Un joven de cabello rojizo y anteojos marchaba a paso apresurado con rumbo a aquel elevador extrañamente posicionado en una bodega.

Ingresó a la cabina con nerviosismo notable, estaba llegando tarde a su encuentro de reclutamiento y su suerte venía siendo lo mismo desde ayer pues no le concedieron información de su jefe en aquel nuevo "Trabajo de oficina" que le brindaron aquellos hombres de vestimenta extraña, negra, en su mayoría.

Fue sólo hasta que una voz autoritaria y seria le habló que salió de sus pensamientos -¡ALTO!- inmediatamente cruzó su pie en el camino en las puertas del elevador.

Un hombre de mediana edad, cabello anaranjado, lentes de sol y sonrisa inspiradora ingreso a la cabina también afirmando un gracias con la mirada, el chico sólo sonrió ruborizado y asintió a la modestia de aquel hombre, era sencillamente imposible de no estar temblando de nervios con tal persona imponente al lado, creía firmemente que en cualquier momento se daría la vuelta y se terminaría burlando de aquel escuálido interno, o al menos es lo que pensaba el.

Sintiendo el disturbio de la fuerza de su lado derecho Brett sólo soltó una pequeña carcajada, era claro que aquel chico estaba asustado; Volteo en el ascensor y encontró su mirada con la del chico, éste dio un brinco del pánico que sintió nadamas verle -Oye... tranquilizate, a partir de hoy tu nuevo empleo comienza ¿o me equivoco?- preguntó cordial Brett, el chico sin dejar de verle respiro hondo y contesto: -Así es señor, me llamo Loid Peter Sánchez señor- dijo firme, Brett sólo volvió a reír y metió sus manos en su bolsillos -Es genial tener nuevos compañeros de trabajo, estoy seguro de que te encantará el lugar, tal vez hasta puedas llegar a ser parte del sistema jaja, éste... sin temor a equivocarme, será un segundo hogar para ti querido padawan- era increible, su semblante, su sonrisa e incluso Loid podía jurar que veía una estela de viento hondear en su cabello -P-por su puesto, ¡muchas gracias Señor!- dijo emocionado el muchacho llegando al punto de que podía escuchar una música de dimensiones épicas en su cabeza -Llámame Brett muchacho... y bienvenido...- continuó el pelinaranja escuchando la llegada del ascensor al piso correspondiente
-A Cognito Incorporated-
Presentó Brett.

El joven presenció horrorizado cómo el lobby estaba repleto de imágenes de una sola persona y lo que parecían ser pancartas del logotipo de Cognito Inc. con un gran ojo en su interior, y una que especialmente le dejó aterrado fue una con una Mujer gigante señalándole directamente con la frase "La gran hermana te vigila", seguido de una presentación de varias personas portando uniformes "militares" y laborando en sus zonas de trabajo, culminado por la atención robada por una mujer que yacía en la cima de aquellas oficinas portando igual de uniforme de militar pero con dominancia de general, el joven hiperventilandose se escondió detrás del indomable Brett, quien solo suspiraba mientras olfateaba el lugar -Vaya, me encanta el olor de mostaza en la mañana, ¡Más vale que sea un Hot-Dog Andre! Por qué tus químicos aveces huelen muy raro jaja-.

Los empleados se tomaron su tiempo para mirar a la mujer que ahora se disponía a hablar -¿Nuestro trabajo es:- gritó desconcertando al joven pelirrojo que ahora mismo estaba dispuesto a dejar su dignidad de lado y orinar en sus pantalones -¡SECRETO!- gritaron al unísono aquellos empleados -¿Para mantenerlos:- volvió a gritar ahora siendo apoyada por todos los presentes que aplaudían y vitoreaban aquel comportamiento tan contradictorio para el interno novato que solo veía incrédulo todo aquello -¡A SALVO!- respondieron de igual manera al unísono, Brett quien se encontraba viendo desde abajo gritó –¡Hola Reagan!– saludó inocente.

Todo golpearon el suelo con su zapato resonando por todo el edificio y después un saludo con su brazo extendido gritando por última vez todos juntos, ahora incluido también Brett
-¡HAIL REAGAN!-.

El Joven pelirrojo no soportó tanto en tan pocos minutos dejándose caer estrepitosamente en el suelo desmayado.

-¡Feliz primer desmayo!- gritó Brett.

De un elevador interno Regan emergió de humo falso -No va a sobrevivir la semana...- dijo Glenn retirando su Máscara de gas -¿Semana? No durará menos del medio día...-