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Hoy debía disculparse con Hoseok. Estaba decidido, ya no queria ni podia esperar más, porque mientras más se demorara en pedir perdón, más rencor le guardaría el chico y seria más difícil.

El problema era que no tenía nada planeado, no tenía ni la más vaga idea de cómo hacerlo, porque eran contadas las veces que había pedido perdón en su vida.

Jimin se había pasado el fin de semana que se quedó en su casa dándole ánimos y él dijo que si, que lo haría ese mismo viernes.

Viernes porque tendría todo el fin de semana luego para lamentarse y olvidar la vergüenza.

En resumen, estaba dejando su orgullo como alfa y su dignidad botadas.

~♡~

Yoongi se acercó a Hoseok a la salida. Era ahora o nunca.

Él sabía que Hoseok siempre era de los últimos en salir, porque se quedaba practicando de más y porque se tomaba su tiempo para arreglarse al final.

Por lo tanto, los pasillos estaban completamente vacios, a excepción por él y por Hoseok, quien estaba inclinado sobre su casillero guardando sus cosas y parecía no haberlo visto aún.

— Hyung-

— ¡Ahh! — Exclamó el chico al ver que era Yoongi, cerró los ojos suavemente mientras suspiraba y ponía una mano sobre su corazón acelerado — ¡Casi me matas del susto! — Se quejó.

— Lo siento — Se disculpó el alfa.

No habia siquiera comenzado a disculparse y ya estaba haciendo todo mal.

— No importa — Hoseok se volvió hacia su casillero — ¿Qué quieres, Min?

— Y-Yo queria disculpame p-por, ya sabes, eso y… si eso es todo, adiós — Yoongi salió corriendo con las mejillas rojas. Era un desastre.

— ¿Qué mierda…? — Preguntó Hoseok al aire.

No es que esperaba que el chico le pidiera disculpas con una pancarta o algo asi, pero Hoseok dudaba que eso que el menor habia hecho se pudiera catalogar siquiera como una disculpa.

Es más, continuaba sintiéndose herido, muy herido.

Yoongi por su parte, aunque avergonzado, estaba conforme.

"Con eso será suficiente" pensó, pero en el fondo sabía que no lo era.

~♡~

— Me siento estúpido — Hyejin lo miró de mala manera — Es decir, ¿Tan poca cosa soy para que ni siquiera pueda disculparse bien? Es más que claro que cometió un error.

— Hoseok. Es un alfa. Para la mayoría es difícil ese tipo de cosas porque su natural orgullo no se los permite.

— Pero yo me merezco una buena disculpa — Dijo sorbiendo por la nariz y haciendo un puchero — ¿O no?

— Claro que te la mereces, Hobi.

— ¿Entonces?

— Para todo llegará el momento. Puede que sea mañana, en un mes o incluso en un par de años, pero el volverá a disculparse y en ese momento, de la manera correcta. No intentes apresurar las cosas. Tú te mereces esa disculpa y en algún momento va a llegar.

— ¿De verdad lo crees? — La chica asintió.

— Deja de pensarlo tanto, ¿bien? — Hoseok asintió — Mejor veamos la película — Hoseok volvió a asentir.

Puso el tarro de palomitas a su lado y acomodó su cabeza en el pecho de la chica, quien dio play y empezó a hacerle mimos en la cabeza al omega mientras ambos comían.

— Te quiero, Hobi.

—Y yo a ti.

~♡~

Cuatro años después...

— ¿Debería sentirme mal?

— ¿Por?

— Por lo que dijeron el fan y Hoseok en el evento. La verdad es que tienen razón ambos. Hay tensión y esa fue la peor disculpa en la historia.

— Vuelve a disculparte — Sugirió con calma Jimin.

— Pero, ¿cómo?

— Creo que es decente que te disculpes pero de manera completa. Es decir, de alguna manera, humillarte un poco. Con eso su omega estará satisfecho.

— ¿A qué te refieres?

— La vez que Dongju me pidió disculpas en la cafetería, me sentí mejor, incluso si tú lo habías obligado a hacer eso. Porque en cierto modo él, un alfa, se estaba humillando ante mi omega.

— Humillar es una palabra fuerte.

— Eres más que consciente que el hecho de que un alfa se disculpe con un omega se considera humillante porque el alfa debe dejar su orgullo de lado para hacerlo. Tal vez humillar no sea la palabra pero en este momento no se me ocurre otra.

—Ah.

— Una disculpa y una reverencia completa estaría bastante bien. Tal vez un pequeño peluche, a Hobi le encantan. Hoseok hyung es alguien sencillo. No necesitarás mucho para hacer que te perdone. El no es rencoroso.

— ¿Pero…?

— Pero su omega probablemente si. Aunque los omegas somos "la clase más baja" — Dijo rodando los ojos ante eso último — Nuestro omega interior si que suele ser rencoroso, no olvida nada. No olvidan lo bueno, pero mucho menos olvidan lo malo.

~♡~

— ¡Hoseok! ¡Espera!

El cambiaformas de ardilla se detuvo, Yoongi había frustrado su escape.

La verdad es que habia estado huyéndo del menor por cuatro años, sutilmente. Cada que sentía su olor cerca o lo veía doblar en alguna esquina se daba a la fuga.

Las veces que se lo cruzaba en los pasillos era porque iba despistado y no alcanzaba a dar la vuelta y ahí ni siquiera le miraba.

Una vez les pidieron presentar un programa y durante la grabación estuvo a punto de tener un ataque nervioso o algo parecido…

Apenas y si convivían en los fanmeetíngs o cuando se cruzaban en la calle, porque frente a cámaras la convivencia era prácticamente obligatoria.

Ni él y ni su omega (sobre todo su omega) lo habian perdonado y esto era porque en su mayoría, su omega era excesivamente rencoroso.

Pero hoy no había escapatoria.

Se giró y formó una sonrisa cuando visualizó al alfa acercándose.

— ¡Hola! ¡Que sorpresa encontrarte por aqui!

— Estabas huyendo…

— Puf, claro que no.

— Si — Aseguró el alfa y luego se puso algo timido… Hoseok recordaba bastante bien que el alfa solía relamer sus labios y jugar con el borde de sus camisetas o sacos cuando estaba nervioso — Bueno, no importa… Yo venía a otra cosa…

"¡Por fin! ¡Es hoy es hoy!" pensó el omega. Por fin Yoongi se disculparia.

— Entonces, ¿A qué venias, Min?

— Ammm, si bueno, yo... — El alfa respiró profundo — Yo queria pedirte perdón por lo que sucedió en la universidad entre nosotros. Sé… que no terminamos en los mejores términos y que aún te debo una buena disculpa asi que aqui estoy, intentándolo — Dijo el alfa hablando excesivamente rápido — De verdad lo siento Hoseok — Dijo finalmente Yoongi, se arrodilló y extendió sus manos hasta el piso en una reverencia.

Se mantuvo unos cuantos segundos asi y luego se levantó para ver a un Hoseok realmente sorprendido.

Yoongi abrió su mochila y sacó un pequeño peluche con una cajita que contenía los dulces favoritos del omega.

— De verdad espero que puedas perdonarme.

Hoseok, en vez de palabras, respondió con acciones.

Se abalanzó sobre Yoongi y lo abrazó con mucha fuerza mientras sonreía inmensamente.

— Te perdono. Mi omega y yo te perdonamos Yoon, quedas libre de toda culpa.

— ¿Podemos ser amigos de nuevo?

Hoseok asintió y Yoongi le regaló una de sus sonrisas mostrando sus encías.

Hoseok se sentía feliz y su pequeña ardillita daba saltos en su interior. Apretó el peluche contra su pecho. Tomó un dulce de la cajita y luego otro para Yoongi.

Eso era más de lo que había esperado de Yoongi y estaba muy satisfecho.

~♡~

— ¿T-Tú...? — Preguntó señalando a Jungkook — ¿Ustedes…? — Namjoon se sintió morir, ¿Por qué esos chicos causaban tantos problemas?

— ¿Yo qué? — Preguntó suavemente Jungkook.

Taehyung lo miró alarmado y negó muchas veces muy rápido con la cabeza. Taehyung si lo sabia, pero Jungkook no.

— Jungkook, ¿Taehyung no te ha dicho nada?

— TaeTae me dice muchas cosas, tienes que ser específico. ¿Nada de qué? — Preguntó mientras miraba expectante a Namjoon y con amenaza a Taehyung, a quien del susto le habían salido sus orejitas y cola gatunas y empezaba a encogerse en su sitio.

— Jungkook, no quiero ser brusco, pero… Estás embarazado.

Taehyung esperó lo peor pero sólo escuchó la suave risa de Jungkook.

— Qué estupidez — Y siguió riendo.

— Jungkook, es enserio.

— TaeTae, ¿Es cierto? — Preguntó ahora un poco dudoso, pues Namjoon no parecía estar bromeando.

— S-Sí.

— ¿Cómo podrian saberlo?

— Tienes más aromas mezclados al tuyo Kookie, incluido un suave aroma a leche — Argumentó Taehyung — Puede que no lo hayas notado, pero dos aromas nuevos acompañan el tuyo. Lo noté hace un par de días y pensé que tal vez habias abrazado a alguien o lo que sea, pero esos aromas persisten incluso luego de que te bañas y no hacen más que aumentar cada día.

Jungkook puso instintivamente una mano en su vientre.

— Jinnie también tenía más aromas cuando estaba embarazado. Bien sabes que ahora tenemos dos niños.

— No puede ser — Jungkook sintió que se mareaba y se sentó en el suelo.

— De hecho si puede ser… Fue hace poco más de un mes y aunque puede que aún no salga en una prueba de embarazo, estoy seguro.

— ¿Jimin no tendría más aromas también? — Preguntó Jungkook — Hace un mes lo marcaron también.

— Nop. Yoongi fue a la farmacia y volvió en tiempo récord para no dejarme sólo por mucho. Trajo la pastilla.

Jungkook asintió pensativo y sintió las lágrimas acumularse en las esquinas de sus ojos.

¿Por que estaba triste si iba a tener a un o una nueva integrante en su pequeña familia? Pero realmente más que triste, estaba preocupado.

Preocupado por su carrera, por lo que dirían sus padres y sus fans, e incluso por no poder ser un buen padre.

¿Sería un buen padre?

Sin darse cuenta había empezado a dejar caer sus lágrimas así que escondió su rostro entre sus rodillas, permitiéndose ser un poco sentimental un momento.

Taehyung observó preocupado a Jungkook y de una sola mirada les hizo entender a Jimin y a Namjoon que los dejaran a solas.

Ambos chicos salieron de la sala sin decir nada más.

Con las orejitas agachadas y apretando su cola felina entre sus manos con nerviosismo, Taehyung se acercó a Jungkook y se arrodilló frente a el para quedar a su altura.

Acarició el cabello del menor y luego bajó un poco la mano sin romper el contacto, llevando su mano por la mejilla hasta el mentón del menor, alzando su rostro para poder verlo a los ojos y el omega pudiera verlo a él.

Jungkook tenía los ojos un poco rojos e hinchados ya, sus mejillas se sentían húmedas.

— Kookie, ¿Por qué lloras?

— TaeTae… tengo tanto miedo…

— ¿Miedo?

— De no ser suficiente. Es que… ¡Demonios! ¡Es un bebé! Conlleva mucha responsabilidad y yo… no creo que sea apto para eso. ¿Y mi carrera? ¿Y qué dirán? ¿Mis padres? ¿Los fans?... ¿Tú?

— Jungkook, no voy a abandonarte. Es también mi bebé. Ambos lo cuidaremos y puede que nos equivoquemos en el camino, pero siempre podremos solucionarlo si estamos juntos. No deben importarte los demás y si es necesario, yo le haré frente a tus padres. Podrás seguir por un tiempo con tu carrera y más adelante deberás hacer una pausa por el bebé. Pero luego podrás continuar de nuevo. Mira a Seokjin. Es padre de dos y es un gran cantante y actor.

— ¿Estás seguro?

— Si Jungkookie. Muy seguro. Esto es lo que quiero, si tú lo quieres también. Ambos estamos en esto, así que debes confiar en mi. Seremos una hermosa familia — Sonrió tranquilizadoramente hacia el menor.

— Confío en ti — Aseguró Jungkook y se inclinó para abrazar con fuerza a Taehyung.

Nunca podría imaginarse un alfa mejor que el.

~♡~

— ¿Cuándo deberiamos empezar a organizar todo lo del bebé? — Preguntó un Jungkook con algo más de cuatro meses de gestación.

Pronto debería dejar de trabajar, su pancita era ya muy notoria y aunque siempre usaba ropa en exceso ancha, los medios empezaban a sospechar.

Hasta cierto punto, Jungkook estaba harto de que Taehyung hiciera todo por el, casi ni lo dejaba salir solo (iba nada más a la empresa porque era su obligación y Taehyung no se le alejaba más de dos metros) y además se había vuelto mucho más territorial y sobreprotector que antes.

Jungkook se habia tentado muchísimas veces de enviarlo a la mismísima mierda porque él aún se sentía y era bastante capaz de hacer las cosas por si mismo, pero luego recordaba lo tierno que se ponía Taehyung cuando estaban a solas y se le pasaba.

Gran parte del día, Taehyung se la pasaba abrazando a Jungkook o con una mano sobre su pancita y a veces le hablaba a los bebés en las noches.

Porque si, eran dos.

— No sé. Cuando quieras.

— Pero me dejarás pintar las paredes también.

— No, ¿Y si te caes de la escalera? Definitivamente no.

— Kim Taehyung — Habló amenazador Jungkook, de verdad que se sentía orgulloso de haber aguantado a Taehyung por cuatro meses, ahora sólo le quedaban otros cuatro y medio.

— Bien. Pero entonces una escalera chiquita. Y yo pinto el techo.

— Trato. ¿En qué habitación?

— Tenemos dos de sobra Jungkookie. No vas a ponerle una mano a mi estudio y nuestro cuarto es… bueno, es nuestro.

— No quiero paredes rosas y azules. Blancas y que cuando crezcan ellos elijan el color — Taehyung movió la cabeza en afirmación y una sonrisa se formó en sus labios.

— ¡Entonces no hay que pintar las paredes! — Celebró Taehyung, perezoso como siempre, además de que ahora Jungkook no tendría que subirse a una escalera, por más chiquitita que fuera.

— No me simpatizas. Pero bueno.

Taehyung tenía razón, luego de que compraran la casa nueva, esta había sido decorada al gusto de ambos: Paredes blancas, muebles negros, grises y café oscuro por Taehyung y todos los toques coloridos y brillantes por Jungkook.

De vez en cuando, Jungkook se animaba a pintar en cuadros o a hacer “dibujitos en las paredes“ (como les llamaba Taehyung para molestarlo aunque a él le gustaban también y casi siempre terminaba ayudándolo).

Cada cosa que cada uno le agregaba, hacía buena combinación y hacía del lugar más acogedor.

Eran por todas esas pequeñas cosas que a Jungkook le encantaba poder tener a Kim Taehyung en su vida y sabía muy bien que el sentimiento era mutuo.

Hola~ ♡

Aquí el segundo capítulo de la maratón ^^

Espero les haya gustado ♡

—LaJavii