Tantas veces quise escribir esto y no me salía del todo, ya que me era difícil expresar lo que sentía, suelo imaginar que el alma es un mar extenso que cuando se escribe en el es algo que nadie puede borrar.

Se preguntaran como he hecho para lograr expresarlo, bueno no les puedo hablar de algo que no haya sentido ni muchos menos que haya vivido, a veces los seres humanos solemos dejar huella sin darnos cuenta, o en otras personas ni siquiera piensan en eso, solo quieren ayudar con un consejo o con una palabra de aliento.

En mi vida hay personas que han dejado huella en mi, que han escrito en mi libro de vida, suelo pensar que esas personas aunque no estén siempre contigo, muchas de esa personas quizás ya no estén físicamente, pero están en espíritu y en esencia, solemos pensar que no dejamos un legado, tan solo el espíritu, tu personalidad, tus consejos y hasta tus acciones se convierten en un legado, para las personas menos pensadas y esperadas.

Todo lo bueno que te pase en la vida, lo malo, lo triste, incluso el mismo sufrimiento deja huella, esas huellas que, como yo pienso, son en el alma, imagina que en tú ser interior, esta tu lugar favorito, el lugar en el que piensas para tener tranquilidad, bueno ese es tu lugar en el alma.

O imaginemos el lugar que te trae recuerdos hermosos de tu infancia, esos momentos en el que parece que se detiene el tiempo, y quieres vivirlo una y otra vez, o esos momentos en el que son para recordar toda la vida esas son la huella del alma de cada persona.