—Hyung, ¿aún no despiertan? —Le preguntó TaeHyung a Félix al entrar a la habitación con los ojos entrecerrados sabiendo que NamJoon lo había dormido a propósito.

—No, ya casi —le dijo para tranquilizar a todos los chicos metidos ahí en esa habitación. Pero la realidad era que comenzaba a preocuparse de que JiMin no logrará salir del mundo que conectaba con la mente de YoonGi.

Debe de estar demorando con YoonGi. Pensó como la única solución para el problema que le estaba creando el dragón omega.

SeokJin se levantó al oír el estómago de JungKook rugir de hambre y entonces cayó en cuenta de que eran las 4:36p. m. de la tarde.

—Voy a preparar kimbap para todos y comer mientras ellos dos logran despertar —dijo inseguro al verlos a los dos aún dormidos sobre la cama y sus manos entrelazadas. Pero cuando vio a Félix encargándose de ellos dos con gran atención pudo relajarse un poco más.

—¿Necesita ayuda, hyung? —Le dijo TaeHyung y el omega asintió con una pequeña sonrisa que ya se mostraba cansada.

—Yo les ayudo —se ofreció JungKook al ver que el de piel canela se iba con su mayor y cuando ellos tres se hubieron ido NamJoon se levantó y se sentó al otro lado de la cama, al lado de YoonGi y ver de frente a Félix.

—Sé sincero conmigo, por favor —le dijo y Félix levantó la mirada con seriedad muy consciente de que no podrá engañar a ese dragón.

—Están en un gran riesgo de morir ahí adentro.

NamJoon enredo sus manos en su cabello y sintió sus ojos picar por las lágrimas que se formaban en ellos. Félix desvío la mirada para dejarlo tranquilo y no irrumpir en ese momento de debilidad que estaba mostrando.

—No le digas nada a los chicos, no tienen que saber nada de esto —le dijo NamJoon y limpio sus lágrimas mientras se sentaba correctamente y veía a la ventana.

—De todas formas no lo iba a hacer.

En ese momento el rostro de JiMin comenzó a formar muecas y su mano presionó la de YoonGi a pesar de estar en el sueño todavía.

—Algo está pasando... —dijo Félix e intento entrar a la mente de YoonGi, pero le fue inútil al sentir una especie de barrera que no le permitía el paso.

NamJoon miró preocupado cuando YoonGi comenzó a balbucear cosas que no tenían algún sentido y sólo sonaban como murmullos tétricos de un idioma incomprensible.

—Y-YoonGi —lo llamo e intento tocarlo, pero Félix detuvo su mano tomándolo de la muñeca.

—Es peligroso que los toques en el estado que están —le dijo y se fue al otro lado de la cama y quedar de frente a NamJoon.

—Ve con los otros, no es seguro que estés aquí ahora.

NamJoon negó y se mantuvo firme en su lugar, Félix suspiró y tomó sus hombros y lo hizo a un lado, aunque NamJoon era más alto que él, sabía que ese hombre mantenía una paciencia infinita en la mayoría de las situaciones por lo que había visto en esas horas.

—Déjame solo unos momentos NamJoon, no tardaré —le dijo y el moreno suspiró pesadamente y salió de ahí con paso lento ya no dispuesto a discutir más.

Félix reviso a YoonGi, encontrando con que estaba despertando al igual que JiMin, pero lo que no estaba bien era ver que los ojos de YoonGi permanecía con el color escarlata que tomaban al transformarse en su forma animal.

—¿Félix? —Preguntó JiMin siendo apenas audible, como un murmullo entre el desastre y que se era llevado por el viento.

—Aquí estoy.

—¿YoonGi está... bien? —El mencionado giró lo más que pudo su rostro para ver al que tenía a un lado y acababa de salvarle. Cerró sus ojos nuevamente al sentir como sus ojos picaban y el agua salada salía de ellos y caía a los lados de su rostro.

—Lo está, ambos están bien.

F l a s h b a c k...

—No sé porque te importo, JiMin —le dijo después es oír que JiMin se preocupaba por él.

—La pregunta aquí es, ¿Porqué piensas que no me importas? ¿Acaso a tus amigos no les importas? Sabes la respuesta a eso, YoonGi.

YoonGi sollozó y tapó su rostro con vergüenza. Sí, sabía perfectamente la respuesta a esas incógnitas, pero no lo podía admitir, seguía hundiéndose en su dolor y oscuridad para no tener a nadie cerca y enfrentar la verdadera realidad que estaba frente a sus ojos desde hacía mucho tiempo atrás.

—Cállate... Sólo... Cállate —le dijo entre lágrimas que incluso a JiMin le dolían, esas lágrimas eran la forma de desahogo del Hell, la forma más viable para poder dejar fluir el dolor y mostrar lo débil que se encontraba por la perdida de su pareja y por la soledad en que se sumió para ahuyentar a quien intentará tener un contacto con él, por mínimo que fuera.

—YoonGi, estoy aquí, y no pienso dejarte, yo quiero...

—¡Que te calles! ¡Entiende, JiMin! ¡No puedo dejar ir a MinHo, simplemente no puedo! —Gritó llorando y JiMin se intentó alejar abrumado cuando la mano de YoonGi atrapó el cuello de su camisa—. No lo puedo dejar ir, estoy atado a él, desde su muerte estoy junto a él, porque fue culpa mía que él muriera, es mi culpa y debo cargar con el sentimiento.

Le dijo y JiMin sintió sus narices rozar, sus rostros estaban tan cerca y no sabía si sentir miedo o no al ver que los ojos de YoonGi parecían tomar cada vez más intensidad y de sus ojos parecía escurrir la sangre en lágrimas de dolor y angustia.

—No fue tu culpa... Nunca lo fue y jamás lo será, el destino quiso que las cosas sucedieran así, no sé por qué, pero tal vez debe tener preparado algo bueno para ti, algo que cambiará tu vida para bien, para hacerte feliz y dejar la soledad atrás para llenar tu vida de lo que debería de haber en ti, no esa profunda tristeza, YoonGi.

—Esa mierda del destino... MinHo creía tanto en esa cosa —dijo con dolor tapando la mitad de su rostro con su mano y apretar su labio con sus dientes. JiMin quiso callarlo y sacarlo de una vez de ahí, pero fue paciente por los dos.

—¿Lo ves? MinHo creía en el destino, entonces tú debes hacer lo mismo, debes creer YoonGi, pero sobre todo, no estarás solo para creer en él —YoonGi elevó su rostro y conecto miradas con el peli plata, y notar que le sonreía con amabilidad, y eso le dolió.

JiMin se animó a tomar la mano del alfa y la enredó con su mano, la acarició y sonrió cuando YoonGi dió un respingo por el contacto.

—Créeme, YoonGi.

—¿Cómo están ellos? —Le preguntó JungKook a Félix mientras veía a su hermano y sentía la preocupación a flor de piel porque había sido demasiado para él ver en todo lo que estaba metido solo por un dragón.

—Cansados.

—¿Pero están bien? ¿No les pasó nada? —Le preguntó SeokJin y Félix suspiró rendido al cansancio y tomar un lugar en la orilla de la cama.

—Físicamente están bien, mentalmente no sé, tengo que esperar a que despierten y hacerles unas preguntas a los dos —dijo y en un tazón con agua metió las manos de los dos para enjuagarlas y dejarlas limpias. Entonces las separó finalizando el lazo que los unió mentalmente.

Los ojos de YoonGi se comenzaron a abrir lentamente, con tanta dificultad que a Félix le preocupo su estado y el como pudiera haber quedado después de haber hecho algo tan riesgoso como dejar a una persona entrar a su mente.

—Na... NamJoon —fue un sonido tan bajo, que incluso a Félix le dificultó oírlo con claridad. Entendió que llamaba a su amigo luego de unos segundos, así que le hizo señas y el otro se acercó rápidamente y tomó la mano de YoonGi.

—¿YoonGi? ¿Estás bien? —Le preguntó y el otro frunció en entrecejo y negó.

—N-no, yo me... siento horrible —le dijo y su estómago se revolvió de la nada y se sentó en la cama y tapó su boca con una mano mientras sus ojos se humedecían.

—¿YoonGi? —Lo llamo Félix, pero no respondió y se levantó corriendo al baño y echar todo fuera de su boca.

Félix limpio su frente y suspiró aliviado, NamJoon miró eso y se le quedó viendo confundido a lo que Félix respondió con una pequeña sonrisa.

—Esos síntomas quieren decir que está bien, ahora sólo falta JiMin.

Ambos vieron a SeokJin entrar a la habitación como el alma que lleva el diablo y fue directo al baño donde YoonGi seguía vomitando, el mayor les gritó por no haberlo ayudado y NamJoon se levantó para ir con él cansado pero más aliviado que cualquier otra cosa.

Pero nadie sabía lo que estaba pasando ahora en la mente del White.

Perdón la tardanza, se me borró el capítulo y no podía poner los separadores.

Edit 2023: Espero finalizar la historia pronto si sigo corrigiendo los capítulos y subirlos en ese orden.

Los amo bebés. 💜