chapter xxxii.
( end credits )

la honestidad es una palabra muy solitaria
todos son muy falsos
la honestidad apenas se escucha
y sobre todo es lo que necesito de ti
honesty ─── billy joel

washington d.c.
31 de marzo, 2014
( un día antes del asesinato de fury )

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—Señorita Stark —el hombre con parche en el ojo asiente con la cabeza hacia la gruesa carpeta amarilla en su mano—, tu archivo personal.

El Director Fury deja caer la carpeta con el emblema de S.H.I.E.L.D en el escritorio entre nosotros. El despacho que nos rodea está cubierta de ventanas, con la ciudad de D.C. abajo. Mis botas negras me acercan cuidadosamente al amplio escritorio mientras Steve y Natasha trabajan en una misión. Honestamente, solo quiero regresar al apartamento de Steve para ver más películas y ponerme al día, pero algunos agentes me "escoltaron" hasta aquí e insistieron en que Fury tenía algo que me gustaría ver.

Sacudo la cabeza, confundida, y me inclino para tocar la gruesa carpeta.

—No lo entiendo. ¿Por qué S.H.I.E.L.D. tiene un archivo sobre mí?

—Lo tenemos sobre todos —él responde con una expresión directa.

—Oh. Wow. Es mucha gente. ¡Tu archivador debe ser enorme! —mis ojos azules se abren cuando mis hombros se levantan en una risa incómoda.

Se vuelve aún más incómodo cuando Fury sin impresionar.

Es divertido porque le he visto darle a mi padre la misma mirada en numerosas ocasiones. Me parece que el Director Fury tiende a hartarse un 200% con los Stark a diario.

Me aclaro la garganta y asiento, entendiendo que mis bromas no tan divertidas. Entonces, recojo la gruesa carpeta, mirándola con una expresión vacilante. Supongo que una parte de mí no quiere abrir el archivo personal de S.H.I.E.L.D. Realmente no quiero saber qué sabe. Es probable que sepan cosas que ni siquiera yo sé. Mis ojos se dirigen a la cara de Fury y sus cejas se fruncen mientras me da un leve, apenas visible, asentimiento. Mis dedos golpean rítmicamente contra la carpeta y mi bota rebota un poco contra el azulejo. Después de un rato de vacilación, lo abro y miro la información.

—Oh —me encojo un poco, viendo cuán básica es la información—. Stark, Lisa May. Fecha de nacimiento: 28 de enero de 1996. Estado: activa; asesora. ¡Uy, como papá! —sonrío y asiento hacia Fury—. Guay —él pone los ojos en blanco—. Última dirección conocida: Torre de los Vengadores. Marcas identificables: repulsores metálicos incrustados en las palmas de ambas manos. Familia: Anthony 'Tony' Stark, padre; Janice Montgomery, madre, desaparecida el 6 de agosto de 1998... —mis labios se separan en confusión y mi voz se queda atrapada en mi garganta.

Algo no va bien.

Y, en este momento, me doy cuenta de que todo está a punto de cambiar. Mis rodillas se sienten débiles y mi cuerpo se balancea. Toda la sangre se precipita a mi cara y un nudo se eleva en mi garganta. La información parece borrosa y tengo que leerla una y otra vez.

Mi cabeza se sacude rápidamente y mi voz gruñe.

—Fury.

El director no hace nada, solo me mira.

Luchando por tragar, finalmente logro tartamudear:

—Es-Espera, n-no, no, uh... —levanto la cabeza y apunto un dedo tembloroso al papel—. ¿Esto... esto dice medio hermano?

Mis ojos se clavan en el hombre que simplemente me mira con lo que creo que debe ser simpatía.

—Fury —mi voz se endurece—, ¿tengo un hermano o una media hermana?

Él deja escapar un suspiro tranquilo, inclinando los codos hacia adelante sobre su escritorio.

—Sí, señorita Stark.

Mi boca se afloja y me cuesta respirar.

—¿Q-Qué? No, no, pero, pero ¿cómo? Oh, ¿cómo sucedió? —mis dedos empujan con fuerza mis sienes doloridas.

Mis ojos recorren la sala que de alguna manera ya no parece tener mucho sentido. La luz se siente cegadora. Un hermano o hermana. No. ¡No puede ser verdad!

—Fury, no... —mis rodillas rebotan y mi voz se apaga.

Él solo me mira y sé más que esto es real.

Sacudo la cabeza, sintiéndome completamente entumecida. Un escalofrío me recorre la columna vertebral.

—¿Papá lo sa-sabe?

Fury niega.

—Tu hermano o hermana no es hijo o hija de tu padre.

Mi cara se retira en confusión. ¿Cómo podría tener un hermano que no sea hijo de papá? No tiene sentido... hasta que me doy cuenta lentamente. Idiota. La única otra explicación posible es que... Oh Dios.

—Mamá —mi mano cubre mi boca—. Ella tuvo otro bebé.

—Hm —él tararea humildemente de acuerdo.

Luce tan enfermo como yo.

—¿Está...? —dejo escapar un sonido de frustración antes de enderezarme y caminar frente al escritorio—. ¿Está...? —sacudo la cabeza de nuevo, incapaz de decir nada.

—Sigue con vida. Está a salvo de ella —me informa, mirándome cuidadosamente, como si esperara que me derrumbara en cualquier momento.

Suspiro aliviada. Eso es bueno. Quienquiera que sea, esté donde esté, está a salvo de mi, no, nuestra madre. Descanso mis propulsores en las rodillas, sintiéndome repentinamente mareada y completamente sin aliento.

—Vale... —mis cejas se fruncen y me enderezo para mirarlo—. Espera, ¿por qué se borró su nombre? ¿Por qué S.H.I.E.L.D. haría eso? ¿Por qué me lo oculta, Fury?

—No es por ti, señorita Stark, es por alguien curioso. Fue la solicitud de su tutor de que fuera una adopción secreta y cerrada. En los tiempos donde vuestra madre intentó encontrarlo.

Un hermano o una hermana. Alguien como yo.

—¿Sabes su nombre? —trago con dificultad y me paso los dedos por el pelo—. ¿Puedes decírmelo? —mis hombros tiemblan en un encogimiento débil.

Él se estira hacia atrás, toma un papel blanco y lo deja en el escritorio. Frunce los labios y sacude la cabeza, como si no estuviera seguro de hacer esto. Él fue quien lo sugirió, en primer lugar; no debería detenerme ahora. No cuando estoy tan cerca. Pero, de nuevo, ¿tan cerca de qué? ¿En qué me estoy metiendo? Me encuentro con sus ojos un momento, hasta que no puedo soportar la advertencia por más tiempo.

Todavía me tiemblan las manos cuando levanto lentamente el papel y lo sostengo. Tiembla ante lo, lo que hace que sea un poco difícil de leer. Mi pecho y garganta se sienten apretados mientras obligo a mis ojos a leer las palabras. Se me escapa un pequeño respingo cuando lo leo una y otra vez. Las lágrimas se acumulan en mis ojos y no entiendo por qué esto duele tanto.

Un niño.

Felicidades, es lo que suena en mis oídos.

Felicidades, tiene un hermano pequeño, señorita Stark.

Entonces una sola palabra, su nombre, tiembla de mis labios.

—Peter.

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Los Stark Volverán...

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Sí, gente, ha pasado. Lisa tiene un hermanito y es *ESE *Peter. ¡Todo se volverá más emocionante ahora!

Subiré un anuncio cuando publique el tercer libro de la trilogía, como siempre. ¡Gracias por leer y espero que os quedéis hasta el final de la saga! ¡Os amo 3000! ♥