—Creo que ha sido una pésima opción sentarnos en esta mesa Jungkookie~ — Taehyung se aferró a los hombros de Jungkook mientras negaba una y otra vez al sentí como aquellas hojas secas caían sobre sus cabezas.

—Es cierto, en primavera es una buena opción, puesto que los arboles de cerezo nos regalan un hermoso techo naturalmente rosa, ahora solo obtendremos como aderezo hojas muertas~ — ahora fue Jimin quien se unió a la queja, Jungkook solo pudo negar y sonreír ante el descontento colectivo.

—Lo sé, pero es esta la mesa dónde nos reunimos por primera vez hace cien días, justo aquí te conocí Taehyungie — levantó con suavidad el mentón del castaño para detenerse solo un par de segundos observando aquellos ojos brillantes, acto seguido, besó aquellos labios dejando que sus ojos se cerraran con sutileza por la calidez del beso.

—Oh vamos, nada de demostraciones amorosas en público — Yoongi les miró con una mueca de asco y en seguida comenzó a reír ante la sonrisa de vergüenza que aquellos dos portaban en sus rostros; Jimin también sonrió, sin embargo aquel clavó la mirada justo debajo de la mesa, donde Yoongi sujetaba su pequeña mano, la acariciaba con suavidad y ternura usando su pulgar, de inmediato, Jimin subió el agarre de los dos y con una sonrisa los delató.

—¿Hablas de este tipo de demostraciones de amor? — burlesco observó los ojos de Yoongi quien de inmediato mostró un sonrojo en sus mejillas.

—¡Jimin! — Yoongi bajó de inmediato el agarre, los otros dos comenzaron a reír ante aquella vergüenza emanada por el pálido.

—Venga Yoongi, es normal que hoy nos comportemos así, hoy se cumplen los cien días de ambos, es normal que demostremos el amor que sentimos por ellos — Jungkook palmeó el hombro del mayor y con suavidad le mostró una sonrisa cálida —. Hoy es especial.

Después de aquella frase reconfortadora, Yoongi asintió, miró los ojos de Jimin y sonrió en amplio al ver a su adorado amor, aquel que por cien días enteros le había hecho sentir valioso, sus abrazos habían sido su lugar seguro, gracias a él, incluso pudo desertar formalmente de aquella carrera universidad. Yoongi abandonaba poco a poco sus demonios nocturnos para quedarse con Jimin a mirar las estrellas entre besos y caricias donde las palabras eran inútiles, pues su mirar decía todo. Yoongi agradecía la llegada de Jimin a su vida, le amaba de sobremanera, y ¿cómo no? Jimin literalmente le salvó la vida.

—Bueno chicos, lamento realmente interrumpir la escena tan amorosa, pero su orden está aquí — el mesero, conocido por todos, se plantó ante ellos con la deliciosa comida, bulgogi para Taehyung, un enorme tazón de japchae para Jungkook, bibimbap para Jimin y sundubu jjigae para Yoongi; los platillos fueron puestos en la mesa con cuidado, después una sonrisa se mostró en los labios del mesero —. Disfruten de su comida, si necesitan algo más, solo llámenme. Con permiso.

—Gracias Seokjin — Jungkook mencionó ante la reverencia de aquel hombre que segundos después se marchó dejándoles solos de nuevo.

Fue el único momento en el que cada uno se centró en su comida, solo en pequeños momentos, las parejas ofrecían entre sí pequeños trozos de comida. Por un momento, los pensamientos de Yoongi llegaron a su cabeza la última vez que se sentó en aquel mismo sitio, se sentía fuera de lugar, sin embargo, sentado ahí con hojas marchitas cayendo sobre su cabeza, pudo sentirse perteneciente a ese lugar, ya no era más un expectante del lugar, sino era una pieza importante en ese mundo que solo en sus sueños era realidad. Yoongi tomó con los palillos una grande cantidad de sundudu jjigae y en seguida se lo ofreció a Jimin quien de inmediato lo comió mostrado una sonrisa, acto seguido, Jimin imitó la acción y alimentó a Yoongi con gusto y felicidad.

Cuando sus platos quedaron vacíos, solo pudieron esperar a que Seokjin se acercara para levantar el desastre, sin embargo, en la barra del lugar, Jin se encontraba manteniendo su rostro lleno de preocupación mientras se mantenía de pie frente a un chico alto de piel morena.

Jin se percató que aquellos cuatro chicos le miraban con curiosidad esperando a que aquellos platos fuesen retirados, sin embargo, al tener frente a él a su pequeño novio solo pudo hacer una señal para que aquellos pudiesen esperar, de inmediato, miró de nuevo los ojos del joven frente a él.

—Lo perdí todo — el joven agachó la mirada siendo incapaz de observar los ojos de Seokjin.

—¿Qué pasó? — de inmediato, Jin levantó su mentón obligando a que aquel le observara.

—Me dieron de baja de la universidad por falta de pago — un suspiro profundo y agotado salió de aquellos labios, sus ojos parecían haber dejado caer lágrimas.

—Escucha Namie, no pasa nada, solo perderás un año, no se ha caído el mundo podemos esperar un año para que te vuelvas a integrar.

—Lo sé, pero no tengo empleo, quisiera saber si la vacante de repartidor esta aun disponible — avergonzado frotó su nuca y soltó un suspiro.

—Lo está, pero, hablaremos de eso después, debo atender la mesa de allá, espera aquí Namie — Jin caminó de inmediato hacia la mesa de Jungkook y de inmediato les miró con una sonrisa —. ¿Se les ofrece algo más?

—Sí, pero antes, ¿ocurrió algo Jin? — Jungkook se incorporó en su lugar y le miró detenidamente, estaba preocupado, puesto que Jin había sido por mucho tiempo, aquel le apoyó cuando solía aparecerse por ahí sintiéndose en total soledad, Jin había sido su gran consejero, era su turno ahora de escuchar sus preocupaciones.

—No es nada, es solo un problema con Namjoon, le han dado de baja por falta de pago, él estaba realmente emocionado, solo le faltaba un año para terminar la carrera.

—Es lamentable, ¿él ya comió? — el rostro de Jin demostraba una enorme preocupación al negar lentamente a la pregunta que aquel le había hecho — ¿Por qué no le dices que venga a comer con nosotros?, dale un buen plato de fideos, yo invito.

—No podría Jungkook — el mesero negó de inmediato, observó a los chicos que le miraban curiosos — no quiero incomodar...

—Déjate de eso Seok, ve por el chico, debe de sentirse triste, quizás lo animamos un poco — los cuatro chicos asintieron, Jin, al verse derrotado, solo pudo susurrar un "gracias" antes de darse la vuelta y caminar en dirección al chico.

Ante los ojos expectantes de los cuatro, Jin tomó los hombros del chico y se acercó mirando sus ojos, le susurro algo y de inmediato aquel miró hacia la mesa de aquellos cuatro, quienes le sonrieron de inmediato. Indeciso, caminó hasta ellos, con mirada cabizbaja, jugando con sus dedos por el nerviosismo de aquel acto.

—Buenas tardes, mi nombre es Namjoon, Hyung me ha pedido que venga aquí

—Oh, ¿atún? Mucho gusto atún, soy Taehyung — Taehyung se levantó de la mesa y tomó la mano de Namjoon, la sacudió una y otra vez mientras mantenía una sonrisa realmente enorme.

—N-no, no soy atún, soy Namjoon — una sonrisa adornó su rostro mostrando así un poco más de confianza —, es un placer.

—Yo soy Jimin, no le hagas mucho cao a Tae, se hace un lio con los nombres — saludó sacudiendo su mano un par de veces.

— Jungkook, por favor siéntate, Jin ya te traerá el almuerzo.

—Yo soy Yoongi, por cierto — el pálido volvía a sentirse pequeño ante su viejo temor, conocer gente nueva siempre le elevaba los nervios.

Después de unos minutos hablando de cosas triviales, el almuerzo de Namjoon fue ameno ante aquellas risas, era realmente extraño aquel suceso, aquellos chicos no le conocían y sin embargo le habían dado un asiento en la mesa, le dieron su tiempo intentando que aquel olvidara al menos unos minutos su tan trágico día.

🍃Polvo Estelar🍃  

Pido 50 comentarios y subo la siguiente parte uwu
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