Capítulo 13

Himawari

—Vámonos Tomoyo, ya me siento cansada — revise la hora, ya eran las 5:00 de la madrugada, pronto amanecerá, ya debíamos descansar, y ya despejados la mente como queríamos.

Y con suficiente tiempo.

Reí toda la noche de las bobadas que hacían Li con Watanuki, y el otro disque cantando un tema a mi, fue lo más bochornoso que viví en esta noche, pero al fin y al cabo me divertí mucho.

Li debió seguir durmiendo.

Salgo a tomar mi auto y veo a Tomoyo devorándose a besos a Eriol, ella ya lo tiene en su poder, Tomoyo si es más fácil en estas cosas y los hombres se enamoran muy rápido, aunque ella no se entrega tan rápido, solo si le ha gustado sus besos y su manera de tratarla, tienes el cielo con ella.

Pero esto era diferente, es una misión y Tomoyo ya lo tenía en su mano.
A ella no le teme enfrentar la realidad.

Y la realidad es que ese hombre es el hijo único del magnate Clow, y este nuevo juego va a ser muy bueno.

—Vamos Tomoyo, ¡ya estoy cansada! — se dan unos cuantos besos y se despiden. Ambas ingresamos al auto, Tomoyo estaba muy sería, esta misión no le estaba gustando.

— Lo único que te puedo decir es que... No me decido, el papá o el hijo, son una cosa impresionante. — bufa y cierra sus ojos, sonreí de medio lado.

—Disfrutalos todo lo que quieras, mientras puedas, pero..

—No entregues tu corazón, lo entiendo, tranquila.

Noto que ella se queda dormida rápidamente, suspiré, bajo la velocidad de mi auto y enciendo el aire, debía enfriar mis pies para no quedarme dormida.

Quiero estar en mi cama.

.....

Sakura.

Ha pasado ya un mes, no he visto a mis hermanas y mi padre no deja de fastidiar, por fin mi cara se ve normal, aunque todavía noto algunos golpes y quiebres en mis labios.

Tomó un baño en las aguas termales. Acarició mi espalda.

Nuestro clan tiene grabado un dragón en la columna como si escalara por esta, lo tenemos todos, hasta mis hermanas, todo el que esté en este clan será sometido a este tatuaje.

A mis 16 años, fui sometida, a los 17 mis hermanas.

Mi padre está enfermo de que yo sea la principal en todo, no se por que se ha aferrado tanto a mi.

Me arrecuesto en una roca, me quedé mirando una hermosa flor de león, mi madre sí que cultiva cualquier tipo de flor. Sople esta y sus pequeños  pétalos volaron, es muy mágico todo, cómo se sentirá vivir con tanta calma, o una vida donde no tengas que estar asesinando a todo el que tu padre te pide.

La lista de mi habitación ha crecido.

La única manera que siento paz es haciendo mi altar para estas personas, no dejo de tener pesadillas, no dejo de sentir tanto peso en mi espalda, no dejo de pensar en aquellas personas, sean buenas o malas.

Pero mi objetivo sigue siendo el mismo, acabar con todo gobernantes, mafias y mi padre, quiero que las personas vivan bien, felices, normales en sus vidas normales si de algún modo se le puede decir.

Salí de las aguas y me vestí, tomé las llaves de mi auto.

—¿A dónde vas? — llega mi padre.

—¡Lejos de usted! —y pasó por un lado, él me detiene del brazo, me suelto de mala —¿Ahora  que deseas?.

—El plan sigue en pie, enfócate en eso, tu madre ya está en esa empresa y créeme no me gusta la idea, así que ¡Retoma! —¿estaba celoso? Jamás había conocido esa parte de él, sonreí de medio lado, este asesino también tiene sentimientos.

¡Quien lo ve!

Llegué a mi auto y subí a este. Enciendo su motor y comienzo a conducir, voy un poco tranquila en el auto, hasta llegar al complejo de departamentos.

Frene en seco antes de ingresar mi auto, me bajó de este, cierro la puerta con fuerza, colocó las manos en mi cintura. Me quedé mirando y esperando a que sus labios aflojaran sus estúpidas palabras.

—Bella mujer, al fin te veo ¡Después de un mes! — role mis ojos, tomé su brazo y lo hice caminar a mi auto, lo metí de mala gana, él solo reía.

Subí a mi auto y pedí que me abrieran las puertas, bajé al sótano y arqueé mi auto.

—¿Qué haces aquí? ¡Quien te dijo que yo...!

Él me tomó de las mejillas y me besó, abrí mis ojos hasta más no poder, estoy bastante sorprendida. Él no deja de besar y danzar con mis labios, acepte su beso y dance junto a sus labios.

Él me suelta ante la pérdida de aire — ¡Te extrañe todo este tiempo! —exclamó Li.

—¡Estás loco! — salí de mi auto, él hizo lo mismo, tomé el ascensor. — ¿Quién te dijo que aquí vivo yo? —cerré mis ojos con fuerza —No, deja así, ya tengo una idea.

Él ríe a carcajadas y asienta —, tu Hermana menor dijo que ya hoy volvías a casa, ¿como te fue en tu viaje? — comencé a toser, estás mujeres están mal de la cabeza, ¿viajé? Viaje de los golpes o ¿Que? Ni sé a qué país me mandaron ellas, suspiré profundo.

No metas la pata Sakura.

—Si bien, ¡la universidad! —sólo atiné a decir eso.

—¡Pensé que habías acompañado a tu madre! —arquee una ceja

—Ella me acompañó, yo la acompañe. Es casi igual. Ambas íbamos para dos cosas diferentes pero juntas.

Muy bien Sakura, que linda te estás portando.

—¡Espera! PORQUE CARAJOS TE DOY EXPLICACIONES — le doy la espalda, no me había dado cuenta de ello.

El ascensor dio su anuncio a la llegada al piso donde está el departamento, piso número 7, si es algo alto.

Abrí la puerta y le invite a pasar
—Linda casa, es increíble que tres mujeres jóvenes mantengan así de impecable un lugar! — role mis ojos.

—No somos esas chicas con las que acostumbras salir, Li.

Un momento a otro él me tenía acorralada contra la pared y la puerta, siento su aliento respirar cerca de mi oreja.

Este tipo de relaciones si me gustan. A ver qué más puedes hacer, señor Li.

.....

Xiao Lang

Paso la lengua por su cuello, no puedo evitar hacer esto, llevo un mes entero en abstinencia, y ella no me detiene, ¿será que ella también desea que yo…?

—¡Si continuo no pararé! — sentencie, ella me mira de reojo bastante seria.

—¿Y quién te ha dicho que pares? —me respondió con una pregunta, lo habitual qué ella hace conmigo, esa fue la respuesta final de ambos, con una de mis manos la ahorcó y la beso con desespero, su corazón comienza a latir rápido y no solo eso, su respiración, por fin noto que ella cierra sus ojos.

Pará después abrirlos y mirarme con furia. Ese brillo es muy excitante viniendo de ella.

Debe imaginar que no lo he notado, cada vez que la besaba era lo mismo, fingía y cerraba sus ojos cuando yo ya iba a parar, pero esta vez...

Ella pasa sus manos por mi espalda y retira mi camisa de mala gana, ya veo, no me equivocaba, esta mujer es ruda y le gusta ser tratada así, no como una mujer del montón o una muy débil.

Aunque ella debe tener una debilidad y la encontraré.

Suelto sus labios, ya se encontraban hinchados, fruncí mi ceño al verlos tan partidos, y eso no es por el frío, de eso estoy seguro.

La tomo entre mis brazos, la cargo y ella enrosca sus piernas en mi cadera antes de irnos, le pasa el seguro a la puerta, creo que en su cuarto no va a ser.

La subí a la mesa y continúe regando besos por todo su cuerpo, retire su blusa dejando ver sus hermosos senos, no es chica de ponerse sostén.

—Deje mis cosas donde mis padres —me explica, nuevamente me da una explicación, sonreí de medio lado.

La tiró a la mesa, ella suspira más de una vez, pase mi lengua por su abdomen, ella seguía encantada, lo notaba por que, siempre muerde los labios cuando algo le gusta, no lo desea demostrar vamos a ver hasta cuando.

—Quiero que me creas, contigo quiero ir en serio. Te deseo Sakura, estoy realmente loco por ti, no hay día que no me embriagué en tu nombre y eso que solo fueron unos cuantos días. —levante mi mirada, ella miraba el techo. Tenía su mirada bastante perdida —Sí tu me alejas o me dejas, creo que ya no seré igual, puede sonar locura, pero prefiero no vivir. —ella me aleja con su pie, se había quitado sus zapatos.

—No digas estupideces, los hombres solo buscan burlarse de las mujeres. Creerlas débiles, inútiles, desordenadas… —le había dolido lo que le dije, ya había notado que ella no es como las demás. — Los hombres son unas porquerías y... — la abrace con fuerza, ella trata de alejarme con fuerza, esta vez no la iba soltar hasta que ella se calmara.

—Lo siento —atiné a decirle, ella deja caer sus hombros —Siento haberte dicho eso, pero.. Me gusta verte enojada — la mire a los ojos y junte mi frente. — Te quiero, Sakura.

—¡Es muy rápido! —se sorprende y susurra — ¡Cómo es esto en verdad! — ella coloca su frente en mi hombro —, no entiendo nada — después me mira a los ojos —No te enamores de mí, no lo hagas, cometes un error, mejor... — ella trata de bajarse de la mesa —¡Vete! —abrí mis ojos, no lo iba a permitir, no así.

Tomé sus manos con fuerza y la tire a la mesa nuevamente

—Jamás me iré por más que tu así lo desees, ¡no te dejaré escapar más! —hable decidido, y tome con fuerza sus labios. Ella debe dejarse querer, ¿que es lo que tanto la detiene?.

¿Hacerme daño?.

Le quitó el jean rápidamente, su linda lencería azul es muy diminuta pero bastante tierna para ella.

Beso sus piernas, la muerdo por donde yo reparto mis besos, ella jadeo por fin, ya se está dejando llevar. Llegó a su vanidad, pero estaba envuelta por este lindo calzon, pase la punta de mi lengua sobre este. Ella suelta otro jadeo.

Le quite su calaon de un tirón, y tomé sus labios de abajo con fuerza, introduje mi lengua dentro de este, ella pone su mano en mi cabeza y comienza acariciar mi cabello, sus piernas las sube en la mesa, comienzo a jugar con ella.

—Aaahh.. —escucharla gemir me excita mucho, ojalá y pueda gemir mi nombre, sería algo totalmente exquisito.

Introduje mis dedos dentro de ella, la mire deseoso, ella se levanta de donde estaba y toma mi boca con vehemencia, me devora y yo gustoso de recibirla, estaba excitada.

—¡No pares! —me ordena, sonreí de medio lado, la besé con más fuerza, hasta ella gimió con fuerza y se dejó llevar.

El líquido salía de su cuerpo sin control alguno, continúe sobando su clítoris, hasta que ella dejara de derramar la última gota, ambos nos miramos a los ojos, ella estaba muy agitada, él sudor bajaba por su cuerpo como si de vapor fuera ella.

Me sonríe con arrogancia, yo le correspondo, ella es como yo solo que más dura. Así que esta si es una verdadera conexión como dice Eriol.

Baje mis pantalones y me introduje en ella, no quería esperar más, yo le había dicho que no iba a parar, la tomó entre mis manos ella enrosca sus piernas en mi. Contaría nuevamente y en el aire la comienzo a embestir, cada vez con más fuerza.

Nuestras miradas profundas se chocan, ella sonríe de medio lado, al parecer no se lo esperaba, echa su cabeza para atrás y se deja llevar por el deseo.

No me puedo controlar, tomó con fuerza sus senos, ella vuelve a gemir, el calor inunda la sala de estar. Nuestros gemidos son la melodía que se nos pasó colocar para que nadie escuche, pero no fue así.

Los brazos de Sakura me toman de los míos, ella estaba temblando, creo que no aguantara más, y se deja caer nuevamente a la mesa, se riega en mi, siento su líquido bajar por mis piernas, yo he ocasionado esto.

No paro mis embestidas, Sakura toma su seno con una de sus manos y con la otra, introduce su dedo en la boca.

Maldición, me está matando.

Aquella imagen hizo que mi instinto animal despertará más, le doy una fuerte nalgada al lado, ella vuelve a gemir con fuerza.

Coloco mis manos en los costados de su cuerpo sobre la mesa, y me dejó venir encima de su abdomen, sus pechos, su hermosa barriga estaba regada por mi, ella ríe como si fuera un chiste, pasa sus manos por su cabello, nuestras respiraciones estaban muy aceleradas.

—¿Quieres beber algo?

—Quisiera una ducha, aunque, no está mal tu idea —ella se para y me abraza con fuerza, mi cara de asco fue un arte para ella, reía a carcajadas, sonreí, la primera sonrisa sincera que veo de ella, las demás son muy sádicas, muy macabras, hasta puedo llegar decir que reía con odio, pero en estos instantes…

Ella me tira una toalla, ya estaba envuelta en una, toma dos copas y  sirve  un espeso vino de uvas, bebe esté con rapidez regando sobre ella.

Me está provocando.

Bebí del mío, es bastante rico —Agradece que te comparto de mi bebida, no me gusta regalar mi bebida favorita.

—¿Te has embriagado sola? — ella asienta. Camina por el pasillo, me le quedé mirando mientras tomó mis cosas

—¿No vienes Li? — frunzo mi ceño, ¿cómo que Li? Es que ni esto hace que ella me diga o me hable por mi nombre.  —¿Frustrado?, no te lo tomes a mal, no eres de mi tipo. ¡Ya te lo he dicho! — suspiré con cansancio, haré que cambies de parecer.

Ambos nos metimos a su... No es su baño. Se nota que este baño es de...

—Es de mi hermanita menor, ¡luego lo acomoda ella! —la mire —No pretendas que tengas confianza conmigo como para que te deje ingresar de golpe a mi vida.

—Pero estuve...

— Una cosa es una cosa y otra cosa es otra cosa.

—No entendí pero bueno, se hará como digas —ella ríe y deja caer su cabeza para atrás, aproveche y bese su delicado cuello —¿Segundo round?

—Te estás demorando, Li — me reta, sonreí con malicia, y la volví a tomar en esa ducha, que fabulosa tarde a verme escapado para estar aquí con ella.

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Continuará
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