Capítulo 31

Tomoyo.

Mis días con Eriol son lo mejor, él me lleva a la universidad, me recoge, hace sus vueltas. Va al club. Después lo acompañó. Me lleva al apartamento, se queda él en este o yo me quedo en su casa.

Aunque me gusta más que se quede aquí. Su casa no me da confianza y menos con Clow mirándonos siempre.

Cierro mis ojos al recordar el comentario que me hizo Eriol "Papá no te quiere en mi vida, pero mamá te adora" "No todo somos moneda de oro Tomy, pero tu estas conmigo y me tiene sin cuidado lo que diga mi padre" cuando me hizo tal comentario era cierto, un padre tiene la intuición, o tal vez jamás pensó que nos cruzaremos nuevamente en el camino, y menos con su hijo a mi lado.

Eriol ha sido mi apoyo en todo momento, hasta en los momentos donde no comprendo a mis hermanas, como por ejemplo, la preocupaciones de Sakura cuando se pierde de la faz de la tierra.

—¿Tomoyo, vienes conmigo? — lo mire sin entender —, a mi casa, mamá quiere hacer una cena especial para ti, le he contado que aceptaste ser mi novia. Hoy se lo diré a papá. —mordí mi labio, iba a decir que no podía pero... — Vamos Tomoyo, será un rato.

Solté el aire que tenía en mis pulmones y acepté, que hay de malo en ello no. O eso creo yo.

......

Eriol me llevo al apartamento, me acomode para la ocasión, un vestido negro ceñido a mi cuerpo con una gran abertura en mi pierna derecha, en tiras, muy sencillo pero elegante, mi cabello suelto, poco maquillaje y brillo labial.

Iba perfecta, lo sé porque Eriol me lo decía muchas veces.

Él también iba ya vestido, puesto que se compró ropa y se cambió en casa, dejando su vestuario del día de hoy en esta, ya tengo mucha ropa de él en mi cuarto, a veces pienso que nos estamos apresurando sin saber que puede pasar.

El camino a la mansión Hiragizawa fue rápido, tome mi teléfono y baje del auto, Eriol me ofrece su brazo, bastante caballeroso, desde que lo conozco es así.

Me da un tierno beso en el dorso de mi mano y otro en la mejilla — Jamás me cansaré de admirar tu belleza, amada mía.

Reí con ternura, le di un suave beso en sus labios.

Ambos ingresamos a la casa, sus padres estaban en la sala, nos hicimos anunciar y ambos se levantan de la silla, nos miran. Uno me mira con perversión, y la señora madre de Eriol con ojos de amor, mire a Eriol quien sonreía con entusiasmo.

—Qué bueno que ya están aquí, tengo demasiada hambre —escupe Clow, bufé internamente, si, hambre es de otra cosa pero no lo obtendrá. Ya perdió su oportunidad.

—Listo, Camelia, sirvenos — la señora da la orden y comienzan a traer un bufé digno de dioses, quien en su sano juicio come todo esto, es un desperdicio de alimentos, espero que se lo den a sus trabajadores o me voy a enojar mucho.

Claro, no como Sakura, a ella le daría algo ver esto así…

La cena transcurrió con calma y tranquilidad, la mamá de Eriol le hace una seña, como quien dice… Cuéntale ya

—Papá — llama su atención, él lo mira —Quiero contarte algo —toma mi mano, se pone frío — Quiero que sepas que Tomoyo por fin ha aceptado ser mi novia —las millones de muecas que hace este hombre hacen que suelte una sonrisa, nadie lo nota, bueno, solo Eriol quien me mira con ternura.

—¡Si es lo que quieres! — y se levanta de la mesa, eso es, —no te la acepto y ahora hablamos—, todos soltamos el aire guardado en los pulmones, eso se sabía, ese hombre es... De enloquecer a cualquiera.

Pasamos el resto de la noche en su habitación. Jugamos, reímos, disfrutamos de nuestros cuerpos, trajimos fruta, se que de noche no se aprovecha pero.. Teníamos hambre.

Picamos un poco de fruta. Nos recostamos en la cama hasta dejarnos caer por el sueño.

Al rato me levanté un poco alterada, pase mi mano por lo frente, estaba mojada. Que tipo de pesadilla es esa, y lo peor es que… No recuerdo nada.

Puse mi mano en mi cuello. Tenía mucha sed, revise la hora. Eran las tres de la mañana pasada. A esta hora todos deben estar durmiendo, no pasaría nada si voy a la cocina.

Baje a la cocina para beber un vaso de agua, sólo uno no me sacia esta sed, terminé tomando tres vasos de agua. Carajo qué es esto que está matando.

—Te está carcomiendo tu conciencia ¿Verdad? —pegue un brinco, me gire sobre mis pies, en la oscuridad no venía nada, ese hombre solo tenía puesta una yukata azul y su cabello suelto, su pecho estaba abierto.

No lo voy a negar, se ve malditamente delicioso, mi boca se hacía agua, pero me aguante, Eriol es mucho mejor que él. Lo mire sería.

—Para nada, ¡soy feliz al lado de su hijo! —él sonríe con picardía.

—Es mi hijo, ya sabes... —suspira — ¿Ya le constate? —negué.

—Está su esposa en medio, no le da algo a ella.... — me tomó del cuello, lo miré mal

—Tu no sabes nada, pero me estás matando Tomoyo, no se que me hiciste pero no encuentro una mujer como tu. Eres perfecta —me besa en medio de esa cocina.

.....

Eriol.

Sentí el pedazo de Tomoyo frío, ¿hace cuanto se despertó?, me levanté a buscarla, baje a la cocina tal vez fue por un vaso de agua, hasta que escuche unas voces.

—¡Suéltame! — frunció el ceño, no estaba sola —Eso fue en el pasado, no sabía que es tu hijo y ¡Lo amo a él! —arquee una ceja, ¿de qué mierda hablan...?

—Eriol no es comparado conmigo, y lo sabes, mira tus ojos, no lo dudes más, no te controles más, aquí estaré para ti. ¡Así sea de amantes! — la voz de mi padre

Empuño mis manos —Aléjate Clow, eso es el pasado ¡Entiendalo de una vez! —ella está alterada, no se dan cuenta que pueden levantar a la gente, no sólo yo escucho también mi madre.

Suspiré con tristeza, Tomoyo fue amante de mi padre

—¡Me importa una mierda mi familia, Tomoyo me encantas, ¡no lo puedo controlar!.

—Le contaré a Eriol, ¡aléjate de mi! —el leda duro al mesón.

Ingrese —¿Y cuando pretendías contarme? — les hable con calma — Ya veo por qué te oponías a nuestra relación, no te gusta la idea de que tu amante ahora es mi novia, ¿verdad, padre?, trabajar… —reí con amargura —Lo  único que haces es engañar a mamá y tu... — empuñe mi mano, la tomó de la mano y me la lleve a mi habitación —Jamás pensé que esto fuera así.

—Déjame explicar, esto no es… —ella comienza a llorar —Cuando lo vi la primera vez no pensé que fuera tu padre, Eriol por favor...

La tomé de las manos con fuerza —Me haces daño — no puedo controlar mi coraje, ya no queda nada de los dos.

Me ha destruido toda mi ilusión, mi corazón, mis sueños, mi vida... La solté con rabia y comencé a llorar.

—¡Ya no te quiero ver más Tomoyo Kinomoto!

Ella tapa su boca, toma sus cosas y sale de mi habitación, mi madre estaba en la puerta la ve salir.

No aguante más y la abrace con fuerza —Hijo, no creo que sea lo correcto, es humana, tiene derecho a equivocarse.

Abrí mis ojos mientras ella me acariciaba.

—Yo jamás sentí algo por tu padre, todo fue por obligación hasta que tu llegaste a mi vida, me aguante esto por verte feliz, no te quiero ver así de vulnerable. —suspira —Una mujer como Tomoyo cautiva a cualquier hombre, ¿crees que echarla a las cinco de la mañana sería bueno?.

—Qué se las arregle sola, como hizo con papá. Los odio.

....................
Continuará