Conociéndote

Màu nền
Font chữ
Font size
Chiều cao dòng

Al dia siguiente

Como siempre Bertholdt estaba en su clase de costura de la tarde, él fue uno de los primeros en terminar de confeccionar una camiseta, mientras a Hitch todavía le costaba trabajo terminar su vestido, ya que no podia cocer en linea recta con la maquina.

-Terminaras destruyendo esta maquina- le regaño Kuchel- Bertholdt, indicale como se debe de hacer.

-Si- Bertholdt trato de ayudar a Hitch, pero esta solo se burlaba.

-De seguro seras un gran amo de casa.

-Hitch, ya que estas con tanta energía para gastar, ve a borrar el pizarrón- le ordeno Kuchel

Hitch a regañadientes fue.

-No le hagas caso, Bertholdt- le aconsejo Kuchel con un tono dulce- Las tareas domesticas no son solo para muejres, lo sé por experiencia propia. Mi hijo, que es de tu edad, es un fanatico de la limpieza, mientras que su novia no, pero sabe cocinar lo cual me alegra porque mi hijo no le sale muy bien que digamos la comida. Ambos son buenos en los que le otro no, y asi son felices. Aunque admito que no estoy lista para ver a mi hijo crecer tan rápido.-sonrio nostalgica ante eso.

-Es una gran maestra-comento Bertholdt-... y estoy seguro que también es una gran madre- se atrevio a decir, por miedo a que lo tomara a mal. Pero al verla sonreir se relajo.

-Eres un chico muy dulce a pesar de ser un grandulon, quedan muy pocos como tú. Estoy segura que la hica que sea tu novia será muy afortunada.

Bertholdt se sonrojo ante eso.

-Suficiente de cosas personales es hora de seguir con la clase- volvio a su papel de maestra.

Cuando la clase termino, el salón estaba vacio, excepto por Hitch quien aún no terminaba su vestido, seguía comentiendo el mismo error y debía de comenzar de nuevo.

Bertholdt tambien se había quedado, ya que su maestra tuvo que salir a atender una llamada y no quería dejar a Hitch sola por miedo a que arruinara la maquina de coser, asi que Bertholdt se ofrecio a vigilarla.

Aunque no estaba vigilándola, aprovecho que nadie lo veía para ver su video favorito. Estaba tan hipnotizado por el video que no supo el momento en que Hitch estaba sentada a su costado.

-¿Asi que te gusto tanto la revolucion del campamento Tybur que lo descargaste en tu teléfono?

Bertholdt se asusto tanto que no pudo evitar caerse de su asiento.

-¿Cómo lo sabes?

-Porque estuve ahí, y se que lo descargaste porque ya no esta en internet.

-¿Estuviste ahí?

-Si, pero no salgo en el video porque lo que menos quiero es que mis padres lo sepan. Esperan a que sea una chica educada y ejemplar- se frustro un poco por eso- pero ese no es el tema, ves ese video con mucha fascinación, ¿acaso te llama la atención alguna chica de ese video?

Bertholdt se sonrojo como tomate maduro.

-¡Lo sabia! Dejame adivinar- penso un momento- ¿Acaso será Ymir, la loca que hizo todo eso posible?

Bertholdt solo desvio la mirada.

-¡Acerte de nuevo!

-Espera, ¿la concoes?

-Si, vamos a la misma escuela- se le ocurrio una idea para aprovechar la situación- Te parece si hacemos un trato, yo te cuento de ella si a cambio me ayudas a hacer mi vestido.

-Mmm esta bien.

Bertholdt comenzo a hacer el vestido de acuerdo a los patrones, mientras tanto Hitch contaba todo lo que sabia de Ymir, al parecer era amiga de Annie, su ex novia, y era muy atrevida y no se callaba nunca al dar su opinion. Con cada cosa que sabia de ella se fascinaba más, pero se incomodo un poco cuando Hitch se sento a su lado y se acerco mucho.

-No hagas eso- Bertholdt se puso de pie para alejarse.

-Que mojigato eres- se quejo Hitch- Ya te dije que Ymir es atrevida, asi que no creo que le agrade un chico tan timido como tú.

Bertholdt se desilusiono un poco ante eso, por lo que volvió a sentarse y trabajar.

-¿Como puedo hacer para hablarle? Me pongo nervioso de solo estar cerca de una chica.

-Podrias usar una grabadora-propuso Hitch- cuando sientas nervios, cuando este cerca, solo reproduce la grabadora.

-¿Y donde...

-Se donde vive, además los fines de semana ayuda a su padre en su taller, asi que tienes una excusa para ir a su casa. Solo necesitas un auto, pero ese ya es problema tuyo. Yo solo puedo ayudarte con lo que diras- saco una libreta de su bolso y una pluma, anoto unas cuantas cosas, rompio el papel y se lo dio.

-Gracias- Bertholdt tomo el papel- Por cierto, ya esta.

-¡Ahhh!- Hitch no pudo evitar gritar de la emoción al ver su vestido- Odio admitirlo pero si tienes talento para esto- le quito el vestido y comenzo a admirarlo- eso te será muy útil cuando te cases con Ymir, porque dudo que ella sepa coser un boton.

Berthldt se volvio a sonrojar.

Antes de que se pudiera decir algo más, Kuchel regreso y al ver el vestido terminado, pidio que se retiraran porque ya debía cerrar el salón.

Una vez en casa, Bertholdt ya tenia todo grabado en su telefono, pero aun faltaba algo, consguir un auto. Primero penso en el auto de su padre pero recien lo habia recoogido del taller, asi que descarto ese. Luego recordo que su abuelo tenia un auto viejo, podría ser la mejor opcion. Aunque tampoco queria dañar algo que era preciado para su abuelo.

Pasaron algunos días hasta que tomo una decisión.

Si era la única forma de poder acercarse a Ymir, de forma supuestamente casual, lo haria. El dia que visito a su abuelo y vio que este estaba bien dormido, fue silenciosamente hacia la cochera donde estaba el auto, abrió el capo y vio el motor.

Suspiro un par de veces y cogio la palanca, la cual levanto por encima de su cabeza. Trato de pensar en Ymir todo el tiempo pero aun no se atrevia a dañar el auto de su abuelo.

-Es inutil, no puedo-bajo la palanca.

-Bertholdt, ¿qué haces?-pregunto su abuelo por detrás.

Bertholdt se asusto tanto que dejo la palanca sobre el motor.

-Lo siento- Bertholdt se disculpo con su abuelo- e-es que....-no sabia como explicarlo.

-¿Haces esto por una chica?

Bertholdt se sonrojo y asintió.

-No se que tenga que ver el auto, pero si es por una chica te ayuda- Tomo la palanca y comenzo a golpear el motor del auto un par de veces- Listo, es suficiente para que pueda andar unos cuantos metros, despues se detendrá y necesitara que lo revisen- miro a Bertholdt- ¿Recuerdas tus lecciones de conducir?

-S-si.

-Muy bien- saco las llaves de su bolsillo y se las dio- entra al auto, yo abrire la puerta de la cochera.

Bertholdt hizo caso y entro al auto, metio la llave y se puso en marcha. Uso la aplicacion de google maps para llegar a la direccion que Hitch le dio.

Unos minutos despues logro llegar al taller, justo a tiempo porque del capo comenzaba a salir humo. Lo que lo obligo a salir.

-Buenos días- se le acerco justo la persona que quería ver- Vaya, ¿Cuál es el problema aqui?

Bertholdt se quedo hipnotizado al verla, era más hermosa en persona que en el video, aun con las manchas de grasa en la cara y manos.

Salio de su ensoñación cuando Ymir golpeo sus manos frente a su rostro.

-Ey, te estoy hablando.

-Amm...yo...- Bertholdt en verdad no sabia que decir, agradecia que Hitch le recomendara mejor grabar lo que diria.

-Ya veo, primer auto- Ymir le resto importancia a Bertholdt y fue a revisar el auto- Si abriera el capo seria muy útil- y tan directa como siempre.

Bertholdt hizo lo que se le pidio y abrio el capo.

Mientras miraba como Ymir revisaba el motor del auto, decidio de que era momento para reproducir las grabaciones.

"Hola Ymir"

"Te vi en el video de la revolución en el campamento Tybur"

"Me sorprende mucho que tu sola hayas sido capaz de tanto"

Ymir dejo de revisar el motor y volteo a verlo.

-Al parecer tengo un admirador- comento divertida.

Bertholdt balbuceo un poco y como se puso nervioso sus manos sudaron, tanto que su telefono resbalo de sus manos. Lo bueno es que Ymir lo sostuvo y reprodujo la utima grabación

-"Me gustaría invitarte a una cita"

Despues de eso se escucho un fuerte golpe, como si alguien se hubiera golpeado la cabeza. Y asi fue, Karl se golpeo la cabeza con el capo del auto auto que estaba reparando al esucchar la palabra cita dirigida a su hija.

Ymir le hizo una señal para que no prestara atención, lo que calmo a Karl y regreso al trabajo.

-Dos cosas, eres un cobarde por traer esto ya grabado en lugar de decirmelo a la cara-levanto un dedo- Y segundo, con gusto saldré contigo. No todos los días alguien me recuerda mi último verano y lo divertido que fue.

Se volvió a escuchar otro fuerte golpe, que venia del mismo sitio.

Ymir le volvió a hacer otra señal.

-Ven por mí mañana a medio dia, en cuanto a tu auto- miro el motor- Parece que fue atacado con un objeto duro varias veces, tuviste suerte de poder llegar aqui antes de que se echara a perde. Asi que debo revisarlo mas para calcular cuanto es el daño y el tiempo que tomara repararlo, ¿estas de acuerdo con eso?

-Si, digo vendre por ti a esa hora... y del auto... también.

Ymir rio al verlo nervioso.

-Muy bien- le entreogo su telefono- Nos vemos mañana.

Bertholdt solo asintio y se fue, tambien porque el hombre que se parecia mucho a Ymir no dejaba de verlo mal. De seguro era su padre, uno muy sobreprotector.

Pero luego penso en como paso todo, fue muy rápido. Hitch no exageraba con que Ymir era muy directa con lo que quería y decia. Pero eso solo hacia que le gustara más. Comenzo a pensar en que podria hacer en una cita, no podia compararla con Annie, asi que le pidio consejos a su amigo Reiner, aunque no creia que a Ymir le gustaran las cursilerías.

Al dia siguiente, Bertholdt estaba más sonroiado que nunca.

Tomo aire varias veces antes de tocar la puerta de la casa de Ymir.

-¡Llegaste!- quien le recibio fue Ymir, quien lo sujeto del brazo- Mamá, el es Bertholdt. Papá ya lo conoce porque vino ayer al taller. Iremos al cine y de ahi por un helado. Adios- comenzo a caminar e hizo que Bertholdt hiciera los mismo.

-U-un gusto en conocerlo- fue todo lo que pudo decir Bertholdt antes de caminar.

-Ya cambia esa carta, Karl- le pidio Hasna.

-Ese chico no me agrada.

-A ti no te agrada ningún chico que se atreva a hablarle a Ymir.

-Tengo mis razones, recuerda lo que paso con Marco.

-Es un buen chico, y ella se aprovecho de que le teniamos confianza para hacer lo que hizo.

-Que bueno que le di mi llave inglesa, asi lo podrá golpear si se sobrepasa.

-Lo dudo mucho, mejor tomate un té hasta que regrese- lo tomo del brazo y lo arrastro hacia adentro.

-¿Y tu porque tan tranquila?

-Lo veo como una oportunidad para que Ymir sea mas femenina, si quiere conquistar a ese chico de seguro comenzara a cambiar su aspecto.

-Eso me agrada menos, lo importante no siempre es el exterior sino el interior, si algún chico va a salir con mi hija debe de aceptarla como es.

-¿Acaso tu no te enamoraste de mi por mi aspecto?

-No, la verdad no- enfrento a Hasna y despues se fue.

Volviendo con Bertholdt e Ymir.

Habian ido a un cine, pararon en una cafetería donde pidieron un helado cada uno.

-No voy a mentirte- comenzo a hablar Ymir- me sorprende que hayas visto el video de la revolucion o no digas que soy una feminazi por destrozarlo todo, ¿o de verdad piensas eso y estas finginedo solo para acercarte a mi y despues burlarte?- lo miro acusatoriamente.

-N-no, no, lo juro- Bertholdt se puso nervioso ante su mirada- E-Es solo...que...soy muy timido- se sonrojo y bajo la cabeza.

-Por tu tamaño nadie lo creeria- opino Ymir- Pero pareces sincero y los estereotipos me importan un carajo. Asi que, ¿quieres ir al cine o no?

Bertholdt levanto la cabeza y asintio.

-Muy bien, vamos a ver los juegos del hambre en cuanto terminemos de comer.

-¿Qué quieres ver?

-Los Juegos del Hambre, quiero ver si es tan malo como lo dicen.

-De acuerdo- Bertholdt solo sonrio y continuo comiendo su helado, esa chica en verdad era diferente a Annie, quien era mas fría y reservada cuando hablaba, aunque con el tiempo consiguio que se abriera un poco y vio su lado dulce. En cambio Ymir era demsiado honesta y directa en su forma de hablar.

Unos segundos después.

-La pelicula ya va a empezar-Ymir miro la hora en su telefono- Vamos antes de que empiece y tengamos que esperar para la siguiente función- dejo el dinero de su pedido sobre la mesa y se puso de pie- Andando.

-S-Si- Bertohldt termino de comer rapido y dejo el dinero de su helado, despues corrió un poco para alcanzar a Ymir.

En el cine cada uno también pago su pedido.

Despeus de la película, Bertholdt acompaño a Ymir a su casa.

-La verdad fue peor de lo que me contaron, es cliché a su máximo nivel ¿Tú que opinas?

-Bueno, ultimamente todo es cliché, como en Crépusculo. Aunque esa es peor porque no representa para nada a los vampiros.

-Exacto, además la mayoría de actores tienen cara de estreñidos.

Ambos rieron ante eso.

Se la pasaban tan bien juntos que no se dieron cuenta el momento en que llegaron a la puerta.

-Fue una salida divertida- Ymir saco su llave para abrir la puerta, pero esta fue abierta por Karl.

-Llegaron con un minuto de sobra- miro su reloj- Ya es hora de dormir- hizo que Ymir entrar a la casa y cerro la puerta sin despedirse.

Bertholdt miro por unos segundos la puerta, supuso que nadie saldria asi que decidio dar media vuelta e irse.

Pero luego escucho abrír la puerta, dio la vuelta y se dio cuenta que era Ymir.

-Se me olvido decirte, pasa por tu auto la próxima semana.

-De acuerdo- Bertholdt sonrio porque seria otra oportunidad para verla, asi que eso vasto para hacerlo sonreir.

La siguiente semana no pudo evitar escapar de Hitch y Reiner, quienes el preguntaban como les fue en su cita, a mala gana tuvo que contarles. Cuando llego el sabado se arreglo un poco, pero no tanto para no parecer muy exagerado y fue al taller del padre de Ymir.

-Hola, Bertholdt- salio de nuevo Ymir- Tuve que intercambiar algunas piezas, nada importante, también ya di una vuelta para probar como corria y quedo como nuevo- palmeo el auto y le extendio las llaves.

-Gracias- Bertholdt extendió las manos para sujetar las llaves pero Ymir no le dejo.

-Te las doy si antes me respondes esto, ¿saldras conmigo este fin de semana también?

Bertholdt se sonrojo ante eso pero asintio.

-Muy bien- le lanzo las llaves- Porque quiero ir al cetro comercial a buscar una camiseta de Death Note. Nos vemos el domingo a la misma hora.

Bertholdt atrapo las llaves como pudo, entro al auto y se fue.

Al llegar a casa de su abuelo, este le pregunto como le fue y Bertholdt le conto que consiguió una segunda cita, lo que hizo que su abuelo lo abrazara fuertemente.

Al domingo siguiente.

-Siempre me ha lllamdo la atención la mecánica, tuve suerte de que mi papá tuviera su propio taller, el me enseño todo lo que se y por eso mis ganas de estudiar ingeneria mecanica- explicaba Ymir para despues dar un sorbo a su milkshake.

-Bueno, es algo raro, pero si es lo que te gusta entonces me parece bien- comento Bertholdt en un tono bajo.

-Gracias, lo malo es que mi mamá no esta muy de acuerdo con eso. Preferiria que estudiara algo más femenino- comento.

-Bueno, algunos padres son asi.

-¿Y tú que estas interesado en estudiar?

-Pues...-Bertholdt penso un momento en decírselo o no-... me gustaría ser maestro de jardín de niños.

-Al parecer no soy la única rara- bromeo un poco Ymir- Se ven muy pocos maestros de jardín de niños, pero seria bueno romper ese estereotipo.

-Gracias, me gustan los niños y pienso que si les enseñamos a no entrar en estereotipos la sociedad avanzaría.

-Eso seria bueno para eliminar el machismo- opino Ymir- ¿Y que piensan tus padres?

Bertholdt se quedo callado ante eso, la verdad nunca le había dicho nada a sus padres sobre lo que quería estudiar porque ellos ya tenían sus exceptativas de lo que debía de estudiar por ser hombre, principalmente decian que seria un gran medico, lo cual Bertholdt no estaba totalmente de acuerdo porque de solo ver sangre sentía que se desmayaría.

Agacho la cabeza al recordar eso.

-¿Qué pasa? ¿Dije algo malo?

-on, nada- Bertholdt levanto un poco la mirada para verla- Es solo que... no le he dicho nada a mis padres... por miedo a que no esten de acuerdo.

-Ya veo, padres muy conservadores.- Ymir acerco su mano a la de Bertholdt hasta tocarla.

Bertholdt se sorprendio y sonrojo al contacto.

-Oye, como me dijo mi papá hace algunos días, lo importante es que nunca renuncies a tus sueños.

-Muchas gracias por el consejo, lo tendre en cuenta- eso le dio animos a Bertholdt, mas el miedo de enfrentar a sus padres aun lo asustaba un poco.

-Bueno, es hora de irnos- miro la hora en su teléfono- No querras ver a mi papá molesto.

-No, mejor ya vamos- de solo pensar en eso Bertholdt sintio escalofríos.

-Pero antes, intercambiemos números telefonicos. Ya que se arreglo tu auto, no podras ir a visistarme al taller y no podre saber si quieres otra cita.

-Cierto- Bertholdt saco su telefono e intercambiaron numeros

Una vez hecho eso, Bertholdt dejo a Ymir en la puerta de su casa, pero esta vez Ymir le dio un beso en la mejilla antes de que su padre saliera y la hiciera entrar.

Solo con ese simple gesto Bertholdt se sintio el chico más afortunado del mundo.

El domingo siguiente fue su tercera cita.

Ahora se encontraban echados en una manta, mirando al cielo.

-Y asi fue como termine en ese campamento de mierda y cree esa revolución- contaba Ymir mientras miraba el cielo

-Vaya, es increíble que tu mamá te enviara ahí sin dudarlo- opino Bertholdt

-Mi mamá tiene la mente más cerrada que una caja fuerte, apuesto que daría todo lo que tiene para que me comportara como la señorita que espera que sea algún dia, pero ni de chiste pienso dejar de ser yo misma.

-Eso no es justo, tú eres tú y ella es ella... y a mi me gustas como eres- susurro lo ultimo.

Ymir rio un poco ante eso.

-No me había dado cuenta, pero contigo disfruto todo, hasta lo que veo todos los días- Ymir se levanto un poco para mirar a Bertholdt- nunca pense que diria esto, porque solo hemos salido tres veces pero creo que me gustas- dijo eso desviando un poco la vista.

-¿De verdad?- pregunto Bertholdt algo emocionado.

-Si, pero un poco, eres diferente a los demás y no solo porque te guste las costura. Sino porque eres de los pocos chicos que se sonrojan con el halago de una chica.

-Gracias.

Ymir tomo a Bertholdt del cuello y lo atrajo a sus labios, fue algo rápido pero muy importante para Bertholdt, tanto que se quedo inmóvil en cuanto se separaron.

-Lo siento, pero si yo no lo hago nunca hubiéramos dado el siguiente paso.

-¿Eso significa que seguiremos saliendo?

-Claro, y espero que me contestes los mensajes y llamadas.

-Lo hare con mucho gusto.

-Por nosotros- Ymir tomo una de las latas de soda y la levanto.

-Por nosotros- Bertholdt hizo lo mismo y chocaron las latas para despues beberlas.

Estaban tan concentrados en ellos mismos que no se dieron cuenta que eran vigilados por cierto par de hermanos.

-Asi que lo que decia la bocona de Hitch era cierto, Ymir tiene novio- comento Porco

-Y de nuevo no soy yo- se lamento Marcel.

Porco le golpeo la cabeza a Marcel.

-No olvides que esa marimacha te dejo un ojo morado, y por su culpa Pieck me dejo.

-Crei que te había dejado porque se entero que aprovechabas el campamento para espiar a las chicas en la ducha.

-Si, porque Ymir se lo dijo. Es por eso que quiero vengarme de ella.

-¿Y como lo haras?

-Facil, averiguaremos si los padres de ese giganton están de acuerdo con que su hijo salga con una mecánica- Porco saco su telefono y le tomo fotos a la feliz pareja- Nada más necesito fotos de cuando este trabajando en el taller y la direccion de donde vive ese chico.

-¿Crees que funcione?

-Por supuesto que si, ya vamonos antes de que nos descubran- Porco comenzo a caminar, pero se dio cuenta que Marcel seguía viendo con tristeza la escena- Dije que nos vamos- lo jalo del brazo para que caminara.

Dias después.

Ymir se encontraba como siempre en el taller de su padre ayudándolo a arreglar los autos que le llegaban, un fin de semana tranquilo como cualquier otro, hasta que una mujer de baja estatura, cabello castaño y ojos verdes entro al taller.

-Buenos días- Ymir la atendio mientras se limpiaba las manos-¿en que puedo ayudarla?

La mujer la miro de pies a cabeza.

-Asi que tu eres la dichosa Ymir- comento la mujer usando un tono de desagrado- Que asco, tienes la cara manchada de grasa.

-¿Y usted quien es? ¿Como sabe mi nombre?

-Soy Faye Hoover, la madre de Bertholdt- se cruzo de brazos- Y vengo a exigirte que te alejes de mi hijo.

-¿Disculpe?

- Lo que escuchaste, niña. Mi hijo es un chico ejemplar, por eso merece una chica que este a su altura y no arruinar su vida con alguien como tú.

-¿Alguien como yo?

-Si, una marimacha que apesta a grasa para motor.

-Oiga- Karl intervino- No se quien se cree pero si piensa que me voy a quedar callado mientras insulta a mi hija, esta muy equivocada.

-No me importa, no pienso permitir que esta chica le arruine la vida a mi hijo, si fuera mi hija se me caería la cara de la verguenza.

Antes de que Ymir y Karl pudioeran decir algo, Hasna se hizo presente.

-Oiga señora, ¿ya termino de decir sus tonterías respecto a mi hija?- Hasna camino hasta quedar frente a frente de Faye.

-Supongo que ustede es la madre, usted si muestra ser una dama, lastima que su hija sea un caso perdido.

-¿Ya termino?

-Si, aunque me quede corta pero el asco que siento no me deja hablar.

-Muy bien, como ya termino de hablar ahora es mi turno de defender a mi hija.

-¡Ja! dudo que...- Faye no pudo continuar hablando porque recibió una fuerte cachetada, tanto que casi pierde el equilibrio- Totalmente desconcertada se toco la mejilla y miro a Hasna.

-Ahora escúcheme, vieja bruja- su tono era tenebroso- Usted no es nadie para venir al taller de mi esposo, y para colmo insultar a mi hija. Y si cree que me avergüenza mi hija no es asi, de hecho estoy orgullosa que tenga la valentía suficiente para mandar a la mierda a gente como usted, pero quiero que sepa que no esta sola, nos tiene a mi y a su padre que siempre la vamos a aportar y protegerla. Asi que si no quiere otro golpe larguese de aquí. Ahora- señalo la salida.

Faye, con las piernas temblorosas dio media vuelta y comenzó a caminar.

-No me jodas, mamá- Ymir se sorprendio ante el comprtamiento de su madre, nunca antes la había visto asi.

-Lenguaje...para las dos- Karl también estaba sorprendido.

-Mi niña- Hasna dio media vuelta y fue a abrazar a su hija- Lamento tanto el querer cambiarte.

-¡Ahora veo que la culpa no es del padre, sino de la madre!- exclamo Faye a mitad de camino.

Hasna deshizo el abrazo y camino hacia Faye.

-¡¿Qué dijo?!- levanto su puño.

Faye salio corriendo de ahí.

Karl e Ymir no fueron los unicos sorprendidos, los demás empleados del taller se le quedaron viendo como si fuera una desconocida

-¿Y ustedes que me ven?- les cuestiono- Regresen a trabajar que para eso mi esposo les paga.

Los demas mecanicos por miedo volvieron a sus labores.

Hasna suspiro.

-Como dije, lamento haberte intentado cambiarte, hija- Hasna se acerco a su hija y la abrazo.

-Mamá, te voy a manchar.

-Eso me importa un carajo ahora- Hasna no deshizo el abrazo.

-Yo tambien te quiero, mamá- Ymir al final se rinrio y coreondio al abrazo.

-Y yo las amo a ambas- intervino Karl, ¿pero seria mucho pedir que cuidaran su lenguaje?

-Siempre tan correcto- Hasna rodo los ojos y rio- Omitelo al menos por hoy.

-Pero, si no fuera mucho pedir, me podrias explicar este cambio tan repentino de actitud-pidio Ymir.

-Oh eso- deshizo de nuevo el abrazo- Es una larga historia.

-Pues cuéntamela.

-Yo también quiero escucharla- pidió Karl.

-¿Pero y el taller?

-Que se encarguen ellos, son empleados fieles.

-De acuerdo. Vamos adentro.

Los tres entraron a casa, Hasna sirvió té para los tres y se decidio por hablar.

-A tu edad era como tú, me vestia como quería, tenia el pelo corto y pintado de varios colores, y me importaba un carajo lo que dijeran de mi, claro que volvia locos a tus abuelos por eso, me repetian a cada rato que era mujer y que debía vestirme como tal. En la escuela usaba uniforme, pero odiaba usar faldas porque me parecias super incomodoas y me inmovilizaban, por eso me ponía el uniforma para hombres; más de una vez el director me llamo la atención. Esparcieron el rumor de que era lesbiana porque no aceptaba los coqueteos y golpeaba a los descerebrados de la escuela y por mi forma de vestir, me sorprendio incluso escucharlo de mis supuestos amigos. La verdad no me importaba, mas bien me hacia sentir importante. Tambien siendo expulsada por darle una bien merecida paliza a un par de taradas que me atacaron en el baño. Tus abuelos se hartaron y me mandaron a un internado para señoritas, donde no podía usar otra cosa que no fuera el uniforme. Cuando sali de ahí conoci a tu padre, el me conocio disfrazada asi y pensé que se enamoro de mi por mi apariencia, asi que decidi enterrar a la antigua yo y ser como todos esperaban que fuera. Y cometi el error de querer hacerte lo mismo- no puedo evitar que unas lágrimas salieran de sus ojos al terminar de decir eso.

-Oh, querida. Eso no es cierto- Karl se sento a su lado y le acerco un pañuelo- me enamore de ti porque dijeron que tu fuiste la que metio la cabeza de Grisha Jaeger y Greg Galliard al inodoro, esos dos eran los peores acosadores de la escuela. Te busque por todas parte, pero me dijeron que ya te habían expulsado, no descanse hasta encontrarte.

Hasna sonrio al eschucar eso.

-Te amo- ambos se unieron en un beso lleno de amor.

-Oigan, sigo aquí- Ymir movio sus manos para que se dieran cuenta de su presencia.

Karl y Hasna rieron por eso.

-No te guardo rencor, má- dijo Ymir- Se que me querias ahorrar sufrimiento, como este, pero yo soy yo y me gusta.

-Saliste peor que yo- comento Hasna antes de reír.

Ymir también rio, luego se acerco a sus padres y se unieorn en un gran abrazo familiar, se sentia feliz porque al fin su madre aceptaba como era, pero por dentro le dolio que Faye le dijera todo eso.

Fue por eso que llamo a Bertholdt y le conto todo lo que le dijo su madre, además de un posdata diciendo que no lo quería volver a ver. Luego de eso bloqueo su número de telefono.

Bertholdt estaba entre destrozado y enojado con su madre, tanto que paso de visitar a su abuelo para ir directo a casa y exigir una explicación. Al llegar vio asu padre mirando unos papeles, se le veía entre molesto y decepcionado, y su madre sosteniendo una bolsa de hielo contra su mejilla.

-Bertholdt, necesito hablar seriamente contigo- pidio Blake- Asi que sientate.

Bertholdt tomo asiento en el sofá pero sin cambiar su expresion.

-¿Es cierto lo que me dijo tu madre? que estas saliendo con una mecánica.

-Tienen nombre y es Ymir.

-¿Entonces no lo niegas?

-No. Y no pienso hacerlo nunca.

-¡¿Pero que te pasa por la cabeza?!- Blake se levanto de su asiento.

-Vas a arruinar tu reputacion como estrella de futbol por una chica que no vale la pena y además se viste como marimacha. Ya fue suficiente con aquellla rubia enana. Agradece que tu madre fue a decirle sus verdades, a pesar de que termino siendo golpeada por el padre de esa.

-¡Que no fue un hombre, fue una mujer!- reclamo Faye.

-Ya te dije que no digas tonterías.

-¡Ambos calllense!- Bertholdt levanto la voz, tanto que Blake y Faye lo miraron con asombro- Ustedes no me conocen en lo mas minimo, solo ven lo que esperan de mi y ya me harte de callarme lo que pienso.

-¿De que estas hablando?- Blake estaba sorprendido, por lo general Bertholdt nunca alzaba la voz.

-Hablo de que nunca estuve en el equipo de futbol americano, me expulsaron cuando audicione porque no podía retener el balón en las mano. Lo que hago despues de clases es irme a las clases de costura que me paga el abuelo, esa persona que olvidaron hace tantos años por ocuparse únicamente de ustedes mismos. Él si me escucha y me apoya. Me consolo cuando espantaron a Annie con sus prejuicios- lagrimas comenzaron a salir de sus ojos- Y ahora hicieron lo mismo con Ymir. No saben cuanto los odio- se fue corriendo hacia su habitación, donde se encerro con llave y siguio llorando.

-Bertholdt- se escucho la voz de su padre por detrás de la puerta y unos golpes- Ya te lo dije antes. Ni se te ocurra llorar. Los hombres no lloran y menos por mujeres que no valen la pena.

-¡Callate de una maldita vez! ¡Te odio! ¡No te quiero volver a ver!- continuo llorando.

No salio de su habitación ni al dia siguiente, pudo soportar su hambre porque aun tenía su merienda. Pero su depresion por perder aYmir lo hizo incapaz de querer levantarse de la cama, ni siqueira atendio el telefono, no queria saber nada de nadie. Se sentía destrozado recordando las palabras de Ymir.

Sus padres no le prestaron atención, pensaron que se le pasaría pero no fue asi.

Iban a tocar de nuevo la puerta pero escucharon que tocaron la puerta principal, Faye abrió y se encontro con su suegro, quien pregunto rápidamente por Bertholdt. A lo que Faye dijo que estaba haciendo un berrinche por una chica que no valia la pena, eso enojo mas al anciano, tanto que obligo a ambos a sentarse mientras el hablaba.

-Estoy muy decepcionado de ambos, no tienen ni el más minimo derecho de hacerle eso a mi nieto, ya fue suficiente con que espantaran a Annie.

-Yo no me arrepiento de eso- se defendió Blake- por lo que he escuchado esa chica ahora sale con un chico afeminado que le gusta vestirse de gato.

-Ese no es tu problema, Blake- le llamo la atención- No tienen derecho a meterse en la vida de otros que no lastiman a nadie solo por gustarle algo diferente, y tu Faye- miro a su nuera- Te tienes bien merecido ese golpe, daberia de darte vergüenza, ir a insultar y ofender a una chica solamente porque le gusta la mecánica. Es por eso que Bertholdt no les dijo nada, por miedo a que la espantaran y terminara con el corazón roto. Aunque en parte es mi culpa por educarte asi, Blake.

-No es nada, ya se le pasara- se excuso Blake- Y cuando este mejor lo hare meterse en el equipo de futbol americano, no voy a permitir que este en cosas de niña.

-¡Ya basta!- el anciano golpeo la mesa, lo que asusto un poco a su hijo y nuera- No voy a permitir que obliguen a mi nieto a nada, ya ha tenido suficiente con lo que le hicieron. Asi que si quieren que los perdone van a ir a disculparse con esa chica y sus padres.

-Ni creas que voy a hacer eso, no voy a disculparme con gente que no vale la pena.

-Ni yo- le siguio Faye.

-Muy bien, entonces me llevare a mi nieto a vivir conmigo- se puso de pie.

-No puedes hacer eso, Bertholdt es mi hijo.

-Y yo su abuelo, y puedo demostrar que estará mejor conmigo que con ustedes. El ha sido la única persona que se ha tomado la molestia para visitarme y pasar tiempo conmigo, en lugar de verme como una carga y dejarme olvidado.

-...-Blake no supo que decir ante eso- papá yo no...

-No quiero escucharte tus excusas, Blake- le callo el anciano- No se de quien aprendiste eso, pero no te eduque para dejarme olvidado, ¿acaso quieres que Bertholdt te haga lo mismo a ti y a tu esposa?

-...-

-Aunque dudo que lo haga, es un chico bueno de corazon como para olvidarse de su familia. Y he apoyado sus clases de costura porque su trabajo me recuerda al de tu madre, es una lastima que tu lo veas como una tonteria- se puso de pie y camino hacia la salida- Vendre mañana, y espero que vayan a disculparse con aquella chica, de lo contrario ya saben lo que hare- cerro la puerta.

Al dia siguiente

Blake y Faye iban, a mala gana, al taller de Karl, detrás de ellos iba Basilio, quien iba para vigilarlos. Pero al llegar al taller se encontraron con una escena un tanto incomoda, ya que vieron a Karl y Hasna besandose.

Basilio carraspeo un poco, lo que provoco que Karl se diera cuenta de que tenían compañía, por lo que se separo de Hasna, se hubiera avergonzado de no ser por ver que Faye estaba devuelta, por lo que su mirada era de enojo.

-¿Vienes a insultar a mi familia de nuevo, Faye?- pregunto Hasna acercandose- Porque dejame decirte que traer a tu esposo y suegro no me intimida en lo más minimo, asi que si no quieres que te marque la otra mejilla con mi mano es mejor que te vayas- señalo la salida.

Faye solo se toco la mejilla y temblo de miedo.

Basilio decidio intervenir.

-Señor y señora Fritz, mi hijo y nuera quieren decirles algo- al ver que ninguno hablaba, golpeo con su mano la cabeza de Blake.

-Lamento mucho haber insultado a su hija- hablo Faye- Me deje llevar por mis creencias de como debía ser una mujer y...

Hasna la detuvo.

-No necesito disculpas falsas de ustedes, mi hija esta dolida y lo que menos necesita ahora es a gente tan falsa como ustedes. Olvidenlo.

-Pues opino lo mismo, mi hijo no necesita por novia a una marimacha mal educada como su hija, que se nota que es igual o peor que usted.

-Largate antes de que te de una paliza.

Basilio de nuevo inetervino.

Lamento mucho el comportamiento de mi nuera, señora Fritz. Y lamento tambien haberlos hecho perder el tiempo. Tengan un buen dia- despues miro a Blake y Faye- En cuanto a ustedes, se los adverti, me llevare a mi nieto a vivir conmigo.

Faye se asusto ante eso y hablo.

-Esta bien, esta bien, danos una semana para asimilar esto porque no es fácil- pidió- Haremos lo posible para aceptar como es Bertholdt.

Basilo miro a su hijo esperando respuesta.

-¿Tu que dices, Blake?

-Esta bien.

-Al fin hablas, pense que eras mudo- comento Karl.

-No me provoques- advirtio

-No te tengo miedo- Karl le hizo frente, se iba a acercar más sino fuera porque Hasna no le dejo.

-Querido, no pelees, la sangre es dificil de limpiar.

Basilio se dio cuenta que había mucha tensión entre las familias, asi que penso en una solucion.

-¿Qué les parece si invitamos a otras parejas para que nos entendamos mejor?-propuso

-Me parece bien- opino Hasna- invitare a la familia Arlet.

-¿Arlet?-pregunto Blake-¿Ese no es el apellido de esa chico afeminado que sale con Annie y...- no pudo terminar su pregunta porque Hasna lo golpeo en la cara, fue tan fuerte el golpe que lo tiro al piso

-Oh, lo siento- fingio estar apenada- Bueno, en realidad no lo siento, están hablando mal del amigo de mi hija, y además la madre de ese chico ayuda a mi hija en sus diseños de motores. Asi que si los insultan es como si nos ilsultaran a nosotros.

Basilio solo sonrio, estaba fleiz que alguien pusiera en su lugar a su hijo.

-¿Ahora me crees?-le pregutno Faye a Blake.

-Esa mujer debe de tener algo en la mano- Blake se puso de pie como pudo y se limpio la sangre de su nariz.

Hasna mostro su mano, con la que lo golpe, en donde solo estaba su anillo de bodas.

-No tengo nada, pero si gusta lo puedo golpear con la otra mano.

-Creo que entiendo, señora Fritz- Basilio intervino de nuevo.

-De acuerdo, no vemos en una semana en el restaurante de los Blous. Aquí tienen la dirección- Karl le extnedio un pedazo de papel.

-Gracias- Basilio acepto el papel y se llevo a empujones a Blake y Faye.

Toda esa semana Basilio visito a su nieto y le explico todo el esfuerzo que hacia por arreglar las cosas, pero que si quería aun seguía la opción de mudarse con el. Bertholdt se lo agradeció, pero a pesar de todo no quería lastimar a sus padres, aunque prometio pasar mas tiempo con su abuelo. Ademas de dejar de mentir a donde iba después de la escuela.

Cuando llego el fin de semana los padres de Bertholdt se fueron a la cena, dejando a Bertholdt solo en casa, algo que no le agradaba mucho por tantas películas de terror que vio con Renier, pero recibió una llamada de su abuelo y decidio que seria mejor ir a visitarlo.

Lo que no esperaba es que su abuelo ya tuviera compañía, y no era cualquier persona, era Ymir, con quien estaba jugando cartas.

-Hola Bertholdt- le saludo Basilio como si nada pasara- Invite a esta encantadora joven para que hablen, es muy buena jugando cartas, pero no tanto como yo- mostro sus cartas- Flor corrida de diamanates.- dijo orgulloso y quiso llevarse la ganancia, que eran varios dulces y una llave inglesa.

-Alto ahí- le detuvo Ymir- Yo gane- mostro su baraja- Una flor imperial. Gane- tomo las ganancias- Me moriria si pierdo la llave inglesa que me dio mi papá, la uso para protegerme de idiotas.

-Es demasiado buena- comento Basilio rendido, para despues estirar sus brazos por encima de su cabeza- Bien, es tarde para mí, asi que me voy a dormir. Ustedes quedense de seguro tienen mucho de que hablar.

-Abuelo, no te vayas- le suplico Bertholdt, pero Basilio hizo caso omiso y se fue a su habitación. Bertholdt volteo a ver a Ymir- Ammm...lamento todo lo que te dijo mi mamá.

-Nah, esta bien. Admito que me dolio al pincipio, por eso te llame y te lo dije, luego se lo conte a mis amigas y me entere que eres el ex de Annie.

Bertholdt se puso palido ante eso.

-No me molesta eso, ni que Hitch nunca te lo haya dicho, esa siempre dice lo que le conviene. Solo que me sorpende que hayas salido ileso despues de todo lo que le dijeron a Annie.

-Se me rompió el corazon cuando Annie se fue de la escuela, pero creo que fue lo mejor porque ya tiene un nuevo novio y mejores amigos, la mayoría de chicos de mi escuela se burlaban de ella porque decían que era muy masculina por practicar boxeo. Pense que nunca volveria a enamorarme, hasta que encontre ese video.

-Vaya, eso es muy cursi- Ymir abrió una de las latas de soda- Pero también lindo, y debo admitirlo pero tuvo que se necesario toda esta mierda para poder llevarme mejor con mi mamá, aunque eso no justifica el actuar de tu mamá.

-Lo sé muy bien, es por esa razón que nunca le dije nada a mis padres, tenia miedo de que te alejaran de mi lado, Ymir de verdad eres importante para mi.

Ymir sonrio ante eso y se acerco a Bertholdt.

-Tu también, fue por eso que hable con mis amigas para saber que hacer, porque no te podía sacar de mi cabeza en todo este maldito tiempo. Aunque en parte se que mi papá estaba feliz de que me alejara de ti.

-¿Hay alguna razón por la que no le agrade?

-No, solo no esta listo para verme crecer- alzo los hombres- y hay algo que me gustaria compartir contigo antes de que lo sepas por otros.

-¿Qué cosa?

-¿Como decirlo de forma sensible?- se llevo una mano a la barbilla- No tengo idea asi que sere directa, ya no soy virgen.

Eso fue como un balde de agua helada para Bertholdt.

-Tal vez por eso mi papá odia que los chicos se me acerquen, creen que todos se aprovecharan de mi. Anuque esa vez diría que yo me aproveche de Marco, era un chico dulce y educado, tanto que parecía un angel, era mi vecino hasta que se mudo, mi papá le tenia tanta confianza que me dejo estar a solas con el, pero una cosa llevo a la otra y terminamos besandonos y luego...-no pudo terminar de hablar porque Bertholdt comenzo a besarla.- Bueno, al parecer esta celoso- dijo en cuanto cortaron el beso, pero despues lo continuo.

-Eso no me importa, lo importante es que ahora estas conmigo.

-Eso es cierto, ¿quieres hacerlo aquí o ir a la habitación de huéspedes?

Bertholdt se sonrojo mucho ante eso pero luego se dio cuenta de un detalle.

-¿Cómo sabes de ...

-Tu abuelo me lo dijo, al parecer lo planeo todo, es un hombre astuto- se puso de pie y jalo a Bertholdt del brazo para que hicieron lo mismo- Veamos que otras sopresas nos tiene preparada- camino hasta la habitación de huespedes.

Fue ahí donde dieron rienda suelta a sus bajas pasiones y demostraron con sus cuerpos lo mucho que se querían. Hubiera sido perfecto si el tiempo se congelara para que se quedaran abrazados para siempre, pero Ymir debia de llegar a su casa antes que sus padres, porque se salio sin avisar. Asi que se vistieron y se despidio de ella con un beso.

Al dia siguiente sus padres le contaran que llegaron buenos terminos con los Fritz, lo que significaba que podría ver de nuevo a Ymir. Es más, los habian invitado para que el proximo fin de semana vayan a su casa a cenar y conocerse mejor. Bertholdt no podía estar mas feliz ante eso, pero debía de esconder un poco su alegria para que no sepan lo que había pasado la noche anterior.

En esa semana Blake y Faye visitaron a su suegro, de paso para ver todos los trabajos de Bertholdt que fueron enmarcados por Basilio y los que estaban por venir, ya que Bertholdt le gustaba mucho visitar a su abuelo. Blake admitio que su técnica de costura era muy apreciada a la de su difunta madre, por lo que su trabajo era muy bueno, también se disculpo con su padre por haberlo descuidado tanto y le dijo que podía ir a visitarlos cuantas veces quisiera. Ademas queria que fuera a la cena que los invito los Fritz, principalmente para evitar posibles problemas.

Cuando llego el dia Bertholdt estaba algo nervioso, no era para menos porque Karl siempre lo miraba mal. Ymir fue quien les abrió y los invito a pasar, todo normal por el momento, esperaron en el sofá de la sala hasta que Hasna vino con una bandeja con bebidas.

-Que alegria que pudieran venir- mas de uno se quedo sorprendido al verla, no por su modo de vestir ni su cabello, sino porque tenia un tatuaje grande en el cuello.

Basilio miro a Blake y Faye, en su mirada se podía ver que esperaba que no dijeran nada ofensivo.

-Que lindo tatuaje tienes, Hasna- fue lo único que se le ocurrio decir a Faye.

-Muchas gracias, queria hacermelo hace tiempo pero decarta varias veces la idea por el que diran, como mande al demonio todo eso decidi hacérmelo.

-Es un tatuaje muy interesante- le siguió Basilio- Intento leerlo pero no puedo.

-Esta en italiano, pero dice "Karl e Ymir, los amores de mi vida"-señalo la oración en su cuello.

-¿Y no te dolio?- fue lo único que se le ocurrio preguntar a Blake.

-Un poco, pero todo vale si es por mi familia.

-Tienes una forma muy original de demostrar el amor por tu familia- comento Faye.

-Te lo agradezco, Faye. Tal vez algun dia te animes a hacerte uno.

-La cena esta lista- les llamo Ymir.

Todos pasaron al comedor, la cena transcurrio con mucha tranquilidad entre charlas y risas. Hasta que llego la hora de lavar los platos, Karl arrastro a Blake a la cocina para que lo ayudara a lavar los paltos diciendo que eso no lo haría menos hombre.

Mientras tanto en la sala se encontraba los demás conversando y riendo.

-Valio la pena hechar a perder el motor de mi auto para que mi nieto pudiera hablar con su hija señora Fritz. Basilio se tapo la boca al darse cuenta de lo que había dicho, al parecer que la copa de vino le habia aflojado la lengua

Segundos despues se escucho un plato romperse y a Karl asomandose por la cocina.

-Querido, por favor calmate-Hasna trato de calmarlo- Mira el lado bueno, todo sirvió para mejorar nuestra familia.-solo de esa forma Karl se calmo.

-Te voy a estar vigilando, Bertholdt- al menos un poco.

Años despues.

-Muy bien niños, hoy vamos a dibujar a gente haciendo diferentes trabajos-Bertholdt repartia una hoja de papel a cada uno de sus alumnos- Y el primer trabajo que vamos a dibujar es un... ¡Bombero!

Los niños tomaron sus lápices de colores y comenzaron a dibujar, Bertholdt se arrodillo para estar a su altura y miraba como sus alumnos dibujaban muy entusiasmados y concentrados.

-¿Cómo se llama tu bombero?- le pregunto a uno de los niños.

-El mio se llama bombero Gary- le mostro su dibujo a Bertholdt.

-Bombero Stud- le siguió otro niño.

-Mi bombero es Sam- y una niña - el es grande y fuerte, tiene un gran caso en la cabeza- señalo su cabeza.

-Esto es divertido, ¿verdad?- les pregunto a los niños

Todos respondieron que si y asintieron.

-Ahora dibujemos un cirujano- les pidio mientras repartia más hojas de papel.- ¿Has pensado en un nombre para tu cirujano?- le pregunto a otro niño.

-Jim Bob.

-Jim Bob- repitio lo que dijo.

-El es un cirujano muy valiente- comento una niña- Yo creo que el llevaria un estetoscopio

-Bien, ahora vamos a dibujar... un ingeniero- repartio más hojas.

Los dibujos fueron iguales los dos anteriores, los niños solo dibujaban hombres.

-Muy bien- Bertholdt se puso de pie- ¿Y a quien le gustaría conocer a estas personas en la realidad?

-A mi, a mi, ami....-todos los niños levantaron la mano.

Tres mujeres entraron, una vestida con una bata blanca de doctor, otra con un traje rojo de bombero y la ultima tenia unos lentes protectores, protectores de oídos, guantes, un enterizo azul y un caso.

-Estan disfrazadas- exclamo uno de los niños.

-Por favor, presentense- les pido Bertholdt.

-Mi nombre es Hanji Zoe, soy jefa de neurocirugia- se presento Hanji con su gran sonrisa.

-Me lllamo Yelena y soy bombero en el cuerpo de bomberos de Paradis- Yelena se quito el casco para que la vieran mejor.

-Mi nombre es Ymir Fritz y soy ingeniera mecánica en una importante fábrica que se encarga del diseño y producción de maquinarias.

Todos los niños se asombraron al escuchar eso, se acercaron mas para ver a las tres mujeres y ellas muy amables les prestaron sus casos y estetoscopio.

-Ahora niños, ¿quieren rehacer sus dibujos usando de ejemplo a estas grandes mujeres?-les propuso Bertholdt.

-¡Si! ¡Si!- exclamaron todos los niños.

-Muy bien, y dejenme prensentarles a alguien especial.

Ymir se separo un poco de los niños y se sento a un lado de Bertholdt.

-Ella es mi esposa Ymir.

Fin definitivo

Listo

Termine

Se supone que este era un one-shot navideño.

Pero por abuse otra vez de la cantidad de palabras y salio esta mostuosidad.

Es un regalo para mi amiga y compatriota 

Espero que le guste.

Ahora si debo de hacer mis cosas.

Como siempre perdonen las faltas ortograficas

Espero que les haya gustado el fic

Si es asi voten y comenten

Nos vemos en esta o en alguna otra historia, ultimamente estoy con ganas de actualizar Sin Cadenas.

Es todo 

Bye

Bạn đang đọc truyện trên: Truyen2U.Pro