15-fifteen

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JinYoung se encontraba en la sala de espera mordiendo las pocas uñas que apenas si tenía. Como único familiar cercano al arquitecto, él había subido a la ambulancia sin siquiera preguntar a los otros dos. Taehyung y Jungkook iban detrás con el auto del azabache. Habían llegado minutos después y los habían dejado esperar con JinYoung gracias a que Taehyung le había pedido al doctor Park que por favor los dejaran entrar allí y éste había accedido de inmediato ante los ojos de preocupación que Taehyung tenía y Jungkook también.

Luego de silenciosos y largos minutos, el doctor abandonaba la habitación donde había dejado al castaño. Al salir era inmediatamente abordado por los otros tres.

—Me informaron en el email que SeokJin recordaba a su familia ¿Cómo es posible que…?

—Tranquilo. ¿Qué noticia recibió? —preguntaba Park BoGum.

—Tuve que ver a mi amigo destrozado otra vez por revivir la noticia con la muerte de su difunto esposo —replicaba el pelinegro entre dientes—. En el resumen que me enviaron dijeron que él solo recordaba a su familia, supuse que él sabría sobre su esposo.

Cada que la palabra “esposo” salía de los labios de su amigo, los otros chicos parecían volverse cada vez más chiquitos e insignificantes.

—Si realmente la paso mal por la pérdida de su amado, es muy probable que el subconsciente del señor Kim lo haya “protegido”… —señalaba con comillas—, es algo que a veces no tiene explicación, solo sucede y este fue uno de los caso. Él recordaba a sus padres y el motivo por el cual estaba aquí —BoGum suspiraba—. Yo mismo lo atendí, él estaba realmente bien. No había forma de saber aquello

—Oh créame que él realmente sufrió. Hasta el día de hoy él no supero la perdida de mi primo. Ni siquiera ha vuelto a estar con alguien por sentir que lo engañaba —JinYoung miraba de reojo a los otros chicos—. Él realmente la paso como la mierda.

El doctor suspiraba entendiendo por completo lo que el hombre le decía, pero no había forma de explicarle cómo funcionaba la cabeza de uno en estos casos. Que SeokJin haya suprimido tal recuerdo podía ser totalmente entendible sabiendo lo mucho que había sufrido.

— ¿Él como se encuentra ahora? —preguntaba Taehyung finalmente. Al ver que JinYoung estaba más interesado en quejarse que preguntar sobre el estado actual de su amigo.

El doctor fijaba sus ojos en un Taehyung que estaba intentando mantenerse neutro.

—Él está bien. Fue un pre infarto. Su primero. Estará en observación 24hs y luego podrá salir, ahora está dormido —señalaba—. Podrán llevarlo luego

—Se irá conmigo —afirmaba su amigo, mirando al resto.

Jungkook ya no toleraba la actitud hostil del tipo y no podía contenerse.

—Amigo, nosotros estuvimos con él y estamos igual de preocupados que tú. Se quedara con nosotros, Jin Hyung no se irá hasta terminar su trabajo aquí. Ya lo dejo en claro —replicaba el menor de los amigos con extrema cólera.

— ¿Amigo? —Cuestionaba el Sargento—. No soy tu amigo, niño. Y no me importa lo que SeokJin… —enfatizaba en su nombre de pila—, quiera. Él se irá conmigo de nuevo a Australia, a eso vine, a llevármelo.

Taehyung y Jungkook sentían un horrible nudo en el estómago. El azabache sentía tristeza y Jungkook impotencia. El doctor pedía encarecidamente que por favor guardaran silencio y que no era momento para este tipo de riñas.

—Sargento Park, conozco a estos chicos. Ellos cuidaron muy bien de SeokJin, pero repito él está bien, necesitaba compañía por si algo como esto sucedía. Ellos actuaron rápido al contactarme. Fue algo brusco pero él esta-…. —en ese instante una enfermera aparecía y se sorprendía al ver al doctor Park aún frente a la puerta de SeokJin.

—Enfermera Lee…

—El paciente de esta habitación está despierto y llamando —mencionaba la chica.

BoGum había visto la reacción de los presentes y alzaba sus manos para pedir que mantuvieran la calma, él saldría con las noticias de si podrían entrar a verlo. De inmediato volvía a la habitación y se encontraba con un Seokjin con rostro de pocos amigos y sentado sobre la camilla.     

—Me quiero ir —soltaba con garganta seca.

De inmediato el doctor le alcanzaba un vaso con agua, pero era rechazado.

—Señor Kim… No se irá de inmediato. Lo tendré en observación por veinticuatro horas. Está estable pero tuvo un pre infarto y no me gusta tomarme esas cosas a la ligera.

SeokJin dejaba caer su cabeza hacía atrás y suspiraba de forma sonora.

—Si necesita hablar al respecto, puedo pedir que la doctora Chan, venga a verlo

—No. Estoy bien —respondía en tono duro.

—Tengo entendido que recordó un suceso muy fuerte. Entiendo que puede estar reviviendo todo casi en carne viva-….

— ¿Usted perdió a la persona que amaba? Y me refiero a perderla por una enfermedad terminal. No perderla porque cambio de pareja —replicaba.

El doctor agachaba la cabeza y negaba—. Por eso creo que la doctora Chan será de mucha ayu-…

—No lo será. Ya pase por eso, estoy bien.

BoGum suspiraba y exclamaba—. ¿Hay algo que quieras preguntarme?

— ¿Taehyung y Jungkook están afuera? —preguntaba.

—Ambos. Incluyendo el sargento Park —mencionaba el doctor—, pero por ahora podrán entrar de a uno

— ¿Puede pedirle a Taehyung que entre? —preguntaba SeokJin.

El doctor no quería verse tan sorprendido como lo estaba, pero no podía evitarlo. Sus cejas se habían elevado en demasía por ver que el apuesto hombre quería ver al chico con el que había intentado más de una vez pactar una cita de índole romántico. No sabía si culparse a él mismo o a su gato siamés por la falta de encanto.

— ¿Doctor? —Insistía SeokJin—. ¿Puede llamar a Tae?

El joven médico salía de su letargo y asentía. Abandonaba la habitación y de nuevo los tres se venían sobre él.

— ¿Puedo entrar ahora, doctor Park? —Mencionaba JinYoung—. Estoy seguro que quiere verme a mí —otra mirada de reojo a los muchachos.

Jungkook apretaba su puño y la mano de Taehyung se posaba sobre esta, dándole una mirada de sumo cuidado para que no comenzara otra discusión. El doctor abría sus ojos y los miraba a los tres en silencio para luego reaccionar.

—Sí, Sargento. Él quiere verlo a usted —exclamaba haciéndose a un lado para que éste pudiera pasar y así lo hacía. Ambos chicos suspiraban y BoGum no estaba seguro si decirles que SeokJin preguntó por ambos o que solo quería ver a uno de ellos.

—BoGum ¿De verdad está bien? —preguntaba Taehyung suavemente.

—Lo está. Él preguntó por ambos —dijo de inmediato, notando que el rostro se les iluminaba a los dos chicos—. Decidan quien entrará luego, si es que él está de acuerdo.

Taehyung y Jungkook de inmediato cruzaron miradas incómodas y balbuceaban palabras que no afirmaban nada. No sabían si ceder su lugar al otro o no, y eso colmó la paciencia del Doctor.

—Tae, tengo treinta minutos de descanso —soltaba de repente, haciendo que ambos presentes dejaran de balbucear y pusieran sus ojos en él—. ¿Quieres beber un café conmigo?

Taehyung no estaba seguro al respecto. De hecho había planeado quedarse allí toda la noche, así tuviera que aguantar al Sargento mirándolo con desagrado. Jungkook palmeaba su hombro.

—Ve con él. Lo veré yo y luego por ultimo vas tú. Tendrás más tiempo —mencionaba el pelinegro—. Seguro y quiere verte más a ti

—Kook…

—Está bien, ve con el doctor y acepta su café de una jodida vez. Luego vuelve —exclamaba el pelinegro—. Ambos sabemos que Jin Hyung querrá verte.

Taehyung no sabía cómo sentirse al respecto. Por primera vez notaba que esas palabras le pesaban a Jungkook y sentía la mirada del doctor quemado su sien. Quien se había esforzado en no escucharlos, pero lo había oído todo.

—De acuerdo. Me quedaré toda la noche así que me vendría bien un café —mencionaba Taehyung y ahora el rostro que se iluminaba era el del doctor.

Ambos se marchaban y Jungkook quedaba solo con una ansiedad y culpa terrible. La forma en la que Jin había caído al piso, sufriendo por su esposo fallecido era una imagen no muy grata de recordar sin que te rompiera el corazón.

Mientras tanto en la habitación, SeokJin había esperado ver al azabache pero sin embargo su amigo era el que aparecía.

—No pedí por ti, Lucky ears —replicaba SeokJin.

—Ya me recuerdas —respondía al haber escuchado el apodo que Jimin le había dado y por él mismo era llamado de esa forma—. No quiero ni saber por cuál de esos dos estabas esperando —soltaba con tono serio el otro muchacho—. Lo siento, Jin

—No lo hagas. No tenías como saberlo —mencionaba SeokJin—. ¿Te harás el Sargento duro o me darás un abrazo?

De inmediato el chico recaía sobre los brazos de su amigo para estrecharlo y ser correspondido, sin dudas a diferencia del inicio. No solo el recuerdo de Jimin había vuelto, todo estaba en su lugar de nuevo. Junto con sus miedos, dudas y cicatrices jamás sanadas. Como el viejo SeokJin amargado que solo vivía para trabajar y esperar por algún día, finalmente, dejar este mundo de viejo o quizás de algún accidente o lo que fuera que le arrebatara la vida mediocre y gris que tenía. Un tipo que robaba oxigeno aún sin tener muchas ganas de seguir en el mundo de los vivos luego de haber perdido casi de forma literal su otra mitad. La razón por la cual SeokJin era feliz, esa razón ya no estaba hacía tiempo y el castaño solo era una sombra de lo que solía ser.

Y de nuevo esa sombra parecía haber vuelto.

Impresionada estoy de que este capítulo haya salido tan rápido en cuestión de minutos frente a la computadora.
Si ven errores avísenme y luego corregiré 😚

Con amor niñita Nany 💜

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