Cuatro días después:

23:45 pm

—nos perdimos—aseguró cruzándose de brazos deteniéndose cerca de un árbol.

—claro que no. Estamos en el punto de reunión,deja de molestar Park—rodó los ojos también deteniéndose en el camino.

—lo único que yo creo es que nos perdimos,Min.

—eres tan... Tan... ¡Argh!—se tomó de los cabellos para luego soltarlos.

—¿tan qué?—retó a terminar la frase mientras lo fulminaba con la mirada.

El pálido lejos de tener miedo lo vio adorable y,entonces solamente sonrió acercándose a Jimin estampándolo contra el árbol,haciendo que ambos comenzaran a sentir la adrenalina sobre sus cuerpos.

—tan tierno y a la vez tan jodidamente sexy...¿cómo lo hacés?— dijo el pálido acorralando al menor,sentía que estaba yendo realmente lejos al confesar aquello pero,no le importó cuando pudo apreciar gracias a la luz de luna,los ojos tan bonitos del castaño mientras sujetaba de la camisa del pálido.

Era un bosque alejado totalmente de la cuidad,uno donde podrían perderse totalmente pero,ellos decidieron perderse en ellos mismos.

Yoongi tomó la barbilla del contrario y con el pulgar comenzó a tocar el labio inferior de este,con lentitud se acercó hasta hundirse en un beso hambriento,hace dos noches que no sentían sus labios o el rose de sus cuerpos al igual que la calidez que emanaban.

Jimin acercaba más al mayor sobre su cuerpo,sintiéndose tan bien y deseado,sonrió cuando el pálido bajó los besos hasta su cuello dejando algunas marcas como a él le gustaba,pasaría casualmente al lado de Seokjin al día siguiente con el cuello descubierto para enseñarle que Yoongi lo deseaba a él solamente.

Una luz lejana alarmó al menor en el momento exacto cuando volvieron a besarse.

—¡allí vienen!—exclamó murmurando,ambos se alejaron e intentaron acomodar sus ropas o cabellos.

Dos horas antes:

—¿no desea algo más,joven Kim?— preguntó mientras el nombrado estaba sentando detrás de su escritorio leyendo algunos documentos.

—no,puedes retirarte—ordenó sutilmente haciendo que su secretaria obedeciera totalmente. Cuando la mujer se retiró,el pelinegro tomó rápidamente su celular,sin poder creer el mensaje que tenía.

Su acelerado corazón le hacía saber que todavía no dejaba de estar nervioso ante la presencia de aquella persona quien le había enviado ese texto.

Presionó llamar y esperó que en el otro lado de la linea atendiera.

—hola... Necesito que nos encontremos para hablar...

Siempre tan directo a pesar de ser tan vergonzoso.

—¿cuál es la razón?— quiso sonar indiferente y con su voz grave lo estaba consiguiendo, escuchó un suspiro del otro lado y supo entonces que hablaría.

—escuchame idiota,tienes que alcanzarme enfrente del la cafetería "a brand new day",estando allí te contaré todo.— murmuró con cierto tono de fastidio haciendo que el pelinegro riera silenciosamente.

—¿a qué hora?— preguntó finalmente mientras corría un poco la cortina de su ventana para mirar afuera y todos sus hombres,debía buscar una forma de escaparse sin ser visto.

—23:00 y llega a tiempo— demandó cortando la llamada.

El pelinegro dejó su celular dentro de un cajón del escritorio,luego se dispuso a ir directamente a su habitación,ignorando la cena con su hermana mayor.

Las horas pasando y como pudo había logrado escapar de la mansión para dirigirse al lugar de encuentro,minutos después pudo observar un vehículo negro estacionarse cerca de él, se subió y miró al conductor...

Cabellos rojizos,cuerpo esbelto y ese pelicular sonrojo en sus mejillas.

—¿a dónde vamos,Hoseok?— preguntó después de un largo silencio.

—tienes que hablar con alguien,deben arreglar algunas cosas—contestó con simpleza logrando que el pelinegro ya tuviera una leve idea de con quien iban a encontrarse.

—esto debe ser realmente importante si Park quiere verme—murmuró cruzándose de brazos,observando el camino.

—lo es—aseguró—si no fuera importante no te hubiera contactado.

Algo en el pecho del pelinegro se removió dolorosamente,como si estuvieran halándole el corazón.

—¿insinúas que lo nuestro no fue importante?— Hoseok casi se atraganta frenando de golpe el vehículo.

—¡cuidado!—regañó el pelinegro.

—¡eres un idiota,Kim! por tu culpa casi... ¡Agh! Olvidalo, solamente calla y preparate para la intensa conversación con mi jefe— sentenció volviendo a poner en marcha al vehículo.

Se podían observar árboles y no había ningún apartamento,solamente la carretera,era un bosque alejado de la ciudad.

—casi llegamos.

Sus brazos cruzados mientras acomodó rápidamente su camisa y cabello,los nervios invadiendo en su cuerpo lentamente ,el contrario a su lado también estaba nervioso.

—park—saludó el pelinegro acercándose al castaño, Yoongi finalmente pudo ver el rostro del famoso V,tenía una expresión neutra y un aura fría,totalmente opuesta a la de Jimin.

—Kim—imitó el saludo dando dos pasos hacía en nombrado,ambos se miraron unos segundos antes de que el menor de todos esbozaba una sonrisa pequeñita.

Había pasado muchas cosas en su vida,dejaron de ser amigos para intentar matarse entre si y,ahora estaban a punto de solucionar ese malentendido, finalmente las dos piezas faltantes se habían encontrado.

—ha sido un tiempo—comentó finalmente soltando un suspiro —y ahora supe que estabas perdido además de que la policía te busca como uno un tesoro— hizo una mueca.

—lo sé,jamas en mi vida fue tan solicitado.

Yoongi y Hoseok se relajaron un poco al ver como los contrarios iniciaban una conversación e incluso bromeaban.

—¿el rey de las cartas tiene un as bajo la manga?— se atrevió a preguntar llevando sus manos a los bolsillos de su pantalón.

El castaño sonrió de lado.

—por supuesto que sí.