30- thirty

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TaeHyung no había dicho su nombre, Jungkook lo había hecho, pero él no lo había negado ni confirmado. Solo habían continuado con su desayuno, para luego transladarse al living con un poco de ruido por parte de la televisión.

Por otro lado, Jungkook, finalmente había compartido sus buenas nuevas también con su mejor amigo, quien, como era de esperarse, estaba tan orgulloso como lo estaba SeokJin.

Ay, el pelinegro se sentía como un niño con padres separados o como cuando eres amigos de las dos partes de una relación recientemente rota, pero SeokJin y TaeHyung no habían tenido ninguna relación. Solo habían tenido un atisbo de algo que podría haber sido o no bueno, pero vaya a saber, ninguno tenía el coraje de dar el paso y al fin de cuentas, no tendría sentido. Ellos tenían vidas separadas del arquitecto y SeokJin estaba decidido a no dar ningún paso con respecto a ambos hombres.

Ya había tomado lo que había podido cuando su cabeza era una nebulosa de recuerdos desordenados y había tomado otro poco cuando su corazón y mente estaban bajo la confusión y el encanto de ambos amigos. Luego de haberse ido, SeokJin se había propuesto no volver a tomar nada más y lo había hecho. Esas casi dos semanas con Jungkook, habían sido días y horas compartidas con un amigo. Era tan extraño porque su único amigo en Australia, verdadero amigo, era JinYoung y él no se había vuelto a abrir para nadie más ni siquiera en amistad, por eso Namjoon aún estaba remándola en ese sentido.

TaeHyung aclaraba sus garganta, finalmente con la curiosidad carcomiendolo.

- ¿Cómo ha estado? -preguntaba débilmente.

Jungkook alzaba la cabeza.

-Él está bien, muy consumido en el trabajo... -respondía.

TaeHyung asentía, quería hacerle muchas preguntas más, pero no se sentía con el coraje suficiente. Pero Jungkook lo conocía tan bien.

-Esta semana estuve visitándolo en su apartamento y almorzamos juntos una que otras veces -mencionaba-. He hecho una lista de cosas que podrían gustarle para hacer juntos y que sean divertidas para que se lleve unas buenas memorias y para que recuerde que la vida se hizo para vivirla. No para estar marchito. Aunque no sé si decidir entre llevarlo a un parque de diversiones o al cine -exclamaba mirando al techo.

TaeHyung mordía su belfo inferior, Jungkook estaba haciendo algo bueno. No estaba intentando meterse debajo de sus sábanas, ni mucho menos, a decir verdad, le sorprendía que no estuviera aprovechando el tiempo para seducirlo.
Nuevamente se perdía en sus pensamientos, pero añadía:

-Ni siquiera nos recordará cuando se vaya -mencionaba TaeHyung-. Toda su vida está en Australia, no creo que hagamos ninguna diferencia si él no tiene ganas de salir del pozo de los recuerdos y avanzar.

Jungkook y por poco lo golpeaba, pero había optado por apretar sus dientes, ignorar sus palabras y continuar con su trabajo, mientras decidía cambiar de tema-. Hablamos mucho -soltaba, luego miraba a TaeHyung-. Le gusta hablar sobre Jimin ¿lo sabías?

TaeHyung se encontraba junto a Jungkook mientras miraba sin mirar la televisión y el pelinegro hacía su trabajo. Esa espontaneidad y familiaridad estaba allí, volviendo entre ellos de a poco. Jungkook no quería arruinar el clima, pero iba a sacar a TaeHyung de su zona de confort para enfrentar esta situación de una vez.

-No hablé mucho sobre su difunto esposo -TaeHyung se encogía de hombros-. Le dije que debía hablar con un psicólogo sobre él... Para soltarlo o alguien conocido de ambos -respondía, mirando sus pies.

Jungkook lo observaba-. Jimin -exclamaba.

TaeHyung alzaba la mirada confundido-. ¿Qué?

El pelinegro se sentaba erguido-. Su esposo, se llamaba Jimin

-Lo sé -respondía, por poco y poniéndole los ojos en blanco.

Jungkook había ignorado eso-. Me dijo que en Australia casi nadie quiere tocar el tema con él, lo tratan con pinzas y eso lo hacía sentir como si quisieran negar que Jimin siquiera había existido -TaeHyung asentía a su respuesta, se le veía incómodo-. Ahora entiendo porque no hablaba contigo de él -mencionaba Jungkook.

El azabache fruncia sus cejas-. ¿Qué quieres decir con eso?

-Quiero decir que parecieras negarte a la idea de que comparta contigo un poco de lo que vivió con el hombre que amaba -mencionaba casi en un tono duro.

TaeHyung se sentía atacado y ofendido. ¿Qué significaban las palabras de Jungkook?

-¿Estás insinuando que estoy celoso de un~...? -TaeHyung apretaba sus dientes y desviaba la mirada cuando las cejas de Jungkook se elevaban, dándole una mirada suspicaz-. No seas ridículo.

Jungkook resoplaba-. No estoy diciendo que estés celoso de su difunto esposo, pero quizás deberías ser más "oídos" con él, dejarlo que te cuente y se abra contigo. Tendría total sentido que quisiera hablarlo contigo, lo ha hecho conmigo, pero de una forma diferente -mencionaba.

TaeHyung lo miraba con sus ojos entrecerrados-. Le ofrecí ser solo oídos para él y no parecía muy contento al respecto -respondía-. Y explicate ¿quién eres?. Estás demasiado "serio" es extraño en ti.

Jungkook lo miraba y sonreía-. Lo sé, me ha llegado la madurez, pero ni tanto -mencionaba divertido, no quería otra pelea o malentendido con Tae, debía relajarse-. Me prometí que lo ayudaría a avanzar a superar. A recuperar el color y no verse marchito, como si estuviera en una película en blanco y negro. Necesita un amigo, seré eso y daré lo mejor de mí para que él se vaya renovado de aquí ¿o crees que solo fue coincidencia que nos conociera?

TaeHyung alzaba sus cejas sorprendido-. Creo que fue mala suerte -se mofaba y justo en ese entonces, recibía un golpe de Jungkook-. ¡Oye! eso dolió.

-Eres un bebé

-Y tú eres tan infantil -acusaba.

Jungkook lo miraba con una mirada descreída-. Yo no tengo el papel de infantil esta vez, cosita... Y volviendo al hombre nuevo que deseo hacer de SeokJin... -suspiraba-. Tienes que ayudarme.

TaeHyung se tensaba por completo a su lado-. ¿De qué hablas?

Jungkook se giraba a verlo con un rostro casi enrojecido-. ¿Qué no piensas hablarle de nuevo?

TaeHyung se encogía en su lugar-. Pero, no creo que él quiera verme. Aparte ¿qué diferencia haría? -su voz era débil, su garganta se había cerrado y Jungkook lo miraba, negando con su cabeza sutilmente.

-Si no creyeras que haría ninguna diferencia, no lo hubieras preguntado con tu voz a punto de quebrarse -recalcaba.

TaeHyung apartaba la mirada-. Quedamos en que aceptaba lo de ustedes

-Ahí vas de nuevo -Jungkook tiraba su pincel en el tacho de agua colorida-. No hay un "nosotros" al menos no de la forma en la que tu tontita cabeza está imaginando.

TaeHyung lo miraba con esos ojos de cachorro perdido-. Pero te gusta Jin Hyung -susurraba.

Jungkook suspiraba-. Lo sé. Me gusta, mucho -TaeHyung relamia sus labios y asentía, sin decir nada más-. No hagas eso.

Tae alzaba sus cejas confundido-. ¿Qué cosa?

-Lo hiciste cuando nos gustaba Choi Young-jae -exclamaba-. Ese imbécil tenía una fascinación con ambos. No fue algo intenso, pero el tipo te gustaba, igual que a mí y metimos la lengua en esa boca más de una vez hasta que decidiste que yo le gustaba más y te alejaste.

TaeHyung reía secamente-. Pero si le gustabas más -mencionaba-. Él era divertido y salvaje, encajaban bien. Yo era el aburrido -mencionaba, bajando la mirada.

Ahí estaba, surgiendo una conversación que nunca habían tenido porque la verdad era que aquello estaba en el pasado enterrado y como Jungkook había mencionado y TaeHyung lo sabía, no había sido nada intenso, pero tenía sentido que el asunto saliera a colación, teniendo en cuenta que nuevamente habían dejado encantado a alguien más y se veían enredados en otro triángulo.

-Era un idiota, muy bueno en la cama por cierto, pero a lo que voy es que estás equivocado y pareciera que te rehusas a verlo esta vez -mencionaba.

TaeHyung relamia sus labios-. Si vas a decir que yo le gustó más~...

-Esto no se trata de gustar, no tenemos quince, carajo -mencionaba Jungkook-. Conectaste con él. Así de simple y quizás si, también le gusto yo, de hecho creo que sí le gusto -admitía sincero y TaeHyung apretaba sus labios-. Pero es diferente TaeHyung, simplemente lo es. También me gusta, pero no lo sé, hombre... -suspiraba agotado y pasaba una de sus manos por su rostro, cansado por tener que llevar el mando de esta charla seria.

TaeHyung volvía a encogerse en su lugar, parecía un cachorro herido al que tenían que tratar con suma delicadeza.

-Mira, una vez te dije que te arriesgaras, me hiciste caso y saliste herido -exclamaba Jungkook con calma-. No voy a decir que te arriesgues de nuevo. No voy a tratarte de cobarde como ya lo hice y pido perdón por eso -mencionaba con su mirada en cualquier parte, menos en TaeHyung-. Solo digo que para pasar al siguiente libro, debes terminar la historia que ya comenzaste -añadía.

TaeHyung abría sus ojos enormemente, recordando lo que BoGum le había dicho, era exactamente igual, bueno, no igual pero similar.

-Es la segunda vez que me lo dicen -mencionaba Tae. Jungkook fruncía el ceño-. BoGum, también me dijo que para dar vuelta la página, debo terminar de leer el capítulo. Se refería a ti y a SeokJin Hyung.

Jungkook asentía-. ¿Se te insinuó ya?. Lo vi cuando fui con Jin Hyung a su chequeo de rutina -mencionaba.

-Si, me lo dijo -respondía, luego relamia sus labios, suspiraba y miraba a Jungkook-. Me dijo que le queda poco y nada para volver a Australia.

El pelinegro ponía una mirada abatida y asentía-. Él está a punto de volver, deberías cerrar esa historia. Te lo debes y se lo debes ¿o quieres que lo último que él recuerde y tú también, sea la última vez hace casi dos semanas cuando estuvo aquí y te escapaste de su vista sin siquiera mirarlo a los ojos?

TaeHyung sentía su pecho contraerse, habían sido casi dos semanas horribles. No hablaba con Jungkook y no había vuelto a ver a SeokJin y éste ya tenía su tiempo contado en Corea. Realmente no quería que el último recuerdo fuera él huyendo de la mirada y la presencia del arquitecto. No sin un último abrazo o un último beso.

TaeHyung necesitaba cerrar ese capítulo de su vida, sino tendría otro tipo de "¿Y si?" en sus recuerdos.

-Creo que el parque sería una genial idea para que él pueda divertirse y recordarnos con una sonrisa cuando vuelva a Australia -mencionaba TaeHyung, apoyando esa idea en la lista de que haceres que Jungkook tenía para seguir al pie de la letra y lograr hacer de SeokJin Kim, un hombre nuevo.

- ¿Eso significa que saldrás con nosotros? -preguntaba el pelinegro con una auténtica sonrisa. TaeHyung le devolvía una más tímida y asentía.

Si, él le pondría fin. Se quitaría la carga y el peso de la tristeza y la incertidumbre. Y le daría a SeokJin un buen abrazo y una sonrisa del tipo "Boxy" que merecía recordar de él y no al chico que había huido de su presencia semanas atrás.

Estamos close to the end. Probablemente dos capítulos más. Si ven errores de tipeo, que Dios las ayude, porque Beto a saber cuándo podré corregir 😅

Perdón no fue largo...

Con amor Niñita Nany 💜

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