comenzó a tocar.

Una extraña y un tanto siniestra melodía comenzó a sonar, la tonada era lenta y se asemejaba a una canción de cuna, el sonido se extendió por la habitación haciendo eco en las paredes, todos se quedaron en silencio escuchando aquella música, aunque era un tanto desconcertante, no parecía generar ningún efecto extraño en ninguno de los pokémon, con excepción de missingno quien comenzó a sentirse somnoliento y torpe. 

Mew se aprovechó de esto y lo golpeó tirándolo al suelo, pero su enemigo se resistía empujándolo con sus patas al tiempo que continuaba absorbiendo energía vital, pero ahora de forma más lenta y menos efectiva, sus ojos rojo sangre destellaban mientras hacía esto, fue entonces que Carmín se fijó en ese detalle y vio algo que los demás no podían ver, entonces gritó:

-¡Sus ojos! ¡Son sus ojos los que absorben la energía vital!

Bridan escuchó las palabras de su hermana y también se fijó en los ojos de missingno, siendo un exorcista pokémon como ella, también podía ver cosas que los demás no podían, y lo que su vista captó fueron tenues hilos plateados que salían de todos los seres vivos que había en la habitación, incluso de él mismo y que eran absorbidos por aquellas orbes escarlata. Entonces tomó una decisión y armándose de valor ordenó.

-¡Green, se mi espada! ¡Jim vamos!

El ditto de Bridan se colocó en su mano y tomó la forma de una afilada espada,  Jim se posicionó junto a su entrenador y extendió sus cuchillas esperando su señal. Bridan respiró hondo tratando de dominar su miedo, cerró los ojos y al abrirlos se sintió listo, dio la señal a su pokémon y comenzó a correr hacia missingno junto a su gallade quien le seguía el paso a la misma velocidad con sus cuchillas dispuestas en posición de ataque.

Missingno aturdido como estaba por la canción de Gray y centrando toda la poca atención que tenía en defenderse de mew, no vio venir a sus atacantes, ni tampoco los escuchó, sólo supo de ellos cuando estos estuvieron frente a él cada uno al lado de uno de sus ojos. Las últimas imágenes que fue capaz de ver fueron las cuchillas de gallade y el sable de Bridan, esto antes de que se enterraran en sus ojos cegándolo y arrebatándole su fuente de poder, entonces el pokémon gritó como jamás había gritado mientras sentía su energía escapar de su cuerpo, sus fuerzas lo abandonaron y mew sin esperar le dio el golpe fatal aplastando su garganta con una de sus garras, la cual se quebró con un sonoro crujido. Jamás en los milenios que llevaba protegiendo al mundo le había gustado hacer eso, pero era su deber, la misión impuesta por su padre Arceus y debía cumplirla.

El cuerpo de missingno quedó inerte, ya no se movería más, estaba acabado, la pesadilla había llegado a su fin. Gray dejó de tocar la pokeflauta y el silencio se hizo en la sala, todos estaban sin aliento, sobrecogidos por la emoción, entonces cuando mew regresó a su forma original estallaron los gritos de júbilo.

La emoción se extendió por el lugar, todos brincaban, reían y hasta lloraban de alegría, estaban a salvo, habían salvado al mundo y ya no había peligro, todas las calamidades provocadas por Noxor cesarían y la región Zero volvería a ser un lugar pacífico y seguro, los pokémon emocionados corrieron hacia mew para felicitarlo y celebrar su victoria, este feliz volaba en círculos junto a celebi que se había unido a su danza aérea, ambos reían y cantaban.

Mientras que en un costado, ignorados por los pokémon dos hechiceros, el de la capa negra y una mujer que usaba un capa blanca se acercaron al cadáver de missingno, observaron su rostro y especialmente sus cuencas vacías, entonces el hombre con algo de asco extrajo de las aberturas donde deberían haber estado sus ojos dos anillos, uno con una piedra blanca y otro con una piedra negra.

-Una vez más los anillos gemelos, o más bien, los anillos de energía regresan a nuestras manos.

-Espero que ahora podamos volver a nuestra pacífica vida de custodios de los anillos, me gustan más cuando son unos simples accesorios que cuando forman parte de ese maldito pokémon.

-Si, a partir de ahora deberemos tener más cuidado con las personas a las que les proveemos cierta información, nunca sabemos cuándo puede aparecer otro loco entre los hechiceros.

Bạn đang đọc truyện trên: Truyen2U.Pro