Taehyung sabía nada de las artes, ni siquiera le interesaban, la única razón por la que se encontraba a las dos de la mañana en un supuesto estudio de artes con un joven de comportamiento extraño era porque quería hacer enojar a Jimin de la misma forma que lo habían hecho enojar a él.

Pero el chico extraño no parecía tener intenciones de pasar un buen rato, sólo se dedicaba a ver el papel y la pintura como si fueran más interesantes que Taehyung desnudo alargado en un sillón con solo una sabana roja cubriendo su entrepierna.

—¿Crees que no me aburro de estar aquí? —preguntó Taehyung, sacando de su concentración a Hoseok—. ¿Si quiera tienes con que pagarme?

Jung ajusto sus lentes y miró al chico.

—No cuento con tanto dinero, pero puedo pagarte un poco más que el salario mínimo, sólo no me hagas desconcentrar.

—No, eso es demasiado poco. Moriré de hambre si me pagas eso.

—Es mucho mejor, sólo por una hora al día, ni siquiera tienes que hacer nada más que quedarte quieto.

Taehyung se levantó del sofá y Hoseok dejó pegado un gritillo de molestia, apenas estaba comenzando con el boceto.

—De qué se supone que es tu proyecto.

Hoseok resoplo y dejó la brocha a un lado y se quito el mandil.

—Es libre, podemos hacer lo que sea, voy a hacer una escultura de madera.

Taehyung miró los instrumentos utilizados y frunció el ceño.

—No veo madera por ningún lado —sonrió de forma sarcástica — y porque entonces estas pintando.

—Sólo son unos bocetos de lo que quiero hacer, cuando tenga el ideal empezaré a tallar la madera.

Taehyung miró el boceto y de nuevo frunció el entrecejo.

—¿Por qué tengo cuernos?

Hoseok resoplo.

—Es mi arte, sólo dejame seguir avanzando y no hagas tantas preguntas.

—Es tu arte pero yo soy el modelo, no puedo dejar que uses mi cuerpo a tu favor para hacer lo que quieras con él —guiño el ojo, notando como Hoseok se comenzaba a poner incómodo.

—¿Alguna vez has salido con alguien?, por tu expresión creo que eres un virginal.

—¿Qué clase de pregunta es esa? —contestó con otra interrogante, parecía a un más incómodo que hace rato—. ¿Eso es como acoso?

Taehyung sonrió.

—Precisamente por eso preguntó. Estoy tratando de coquear contigo pero eres como un muro.

—No soy un muro, simplemente no soy gay, no puedo soportar tu coqueteo, me incómoda.

—¿Con cuantas mujeres has salido?

—No voy a responder a eso, y no tiene nada que ver.

Taehyung sonrió coqueto y al mismo tiempo burlon.

—Ya no es necesario que respondas, ya sé la respuesta.

Hoseok se cruzó de brazos.

—No lo sabes.

—Ninguna. La respuesta es ninguna —dijo burlon.