Ryujin no se quedaba en casa de Beomgyu solo para dormir. Ellos veían series en nexflix, madrugaban para ver los comeback se sus grupos de kpop favoritos, y tenían sexo.

A la madre de Beomgyu le parecía la cosa más normal del mundo. Porque era la cosa más normal del mundo, dah.

—Mamá —Beomgyu entró a la cocina vuelto un desastre, la camiseta al revés y el cabello enmarañado— ¿Qué hay para desayunar?

—Cereal, debo ir a hacer la compra hoy.

Ryujin entró a la cocina detrás de él, perfectamente peinada, con una camiseta y unos shorts de Beomgyu, ambas prendas le quedaban grandes pero ella las lucia como si fueran propias.

—¡Buenos días señora Choi!

—Hola preciosa —saludó bebiendo su café, observando a los dos preparar el cereal. La misma imagen de cuando eran niños, pero ahora, ambos habían crecido considerablemente. Adoraba verlos así, nunca se cansaría.

—Queda un poco de leche de chocolate en la nevera si quieren —soltó de repente, y lo siguiente fue ver a ambos luchando al punto de casi matarse para llevar a la nevera primero.

Podían crecer hasta que tuvieran tantas canas como ella, pero seguían siendo los niños de siempre en su corazón.

—Ryu, Gyu ¿Qué van a hacer hoy? —preguntó casualmente cuando ambos se sentaron a comer. Beomgyu le ganó la leche de chocolate a Ryujin, pero al final le daban al otro de su cereal, era irrelevante quien lo cogiera primero.

—Yo voy a salir con mi amiga después de clases —dijo Ryujin.

—Yo voy a quedarme practicando con la guitarra en la escuela.

La señora Choi asintió y se terminó su café. Antes de irse a trabajar le dio un beso en la mejilla a cada uno.

Ellos bebieron directo del plato lo que quedaba de leche, eructaron y soltaron una carcajada.

—¿Vas a quedarte en casa de Lia hoy?

—Sip.

—¿Tu vas a decirle a Yeonjun...?

—Sip.

—Cool...—Ryujin le echó una mirada a las escaleras—. ¡El que llegue arriba de último cambia las sabanas!

.

.

.

Amen al ryugyu <3