Hestia

  Me desperté de golpe sintiendo como el agua me caía encima.

   El susto fue enorme.Estaba muy fría.Miré a mi alrededor intentando ubicarme en tiempo y espacio pero no pude.

   No conocía aquel lugar.Parecía ser una cabaña abandonada.Las paredes de madera medio podrida le daban un aspecto antiguo y había polvo en todos lados.Aparentemente llevaba mucho tiempo cerrada.Estaba segura de que no había estado allí nunca pero, se sintió familiar.

   Me removí en el lugar aún mirando a ambos lados y sentí que algo me retenía los brazos.Los estiré y solo pude escuchar el crujir de las cadenas que me aprisionaban.

   Fijé mis ojos al frente y vi a mi madre, Brianne.Bueno, era mi madrastra porque mi madre biológica había muerto cuando yo era niña.

   La extrañaba muchísimo.Era muy hermosa, rubia como Charlotte pero todo el mundo decía que yo era la que más me le parecía.

   Mi mamá olía a rosas rojas.Esa fragancia suave y reconfortante.
Recuerdo que solía abrazarme a ella y sentarme en su regazo a que me leyera cuentos para quedarme dormida.Era el mejor aroma del mundo y a la vez, la mejor sensación.

  Cómo nos reíamos y jugábamos juntas con mi hermana y papá.Pero sobre todo me acuerdo de su sonrisa.Era bella, los dientes blancos como el nácar y sus labios rojos, el sonido cascabelero de su voz, cuando reía parecían campanillas tintineantes siendo rozadas por el viento.¡La extrañaba tanto!

  Luego de su muerte, nada volvió a ser igual.La sonrisa de papá desapareció casi por completo mientras que a mi hermana y a mí solo nos quedó esa horrible sensación de vacío.Éramos niñas pequeñas e íbamos a crecer sin nuestra madre, eso era un hecho.

  Cuando tuvimos aquel accidente en el que murió me sentí horrible.Nadie nunca lo dijo pero siempre sentí que debía haber muerto allí en su lugar.Después de todo me cubrió con su cuerpo para protegerme.Aún recuerdo sus últimas palabras

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-¡Mamá!¡Mamá!¡Abre los ojos mami , no me dejes!-grité llorando a lágrima viva al ver como la sangre corría por su frente empapando su pelo rubio y los ojos se le cerraban poco a poco

-No llores, cariño-exhaló-estaré bien, siempre las voy a cuidar, a Charlotte y a ti-jadeaba entre palabra y palabra

-¡No te vayas mami!¡No me dejes sola!¡No me dejes!-lloré-¡Yo tengo que estar ahí, no tú!¡Por favor, déjame morir por ti!-grité tan fuerte que pude sentir como me ardía la garganta

-Cariño, las madres protegen a sus hijos sobre todas las cosas, por eso te protegí.¿De qué me habría servido estar viva sabiendo que tú no ibas a estarlo?Lo hice y... lo haría mil veces más-sus ojos se cerraron y la respiración se le volvió pesada, como si le costara inhalar y exhalar-Te amo hija-susurró

-¡Y yo a ti mamá!-me tiré a llorar en su regazo y sentí como si me arrancaran un pedazo del alma

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   Volví al presente con los ojos húmedos y me fijé en Brianne.A pesar de que no era mi verdadera madre yo siempre le tuve cariño.Mi papá solía sonreír a su lado y con verlo feliz a mi me bastaba.Charlotte me contó que tuvo una hija llamada Valeria y que la niña murió.Yo realmente no me acuerdo de eso.

  Solo sé que me sentí aliviada al verla en aquel momento donde me moría de miedo.

-¿Mamá?-exclamé con duda y un atisbo de esperanza en la voz

-No soy tu madre Hestia, y creo que es hora de que sepas unas verdades niña-me miró con desprecio

  Nunca la había visto así.Lucía diferente y... no en el buen sentido.Se veía malvada, como sino fuera ella.

-¿Qué dices?-la miré confundida

-Lo que oyes Hestia, yo no soy tu madre.-su tono era firme y serio

-¿P-pero, por qué estoy aquí?-pregunté aún más confundida

-¿Qué no es obvio?-una sonrisa siniestra se formó en sus labios-Porque serás el elemento principal en mi venganza-me miró con malicia

-¿Venganza?¿D-de qué estás hablando?-pregunté incrédula

-Hablo de como planeo vengarme de tu asquerosa familia.¡Uds son los culpables!¡Uds se llevaron a mi madre y a mi bebé Valeria!-comenzó a llorar con rabia

  Yo me quedé helada.Me moría de miedo pero sobre todo, quería entender el por qué de sus acciones.

  No comprendí de qué culpaba a mi familia.¿Qué cosa tan horrible pudimos haberle hecho para que se sintiera de esa manera?Pues estaba claro que no había sido bonito y eso era bastante obvio pero... mi padre no pudo haberle hecho nada malo.Hasta donde sé la complacía en todo.Se veían muy felices juntos de hecho.

-¿Brianne?-la llamé en un susurro y ella levantó la vista hacia mí-¿Qué fue... lo que te hizo mi familia exactamente?

   Me contó todo de principio a fin.Cómo mi abuelo había despedido a su madre injustamente y luego como su hija murió en lugar de Charlotte.

  No pude evitar sentirme horrible.Indirectamente le arruinamos la vida, es verdad, pero nada de eso había sido intencional como ella hacía creer a su mente.

  En mi opinión Brianne había sufrido tanto que ya se le habían aflojado unos tornillos allá arriba.Pero el punto es que yo seguía aquí sola sin poder irme y no tenía ni la más remota idea de lo que ella planeaba hacerme.

-¿Puedo preguntar qué vas a hacerme?-hablé tímidamente

-¿Qué voy a hacerte niña?¿En serio lo preguntas?¡Pues es obvio que voy a matarte!-sonrió perversa y salió de la cabaña dando un portazo

  Ok, ahora sí estoy asustada.A quién engañaba, estaba muriendo de miedo.Creo que si ella no me mataba me iría yo misma al otro lado de un paro cardíaco.

   Comencé a mirar por todas partes buscando una salida, algún punto estratégico por donde escapar de la seguridad, armas, no sé, algo de todas esas cosas que Aidan me enseñaba cuando éramos niños.

Aidan... sí que lo eché a perder.

  Y ahora me iba a morir sin decirle que lo amo.Debe pensar que lo odio y odiarme a mí también.Seguro ni se molesta en buscarme.

  Estoy siendo estúpida, lo conozco, está buscándome por todo el reino

  Ni sé por qué me pongo tan paranóica

  Seguro atraparán a Brianne y me salvaré, de algún modo.

  O eso espero

  Las horas pasaban y yo seguía ahí atrapada.Sola y esposada en aquella cabaña polvorienta.Comencé a mirar a todas partes de nuevo.

  La casita cada vez se me hacía más conocida hasta que, tuve otro recuerdo...

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  Soy yo

  En esta cabaña

  Estoy llorando y...¿atada?

  No lo entiendo

  Brianne está delante de mí sonriendo con malicia mientras yo asiento frenéticamente.

  Las lágrimas resbalan por mis mejillas

  Siento algo en el pecho, como si me fuera a explotar una bomba dentro del estómago

   Esa sensación de que algo palpita dentro de ti, sabes que es negativo y te asusta que detone porque te dolerá, pero  no lo hace...nunca se va.Permanece ahí.A veces podemos ahuyentarlo, pero siempre vuelve cuando pensamos en eso que nos duele.Regresa el frío, el nudo en la garganta, el agujero en el estómago, el corazón late a prisa.A ese horrible sentimiento, compañero de todos nosotros se le llama miedo.

  Y justo eso era lo que emanaba cada poro de mi piel en cada instante que pude recordar, que fue con mucha claridad, porque como ya dije anteriormente.No recuerdo imágenes, me gusta recordar las sensaciones que me dejan las experiencias.

-¿Entonces pequeña Hestia, quieres salvar a tu hermana Charlotte?-me dijo con ese tono que tanto había odiado

  Asentí con la cabeza y respiré agitada.Mi pecho subía y bajaba con cada gota de aire que entraba a mis pulmones.

-Pues entonces harás lo que yo te diga, ahora volverás al castillo, saldrás sin que te vean, no dirás una palabra a nadie y te lanzarás por el precipicio que hay en el río.¿Entendido?-hablaba con tono lento como disfrutando cada palabra y en la última frase sujetó mi mentón obligándome a mirarla

  Yo no respondí, solamente lloré con más fuerza que antes.

-¿Entendido?-repitió con furia apretándome la mandíbula con fuerza

  Gemí de dolor y asentí de nuevo.Luego ella salió dejándome ahí sola con mis pensamientos.

  Le hizo una seña a los hombres de fuera para que me desataran.Cuando entraron comenzaron a tocarme por todas partes.Uno me estaba besando el cuello mientras tocaba mis pechos, otro mis piernas.Era horrible

Estaba asustada

Quería morir, vivir, correr, gritar, llorar, vomitar, todo al mismo tiempo

  No sé si fue producto de la adrenalina que me puse de pie y golpeé al que me besaba el cuello con la cadena de las esposas en la cabeza.

Corrí

Corrí como nunca en mi vida huyendo de ese lugar

Solo quería que alguien me abrazara

Que me dijeran que todo estaría bien

Que no había nada que temer

Que estaba soñando y despertaría siendo feliz de nuevo

Pero estaba equivocada

No iba a pasar eso

Ya estaba despierta

Y debía morir

    Todo mundo creía que yo aún seguía encerrada en mi habitación por lo de Aitana y Aidan aunque la verdad Amy había conversado conmigo y me contó lo de la enfermedad así que se me había pasado un poco.La realidad era que no fue su culpa y sabía que debía perdonarlo por ello.Cuanto antes mejor.

  Pero en el momento en que me dispuse a salir me secuestraron y Brianne me retuvo durante días en esa cabaña oscura.

  Bajé y ensillé a Corazón para irme al lugar donde iba a morir.Se sentía horrible pensar en ello.

  Cuando llegué al acantilado me paré en la orilla y miré hacia abajo.El río se veía tranquilo y hermoso.Pero estaba segura de que por dentro era turbulento y peligroso.

  Estuve a punto de saltar cuando escuché una voz detrás de mí

-Hestia-me llamó Aidan calmado pero en un tono aterrado al mismo tiempo

  Supongo que se imaginaba lo que pasaba por mi cabeza en ese instante.

  Ni siquiera noté que me estaba siguiendo.Giré mis ojos y lo miré una última vez.Las lágrimas corrían con libre albedrío, ya no me controlaba y me lancé hacia el vacío frente a mí.

  Brianne me había amenazado con matar a mi hermana sino me sacrificaba.Me dio a elegir, o mi vida o la de Charlotte.

-¡Hestiaaaaa!-escuché el grito desesperado de Aidan y vi su intento por lanzarse detrás de mí pero unas manos lo sostuvieron.

  Cuando caía perdí la conciencia por el miedo y luego de eso solo recuerdo haber despertado en mi habitación en casa, sin rastros de mi memoria.Eso fue lo que pasó, aquel día hace tres años

Recordé las pesadillas que tuve cuando volví al castillo, eran de ese día.

Aquellas amenazas, las manos que me tocaban

Las náuseas que tenía al estar en la oscuridad y el polvo

Lo comprendí todo al recordar aquel lugar

Este era mi verdadero trauma, aquello que bloqueaba mis recuerdos.