u n o

Màu nền
Font chữ
Font size
Chiều cao dòng

Ladybug llego a su terraza, le hora era un poco pasando la media noche. Su transformación se desapareció y regreso a ser Marinette Dupain-Cheng. Su pequeña kwami catarina, Tikki, dio vuelta por el aire varias veces antes de flotar sobre el hombro de Marinette.

"Otro trabajo bien hecho, Marinette!" Dijo ella mientras se frotó contra el cachete de la adolescente. Marinette dio una pequeña risa, deteniendo el pequeño kwami en su mano.

"Gracias Tikki, hay unas galletitas en el escritorio que puedas disfrutar." Ella asintió y fue volando adentro una vez que Marinette abrió la puerta de la terraza. Marinette la siguió, bajando la escalera y entrado a su cuarto oscuro. Paso por su escritorio y prendió su lámpara, viendo Tikki disfrutando una galleta de chocolate. Marinette sonrió y se fue a su cama.

Marinette cayó a su cama con un suspiro largo y comenzó a enrollar la manga de su camisa de pijama. Como si fuera señal, la tinta verde comenzó a aparecer encima de su brazo.

"Realmente, que desagradable es dejarte en una noche tan hermosa como esta." La letra era bonita y hasta parecía que brillaba mientras la leía. Suspiro un poquito y sonrió, trayendo su marcador a su boca y destapándolo con sus dientes. Paso sus dedos sobre la letra varias veces hasta que se desapareció la tinta verde, dejándose espacio para escribir.

"Desafortunadamente, no tengo todo el tiempo libre que tienes tú." La letra de Marinette siempre era grande, pero cuando llega a comunicarse por su brazo, tuvo que aprender a minimizar su letra para escribir más. Vio como su letra de tinta rosada comenzó a desaparecer de su brazo, y tomo unos cuantos segundos para que apareciera la tinta verde.

"Seguramente puedes ahorrar algo de tiempo para mi este Gatado." Marinette no se pudo aguantar el ronquido que se escapó sobre sus labios. Borro la tinta verde y respondió rápidamente.

"Gatado?"

"Es el día de la semana donde yo recibo toda tu atención."

"Y qué día es ese?"

"Es todo los días, y déjame decirte que to has estado gateando detrás mucho." Marinette se río y levanto su mano a su boca cuando Tikki recogió su cabeza a ver Marinette somnolienta desde el escritorio. Paso su mano sobre el tinte verde, trayendo su marcador rosado a su brazo.

"Buenas noches, Chat Noir." Escribió lentamente, con movimientos tan suaves, que parecía que estaba haciendo caligrafía. Se quedó viendo a su tinta rosada lo que se sentía como una eternidad, tanto que decidió a levantarse y apagar su lámpara, acobijando a Tikki con una cobija pequeña. Marinette regreso a su cama, dando nota que la tinta rosada todavía estaba sobre su brazo. "Se ha deber dormido." Se dijo ella misma, parpadeando lentamente.

Marinette sintió el toque como de un fantasma sobre su piel y abrió sus ojos, a ver la letra que se veía borrosa en la luz de la luna. "Buenas noches, mi dulce Ladybug." Marinette sonrió antes de dejar su brazo caer a su lado y se durmió.

La próxima mañana, Marinette despertó con un mensaje nuevo sobre su brazo. "Buenos días, milady! Espero que tengas un maravilloso día y espero que tenemos suerte de participar en Gatado hoy." Marinette prácticamente podía ver la sonrisa de satisfacción que tenía puesto cuando él escribió esto para que lo viera ella. Marinette quería responder, pero es prohibido responder.

Cada vez en cuando, miraba a su brazo, viendo que se desapareció la tina verde. Estaba esperando, rezando, que a lo mejor recibiría una respuesta de ella antes de que Plagg se dará cuenta. "Adrien, no estarás esperando una respuesta, verdad?" La voz del kwami hico que el rubio brincar del susto, y tiro la manga de su camisa a bajo.

"Claro que no! Nomás estaba checando que ella no me escribió algo!" Adrien Agreste se río nerviosamente. El gato kwami negro entrecerró los sus ojos al muchacho, tarareando con recelo antes de regresar a su pedazo de camembert.

Un hilo rojo que conecta dos personas que están destinadas a estar juntos desde el momento que nacieron. Este hilo se puede estirar y se enreda, pero nunca se rompe. A pesar de la hora, el lugar y las circunstancias, el hilo nunca re romperá. Los dioses ataron estos hilos rojos a los dedos meñiques de todos, a la edad de quince años, todos están regalados con el modo de comunicación. Con el poder de hablarse por la piel, las almas gemelas se aproximan más entre sí.

En cuanto a Ladybug y Chat Noir, ellos estaban destinados para juntarse y juntos a combatir contra los akuma en Paris. Desde entonces, las identificaciones reales de Ladybug y Chat Noir han sido predestinados. Pero el destino tenía otras cosas en mente y decidió que podían saber sus identidades reales, sus kwamis establecieron reglas para la comunicación entre ellos.

"Tú ya sabes, no puedes mandar mensajes cuando el nuevo día comienza." Plagg dice, comiendo de su queso mientras Adrien se preparaba para la escuela.

"Ustedes van a patrullar hoy en la noche, pueden hablar entonces." Tikki menciono antes de esconderse en el bolso de Marinette, y se dirigieron hacia las escaleras.

Marinette se acuerda escuchando sus papas contándole de su nueva forma de comunicación el día que cumplió los quince años. Su mama le enseño, recogiendo un bolígrafo y escribiendo una notita de amor encima de su brazo, y apareció el mismo mensaje encima de su papa.

"Quien sabe, podrás tener suerte. Tu media naranja puede ser alguien cerca de ti, o los dos pueden estar legos de si mismos. Lo que sea la situación, los dos de ustedes estaban destinados a conocerse, no importa las circunstancias.

Marinette estaba encantada – ella estaba esperando para correr a su cuarto esa noche y dibujar sobre su brazo para averiguar quien era su otra mitad, pero al momento de hacerlos, Tikki la paro.

"Tikki, todo bien?" Tikki se quedo sin decir nada mientras flotaba afrente de Marinette. Las dos de ellas apenas recientemente se juntaron hace varios meses y ya conoció a Chat Noir. Marinette se preguntaba por que su kwami flotaba enfrente de ella hasta que comenzó a pensarlo. "No... Tikki, por favor, no me digas que... No me vayas decir que Chat Noir es con quien mi hilo rojo me ha atado." Tikki vaciló en responder y Marinette la miraba con incredulidad antes de dar un suspiro de exasperación.

"Perdóname Marinette!" Comenzó Tikki. "P-Pero hay mas de un hilo rojo del destino! Yo estaba destinada para ayudarte, entonces tenemos un hilo entre nosotras también! Así como Chat Noir tiene un hilo rojo con su kwami! Hilos rojos no están reservados al amor, pero ustedes dos son destinados para trabajar juntos!"

Marinette trato de imaginarse a sí misma enamorándose de Chat Noir – el coqueto, guapo, gato amante de juego de palabras – ella rápidamente sacudió ese idea de la mente. "No," se dijo ella misma, mientras caminaba a la escuela. "La única persona con quien yo quisiera tener mi hilo rojo atado ha es con-"

"Adrien!" Su amigo Nino llamo al muchacho que estaba saliendo de un caro plateado. Allí estaba, el niño rubio que parecía ángel, el modelo popular, la persona con quien ella quería su hilo rojo atado ha.

"Marinette." Una voz la saco de sus pensamientos.

"Alya, buenos días."

"Has visto a mi Ladyblog? Había una apariencia de los dos anoche!" Su amiga, Alya, era la que dirigía el blog mas popular de los superhéroes mas populares de Paris, el Ladyblog. Alya era un gran fan de Chat Noir y Ladybug, y a Marinette la mataba escondiéndole un secreto a su mejor amiga, pero no quisiera meterla en ningún peligro mientras salvaba a Paris.

Mientras Marinette y Alya se dirigían hacia el salón de clase, Adrien y Nino siguieron lentamente. "Es interesante. No se quien es mi otra mitad, pero quien sea, le tienen un amor a Ladybug." Nino se río mientras le contaba a Adrien que el encontraría palabras y dibujos sobre sus brazos y sus piernas.

"Me pregunto cuántas personas quisieran que su hilo rojo estuviera atado a Ladybug?" Adrien pregunto en voz alta. Nino dio un ronquido.

"Quien no quisiera su hilos rojos atados a Ladybug?" Los dos se rieron y entraron a salón. Lo que no sabia Nino, es que el hilo de Adrien estaba atado a Ladybug.

La clase comenzó y Adrien no puedo parar que su mente pensara en Ladybug. El estaba feliz cuando el oyó la explicación de Plagg cuando el cumplió los quince – su hilo rojo estaban atadas a Ladybug, la persona mas asombrosa, potente chica que el conocía. Adrien estaba hasta desesperado para hablar con ella nomas segundos de recibir las noticias, y fue casi devastado cuando Plagg le dijo que no podía durante el día.

"Ustedes tendrán su tiempo para conocerse, para que te apuras." Plagg le dijo.

Adrien dio un susprio, sus ojos llegando a su brazo. Tenia ansias de oír de ella, quería mandarle un mensaje de amor, preguntarle como estaba, que anda haciendo, pero sabia que Plagg lo regañaría. No solo eso, correría el riesgo de la identidad de Ladybug y podía poner la en peligro; eso era la ultima cosa que quería hacer.

La hora de comer llego, Marinette y Alya estaban sentadas por la corte, Marinette escuchando a Alya platicar de el ataque de akuma de la noche anterior, antes de que una risa desagradable la interrumpo.

"Mira, te aseguro, el hilo rojo del destino de Adrien esta atada a mi." Chloé Bourgeois, la hija del alcalde de Paris, estaba haciendo alarde de algo nuevo... Como siempre.

"Oye, donde esta Adrien?" Alya pregunto, buscando por la corte, no encontrando a el ni a Nino por ningún lado.

"Mira." Chloé le quito la tapa de un marcador rojo y escribió sobre su brazo. Lo que sea que decía, no le importaba a Marinette – probablemente era una tontera amorosa. Cuando llego la respuesta, habían suspiros y ruidos de asombro. "Hola mi amor." Una tinta azul con letra fea apareció sobre su brazo que no parcia que venia de Adrien. Pero Marinette era crédula.

"En verdad crees que Adrien es la otra mitad de Chloé?" Marinette pregunto, deteniendo tenedor afrente de su boca. Alya dejó que su mano caerá a la mesa fuerte, asustando a Marinette.

"Tu le estas creyendo a esa?" Alya susurró en voz baja. Los ojos de Marinette se abrieron cuando se dio cuento lo que ella dijo. "El tipo probablemente es alguien rico que nomas le sigue la corriente."

"Esta alguien triste por que no tienen una alma gemela?" La voz de Chloé entró por la multitud, todos volteando a ver a Marinette y Alya. Alya gimió.

"Aw, pobre Marinette, ella no tiene un hilo rojo que la ata a alguien. Se va quedar solo, como un vieja loca con un montón de gatos." Chloé habló de una manera arrogante y condescendiente. Marinette rodo sus ojos.

"Me siente mal por tu otra mitad porque todo lo que tu haces es hablar de otro niño." Marinette resopló, metiendo su comida a su boca.

"Como quiera, mientras tu tienes un triste tipo rico, el hilo rojo de Marinette esta atado al único Chat Noir." Alya replicó y Marinette se comenzó a ahogarse. "Marinette!" Chloé y Sabrina se rieron.

"Ya quisieras." Ella replicaron. Un timbre sonó, señalando que la hora de comer se había acabado. Marinette tomo varios sobros de una botella de agua que le había agarrado Alya, tratando de calmar la toz que tenia.

"C-Chat Noir?" Alya se rio.

"Él es el superhéroe más bonito de nuestro tiempo, a lado de Ladybug. Quién no quisiera sus hilos atadas a ese galán?" Ella pregunto. Marinette no le respondió, siguiendo tomando de su botella de agua. Si Alya supiera cuánta razón tenía de sus hilos.

Le mente de Marinette comenzó a vagar – Tikki le habia dicho que había mas de un hilo rojo. Eso podría significar que sus relaciones con Chat Noir podrían permanecer estrictamente profesional y ella podría tener otro hilo rojo atado a...

Los ojos de Marinette fueron al muchacho que estaba sentado frente a ella. Sin pensarlo, trajo su bolígrafo a su mano y comenzó a dibujar sobre las puntas de sus dedos.

Sin saberlo, el niño enfrente de ella sintió de algo en sus dedos. Voltio su mano y vio como las flores brotaron y florecieron de las puntas de sus dedo hacia la palma de su mano. Los dos encontraron un defecto en las reglas de sus kwami's – ellos habían dicho que no se podían mandar mensajes pero no habían dicho que no podían dibujar. Entonces, cuando ellos se encontraban aburridos al medio del día, se ponían a dibujar.

Adrien sonrió cuando vio que todo su brazo iba estar cubierto en flores. El ha notado que su Lady esta bien artística que el quería nada mas que sentarse y verla dibujar por horas.

Adrien sintió suerte por que sus hilos rojos fueron atados a Ladybug. Marinette, al contrario, hasta casi lamento sus lazos con Chat Noir.  

Bạn đang đọc truyện trên: Truyen2U.Pro