Chat 35: ¿Ahora es cuando nos besamos?

Màu nền
Font chữ
Font size
Chiều cao dòng

—¿MoonLight?

Mi sonrisa se desvanece en el instante que escucho mi usuario salir de su boca. Muchas veces había fantaseado con la idea de que me llamara Moon, pero no estaba siendo tan placentero como me lo había imaginado.

Río nerviosamente.

—¿De qué hablas, Dioncito? —Finjo locura.

Él escribe algo en su móvil mientras sujeta el mío. Segundos más tarde, la pantalla se ilumina, mostrando su usuario.

Así lo había descubierto yo.

—¿Qué cojones, Lesya?

No parece decepcionado, tampoco molesto, más bien desconcertado.

—Cojones es una palabra bastante obscena, nunca esperaría que tú dijeras algo así —suelto, desviando la atención.

Él analiza nuestros alrededores y toma mi muñeca para arrastrarme hacia la parte trasera de las escaleras que había cerca de nuestra aula.

—Lesya.

—Dión.

—¿Eres MoonLight? —insiste.

—No... —respondo, muy poco convencido, apartando la vista.

Me toma del mentón para que lo mire directamente a los ojos.

—¿Te vuelvo a preguntar?

—¿Para qué? Si acabaré diciendo lo mismo —murmuro.

—¿Porque quiero saberlo?

—¿Para que me rechaces? Ya sé que nos consideras incompatibles y bla, bla...

Él alza ambas cejas.

—Y si...

—¿Y si qué? Ya sé que no te caigo tan bien y que apenas somos amigos...

—Si te dijera que no.

Me paralizo por completo.

—¿Qué acabas de decir?

—Que qué pasaría si te dijera que no, que no te rechazaría —susurra.

—Espera, ¿puedes repetirlo?

Lo veo entornar los ojos antes de obedecer.

—¿Qué me contestarías si te dijera que no te rechazaría?

Me relamo los labios.

—Que sí soy MoonLight. —Asiento varias veces.

Él estalla en carcajadas.

—Guau, eso ha sido fácil.

—Soy un chico fácil, ¿qué te puedo decir?

—Pensaba que íbamos a tener una conversación larga y dramática.

—Soy un chico simple —repito.

—¿Y qué pasará ahora?

—No sé, yo pensaba que me tenías retintín y que te decepcionaría.

—Bueno, ya me esperaba que fueras tú o alguien parecido a ti.

—¿Y eso? —cuestiono, sin saber si sentirme ofendido o halagado.

—Lesya, eres idéntico por chat y en la vida real —declara.

—¡Pues mucho te ha costado descubrir quién era! —lo acuso.

—Pensaba que no serías precisamente tú porque creía que eras hetero. —Se cruza de brazos.

—Qué feo que asumas eso de mí.

—Pido perdón. He aprendido contigo que no debo asumir cualquier cosa...

—Así me gusta —sonrío con orgullo y el silencio se instala en el ambiente—. Y bueno, ¿ahora qué pasará?

Suelto una carcajada nerviosa.

—¿Y me lo preguntas a mí, MoonLight? —inquiere con un tono sarcástico.

—¡No sé! ¡Nunca pensé llegar tan lejos! —Me sujeto la cabeza, estresado.

—Supongo que podemos seguir hablando por LoveLink hasta desbloquear los últimos niveles que te faltan. —Las comisuras de sus labios se elevan según se encoge de hombros.

—Pero...

—¿No era ese tu objetivo principal?

Sorbo mi nariz y hago un puchero.

—¿Seguiremos siendo amigos?

—No, nuestra amistad se acaba ahora —ironiza.

—No me digas eso, Dión, que me lo creo. —Abulto aún más mi labio inferior.

Él se calla y parece estar replanteándose toda su vida.

—La gente que se gusta suele ir de citas, conocerse más...

—¡Oh, podemos hacer eso! —Salto en mi sitio.

—No estoy acostumbrado a que te comportes tan parecido a Moon en la vida real. —Se ve sorprendido por mi actitud, tanto que siento algo de vergüenza.

—Solo suelo ser así con gente en la que confío. —Me encojo de hombros.

—¿Así que ahora sí soy de confianza? —Se rasca la nuca.

Asiento con fuerza.

—Dios Santo, Lesya.

No me había dado cuenta de lo tenso que se encontraba hasta que relaja su postura.

—¿Ahora es cuando nos besamos?

Pensamientos impulsivos no, por favor.

—¿Vamos tan rápido? No lo sabía. —Alza una ceja.

Me sonrojo y lo aparto de un empujón.

—Solo han sido pensamientos impulsivos. —Me volteo con la intención de regresar al aula—. Ya está todo solucionado entonces.

Comienzo a caminar, pero Dión me toma de la cintura, impidiendo mi táctica de huida muy planeada.

—Primero solucionemos esos pensamientos impulsivos, ¿no? —sonríe coquetamente.

—¡Ni de puta broma! —espeto, abriendo mucho los ojos y haciéndolo carcajear.

Él niega con la cabeza y se pone de puntillas para dejar un beso en mi mejilla.

—Te lo debía.

Después, se dirige a la clase, dejándome atrás.

—¡Eres un cabrón, Dión! —grito, escuchando una risa como respuesta.

Finalmente, llega un profesor de guardia que no nos da clase ni nos permite salir durante nuestra hora libre. Así que decido seguir molestando a Dión.

En un momento, mientras está distraído, aprovecho para dibujarle un solecito en la mejilla. Él se venga inmediatamente, trazando una luna en mi frente. Nos envían al baño para que nos limpiemos, y lo hacemos entre risas y codazos.

—Voy a matarte —resoplo, secándome la cara con un papel.

—¿Perdón? Quien se ha dedicado a pintarrajearme has sido tú —bufa.

—No sé de qué hablas. —Aparto la mirada.

Él mantiene su sonrisa y entramos a la cafetería, viendo que Hywel y Dess ya están sentados en la mesa, con dos bandejas extra, que supongo que son las nuestras.

—Vaya, vaya —carraspea falsamente Dess.

—¿Qué veo? —le sigue Hywel.

Les dedico una expresión de disgusto.

—Como comencéis con las bromitas... —digo con un tono de advertencia.

Ellos ríen y hacen el gesto de cerrarse la boca con una cremallera.

—¿Ya sois pareja oficialmente o qué? —Dión cambia de tema.

Ambos se observan, y Dess apoya su cabeza en el hombro de Hywel, luciendo una sonrisa de oreja a oreja.

—Ignorando el hecho de que acaban de pegarse aún más, ¿no te parece obvio porque Dess está literalmente encima de mi mejor amigo? —Arrugo la nariz.

—A ver, "literalmente". Es verdad que tiene una pierna encima de su regazo, pero yo los he visto más pegados en fiestas —replica frunciendo el entrecejo.

—No necesito detalles, gracias. —Tuerzo la boca.

—Estamos saliendo oficialmente —confirma mi mejor amigo.

—Felicidades, os ha costado admitirlo —celebra Dión.

—Ahora te toca a ti, Dión, con Mooncito —indica Dess con un tono acusatorio.

—De hecho, ¿sabías que hemos comenzado algo?

Su mejor amigo se levanta de repente, casi tirando su bandeja.

—¡Dión Ainsworth! —chilla—. ¿Por qué me estoy enterando ahora?

—Porque acaba de suceder. —Le resta importancia.

—¿Cómo?

—Come —contesto yo, haciendo carcajear al pelinegro. Su mejor amigo no parece tan divertido.

Entonces, Dión me señala con la cabeza.

—MoonLight.

Hywel abre mucho los ojos y fija su vista en mí.

—SunShine —lo imito.

---

07/08/2024: mi espalda está llorando, ayuda.

AYUDA KASJHDAKHDAKSHDASKJ, no sabéis cuánto tiempo llevo esperando a que descubran quiénes son y que se diga el título del libro. Lo peor de todo es que, al principio, iba a ser una escena triste de Dión rechazando a Lesya, pero me negué a escribir más cosas tristes. Ni yo quería escribir ni vosotrxs leerlo, seguramente.

En fin. qué bonitos son. Los amo. Solo quedan dos o tres capítulos y son cortitos, excepto por el del final.

Espero que os haya gustado el capítulo <3.

BTW, Lesya y sus pensamientos impulsivos, lo amo.

Eso es todo, besitos vespertinos (sorprendente que escriba tan temprano, pero tengo un sorpresa para el capítulo final y lo tengo planeado).

Bạn đang đọc truyện trên: Truyen2U.Pro