Tras la pelea contra el Julian Malvado la escuela de Norrisville decidió hacer una fiesta conmemorativa al Ninja en la cual celebrarían la gran victoria del Ninja contra el Hechicero y el Julian Malvado.

Por su parte Randy había estado haciendo lo de costumbre salvar la escuela de los robots de McFist y jugar al Derriba Tumbas con Howard. Y hoy no era un día diferente, ya que Randy y Howard se encontraban jugando después de clase al Derriba Tumbas.

Howard: Vamos Cunningham. Tenemos que batir nuestro propio récord en el Derriba Tumbas 4. –Decía mientras no paraba de golpear botones como un loco. –

Randy: Eso debería decirlo yo te estas quedando atrás Howard. –Mientras decía esto también aporreaba botones como su amigo. –

Howard: Por cierto, Cunningham. ¿Que tienes pensado para la fiesta de mañana? Podrías revelar ante todos que eres el Ninja. –Ante la pregunta Randy no pudo evitar poner una cara de sorpresa. –

Randy: Que de que. ¿Te has vuelto loco Howard? –Mientras decía esto en la pantalla del juego salía las palabras Has Perdido. –

Howard: Quiero decir, ¿el Hechicero ha sido derrotado no? – Pregunto sabiendo ya la respuesta de ante mano. – ¡¡¡ADEMÁS SI LA GENTE SUPIERA QUE ERES TU EL HÉROE QUE SALVO LA CIUDAD SERIAMOS LOS CHICOS MAS POPULARES DE LA ESCUELA!!! – Grito Howard intentando contener la emoción ante esa idea. –

Randy: No Howard esa es una idea estúpida. –Mientras rechazaba la idea de Howard este no podía evitar poner una cara de desconcierto por no saber que había de malo en su plan. – Piénsalo. Si se supiera que soy el Ninja ¿cuántos enemigos crees que irían a por mi familia y seres queridos?

Antes de que Howard pudiera decir algo el teléfono de Randy empezó a sonar. Cuando contesto a este la voz que se escuchaba del otro lado era la de su madre para que fuera para casa.

Randy: Lo siento tengo que marcharme. Te veo mañana en la fiesta de la escuela. –Dijo despidiéndose de su amigo. –

Howard: Si además han elegido a mi hermana como la organizadora del evento y mi madre me pidió que la ayudara así que lo hare.

Randy: Espera, tu madre te lo pidió y aceptaste así sin más. No protestaste ni por un segundo. –Pregunto mientras juzgaba a su amigo con una mirada de desconfianza. –

Howard: Vale, mi madre me amenazó con que si no la ayudaba me castigaría de por vida sin poder jugar a videojuegos. ¿Contento? –Dijo como si maldijera su mala suerte de tener una hermana. –

Randy: Vale pues nos vemos mañana. –Antes de salir Randy los dos amigos hicieron su típico saludo como despedida. –

En su casa Randy se encontraba en la cama pensando en lo que le había dicho su amigo Howard. Tenía razón si decía que él era el Ninja se convertiría en el chico más popular y nadie se metería con el de nuevo. En ese mismo momento como si fuera una ayuda para tomar una decisión el NinjaNomicon empezó a brillar. Entonces Randy bajo de la cama y se dirijo hacia el NinjaNomicon cuando lo abrió se metió en el quedando en trance como de costumbre.

Randy: ¿Que pasa ahora Nomicon? –Pregunto extrañado después de todo desde que derroto a Julian Malvado y al Hechicero no volvió a llamarle. –

De repente el Nomicon empezó a formar una frase con letras que parecían hechas como con el agua de un dibujo.

Nomicon: "Cuando el enemigo jurado sea derrotado un nuevo enemigo tomara su legado" (Escrito en la pared del interior del Nomicon).

Randy: Nuevo enemigo. Si ya vencí al Hechicero y al Julian Malvado. Hice lo que el primer Ninja jamás pudo hacer. No me convierte eso en un mejor Ninja que él. –Pregunto con la esperanza de que el Nomicon lo reconociera como a un auténtico Ninja. –

De repente las palabras que estaban en frente de Randy se empezaron a deformar y a tomar una nueva apariencia con un tono de color el cual simulaba al fuego. Parecía como si al Nomicon le molestara que a Randy se le estuviera subiendo a la cabeza el hecho de vencer al Hechicero.

Nomicon: "El Ninja que necesita el traje no es un Ninja. Solo si vence esa debilidad se convertirá en un Ninja."

Randy quedo confundido ante estas advertencias. No entendía lo que el Nomicon quería decirle. Después de todo no a registros de ningún Ninja que peleara sin usar la Máscara del Ninja.

Randy: Pero todos los Ninjas han usado el traje eso no me hace menos Ninja. Hasta el primer Ninja utilizo el traje y se aprovechó de los poderes de este para enfrentar al Hechicero. –Antes de que Randy pudiera acabar de quejarse al Nomicon este le envió de vuelta a la realidad. –

Cuando Randy volvió se encontraba en su cuarto tirado en el suelo. Pero estaba confundido no entendía lo que el Nomicon quería decirle con sus advertencias. Y tampoco entendía esas advertencias que le había dado el Nomicon. Por qué le dijo que no era un verdadero Ninja por utilizar el Traje después de todo había sido utilizado por todos los Ninjas. Incluso cuando viajo al pasado pudo ver que el primer Ninja también lo estaba utilizando. Randy decido acostarse para calmar sus ideas no resolvería dándole vueltas tan tarde así que decidió dormir para enfriar sus ideas.

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En la oficina de McFist se encontraba una Hechicera con su aspecto de adolescente siendo mimada por los Robo-Gorilas los cuales la servían como si fueran sus sirvientes profesionales. En ese momento entro McFist el cual al ver la escena se puso a gritar.

McFist: ¡¡¡VICEROY!!! ¿Qué significa esto? ¿Que estoy viendo? –Pregunto con frustración hacia la escena que estaba presenciando delante de él. –

Viceroy: Lo que está viendo es a los Robo-Gorilas sirviendo a la Hechicera. –Dijo con una voz calmada y un tono sarcástico. – Además al contrario que el hechicero la hechicera no está encerrada y pude utilizar sus poderes contra nosotros cuando quiera. –Explico remarcando lo obvio. –

McFist: Vale, pero ¿PORQUE NO ESTAS CONSTRUYENDO NINGÚN ROBOT? para destruir al Ninja de una vez por todas. –Pregunto gritando de tal manera que la Hechicera se sintió incomoda por las molestias que la generaban. – Te recuerdo que nuestra meta sigue siendo destruir al Ninja.

Antes de que Viceroy pudiera decirle nada a McFist la Hechicera interrumpió la discusión que ambos estaban teniendo. Después de todo, los gritos de McFist estaban empezando a molestarla.

Hechicera: Porque no lograran destruir al Ninja con esos patéticos robots. –Dijo con desprecio como contestación a los gritos de McFist. –

Viceroy: Oiga señora mis robots no son para nada pate... –Antes de que Viceroy pudiera acabar de quejarse sobre la critica que había recibido sobre sus creaciones. La hechicera logro callarle con una mirada fulminante que hizo temblar de miedo a Viceroy. – Aunque debo de admitir que no han resultado útiles del todo para cumplir sus cometidos. –Dijo intentando disculparse y calmar el enfado de la Hechicera. –

Hechicera: No estoy diciendo que no nos vayan a ser de utilidad para nuestro plan, solo digo que no son en lo que más debemos concentrar nuestros esfuerzos. –Dijo mientras bebía una bebida que le trajo un Robo-Gorila. – En lo que debemos de concentrar nuestros esfuerzos en construir un robot el cual pueda mantener ocupado al Ninja el tiempo suficiente. –Dijo mientras apoyaba la bebida en una bandeja que sostenía uno de los Robo-Gorilas. –

McFist: No entiendo entonces ¿qué es lo que debemos de hacer? –Pregunto ante la idea de que los robots serian útiles, pero a la vez no lo serian. Ya que no los iban a utilizar para destruir al Ninja sino para mantenerlo lo más ocupado posible. –

Hechicera: Sencillo, lo que debemos empezar por destruir es el lugar de donde el Ninja saca sus armas. –Dijo mientras recogía de nuevo su bebida de la bandeja y jugaba con esta, mientras ponía una sonrisa malvada en su cara. – Y bien alguno ha pensado alguna vez de dónde saca sus armas el ninja.

Viceroy y McFist: ¿El lugar de donde saca sus armas? –Se preguntaron los dos a unisonó al darse cuenta que en todo este tiempo no se habían planteado esa pregunta. –

McFist: Jamás me pregunte de donde sacaba sus armas el Ninja. Aunque bien pensado es todo un misterio. Y además sus armas están muy bien hechas. –Dijo mientras se frotaba el bigote. –

Viceroy: Pero debe ser un lugar el cual este bien escondido y oculto para cualquier persona de la cuidad. –Dijo mientras se sujetaba la barbilla con la mano. –

Hechicera: Estáis muy equivocados pequeños el lugar ha estado siempre a la vista de todos, pero nadie lo ha notado. –Dijo mientras McFist y Viceroy pensaban que lugar era ese. – El lugar del que os hablo es el ¡¡INSTITUTO NORRISVILLE!!

La noticia los pillo por sorpresa a Hannibal y ha Viceroy los cuales no pudieron evitar poner una cara de asombro. Al descubrir que un lugar que era tan importante para el Ninja había estado todo este tiempo en frente de sus ojos, pero ellos no pudieron notarlo.

McFist: Entonces todo lo que debemos de hacer es destruir ese lugar muy bien manos a la obra. Viceroy manda unos cuantos robots para destruirlo. –Dijo McFist eufórico ante la idea de que por fin daría un golpe al Ninja. –

Viceroy: Y a que parte del instituto quiere que los envié. O acaso piensa destruir todo el instituto después de ayudar a su reconstrucción. –Dijo con un tono de sarcasmo. –

McFist: Tienes razón eso sería un duro golpe a mi bolsillo. –Dijo mientras se quedaba pensativo. –

Hechicera: No hace falta destruir todo el Instituto, se dónde se encuentra. Yo misma lo destruiré, solo necesito una distracción para entretener al Ninja. –Dijo con una sonrisa enfermiza la cual no estaba acorde con su aspecto juvenil. –

McFist: ¿Y cuándo llevaremos a cabo ese plan? –Pregunto con dudas después de todo necesitaban un momento en el cual supieran que el Ninja aparecería. Entonces se dio cuenta de cuál sería el día perfecto, a lo que la Hechicera se dio cuenta de que Viceroy se había dado cuenta de cual sería ese día. –

Hechicera: Muy bien pequeño parece que descubriste. El plan lo llevaremos a cabo el día de la celebración de su victoria en el instituto. –Dijo eufórica la Hechicera. –

McFist: Muy bien. Viceroy ponte manos a la obra construye un robot que destru... distraiga al Ninja. –Dijo mientras le indicaba a Viceroy que se pusiera manos a la obra. –

Después de indicarle a Viceroy que se pusiera a diseñar un robot que cumpliera con el plan de la hechicera McFist lo siguió dejando sola a Hechicera. La cual se levando y se puso a caminar camino a la ventana de la oficina de McFist.

Hechicera: Poco a poco. Te iré destruyendo poco a poco Ninja, hasta que no te quede nada que proteger. – Dijo mientras utilizando sus poderes para hacer aparecer una esfera parecida a las del Hechicero. – Y tu frustración, tu ira, tu desesperación, todos tus sentimientos negativos serán lo que alimente mi poder para destruirte. – Dijo mientras contemplaba la esfera que acababa de sacar con una sonrisa siniestra de satisfacción. –

Me gustaría que vayan diciendo que les parece el como va la historia. Ya que soy nuevo esto y me gustaría mejorar en lo que pudiera.