Narra Henria

— Jóvenes magos y brujas centren toda su atención en su cristal mágico, imaginen que esa piedrecilla mágica es su corazón y su energía, déjenlo fluir su magia, el cristal es el corazón de un mago, un mago es la energía vital de la magia, la magia es el soplo de vida del cristal. Todo está conectado, el cristal, el mago, la magia, incluyendo a nuestros dioses — escuché las palabras resonantes del magister William.

Hago caso a su voz fuerte y serena a la vez del viejo maestro, yo miro la piedrecilla blanca de mi varita y con reflejos tornasol mientras la sostengo con las manos. Tras una larga meditación a solas una suave vibración melódica sale y converge con los movimientos de mi cuerpo. Una luz etérea comienza a iluminar dejo que las partículas de magia se muevan por todo mi cuerpo, y ahora con dificultad controlo la gran corriente mágica se mueve, es un fuerte torrente lleno de muchas partículas de magia, finalmente la introduzco en la mítica piedra blanca y mi cristal deja rayos de luz alrededor mío que se mueven de forma brusca y rápida.

Muchos adolescentes desafortunados al igual que yo. No pueden controlar sus poderes mágicos florecientes. A mi lado una chica pierde el control sus poderes de fuego, a otro jóven logra mojarse a si mismo con su varita empapándose por completo. A mi lado veo a Owen y para sorpresa mía, el logra controlar sus poderes con precisión y equilibrio, las corrientes de agua fluyen alrededor con elegancia, su cristal brilla de un color azul brillante. Al concentrarme mucho en otras personas, esas líneas de luz me golpean, casi grito de dolor. Pero no lo hice para no llamar la atención del magister William y no quiero muchos problemas.

— Jóvenes, se que muchos de ustedes no pueden controlar sus poderes la primera vez y les costará controlar toda la magia que tienen todos ustedes, si ahora quieren desactivar su magia tienen que centrar toda su energía a su interior, recuerden que el cristal solo es un catalizador, porque sus verdaderos núcleos mágicos son sus corazones — nos indicó el señor William.

Ahora tengo que extraer toda la magia del cristal y llevarlo de nuevo por el cuerpo, una fuerte energía recorre cada uno de mis brazos. Hasta mi corazón palpitante, siento que mi pecho fuera inundado por luz blanca, solo me falta controlarla. Me derrumbo en el suelo llena de cansancio. Los magos que están en toda la habitación tanto chicos y chicas están en las mismas condiciones. Owen quien está a mi lado sentado con las piernas cruzadas y balancea su cuerpo.

— Al parecer estos ejercicios sí que te siguen dejando con mucha energía no es verdad Owen —le digo con una sonrisa cansada.

Owen solo relaja sus hombros e intenta peinarse con sus manos su desordenado cabello castaño oscuro que no puede, siendo mucho más rebelde lo dejó igual. Intento levantarme.

—Henria, sabe que es necesario poder tener resistencia, solo que unos pueden desarrollarlos más que otros, especialmente para poder luchar contra otros adversarios, posiblemente nos toca luchar en algún momento dado por decreto del gobierno contra los magos quienes son mucho más poderosos debido a su elemento, y debemos sorprenderlos — dice él con audacia e intenta levantarme como un costal del papas.

—Por esa misma razón el tren subterráneo nos lleva a Shappirus de nuevo, porque en Hiperborea no había suficiente espacio para todos los estudiantes, por eso mismo terminamos en la Academia mágica Itzlacoliuhqui, no hay duda que en unas semanas nos envíen como soldados de reserva — le comento a mi amigo y logro levantarme con pesadez, para ir a la siguiente clase que es sobre la teoría mágica.

— No estén tristes mis jóvenes — nos consuela el anciano acariciando mi cabeza — El camino que tendrán es peligroso y lleno de obstáculos, enemigos ocultos en donde menos lo esperan a la vez siempre encontraran un amigo que les tenderá la mano y saldrán adelante.

— Muchas gracias por su palabra maestro William vamos a ser fuertes — prosigo luciendo más animada.

Nos despedimos de nuestro amado maestro, El magister William, el hombre mayor queda en el amplio lugar de azulejos azules paredes blancas esperando a sus siguientes estudiantes para enseñarles a controlar la magia a voluntad.

Ahora nos toca con una maestra diferente la materia que nos van a dar. Owen y yo caminamos por los largos pasillos de madera rojiza, giramos a la derecha, donde está la siguiente aula. A primeva vista es muy similar a la de una clase. En la mesa del escritorio nos espera, La maestra Yané, una hermosa anciana de cabello amarillo pálido gris, que combinan bien con su cristal de color ambarino, es una mujer muy cortés, estricta. Nos va explicando sobre el origen de la magia.

Nos dice que, hay cristales mágicos por todo el mundo de distintos elementos, tierra, agua, aire, fuego, luz, oscuridad entre muchos otros desconocidos que dotan de poderes sobrenaturales a los seres humanos, gente de agua, enanos, hadas, trodonianos. Todos afirman que aquellos fragmentos mágicos en realidad son regalos de los Dioses a sus creaciones.

Los cristales mágicos tienen influencia de los dioses Xochipilli dios de la primavera y las flores, sus dos hermanas Xiuhcóatl, diosa del fuego y el calor, Cotlaxóchitl diosa de los vientos, junto con el dios Creador, de la vida, luego se encuentra el Dios Itzlacoliuhqui el dios del agua, la corrientes de agua, por último está Matchitehew, dios de las sombras y el caos ellos son los dioses principales de la mitología Zaefíriana y a nivel general por lo tanto la magia en sí tiene poderes de origen divino.

—Señores estudiantes — La maestra Yané nos continuó explicando con una voz afónica — Cómo les estaba diciendo para que una persona sea un mago o bruja la primera condición es pertenecer a una familia real de cualquier reino o ser de la nobleza, ellos son los únicos que tienen poderes por ser bendecidos gracias a sus legendarias hazañas en el pasado, la segunda condición es ser elegido por uno de los cristales. La mayoría de los magos surgieron en esas circunstancias y la última condición es tener un corazón noble. Esto es todo por la clase de hoy como tarea quiero que investiguen sobre los niveles de la magia y regresen con cuidado a Hiperboréa, allá estarán seguros — nos dijo la maestra Yané con una sonrisa.

Todos los adolescentes se fueron con dirección la estación de Shappirus para coger el siguiente tren con dirección a Hiperbórea, donde estarán mucho más seguros.

—Owen, me voy a quedar en Shappirus para asegurar la seguridad de mis padres, pueden tú y Alina cuidar a mis hermanitos, regresaré más tarde — le digo a Owen muy tensa — tengo que resolver unos misterios con respecto mi origen — finalizó.

Para, mi alegría mi mejor amigo Owen apoya mi decisión con una leve sonrisa. Nos despedimos y observó que el se dirige a la estación de trenes, me quedo viendo un rato a mi amigo y luego continúo caminando por las aceras y puentes de mi ciudad, Shappirus.

Las calles están en su totalidad silenciosas, todas las personas con las que me encuentro, tienen la expresión ensombrecida y el brillo de sus ojos fue arrebatado, vacías, carentes de ese color vivaz que solía tener, ahora todo el lugar se volvió más frío y gris. Por el gran canal, hay muchos buques de guerra estacionados en cada muelle. En muchos de ellos parten muchos soldados usando el uniforme azul de la nación de Zafeíri marchando en escuadras y levantando la bandera azul y blanca. También veo magos de distintos rangos por el color de sus báculos. En el río nereida están muchos tritones y sirenas usando una gran armadura azul metálica con muchos tridentes.

Me toca caminar mucho hasta llegar a la casa de mis padres, voy corriendo hasta que veo la familiar casa color verde paste que pertenece a mi familia, yo golpeo muy emocionada esperando que mis padres puedan salir de ahí sanos y salvos. Escucho pasos venir desde el interior.

—Hola mam... — me detuve en seco al ver a la persona al frente.

— ¡Ja jajajaja! ¡Hola pelirroja, veo que nos volvemos a ver! — contesta un muchacho familiar con mucha arrogancia —Si quieres dormir aquí tienes que darme algo de gran valor — me responde riéndose entre carcajadas con arrogancia en su tono y me trata como si fuera un ser inferior

—¡Fédor qué haces en la casa de mis padres! —exclamó en voz alta con mi sonrisa siniestra.

Veo de pies a cabeza con detenimiento a Fédo, desde su brillante cabello plateado desordenado con unos mechones adelante, hasta sus profundos ojos violetas y su tez pálida similar a la mía similar a la mía que contrasta con su traje negro. Yo pienso que "Es el ser más hermoso que he visto" pero su actitud arrogante lo hace un gran idiota y sin duda, eso le baja muchísimos puntos.

— Bueno mi estimada Henria, tus amados padres fueron tan amables de prestarme su cálido hogar a cambio de seguridad y medicinas por su puesto. Pero a cambio de fortuna, dinero y seguridad. El hijo de esa amable pareja ya se fue a la guerra y no sabes que las personas mayores en especial médicos suelen ser asaltados por delincuentes ahora que hace ausencia de la policía — me dice Fédor sin importarle nada con una blanca sonrisa brillante — De hecho, ellos están sanos y salvo.

— ¿Fédor, quien está afuera? — pregunta la voz de mi mama desde el interior de la casa.

—Es su amada hija Henria, están tan preocupada que casi me rompe mis oídos con sus dulces gritos — habla él burlándose de mí.

Antes de que pueda propinarle un codazo a ese lobo alfa de pelos plateados. Mis padres salen y me saludan muy emocionados, por volverme a ver de nuevo. En el comedor mi mamá Antonella solo nos sirve agua aromática con un pan fresco recién salido del horno, lo saboreó como lo más rico de mi vida, después de haber bebido es pócima para respirar bajo el agua y arrecife de coral como desayuno durante un mes.

Fédor comer la cena simple con una sonrisa muy feliz el pan de mamá, junto con el agua de horchata sin azúcar y le agradece a mi mamá Antonella por la comida.

—Lamento mucho mi pequeña con solo esperarte con pan — se disculpa mi mama.

—Hay mucha escasez de comida en la ciudad y hay un par de días que nos quedamos sin comer — dice mi papá con la expresión preocupada — muchos de las fuerzas armadas racionan la comida y como somos médicos tenemos una parte considerable por producir medicinas, pero hay otros vecinos que no tienen casi nada para comer.

—Mamá, papá no hay ningún problema de hecho el pan de mama es lo más rico de la vida — hablo con una sonrisa emocionada.

Después de comer, llevo a Fédor a mi habitación por las escaleras, sorprendiendo al muchacho y lo hago sentar en mi silla y yo me siento en la cama.

—Gracias por cuidar a mis padres — le digo con una sonrisa al jóven con un abrazo.

—Solo lo hago por dinero Henria o por algo a cambio, el mundo siempre se mueve por interés — replica él con cinismo en su rostro endurecido.

—Ya que tú sabes de dinero que me puedes decir de este collar que tengo en el cuello — digo cambiando de tema antes de que podamos ensartarnos en otra discusión absurda.

Le muestro al jóven Licantropó el collar que tenía desde mi infancia con esperanza de por descubrir alguna pisa que él me pueda dar y así poder resolver este misterio de mi origen.

— Veo que tienes una de las reliquias de la familia real de Akakor eso me interesa mucho — dice Fedor mirando el collar con detenimiento — Eso es el medallón del rey Joseph y fue pasado de generación en generación. No me importa como lo hayas conseguido el punto importante que si vendo ese collar tendré una fortuna y a la vez serías una gran presa para el emperador de Mammón, lo cual sería preocupante para ti porque muchos mercenarios estarían detrás de tu cabeza, lo mejor es ocultarlo a todos incluidos a tus amigos —me da una advertencia seria el peli plateado.

— Lo sé ni yo misma lo sé, como lo obtuve, pero tampoco lo voy a vender es muy valioso para mí— respondo audaz, yo sé que ese collar es la única pista que me llevará a mis orígenes y a Prasinus — ¿Cuándo te vayas, no vas a llevar nada para el viaje? — le pregunto al chico peli plateado en un tono mucho más amistoso.

— No es necesario — responde él con jovialidad — Yo siempre lo llevo en un reloj mis cosas lo que hace que sea más práctico para viajes, como por ejemplo sus medicamentos — finaliza arrogante mostrando un reloj de bolsillo

—¿Cómo que llevas todo en un reloj? — respondo rompiendo en unas carcajadas con burla.

Antes de seguir riéndome de lo que dice, él abre el reloj con un movimiento de su varita que emite una luz morada, agarra las cosas de mi dormitorio desde peluches, libros, hasta la lampara y las mete en el reloj. Yo le miro algo sorprendida por unos segundos luego me enojo de que haya cogido mis cosas sin pedirme que las lleve o algo por el estilo.

— ¡Puedes quedarte con ese reloj, yo ya tengo un mucho mejor! — yo resoplo a su respuesta haciendo un puchero mirando sus peculiares ojos violetas —pero cuando necesites tus cosas quiero que me la cuides como si fuera tu vida misma — finalizó antes de despedirse.

Me quedo en mi cama sentada mirando ese peculiar reloj morado con filos dorados similares a los de una rosa de los vientos que indican todas las direcciones y puede servir de brújula, las agujas del reloj en especial la del segundo se mueve constantemente sin descanso alguno siendo la más delgada, la del minuto, es la más grande y se mueve menos y finalmente la más pequeña la de la hora se mueve mucho más lenta que las demás. Me cambio de ropa, pero ante de irme a la cama, yo contemplo el reflejo en el espejo.

Hay una niña de largos cabellos rojos que me mira con una inocente sonrisa, luego se va cuando aparece el mismo hombre del mismo cabello rojo que la niña y juega con ella en compañía de dos niños idénticos en un cuarto elegante. Me doy cuenta que el collar de esmeralda que usa el rey es el mismo que tengo en el cuello, lo sujeto con nostalgia. Me acuesto en mi cama y me sumerjo en el reino de los sueños, mientras pienso en mis hermanos, mis padres, mis amigos todos ellos en peligro.

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Hola Buenas noches estrellitas, estoy emocionada de que mi historia tenga más de cuatrocientas lecturas y 160 estrellas.

Eso me da motivaciones para seguir escribiendo.

¿Quisieran saber más a fondo de los Dioses y Mitos de Prasinus para hacer una pequeña guía sobre ellos y puedan conocerlos?

Por otro lado quiero dejar que mi Heria descanse un poco en su cumpleaños, ya que después se viene la parte difícil para ella y sus amigos. ¿Qué creen que les deparará el destino? descúbranlo en la siguiente entrega