Leila POV

Creer que Cristian reaccionaría bien al encontrarme en su cama fue un error, creí podría manipular su cuerpo para poder tener sexo con él fue un fiasco, creí que su cuerpo me recordaría, pero no fue así. No podía creer que la mosca muerta de Anastasia siendo mucho mas joven que yo pudiera manipular sexualmente a un hombre como Cristian. Fui muy estúpida al creerlo, si no fuera por los Hyde o los Clayton no lo hubiese intentado.

Ahora voy de camino a la estación de policía para ser acusada de violación a la propiedad pública, drogar a Cristian con intenciones de asesinarlo o quien sabe que, el odio que reflejaron sus ojos casi me mata, pero como me han tratado los haré pagar de alguna manera voy a escapar y juro que todos me las van a pagar.

La patrulla choca con algo, lo que la hace detenerse, es ahí donde el infierno estalla, me protejo de las balas, pero lo extraño es que sólo es en la parte delantera, miro por la ventana, hay cuatro hombres, dos a cada lado de la parte delantera y sueltan las ráfagas de balas, sus armas son pesadas. Dejan de disparar al terminárseles las cargas. Uno de ellos se dirige a la puerta, la abre revisa a los oficiales, hasta encontrar las llaves, sale y se dirige a la puerta donde estoy, la abre, extiende su mano instándome a salir y lo hago un poco desconfiada.

-No le haremos daño, nos están pagado para sacarla de esta situación – Me informa uno de ellos.

- ¿A dónde me llevan? – Pregunto de vuelta.

-La llevaremos con su salvador- Habla el hombre que me saco de la patrulla.

Nos desplazamos en dos autos por un largo tiempo, hasta que llegamos a un portón con grandes rejas, la misma es abierta por un portero automático, entramaos y soy conducida por un camino empedrado hasta una imponente mansión, el auto se detiene frente a la puerta principal.

-Su benefactor la espera. Nosotros nos vamos ya nos han pagado – Salgo del auto como me lo indican, dirigiéndome dentro de la casa, el mayordomo me abre la puerta y puedo apreciar el lujo que hay en el lugar.

-Bienvenida Leila- Me recibe Thomas Hyde.

-Thomas. Te agradezco ya ayuda- Le agradezco el rescate, sin embargo, no sé qué planes tiene conmigo.

-No hay nada que agradecer. Sólo ayude a alguien que esta de mi lado.

- ¿A qué te refieres con eso? –

-Bueno que al separar a Grey de Anastasia o de sembrar la duda entre ellos, le dejarás el camino libre a Jack. Suena tonto pero el idiota de mi hijo a puesto sus ojos en ella desde hace tiempo. Pero lo mío es más financiero –

- Yo tengo mi punto muy claro, no obstante, eso se fue a la mierda hoy. ¿Cuál es el tuyo? – Pregunté con curiosidad.

-Steele, descubrió, me saco de su compañía. Por lo que le toca a mi hijo ganarse el corazón herido de la niña mimada de Steele – Ríe con suficiencia, pero tengo que sacarlo de su error.

-No creo que eso sea, posible. Cristian y su padre saben, no sé cómo, que tu hijo fue el que drogo a Cristian y luego me dejo entrar – Lo veo palidecer.

- ¿Cómo se enteró? -

-No tengo idea, como se enteró-

-Ni idea. Lo mejor es que vayas formulando otro plan si tu interés hacerte con la fortuna Steele. La ventaja que tienes es que hay dos mujeres a las que puedes seducir, si faltase el viejo. También toma en cuenta que Paul Clayton esta tras Anastasia –

-Jack es un pendejo se dejo descubrir y has dado en el clavo con las mujeres Steele. Eso da paso a plan B, el cual pondré en ejecución en algunos días. Esperaré que las aguas se calmen y lo mandaré a ambos fuera del país en un avión privado. Vamos a comer algo, vas a descansar que salen temprano, ahora sólo falta buscar a Jack –

Al día siguiente viajamos a las Islas Caimán donde Thomas guado el dinero desfalcado a las empresas Steele, por ahora estoy tranquila porque tengo una fuente de ingresos sin esforzarme ahora lo que queda es disfrutar, lo que no me agrada es estar escuchando a Jack quejarse, eso le paso por idiota.

Lo único que me hace más feliz es que Cristian pagó la humillación que me hizo, la muerte de Anastasia es mi acto resarcitorio a su desprecio.

Koby POV

¡IMBÉCIL! Ese debería ser mi primer nombre, cuando descubrí que la inteligente Anastasia Steele tenía novio, me lleno de furia. Me preguntaba constantemente ¿Por qué las mujeres como ella siempre estaban comprometidas? O en alguna relación sentimental, me había obsesionado con ella. En vez de ser gentil con ella, alabarla, piropearla; hice todo lo opuesto, la menosprecié, la humillé y ahora que se ha ido con su ahora prometido me doy cuenta de mi error.

He estudiado el crecimiento de su compañía y en este tiempo desde que se marchó a su país, su empresa ha crecido un veinticinco por ciento, me he decepcionado de mi mismo, por lo que he decidido dejar Centurian Engineering y dedicarme a la empresa de mi familia. Por suerte mi padre decidió abrir una subsidiaria aquí en Londres.

Sentado en mi escritorio me siento sólo, la satisfacción sexual ha sido satisfecha, pero mi vida sigue estando bacía, miro la fotografía de Anastasia que extraje de su expediente laboral, es tan hermosa e inteligente, siento envidia de Grey el puede tenerla todas las noches, invadir sus sueños y compartir con ella la esperanza de formar una familia. La he mandado a vigilar, soy un masoquista y un puto acosador de una mujer que no me soporta.... Emito un gran suspiro de tristeza, en este momento mi puerta se abre de golpe dejándome ver mi jefe de seguridad.

-Te tengo malas noticias – Me dice muy pálido.

- ¿Qué le ha sucedido a la señorita Steele? – Le pregunto poniéndome de pie.

-Ha sufrido un atentado, esta al borde de la muerte – Me siento de golpe.

- ¿Qué más sabes? – Él me cuenta lo que sabe.

-Sólo pude obtener esa información de los medios, el resto se ha mantenido bajos las sombras por ser hija de uno de los empresarios más influyentes de Estados Unidos-

Vasili busca en su table más información de Anastasia, en algún momento su rostro se frunce y su cabeza niega.

¿Qué has encontrado? - Pregunto ansioso.

-Uno, Industrias Steele, abrirá una subsidiaria aquí en Londres y ellos la pasarán aquí por un tiempo. Y Lo más duro es que lo hacen por que tu amor platónico no supero las heridas recibidas en el atentado – Tomo mi cabeza con ambas manos siento que me va a explotar.

-Dicen que la han cremado y que se trasladaran aquí mientras superan la muerte de su hija y encuentran a los culpables –

-Consígueme el número de móvil del señor Steele –

-También hablan de su prometido y sus amidos, están devastados –

-No quiero estar en sus zapatos. Sabes él realmente la amaba y como no amarla –

-Si, era muy bella, vi una foto de ella –

-Búscame el número que te pedí se lo pasas a Sarah para que me comunique-

Dos horas después he hablado con Raymond Steele, lo escuché muy calmado, para situación por la que está pasando al ser Anastasia su única hija, me sorprendió al manifestarme que desea reunirse conmigo cuando se hayan instalado en la mansión familiar en Chelsea a lo que accedí de buen gusto, será una buena alianza, asociarme con su empresa ya que me abrirá también el mercado americano.

Dos semanas después estoy ingresando a la mansión Wilks, que le pertenece a la familia de la esposa de Raymond, Carla Wilks, es impresionante, los jardines bien cuidados y la estructura mantiene su diseño original del siglo diecisiete.

El mayordomo me guía por el gran salón y luego a su despacho, él esta sentado en su despacho, con una montaña de papeles.

-Señor Steele- Habla el mayordomo, haciendo que el aludido levante su cabeza de los documentos.

-Señor Novikov, bienvenido. Disculpe que lo reciba aquí y no en la empresa, estoy tratando de llegar a un acuerdo con mi cuñado en usar al menos una planta del edificio de su empresa- Me explica contrariado.

-Señor Steele, para mi es un honor estar aquí después de mi actuar con su hija. Yo quiero explicarle que sucedió...-

-No es necesario- Me corta.

-Si lo es. Al menos le debo eso- Trato de conciliar con él.

-Bien, explíquese -

-Yo estaba enamorado de su hija, cuando me enteré de que .... – Le cuento todo desde el principio y me sorprende verlo tan calmado.

-No estoy de acuerdo con lo que hizo, pero lo entiendo- Me tranquiliza su pensar.

- ¿Cómo lo tomó Grey? –

-Muy mal y a su familia también, mi hija se hace querer señor Novikov-

- ¿Se hace querer? – Pregunto intrigado. Él se levanta y abre la cortina de su despacho, dejando ver un inmenso patio trasero.

-Acérquese, voy a compartir con usted nuestro secreto, espero que los sentimientos que usted dice sentir por mi hija sean ciertos. Porque voy a necesitar de su ayuda- Me acerco a la gran ventana, llevándome la mayor de las sorpresas.

- ¿Cómo? - Lo único que sale de mi boca.

- Si ella esta viva, tiene una amnesia, de un año hasta el momento que despertó en el hospital. Creemos que el atentado iba dirigido a mí, puesto ella conducía el auto... - Steele me cuenta lo sucedido del accidente y la sospecha de quien es el que orquesto todo.

- El Asunto es que mi hija tiene casi cuatro meses de embarazo y no recuerda quien es el padre de o cuando fue concebidos, Cristian hace muerta a Ana. Así que no sabe nada de los bebes- Me explica.

- ¿Y yo como encajo en esta historia –

-Muy perspicaz Koby. Quiero que se haga pasar por su novio, mientras todo esto se resuelve. Se que cuando recupere la memoria se pondrá nuclear y nos mande a la mierda a todos. Pero por el momento su seguridad es lo más importante. Entiendo que será difícil amar a dos niños que no son propios. Sólo quiero apelar a su amor por mi hija. Son mi tesoro, el patrimonio de mi familia, lo más valioso que posees-

-Será muy difícil, no conozco mucho de su familia, de ella, su relación con Grey y sus amigos –

-Cuando Ana se vino a estudiar a Londres, fue para escapar de Grey, le había hecho un desplante como muchos otros... - Nos la pasamos todo el día en su estudio hablando de la vida de Ana, si acepte la propuesta de Raymond, porque tengo la oportunidad de ganarme a Ana durante este tiempo y si, amare a esos pequeños como si fuesen míos. Se oyen unos toques en la puerta nos interrumpen.

-Señor Steele la cena esta lista- Informa el mayor domo.

-Bueno Koby. ¿Preparado para ver a Anastasia? –

-Si vamos a ver como reacciona a mi presencia – Digo levantándome del sillón

Salimos del despacho del ahora suegro rumbo a encontrarme con la mujer que amo.

-Buenas tardes mis bellas damas, tenemos visita – Anuncia Raymond.

-Buenas tardes, señora Steele. Buenas tardes, Anastasia-

Ambas me miran inquisitivamente, esto va a ser muy difícil.

Bueno espero que les guste este capítulo, sé que me deben de odiar, pero todo es un medio para un fin, tengan paciencia.