Cistal

Después de escuchar todo lo que Frank me decía, la verdad sentía rabia pero, después sentí alivio, tanto él como yo hemos sufrido por nuestros propios errores, los dos actuamos mal, actuamos por el bien propio de cada uno, sin pensar en las personas de nuestro alrededor.

Me pongo a pensar toda la situación que pasamos y me da tristeza, es como si los dos no nos conectaramos en esta vida, como si el destino nos dijera que no somos el uno para el otro.

Y lo continuamos desafiando, por que así somos nosotros.

Le sonrió a Frank, una sonrisa sincera, lo comprendía más que nadie, lo conozco más que sus propios padres y vivimos tantas cosas que a la vez me da alegría de haberlo conocido, nadie conoce nuestro dolor y a la vez el fuerte amor que nos tenemos.

Es algo inevitable dejar de quererlo, nunca pude y es la verdad... Frank se asombra de verme con aquella sonrisa pintada en mi cara, pero no se la quitó, se la sigo dedicando, ya no somos unos niños, Frank ya casi va para sus 30 años al igual que yo y es hora de reparar todo estos errores y uno de ellos son nuestros hijos.

—Para mi, querer a alguien implica momentos dolores y tristes, pero lo veo como algo bueno, ya no quiero convertir esos sentimientos en una mentira.—el me mira con atención

—¿Sigues creyendo en mi?.

—Si —no dudé en mi respuesta —Pero los dos sufrimos por la presencia del otro —suspiro para después sonreír –A pesar de lo mucho que pasamos y sufrimos, yo sigo creyendo en Ti y te valoro, Frank... —cierro mis ojos —, aunque no quiera lastimarte, ni hacerte sufrir pero, con solo estar a tu lado, me pongo a pensar ¿Para qué existo en tu vida? —lo miro a los ojos —, soy Cristal Smith y hay más cosas en las que debo pensar, pero no puedo! —mis lágrimas resbalan por mis mejillas —¿Que extraño verdad? — me limpio las lágrimas —Hemos pasado por tanto, que parecemos dos desconocidos...

—No digas eso.. —me tomá mi cara con sus manos, me asombro

—Frank

—Tu vales mucho para mí, Cristal, te amo mas que a mi propia vida —me besa, nos fundimos en un tierno beso, de eso que he venido esperando por más de 4 años, un beso sincero, un beso del verdadero amor que nos tenemos, en ese beso entregamos nuestros verdaderos sentimientos.

—¿Qué dices, Cristal? ¿Comenzamos de nuevo? — asiento y le sonrió

—Pero primero, mereces un castigo por haber ocultado qué me habías recordado... Te lo Mereces!. —él me sonríe con picardía —Tu mente si que esta pérdida, Frank Collen. — nos reímos suave, ya que la bebé seguía dormida, Frank vuelve a besarme.

....

Frank.

Las cosas iban bien, Cristal le dan de alta el día de hoy en el hospital; todos sus exámenes mostraba grandes avances, ella ya estaba mejor, ya podía volver a su vida.

Habíamos hablado bastante de nuestra situación, pero por ahora, ella quiere que las cosas vayan en calma, decidió quedarse en casa de sus padres.

Ella había llamado a sus padres y les había dicho que yo la llevaría a casa junto con los niños, me hacía feliz la idea, pero con solo imaginar la cara de Albert me daba un poco temor, pero ya habíamos hablado de ello la otra vez.

Era decisión de nosotros dos y nadie podía meterse ahí...

Le ayude a guardar todo a Cristal, mientras ella llevaba a Luci en sus manos, Alan y yo llevamos sus cosas al auto, hoy Cristal estaría por fuera del hospital después de un año, y un mes hospitalizada, era demasiado tiempo lejos de casa y de su familia, sobre todos de nuestros hijos.

Y de mi lado...

Alan nos contaba cómo la pasaba en en el jardín, pronto pasaría a su kinder para iniciar su primaria, nuestro hijo comenzaba a crecer.

Primera vez que conduzco feliz de llevar a mis tres amores en este, por que si... Somos una familia, mis dos hijos y ahora Cristal al lado nuestro.

—Antes de ir a casa, que dicen si vamos a comer algo... —les digo.

—Siiii —gritan, Alan y Cristal —¿Quiero helado?

—Jaja... Somos dos Alan, queremos helado.. Verdad Cristal! —la bebe aplaudía, eso quería decir que si

—Entonces, helado será!.

Y así pasamos la tarde, una agradable tarde en familia, primera vez que disfrutamos de nuestros hijos y sobretodo de Alan de una buena manera, sin peleas, ni gritos..

Sobre todo de mi parte.

Ya comenzaba a caer la noche, Alan se había quedado dormido en la parte de atrás del auto junto con Cristal y Luci, esa escena me dio bastante ternura, pare el auto y les tomó una foto, este recuerdo me lo guardare para mi.

...

Al llegar a la mansión Smith, nos abren el portón, la familia sabía cómo era mi auto por lo que, abrían las rejas de una sin avisar.

Parqueo el auto para comenzar a bajar el equipaje de Cristal, ellos seguían dormidos.

Al terminar de entregar su equipaje, comienzo a mover suave a Sakura.

—Llegamos — le digo.

—Cinco minutos más... —hace un mohín típico de ella, sonrió.

— Vamos Cristal, para que descanses en tu habitación, ya lleve a Alan a su cuarto.

—Esta bien — se talla los ojos, agarró a Luci con cuidado, para que Cristal salga del auto. — ¿Te vas? — asiento —Quédate, esta noche ¡Quédate! —me asombro por sus palabras.

— Descansa Cristal. Mañana nos vemos, debes descansar.

—Yo quiero que te quedes! — hace un puchero de niña pequeña, le doy un corto beso en sus labios

—Que tal otro día ¿Que dices? — carga a Luci en sus manos.

—Esta bien... Tú también descansa, nos vemos mañana —me sonríe, para después besarme.

Al verla ingresar a la mansión, me subo al auto para irme a mi casa, pero no a nuestro futuro hogar, si no a la mansión de mi padre, faltaba arreglar mi situación con él.

...

Cristal

01 de abril...

Hoy es mi cumpleaños número 29; estoy feliz porque mi mejor regalo estaba al lado mío y mi otro regalo al frente, Luci acostada a un lado y Alan jugando frente de mi.

Que mejor regalo que el amor de tus hijos, que te levantan día con día con una feliz sonrisa para animarte todos los días...

Hoy me harán una reunión en mi honor y "mi regreso a la vida " así lo había bautizado Hanna

Todo había cambiado, hasta la actitud de Frank, se le veían notablemente los cambios, me enviaba flores, nos traía comida, juegos, chocolates, fresas y demás, aunque todavía no pienso dar mi brazo a torcer debe esforzarse más.

Mis padres duraron una semana sin preguntar nada acerca de nosotros y de volver a empezar, hasta que una vez mi padre me llamó a su despacho.

Tiempo atrás...

—Cristal ¿Estás segura de lo que vas hacer?.

—Papá se que dudas ahora lo entiendo, pero estoy segura de estar con él, no me veo con nadie más... Además... No importa por lo que hemos pasado, yo quiero volver a intentarlo papá, por favor apoyame...

—Esta bien hija. Aunque no me gusta del todo la idea, pero siempre contaras conmigo, si eso te hace feliz... —me mira a los ojos — Pero sí ése te vuelve hacer algún daño. No lo pensaré más y lo molere a golpes.

—Papi ... —nos miramos y sonreímos, mi papá algunas veces sale con unas cosas —Te amo papá..

....

Estoy haciendo un poco de pereza con mis hijos, todavía no me quería parar de la cama,  hasta que...

—Sakura ¿Qué piensas de la vida?... Ya son las 6 de la tarde ¿a que horas te arreglarlas? Y a los niños... —me regaña mi segunda madre, Hanna Smith

—Ya entiendo, solo un rato más y enseguida me paro a organizarme.

— Ningún un rato más, ve mueve ese culo bello tuyo y te metes a la tina —pongo mis ojos en blanco.

—Shhhh... Los despertarás con tus gritos de loca —corro al baño, Hanna estaba totalmente roja de la ira.

— Huye, cobarde

—Te adoro... —grito, ya adentró del baño.

....

Frank

Hoy cumpleaños Cristal; me la he pasado ocupado en la empresa adelantando parte del trabajo de hoy y mañana, para estar libre y compartir tiempo con mis hijos y  Cristal.

Toda la mañana me la pase sumergido en documentos y leyendo lo del nuevo festival de verano, que mi empresa estaría a cargo, era mi turno, tenía varios de mis trabajadores acomodando el festival y lo que daría que se daría ha conocer; el nuevo centro comercial de París Love...

En la tarde pase con Lucas a recoger los esmoquin para la fiesta de cumpleños de Cristal, ambos comprarnos los regalos y recogimos el de Hanna, ya que cada vez que llamaba a Lucas se escuchaban los gritos de su amada violeta, pongo mis ojos en blanco y me rio suave.

—En verdad las mujeres son muy aterradoras ¿No lo crees lobo?

—Si ... —claro que lo son, Cristal también lo es.

Abordamos el auto de Lucas, nos dirigimos a mi mansión por  un momento y después nos iríamos a la mansión de los Brown de ahí salimos a la mansión de los Smith, valga la redundancia

Debía terminar de organizar las cosas aquí y ver como tenía los empleados la mansión en la noche llegaría Nana, espero que haya podido hablar con Rita, me daba lástima, a pesar de lo que hizo, no le guardo rencor pero, es algo que no podré perdonar, se había metido con mi flor.

La mansión se encontraba en buenas condiciones, después de la fiesta, Cristal volverá a su hogar, a su nuevo hogar Junto con los niños, no puedo con tanta emoción

Que llegue la noche  ya.

Todo estaba decorado, tanto la sala como el jardín y la piscina, mañana celebramos su cumpleaños y el regreso a casa en el día.

Juntos, los cuatro.

....

La noche había caído rápido, Lucas y yo nos habíamos terminado de arreglar; Lucas le pido a su chófer que nos llevará a la fiesta, era lógico que el alcohólico de mi amigo no se iba a quedar a atrás, era claro que quería beber y que Hanna tampoco llevaría auto, por lo tanto, necesitaba quien conducirá.

Me puse un smoking negro con una corbata verde oscuro y Lucas si se puso un smoking azul oscuro con una corbata vino tinto, se veía bien el cabron.

<Estamos bien, querras decir > gracias.

Al llegar a la mansión, quedamos impactados, los Smith se habían lucido para esta reunión, todo estaba decorado con bombas plateadas, negro y rosa metálico y muchas flores.. La verdad que se veía muy linda la entrada.

Si es así afuera, no me imagino adentro..

Cuando ingresamos había mucha gente, el señor Albert y mi padre, habían invitado a sus ejecutivos y sus familias, al ingresar lo primero que vi fueron reverencias hacia nosotros, Lucas ve ha Hanna y me deja solo como un idiota. Me dirijo a la cocina, ahí se encontraba la Señora Nana junto con Penelope y Hilari1

Nana llegó directo de su viaje a la fiesta... Quien te ve abuela

—Las tres lucen muy bien — las saludo de beso en la mejilla, las tres  me sonríen

—Tu también estás muy bien hijo... — esa palabra era extraña de parte de Penelope, últimamente me decía así, no sonaba mal, es la mujer de mi padre y también me ha apoyado, no sería malo que ella me llamará hijo, se había ganado el lugar, me siento halagado.

— Gracias, madre — le sonrió, veo que se sonroja, para después tirarse encima mío y abrazarme.

—No sabes lo feliz que me haces...

—Estoy celoso de mi Hijo... ¿No se supone que al que debería abrazar es a tu querido esposo?. —pongo mis ojos en blanco, que bochornoso.

—Señora Nadeshiko, ¿Cristal y los niños?

—Los niños en el jardín, Cristal arreglandose, se había quedado dormida, ya vez, hay cosas que no cambian — que raro.. Sonrió

Nos reímos, asiento y me retiro, ahora camino hacia el jardín de la mansión, veo que Emmanuel y Natasha, estaban con Alan y Luci jugando.

—No se ven mal, ¡Hasta parecen pareja!. —me burló.

—Como que parecemos, ¡ Frank!.. Somos pareja —mi prima la malgeniada.

—Frank, amigo.. — Emmanuel me regala un abrazo, creo que hace rato que no le veía, debe estar bastante te, ocupado y no solo con las empresas, también con la melosa de Natasha.

—Mucho trabajo... —pone una cara de espanto, me rio a carcajadas.

—Papá .. —corre a mi Alan

—Campeón ¿Como estas? Has cuidado de tu madre y tu hermanita... —cargo a Alan

—Si.. —él me abraza del cuello y yo también le regaló un abrazo. — Mira Luci, papá llegó!. —le habla a su hermana

Bajo a Alan de mis brazos para cargar a Luci — Como esta la princesa más hermosa del mundo!.

Luci  balbuceaba, quien sabe que cosas me dijo, pero estaba muy hermosa. Le sonrió como Idiota.

—Pone la misma cara de idiota como si fuera Cristal... ven entregáme la bebe, Frank.. Te apuesto a que no has ido a ver a Cristal, corre, ve a saludarla...

Alan continuó jugando a la pelota con Emmanuel, mientras Natasha se sentaba con la bebé hacerle caras.

Sonrió.

Ese par ya estaban preparados para hacer hijos...

Me encaminó a dentro de la mansión y subo las escaleras, para ir directo a la habitación de Cristal.

Veo que estaba entreabierta la puerta e ingresó a su cuarto.

—Hanna, ya te dije que estoy...

— Lista!. —terminó la frase, ella asienta, me acerco a ella, muy cerca de sus labios, se veía tan bella esta noche. —¡Estás hermosa!.

—Tú no te quedas atrás —pasa sus manos por detrás de mí cuello y nos fundimos en un beso.

— Ya van a comenzar este par a reproducirse de nuevo... —las burlas de Lucas  se hicieron presentes

— Oye... Van a poblar el mundo entero o que! — se burla Emmanuel

—Ya que a ustedes dos les quedó grande, si — sonrió con triunfo, y salgo de la mano con Criatal, las chicas se comienzan a reír.

Jaqué, mate

—Hanna

—Natasha —las llamaron al mismo tiempo, cosa que ignoró las aludidas.

Los miró de reojo, les discutían a las chicas como si fueran niños, ellas solo sonreían y los agarraban del brazo, también para venir detrás de nosotros.

—Lista para irnos a vivir juntos..

—Siempre —me da un beso suave en los labios, nos sonreímos.

—Su atención, por favor —la voz de Albert captando la atención de todos los presentes —Quiero agradecer por aceptar la invitación de venir a nuestra casa, para disfrutar del cumpleaños de nuestra hija y su regreso a casa, por eso decidimos compartir con ustedes este momento de felicidad —comenzamos a bajar las escaleras, Cristal tenía un vestido negro pegado a su cuento, pero en las caderas era suelto y largo, algo transparente, muy típico de Hanna y mi prima. Sus manos estaban cubiertas por unos guantes negros y su cabello estába recogido en un lindo peinado con unas estrellas, se ve muy bella esta noche, Cristl se suelta de mi y llega hasta donde su padre abrazarlo, todos estábamos reunidos, cada uno con una copa en las manos — Los invito a levantar su copa, esta noche quiero brindar por la vida y las nuevas oportunidades... —eso último me dice directo a los ojos, creo que otra vez me acertó, levanto mi copa hacia el —¡Salud!

—¡Salud!.. —todos dijeron a la vez...

Le pido el micrófono a Albert, él me lo sede. — Buenas noches a todos ustedes! — veo como todos hacen una reverencia, mi padre se tapa la boca para no reír fuertemente, Penelope le da un codazo en el estómago, yo le guiño un ojo —Esta noche he decidido compartir algo muy bello con ustedes, es algo que le di a mi amada mujer antes del viaje donde comenzó nuestra travesía...

—Su travesía fue desde antes —grita Emmanuel, volteo a mirarlo mal, Lucas asienta varía veces con una sonrísa de burla, pongo mis ojos en blanco.

—Bueno, desde la preparatoria... Pero la que más nos marcó fue esta última, cuatro años de incertidumbre y malos entendidos... —suspiró y miró a los ojos de Cristal quien me sonreía con amor —Amor, eres la única mujer que ha soportado a este hombre desde el momento en que nos conocimos, y eres la única capaz de perdonar a este hombre por todo lo que te hizo pasar, por eso deseo preguntarte por última ve — me arrodilló frente a todo hacia ella, la mayoría de las mujeres se tapaban la boca para ahogar un grito, hasta Hanna y Nati, nadie se lo esperaba — Cristal Smith ¿Quieres ser mi esposa? —sus bellos ojos verdes, se comenzaron a cristalizar, se arrodilla donde estoy y me susurra un "si" para después abrazarme.

—Claro que deseo ser tu esposa, pero esta vez para siempre...—asiento y nos besamos, nos paramos juntos y miramos a todos los presentes, quienes seguían aplaudiendo, no faltaba el vago o los vagos que silban ante el bullicio, como Lucas, Emmanuel y papá.

No les da ni una pizca de pena.

...

La velada transcurrió con normalidad, ya era hora de irnos para nuestro hogar, la primera noche juntos, nos subimos al auto; esa noche no bebí ni una gota de alcohol, aunque Lucas se la pasaba de borracho, corriendo tras de mi cómo si fuera un niño pequeño, Hanna estaba bastante sonrojada por los tragos que tenía encima al igual que mi prima.

Está noche habrá desquite entre ellos... niego con una sonría.

<Que pensamientos los Tuyos Collen, céntrate en tu familia > ja.. Pensé que mi Conciencia estaba durmida.

En el auto iba Nana con los dos niños atrás, estaban totalmente dormidos y como no ya eran las 2 de la mañana pasadas. Era más que.obvio que estarían rendidos.

Cristal estaba sentada en la silla del copiloto me agarra de la mano y me da una opreton, eso quiere decir que estaba nerviosa, le sonrió.

Arrancó director a la mansión, no estábamos tan lejos.

....

Al llegar a la mansión estaba bien iluminada, abren el Portón e ingresamos a esta..

Estacione el auto y comenzamos a bajar, Cristal llevaba a Luci en sus manos, al Ingresar a la casa, Nana a Alan. Cristal tenía una cara de asombro, todo se veía bien, había quedado exactamente como se los pedí a los empleados.

....

Cristal.

Estaba sorprendida al ver lo bonita que estaba la casa, Frank me había contado que la había mandado hacer junto con Penelope la mansión para nuestra familia, y esperaba llenarla de hijos.

Se toma muy a pecho lo que le dice Bernal, pongo mis ojos en blanco.

Recorro la mansión con mi hija en manos, estaba decorada, más tarde celebramos mi cumpleaños los cuatro juntos, eso me emociona mucho

—¡Cristal! —me llama Frank, asiento y lo sigo a la segunda planta, él me enseña las habitaciones de Alan y Luci, estaban bellísimas se ve que Natasha y Hanna, metieron mano en mi hogar, y se los agradezco, ellas dos saben mis gustos y había quedado perfecto todo.

Acuesto a Luci en su camacuna la arropo con su cobijita y le doy un beso en la frente — Descansa hija, nos veremos. Más tarde! — después camino hacia la habitación de Alan, tiene los gustos de su padre; Alan ya estaba en su cama, Frank y Nani se habían retirado, me despido de mi pequeño con un beso en la frente, prometiendo más tarde divertirnos, veo que sonríe, me da una alegría que mi pequeño al fin disfrute de una verdadera familia.

Los cuatro juntos... Sonrió como tonta al recordar las palabras de Frank, pero como no estar feliz, si estoy completá al lado de los míos.

Por fin...

Siento que me abrazan por atrás, Frank me da un beso en el hombro

—Vamos a conocer nuestro dormitorio, no quise estrenarlo. Si no estabas tú aquí en casa... —asiento, entre lanzamos nuestras manos y nos dirigimos al tercer piso, ahí estaba nuestro cuarto, y la verdad me dejó impactada.

Todo el tercer piso es nuestra habitación, es bastante grande con dos balcones a la vista del Jardin, nuestro baño era bastante grande y a la Luz de la Luna todo estaba enchapado en vidrio, aunque polarizo las ventanas para que no nos vieran, podíamos ver para afuera, pero hacia dentro nadie lo notaria... Ésto es increíble... El techo de manera le daba un estilo de cabaña, me gusta mucho, Los gustos de Frank me encantan

— Todo esta bellisimo, amor.. Esto es increíble — me encaminó al balcón él tenía preparadas dos copas de vino, me quitó las pantuflas y camino descalza, tomó con las manos el barandal del balcón, la Luz de la Luna estaba perfecta, es como si también me diera la bienvenida.

— Tú eres perfecta Sakura... —me abraza por la espalda, le sonrió me volteo, chocamos nuestras copas —Por tu vida —brinda Frank.

—Por una vida juntos, los cuatro —y bebimos el contenido de las copas, Frank me retira la copa y las coloca en una mesa pequeña, se vuelve acercar a mi.

—Te amo, Cristal.

—Y yo te amo a ti, Frank — me abraza por la cintura y me besa, paso mis manos por su cuello, y profundizó más el beso.

Bajo mis manos de su cuello y las paso por detrás de mi espalda para bajar mi cierre, Hanna me pidió que me pusiera la lencería verde, que era "El momento " y se lo agradezco, este si es el momento.

El vestido resbala y cae al piso, los ojos de Frank eran fuego, me tiro a él para besarlo con más pasión, deseo, amor y lujuria.

Deseo a este hombre, mi cuerpo no puede dejar de amar a Frank, nuestros cuerpos conjinan mutuamente, él me carga y me sienta en una de las mesas del balcón, la noche es perfecta para los dos, el verano apenas comenzaba.

Paso mis manos por su pecho y le quitó el saco, Frank no deja de besarme, mientras quitó su corbata, me besa el cuello.

Nos miramos a los ojos, comienzo a quitar botón por botón, sus músculos se tensiónan, se me escapa un gemido, Frank cierra sus ojos, al terminar el último botón, paso mi mano por su pantalón, estaba como apretado, mejor le ayudo a tomar aire..

Mientras él se termina de quitar la camisa yo le retiró la correa y desabrocho sus pantalones, estos caen al piso, ahora estábamos a la par, en ropa interior, pero no por mucho tiempo ya que me quito mi sostén dejando mis senos al aire.

—Te volviste más atrevida... — besa mis labios y masajes mis pechos, baja por mi cuello me muerde, gimo — Eso me encanta.

—Lo aprendí del mejor. —me acuesta en la larga mesa del balcón, su mirada llena de perversión me dice que esta noche no íbamos a dormir, me río suavemente.

—Trata de no hacer bulla, para no despertar a nadie.. —me sonrojo y le saco la lengua, me sube los dos brazos por encima de mi cabeza mientras reparte besos por toda mi cara. Llega a mis labios y me besa, trato de profundizar pero él no deja, niega y sonríe con picardía

Me estaba torturando

Suelta mis manos y me coge la cara para besar mi cuello, pasa su lengua y me muerde, suelta mi cara para delinear mis brazos con sus manos, dejando besos por todo mi pecho, masaje de nuevo mis senos, se los mete a su boca y los comienza a chupar, succiona como si se tratase de leche, menos mal que deje de mamantar hace rato, al tercer mes de mi pequeña ya se había secado la leche, ya ella comenzaba a tomar leche prescrita...

Gimo ante la sensual boca de mi ahora marido pronto esposo, por inercia vuelvo a ver mi mano donde tengo el anillo que lo comprueba; recordar por todo lo que pasamos hace que mis lágrimas salgan, tanto daño que sufrimos los dos me pone sentimental.

Me tapó la cara con mis manos — ¿ Qué pasa, Cristal? —Frank se había preocupado, retira mis manos de mi cara y me acaricia limpiando mis lágrimas, niego.

—Nada, es solo que... No quiero que nada de esto cambié otra vez! —me siento el me abraza.

—Eso no pasará, te lo prometo, disfrutaremos de nuestros hijos y nos casarémos verás que todo cambiará para bien, seremos felices al lado de Alan y Luci, los veremos crecer juntos!.

Lo miro a los ojos, sus ojos brillaban con tal anhelo, que era bastante contagioso como negar ante tal emoción causada por sus palabras.

Me paro de la mesa y lo beso, lo beso con más fervor, lo llevó hasta nuestros aposentos, nuestra cama es perfecta, la noche es perfecta, lo tiró en esta y me subo encima de él.

Sonrió de medio lado, él también me sonríe

...

Frank

Nos comenzamos a besar. Bajo por su cuello, pasa por sus pechos con mi lengua, veo la reacción en su cara estaba totalmente roja con la boca entreabierta.

Bajo por su abdomen, le doy varios besos hasta llegar a su intimidad, rozó mi lengua en su vaina.

—Aahh... —arquea su espalda, comienzo a jugar con su ella, pasando varias veces mi lengua, estaba totalmente mojada, en su punto como a mi me gusta tenerla.

Introduzco dos dedos dentro de ella y comienzo mi tarea de meter y sacar varias veces, sus gemidos cada vez son fuertes, no me detengo, continuó pero esta vez uniendo mi boca, haciendo que Cristal no resista más.

—Aahh... Frank... Aaahh! —se reprime al principio, pero después estalla soltando todo su líquido en mi

—Eres deliciosa. —le sonrió con picardia.

—Frank —hace un mohín digno de ella, los extrañaba.

Me terminó de quitar mi última prenda para acomodarme en Cristal, pero esta vez la acuesto de lado, dándome la espalda, dejando a la vista sus hermosas glúteos, le acarició sus piernas, Cristal se eriza.

—Te deseo tanto, amor — ella acomoda su cabello de lado para mirarme

—Y yo te deseo a ti, vida. — la agarro del cuello y me pongo en posición, me introduzco en ella de un tirón.

—Aaahh.. —Cristal gime.

—Oooh .. —gruñó. —Como siempre tan apretada y deliciosa, me tienes muy exitado, Cristal

— Entonces calma tu hambre, amor!.

Le doy un suave mordisco en su hombro y aprieto su nalga, comienzo a embestir su intimidad con mi muy erecto pene, la extrañaba y mucho, había pasado demaciado tiempo desde que no la tenía así conmigo.

Agarró con un poco más de fuerza su nalga, para embestir más fuerte y rápido.

—Ahhh. Aaahh... así.. Framk ...Aaahh... —los gemidos de Cristal hacen que me caliente aún más, dándole más duro, hasta no aguantar más...

—Oooh, Cristal

—Ahhh, Frank —gemimos nuestros nombres

—Correte amor correte, estoy que...—ambos habíamos llevado a nuestro climax —Ooohh — sigo abrazando a Cristal por la espalda, tratando de regular nuestras respiraciones.

—Te amo, Cristal

—Te amo, Frank

Ella voltea un poco su cara y yo me acerco más a ella para darle un beso corto en sus labios, ambos cerramos nuestros ojos y nos dejamos llevar por los brazos de morfeo.

A partir de ahora, todo comenzará a cambiar, mi familia va ser feliz y de eso me encargaré yo por que, Sigo creyendo en nuestro amor.

Sigo creyendo en Ti.

FIN.