especial de navidad

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—Lisa, anda, ¿Porque no quieres festejar?

Rosé intentaba sacar a Lisa del aula ya que todos estaban festejando en el salón de fiestas del instituto.

—Porque no me gusta la navidad

—Ya pareces el grinch, vamos, no se te va a caer una mano por venir a festejar

—Rosé ya te dije que no, no tiene sentido

—¿Nunca has festejado verdad?—Rosé lo dijo pensativa y Lisa asintió

—Entonces ven con nosotros, Yoongi y Jungkook seguro deben estarnos esperando

—Ve tú, disfruten

—Pero..

—Que te vayas—Trato de no ser grosera—Odio la navidad

—De acuerdo, pero si cambias de opinión te estaremos esperando

Rosé salió del salón dejando a Lisa sola de nuevo. Ni siquiera habría asistido a la escuela de no ser por sus amigos que insistieron tanto e incluso la llevaron a fuerzas.

—¿Y Lisa?—Preguntó Jungkook

—No quiso venir porque odia la navidad

—Yoongi también y míralo, lo está dando todo—Los dos miraron al chico que bailaba al ritmo de un villancico mientras estaba vestido de santa

—Sabes que en el caso de Lisa es diferente, se que ella odia esta fecha por culpa de sus padres, pero no la culpo, yo también lo odiaría

Los dos chicos suspiraron para luego unirse a Yoongi.

—¿A donde vas Jen?—Preguntó Jisoo

—Iré al aula por mi abrigo

—No tuvieras frío si te unieras a Irene y Seulgi—Jisoo miró a las dos chicas que bailaban junto a Yoongi

—Vengo a festejar no a hacer el ridículo

Sin duda esos tres estaban haciendo un total ridículo, bailaban villancicos disfrazados mientras la mayoría de chicos se reían divertidos.

Jennie entró al aula apresurada buscando su abrigo en su mochila. Sin embargo se llevó un susto al ver a Lisa recostada sobre su pupitre mientras que tenía el gorro de su suéter puesto.

—¿Lisa?—La castaña no consiguió respuesta—¿Porque no estás con los demás?

—Porque el Grinch y yo somos grandes amigos, tanto que los dos odiamos la navidad

—Tonterías, en lugar de estar aquí de amargada estarías allá riendo de cómo Yoongi está haciendo el ridículo frente a todos

—Tú lo dijiste, estaría, sin embargo no tengo ganas de nada

Jennie frunció el ceño. Tenía que haber alguna manera de convencer a esa chica.

—No entiendo como es que odias la navidad, de verdad—Jennie sonrío—es lindo poner el árbol y llenarlo de adornos y luces, decorar el hogar, esperar los regalos emocionada, cenar con la familia y amigos, cantar villancicos y...

—Aburrido—Lisa le borró la sonrisa a Jennie

—Te estás perdiendo de mucho Lisa, pero allá tú

Jennie salió del salón y Lisa levantó la cabeza solo para observar como se iba, cuando la perdió de vista volvió a recostarse esta vez, pensando en dormirse. Suspiró y cerró los ojos por un rato hasta que escuchó ruidos pero no le dio importancia.

Permaneció con los ojos cerrados, pero de repente alguien la jaló del brazo haciendo que reaccionará de inmediato. Cuando se dio cuenta de lo que sucedía, una castaña la llevaba de la mano hacía el salón de fiestas en el instituto.

—¿Qué crees que haces?—Lisa preguntó sin ningún esfuerzo de soltarse

—No me parece buena idea que todos estén disfrutando el día mientras tú estás ahí encerrada

—Disfruto estar encerrada ¿sabes?—Los a hablaba en serio, parte de su vida la había vivido encerrada en un lugar con malas condiciones

—Bien, pues ahora vas a disfrutar con los demás

Lisa cayó en cuenta del vestuario de Jennie. No era tan llamativo pero si conforme a lo que se celebraba. Vestía un suéter rojo que le quedaba grande con unos simples jeans. En su cuello estaba enredada una bufanda blanca mientras que sus manos estaban envueltas con un par de guantes del mismo color que el suéter. Y como un extra, en su cabeza portaba una pequeña diadema con cuernos de reno que según Lisa la hacía ver tierna.

—Espera—La peligris la detuvo

—¿Qué pasa?

—¿Y ese atuendo?—Jennie miró su ropa

—¿Qué hay con el?

—Nada

—¿Entonces?

—Sólo que te ves tierna, así como aquella vez con tu pijama de ositos—Las mejillas de Jennie se pintaron de un color carmín—Y ese sonrojo le da el toque perfecto

Lisa tomó camino sola hasta el salón de fiestas dejando a Jennie totalmente desconcertada. Seguro Lisa algún día la mataría por sus repentinos cambios de humor.

Mas tarde, todos los alumnos se deseaban feliz navidad con un abrazo incluso con besos en la mejilla.

Lisa se sorprendió al ver a Yoongi depositando un beso en la mejilla de un chico rubio casi de su misma altura.

La peligris observaba todo alejada de los demás. Mientras nadie se diera cuenta de su presencia, nadie la abrazaría ni mucho menos le daría besos en la mejilla.

—¿Porque tan apartada?—Lisa suspiró, ahí estaba Jennie de nuevo, arruinando sus planes

—Sólo me gusta observar

—Creí que dirías que también odias el afecto

—Bueno algo así...

—¡Jennie!—Kai se acercó—¡Feliz navidad!

El chico abrazó a Jennie y deposito un beso en su mejilla mientras Lisa observaba con cierto malestar en su estómago.

—¡Lisa! ¡Feliz navidad para ti también!

A la peligris no le dio tiempo de alejarse cuando Kai le dio un fuerte abrazo. Y justo estaba por dejar un beso en su mejilla pero Lisa fue rápida y se apartó.

—Nunca voy a entender porque Kai no te cae

"Ese día en la casa del terror, desde ese maldito día lo odio" —Lisa pensó

—Hay varias razones

—¿Cómo cuáles?

—No puedo decirte

—Tal vez una es ¿Estás celosa?

—¿Qué insinúas?

—No sé, cuando Kai está cerca mío he visto como lo miras con molestia—Lisa puso cara como si hubiera visto un fantasma

"Lo has arruinado Lisa" —Se golpeó mentalmente

—¡Solo bromeo tonta!—Jennie golpeó su hombro ligeramente

—No es divertido

—¿Ves lo que se siente?..

Jennie fue interrumpida por sus amigas que le estaban llamando para que regresara con ellas ya que faltaba poco para irse.

—Bueno debo irme

Jennie estaba a punto de irse sin siquiera despedirse pero fue detenida por el brazo de Lisa, quién la envolvió en un abrazo.

—Feliz navidad Jennie—La castaña sonrío y correspondió el abrazo

—Feliz navidad Lisa

Jennie no quería separarse, realmente se sentía cómoda en los brazos de Lisa pero era hora de irse. Así que se separó y depositó un beso en la mejilla de la peligris dejándola sorprendida.

—Perdón yo... —Jennie se dio cuenta de lo que hizo

—Ésta bien—Lisa sonrío

Se despidieron y la peligris sonrío mientras se tocaba la mejilla al ver a Jennie alejarse.

—De repente adoro la navidad... —suspiró

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