No soy dueña de la serie, ni sus personajes.
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- Entonces... ¿qué otros dulces tienes?-

Marinette suspiró y volteó a ver a ese gato irritante que estaba en su sofá rosa.

Desde hace muchas semanas que él la visitaba y se hicieron amigos. Claro que, en sus visitas, él nunca desperdiciaba algún momento para molestarla, la consideraba tierna cuando se irritaba.

La peliazul había estado trabajando en una nuevo diseño desde antes de que el gato negro llegara y aún no lo terminaba, usualmente le tomaba algunas horas en terminar un diseño.

- No lo sé, galletas, pasteles, es una panadería y pastelería, osea que hay de cualquier tipo- dijo agitando sus brazos en el aire. Chat solo rió.

- Está bien princesa, no hay que estresarse- dijo sonriendo.

- Es muy difícil cuando cierto gato está presente- respondió Marinette con una mirada divertida.

- Meowch, eso duele- dijo Chat poniendo una mano en su pecho dramatizando dolor. Marinette rodó los ojos.

- Si claro- dijo y bostezó.

- Mejor me voy, además de sueño, no quiero que mi princesa llegue tarde a la escuela mañana- dijo levantándose del pequeño sofá rosa de la chica.

- No tengo sueño y para mi es normal llegar tarde- contestó rápidamente la azabache.

- De todas formas. Además ya es muy de noche- dijo Chat.

- Está bien, ¿pero no quieres llevarte algun postre?- preguntó la peliazul. Chat sonrió.

- Será para otro día princesa, además, debo mantenerme en forma- dijo exibiendo sus músculos. Marinette rodó los ojos.

- Claro. Adiós gatito- dijo. Chat se agachó, tomó su mano y la besó.

- Adiós princesa, duerme bien- y con eso salió por el balcón hacia la noche.

Marinette subió a su balcón y lo vió desaparecer entre los tejados de París. Suspiró y Tikki voló a su lado.

- ¿Qué sucede?- preguntó su kwami.

- Solo estoy cansada-

- Pues ve a dormir. Chat Noir tenía razón cuando dijo que ya era muy de noche-

- Espera un momento. Me encanta ver cuando la ciudad esta así de... tranquila-

- No te despertaré si te quedas dormida- dijo Tikki cruzándose de brazos. Marinette rió.

- Está bien-

- De paso, ¿cómo va todo con Chat Noir?- preguntó Tikki al ver que Marinette se quedaría más de un rato viendo las calles.

- Bien, somos amigos. Parece que si le agrada la verdadera Ladybug-

- ¿A que te refieres con eso?-

- Me refiero a que si le gusta como es Ladybug en verdad, aunque no sepa que yo soy ella-

- ¿Gusta?- preguntó Tikki sonriendo. Marinette suspiró cerrando los ojos.

- Sabes de que hablo Tiki. Gustar de contentar, alegrar, así. Le caigo bien como soy en realidad. Si tan solo Adrien viera eso- dijo poniendo la cabeza en su mano.

- Tú sabes que Adrien te aprecia mucho- dijo Tikki.

- Eso espero. Bueno me voy a dormir- concluyó Marinette.
Ambas se dirigieron adentro.

Marinette se acostó en su cama cuando se percató de su muro. Tenía que volver a colgar las fotos de Adrien porque las quitaba sin que Chat se diera cuenta cuando él la visitaba. No quería contarle sobre su crush en él, no creía que Chat se burlaría pero le parecia vergonzoso hablar de eso con él.

Los colgare mañana* pensó y se quedó dormida.