Maratón en el pasado parte final.

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"Tom era mi amigo"

Enero 13 de 1980.

Diana había sido llamada de nuevo por el señor tenebroso, desde aquella vez en que le ayudó a descubrir al infiltrado Diana se había convertido en un miembro del círculo cercano a Lord Voldemort y el la llamaba "Su consejera"

Diana entró cubriéndose más con su abrigo negro debido al frío y sin tocar, ya acostumbrada a ser de las que mandaba en aquel lugar, entró a la sala de reuniones de Voldemort.

-Mi Lord- Saludó haciendo una revencia.

-Diana, que alegría que vinieras tan rápido, siéntate querida no me gustaría que en tu estado este de pie -

Ante el asombro de todos Lord Voldemort dejó que Diana ocupara la silla a su lado derecho, la que en su día utilizó Bellatrix.

-Mi Lord, disculpe mi pregunta, pero ¿A que se debe su llamado? - Preguntó Lucius quién ya estaba en su silla.

-Esta noche me han entregado al fin la ubicación de los Potter, quienes como muchos sabrán tendrán al bebé de la profecía- Informó

-Mi señor - Llamó Diana extrañada y el la vio - ¿Quién le ha dado tal información? Si se puede saber-

Diana desconfió de inmediato ella sabía que Lily y James estaban bien protegidos porque ella se había encargado de mandar a un fiel de ella a cuidarlos.

Pero ¿Quién los traicionaría?

-Un traidor en sus filas, Peter Pettigrew-

Diana supo de inmediato que esto podría ser una trampa, Peter se había unido hace poco y por muy rata que fuera el jamás se arriesgaría a perder la protección de Dumbledore.

-Quiero que se preparen, iremos esta noche - Anunció - Todo retirénse, Diana quiero hablar contigo -

Todos los mortífagos salieron pero antes de irse Regulus, Lucius, Alex, Severus y Evan vieron a Diana para asegurarse que estaba cómoda.

La mujer asintió y ellos se fueron, más unos pocos mortífagos fieles a quien llamaban "La Lady" se quedaron a cuidar a su señora.

-¿Hablé en parsel? - Les preguntó Voldemort.

-Por favor salgan - Pidió Diana.

Los mortífagos se fueron y así ella se aseguró de que Voldemort no supiera que dentro de su organización ella tenía más poder del que el imaginaba.

-¿Puedo saber el motivo de tus dudas Diana? - Preguntó Lord Voldemort una vez se quedaron solos.

El hombre se sirvió una copa de vino y sirvió un jugo a Diana.

-Verás Tom- Dijo llamándolo por su nombre con valentía, pues era la única que lo hacía, pero sólo en privado.

Voldemort dejó la copa de jugo frente a Diana y se sentó en su silla de siempre.

-Me parece extraño que ese hombre se arriesgue a perder la protección de Dumbledore, sabe que lo matarían si los traiciona - Recordó ella.

-¿Estas diciendo que le teme más a Dumbledore que a mi? - Preguntó divertido el de ojos rojos.

-Sabes que no, a lo que voy es que no quiero que salgas herido Tom-

Diana sabía bien que se había ganado el respeto de Voldemort al preocuparse por el y tratarlo como si no fuera alguien temido, sino respetado.

-No debes preocuparte mi Lady. Para mañana todo cambiará y seremos los ganadores de esta guerra -

-Solo prométeme que vas cuidarte y que vas a traer a mi esposo y amigos a casa- Pidió la castaña.

-Eso no será problema, sé lo que sientes por ellos así que los enviaré a otra misión ¿Entendido? - Prometió

-Bien ¿A qué hora iremos? -

-¿Iremos? Ni hablar, estás embarazada. Llevas a un heredero en tu vientre no vas a salir de aquí hasta que vuelva, vas a quedarte aquí protegida por mis fieles- Ordenó el hombre.

En los últimos meses Diana de había dado cuenta que muy en el fondo Voldemort tenía corazón y que realmente sentía aprecio por ella así como ella había aprendido a apreciar lo que él hacía por ella.

Le daba la mayoría de cosas que pedía, le hacía favores, protegía a Regulus y los demás y realmente era un buen amigo cuando se lo proponía.

Así que muy en el fondo ella sí lo quería un poco.

-Bien, te veré esta noche para la cena de la victoria...- Diana habló con algo de tristeza

-¿Qué tienes? -

-Nada... -

-Habla Diana Black - Ordenó Voldemort con tono autoritario.

-Lily... Lily Potter - Dijo finalmente - Podrías, por favor, asesinarla rápido, ella no es tan mala - Pidió

-Bien, pero no prometo nada. Ahora ve a descansar-

-¿Qué pasará con el niño? - Preguntó de pronto Lady Black.

-Te habías tardado en preguntar, sé que te preocupas por mí hijo. Él se irá con Rabastán, el lo va a proteger mientras Rodulfus cumple una misión que le encargué - Explicó

-Bien -

Diana se levantó y se dirigió a la sala para buscar a uno de sus fieles.

-Tyler - Llamó y el hermano menor de Evan la vio.

-Mi Lady -

-Si algo sale mal esta noche irás a Hogwarts con un permiso que te voy a redactar y traerás a mi hijo- Ordenó

-Entendido mi Lady -

El hombre siguió a Diana hasta el estudio donde ella escribió el permiso y se lo dio.

Las horas pasaron y la noche cayó. Regulus y Lucius fueron enviados junto a Rabastán a proteger al heredero quien iría a París con Rabastán.

Alex y Severus fueron enviados junto a Evan, Barty y Rodulfus a sacarle información a los Longbottom.

Diana se despidió de Voldemort con una sonrisa cuando este y sus mortífagos se fueron a asesinar a los Potter.

-Te ves nerviosa- Comentó Narcissa quién había sido traída a la mansión por protección.

-Lo estoy, algo anda mal Cissy -

-Todo está mal. Zabi esta siendo cuidada porque traer a Blaise al mundo la dejó débil, la esposa de Alex acaba de tener a su hijo y enfermó, tu y yo estamos aquí encerradas y Alana esta en quien sabe donde con un embarazo secreto - Contestó la rubia

Diana la abrazó y ella le correspondió mientras sus pequeños vientres chocaban entre si.

-Ya han pasado dos horas... - Murmuró Cissy cuando se separaron.

-Ellos van a volver o los voy matar-

Justo cuando Diana terminó de decir eso Lucius y Regulus entraron por la puerta, estaban algo mojados por la lluvia, pero estaban bien.

-Mi amor - Diana corrió hasta Regulus y el la abrazó.

-Todo esta bien mi reina - Aseguró el Black con una sonrisa.

Regulus se agachó y besó el vientre de su esposa para luego volver a abrazarla.

-El viaje estuvo tranquilo - Informó Lucius después de abrazar a Narcissa.

-Dejamos a Rabastán y al bebé en la frontera y volvimos - Siguió Reg.

-Bien, al menos el bebé está a salvo- Murmuró Diana.

-¿Enserio te agrada no? - Preguntó Zabi entrando con un bastón.

El parto de Blaise se había complicado por lo cual la mujer tuvo una cesárea y por eso no se había levantando en una semana, pero ahí estaba la obstinada Victoria caminando.

-¿Qué haces? No camines - Regañó Regulus cargandola al sofá.

-No quería estar sola en esa tétrica habitación - Contestó ella acomodándose.

Las otras dos se sentaron a su lado ayudándola.

-Contesta - Pidió Zabi viendo a Diana.

-El no siempre es malo, solo no tiene alguien que lo quiera y le enseñe a querer- Contestó la señora Black sincera.

Regulus sonrió y abrazó a su esposa.

-Eres demasiado buena para este mundo Diana Black - Le susurró.

Justo entonces Tyler Rosier entró alarmado a la sala y buscó a Diana desesperado.

-Lady consejera - llamó y ella lo vio - Tenía razón, era un trampa... Lord Voldemort a muerto - Informó.

Regulus y Lucius se quedaron en shock mientras que Narcissa y Victoria abrieron la boca.

Diana sintió una lagrima caer y se aguantó el sollozo que quería escapar...
El era su amigo.

-Tom... - Murmuró dolida la mujer y se abrazó a su esposo.

-Esto no es posible - Dijo Lucius alarmado.

-Lo es - Contestó el chico - Mi hermano, Rodulfus y Barty fueron capturados -

Los reyes se levantaron alarmados.

-¿Dónde... - Comenzó Regulus preocupado.

-Nadie sabe de Lord Nott o de Lord Prince - Contestó el joven.

Victoria sintió su corazón irse a su pies y se abrazó a Narcissa mientras lloraba, la rubia hiperventilaba ante la posible captura de sus mejores amigos.

Diana tomó la mano de Lucius y Regulus a la vez que los tres entraban en pánico.

-Vamos a buscarlos - Murmuró Regulus al fin.

-¡No! - Contestó de inmediato Narcissa- No voy a dejar que los capturen también-

Diana pensaba en un plan más rápido de lo que se movía. La mujer corrió a un cofre que sabía que Tom escondía en un jarrón de la sala.

-En caso de emergencia, Diana, vienes aquí y tomas esto ¿Entendido? - Le había dicho el una noche que la invitó a cenar.

De ahí sacó una poción que ella misma había hecho a pedido de Voldemort, su investigación del último año.

Vio que también estaba una carta de que hacer en caso de que algo saliera mal y supo de inmediato que Voldemort al fin había confiado en alguien...

Lord Voldemort le había confiado a ella la protección de su hijo.

-Tomen esto - Dijo dándole a Lucius y Regulus un frasco a cada uno de la poción que creó.

-¿Qué es? - Preguntó Lucius después de tomarla.

-Esto va a ocultar su marca, para siempre- Explicó ella.

La señora Black le dio uno también a Tyler quien la vio agradecido, pues sabía que iba ser interrogado y si lo sabían iría a Azkabán.

-Esto salvará mi vida - Le dijo en agradecimiento.

-Toma eso y ve a Hogwarts por mi hijo, llévalo a casa de Lucius- Ordenó Diana.

Tyler Rosier cumplió inmediatamente la orden saliendo de ahí corriendo.

Los mortífagos que no habían sido capturados comenzaban a llegar preguntando si era verdad.

Diana sabía que no podía darle la poción a todos, pues sólo había hecho 10 frascos.

Despachó a todos los que pudo rápidamente con ayuda de Regulus y Lucius mientras Narcissa cuidaba de Zabi.

Justo cuando sólo quedaban dos mortífagos confirmando su historia de que estaban juntos en caso de interrogatorio la puerta se abrió.

Dos heridos entraron.

-¡SEVERUS! ¡ALEX! - Llamó Diana

Regulus y Lucius corrieron hasta sus amigos y al ver que no podían sostenerse de lo heridos que estaban los cargaron.

-¡TRAIGAN A UN SANADOR AHORA! - Exigió Diana corriendo tras ellos.

-No es necesario- Dijo Narcissa entrando.

Ella había dejado a Zabi dormida y volvió a tratar de ayudar.

La mujer hizo que Regulus y Lucius dejarán a los heridos en un sofá y comenzó a cuidar de ambos.

-Lucius ve a casa y trae mi maletín ahora- Ordenó la mujer.

-Sí claro cariño -

Lucius desapareció y apareció después de unos minutos con el maletín de sanación de su esposa.

Narcissa curó en cuestión de unos minutos a ambos Lord's

-¡Alex! ¡Sev! -

Zabi se había levantado de donde Narcissa la había dejado dormida y llegó hasta el ojiverde corriendo a como pudo.

-¿Estas bien? -

-Todo bien linda - Contestó cansado el Nott.

Victoria dirigió su mirada a Severus y se acercó a besar la coronilla de su mejor amigo.

-Eres un idiota Severus ¡¿Cómo le explicaba yo a Blaise que su padrino murió?! ¡O peor! ¡Que fue capturado! -

Severus sonrió a como pudo y tomó la mano de la morena que lo veía con ojos cristalizados.

-Lady Diana - llamó uno de los mortífagos que quedaban

-Habla -

-Deben irse, mi contacto en la oficina de aurores me acaba de decir que vienen hacia acá -

Diana asintió mientras Regulus y Lucius tomaron un herido cada uno.

-Nos vemos en la mansión Malfoy- Dijo Narcissa.

-Bien, Cissy lleva a Zabi - Pidió Reg- Tú, no me importa quien seas, lleva a mi esposa a la mansión Malfoy segura o te voy matar - Ordenó

Lucius entró a la chimenea cargando a Alex, luego fue Regulus cargando a Severus, Narcissa y Zabi lo siguieron y ya por último Diana entró con la caja de madera en sus manos.

Justo en ese momento empezaron a llegar los aurores.

-Váyase mi Lady - Pidió el mortífago mientras lanzaba hechizos a la puerta.

Diana habló alto y fuerte "Mansión Malfoy" y vio con cara de culpabilidad al hombre antes de irse.

Salió en aquella casa que ya era tan conocida para ella y vio que Narcissa la esperaba.

-Vamos, están en la habitación de invitados- Dijo ella.

Ambas mujeres corrieron hasta el lugar y entraron rápidamente. Lucius y Regulus esperaban frente a la chimenea.

Victoria estaba sentada junto a la cama donde descansaban los heridos.

-Tomen -

Diana se acercó a ambos hombres y les dio la poción para que la bebieran.

-¿Qué es? - Preguntó Alex

-Es para la marca - Contestó Lucius viendo su antebrazo izquierdo totalmente limpio y sin marca.

-Gracias Di, eres una genio - Alagó Sev bebiendo la poción.

Diana guardó la caja en su bolsita con un hechizo de expansión y se decidió a cumplir la última voluntad de Voldemort.

Ella ocultaría a Rabastán y al hijo de quien fue su amigo.

-Amo-Habló Dobby, el elfo de los Malfoy.

-¿Qué quieres? - Contestó Lucius

-Amabilidad Lucius - Regañó Diana.

-Amo unos aurores los buscan -

Los antiguos reyes se vieron entre ellos. Los heridos estaban completamente sanos gracias a Narcissa y ya no había marcas en sus antebrazos, nada los inculpaba gracias a Diana y Narcissa.

-Diles que ya vamos - Respondió Narcissa por su esposo.

Los seis ex-reyes salieron de la habitación de invitados y bajaron al salón donde estaban Ojoloco Moody, James Potter, Sirius Black, Remus Lupin, Peter Pettigrew y Marlene Mckkinon.

-Miren que colección - Dijo Lucius con asco.

-Señor Malfoy tenemos unas preguntas para ustedes- Informó Ojoloco.

-Claro-

-¿Qué le pasó señora Thomson? - Preguntó Alastor viendo a Victoria.

-Soy Zabini aún, no sé confunda Moody y para que sepa tuve a un bebé hace una semana y aún no me recupero, por eso Regulus no me deja hacer nada -

Regulus sonrió a la mujer que cargaba en su brazos y la puso en un sofá.

-¿Dónde estuvieron hoy? - Preguntó James Potter viendo a Severus Snape.

-Aquí - Respondió Lucius rápidamente- Hicimos una fiesta - Informó

-¿Para qué? - Preguntó Sirius sin despegar la vista del anillo de Diana ¿Con quién se había casado?

-La revelación del sexo de nuestro hijo- Mintió Narcissa frotando su vientre.

-¿Qué es? ¿Un demonio? - Bromeó Sirius

-Al menos no traidor- Respondieron Diana y Regulus.

Sirius los vio con enojo, pero Remus Lupin hizo una tos falsa.

-Debemos ver sus antebrazos - Pidió el hombre lobo viendo directamente a Alexander.

Todos los presentes vieron primero a Alex luego a Regulus, Lucius y Severus como si supieran que ellos eran los que estaban marcados.

Diana supo de inmediato que Peter no sólo era un espía para la orden sino que también buscaba capturar a los miembros mortífagos dando sus nombres.

-No sigo órdenes tuyas Lupin- Contestó Severus.

-Háganlo - Pidió Victoria

Los cuatro levantaron sus mangas mostrando que no tenían ninguna marca visible.

La cara de Peter Pettigrew se volvió de confusión mientras que la del resto de merodeadores y los otros dos se volvió de enojo.

-P-pero... Yo lo vi - Susurró el muchacho.

-Cuidado con lo que dices Pettigrew, las mentiras son malas - Respondió Regulus.

Los cuatro bajaron sus mangas con rapidez y las arreglaron.

-Exijo que tomen veritaserum - Habló enojado Sirius.

-Tú no puedes pedir nada - Le dijo Diana enojada - Estás hablando con cuatro Lord's y tres Lady's de la corte de los sagrados 28 - Recordó

-A nosotros nadie nos puede exegir nada- Continuó Narcissa.

-Con nuestros votos podríamos correrte a patadas del ministerio y veremos quién nos desafía - Siguió Victoria.

-Nosotros somos Lord's y ustedes no nos pueden perdir nada- Terminó Regulus rodeando a Narcissa y Diana con sus brazos para protegerlas.

Los seis aurores los vieron enojados, pero sabían que tenían razón. Para lograr que tomen veritaserum tendrían que hacer una votación en la corte de los sagrados 28 y ellos ya tenían muchos votos a su favor pues eran miembros de casi cada familia que la conforma.

-Bien- Aceptó por fin Moody.

-Quiero que se vayan de mi casa- Pidió Lucius lo más amable que pudo.

-Las preguntas aún no acaban - Recordó Marlene hablando por primera vez.

-No estamos obligados a responder eso y si es así entonces me presento como abogado defensor de todos nosotros y quiero una orden que nos obligue a responder señorita Mckkinon- Le dijo Alex.

Alexander Nott se había ganado una fama de nunca perder y ser uno de los mejores abogados del mundo mágico por lo cual Ojoloco se vio obligado a irse.

-Esto aún no acaba - Les dijo James Potter antes de irse.

Una vez estuvieron solos los seis amigos se abrazaron por salir libres de esto.

____________

Diana pasó los siguientes meses de su embarazo planeando un viaje con Allan al cuál irían después del nacimiento de su hija Artemis...

Más ese viaje nunca se realizó.

Diana murió en el parto al perder toda su fuerza en este y por causa de un paro murió.

Allan Brunner-Black escapó de casa ese mismo día volviendo a la casa que le heredaron sus padres Lord y Lady Brunner.

Regulus lo buscó durante meses y fue a visitarlo a Hogwarts varias veces, sin embargo el chico se negó a verlo y le pidió que se alejara.

Diana antes de morir había logrado ocultar a Rabastán y el heredero Riddle en su casa en París y cumplió cada pedido que Voldemort le había dejado en aquella carta.

Esto sin decirle a Regulus tal y como su amigo le había pedido.

Nota:

POOM ¿Se lo esperaban?

💖🥰

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