La última confrontación familiar:

Había llegado finalmente el día en que se terminado de convocar a todos los Loud para asistir a aquella reunión en la casa de la familia de Royal Woods, para los chicos no les gustaba ya que estarían Ruth y los demás con sus berrinches y estupideces por las relaciones que tenían cada uno con las hermanas mayores de Lincoln, el cual también estaba con sus asuntos porque debía revelar sobre su relación incestuosa con Lynn y en la que habían mejorado bastante y eran muy unidos.

Pero también había un problema y era que Lynn estaba con unos extraños antojos, cosa que ella se cuidaba muy bien y hacía mucho ejercicio, fue entonces que su hermano y novio le preguntó si estaba bien, cuando salía del baño para ver qué era lo que le estaba pasando.

- Lynn, ¿estás bien?. Preguntó el peli blanco y ella le pidió que lo discutieran en la habitación del albino.

Allí cerró Lincoln la puerta con llave y ella se sentó en la cama; lista para contarle todo al respecto de lo que le estaba pasando.

- Hace mucho que no tengo mi período. Dijo ella, cosa que su hermano sintió que se le encogía el estómago, le faltaba aire, se sentó al lado de su hermana y se llevó las manos a la cabeza.

- ¿Tuviste...tuviste antojos? ¿Cambios de humor?. Quiso saber el chico y ella asintió con la cabeza.

- Creo que estoy embarazada. Dijo ella.

- Pero es imposible, si usamos protección y Pavel nos dio la pastilla del "Día después"...Decía Lincoln, quien trataba de hallar una respuesta a esa pregunta.

La deportista lo detuvo, había una posible respuesta por lo que estaban pasando en aquel momento y esa no era para nada bueno.

- Lincoln, tal vez esté embarazada. Dio ella el anuncio y eso los dejó helados, el embarazo era bueno para una familia pero para ellos, quienes eran jóvenes, sabían que las consecuencias se vendrían tarde o tempano.

- ¿Se lo decimos a Pavel?. Sugirió Lincoln.

- Se lo diremos luego. Pidió ella, mientras que se iban preparando para la noche que tendrían.

Cuando estaban por salir, Lincoln la detuvo a la chica y se arrodilló ante ella, tomándole de las manos y arrodillarse ante ella, cosa que la dejó sorprendida a la castaña.

- ¿Estás bien, Linc?. Preguntó Lynn.

[Mientras tanto, en la planta baja]

Ya habían llegado los parientes Loud, entre ellos Ruth y Albert, el cual había saludado a todos sus nietos menos a Lincoln y Lynn, los cuales llegaron justo a tiempo, corriendo y lo abrazaron a su abuelo, mientras que se podía sentir una calma ne los alrededores, pero todo sería el principio de la confrontación que estallaría más tarde.

- ¿Así que sigues con el Ángel de la Muerte? Leni, me decepcionas. Dijo una de sus primas.

- Como que por lo menos no ando con un bravucón que pasó una noche en la Comisaría por intentar robar un auto, tú eres la más estúpida, Amber. Dijo Leni, dejándole en claro que ella estaba en lo cierto y se retiró, dejándola a la prima suya totalmente destruida moralmente.

- Eso dolió. Tuvo que aceptar Amber aquella verde.

A su vez, Mark y Luna se hallaban conversando tranquilamente, sabían que darían su importante anuncio para todos los presentes, pero algo presentía la castaña rockera, algo raro y que estaba relacionado con todos ellos y en especial con Lincoln y Lynn.

- ¡Ok, Familia, Amigos, vengan a cenar!. Les llamó el Señor Lynn, mientras que iban hacia el comedor y se preparaban para comer.

Cada uno fue con sus parejas, ocupando sus respectivos asientos, las hermanas menores fueron a la mesa de los pequeños, mientras que el resto permaneció en la de los grandes, sin olvidar a Lincoln, el cual se sentó al lado de Lynn.

- ¿Por qué toda esta reunión?. Quiso saber la castaña deportista a sus padres, los cuales se miraron y tomaron sus manos.

- Bueno, Lynn, verás, esto es para dar un importante anuncio de parte de los chicos. Dijo Rita, mientras que algunos se quedaban en silencio y otros seguían hablando.

- Espero que sea muy importante y ojala de que trate de que el Demonio tengo a mi derecha se esté por ir. Pidió Ruth, la cual estaba tomando del vaso de vino.

- Cuidado, Señora, que vertí mi sangre en su copa y es venenosa. Le "advirtió" Alexander a Ruth, la cual escupió el líquido y casi se ahogaba, cosa que uno de los tíos de Lincoln debió atenderla.

- Jajajaja, muy buena, Alex. Le felicitó Luan y chocaron los cinco.

- Bosnio hijo de...Iba a a decirle aquel hombre, pero desde las sombras emergió el Basilisco, el cual defendió a su Portador.

- Mucho cuidado con lo que dices de Mi Ángel de la Muerte. Le advirtió Leni a Ruth y a su tío, para luego sentarse en las piernas del Teniente del Este y estaban a punto de besarse cuando los interrumpió el matrimonio Loud.

- Familia, por favor, calma, no hemos hecho para que armen una guerra, así que todos tranquilos, ¿sí?. Además hay algo muy pero muy importante que nos quieren anunciar Mark y Luna, ¿no es así?. Llevó el Señor Lynn la calma y la paz a los que estaban a punto de pelearse, para luego señalar con la mirada al kazajo y a la castaña rockera.

- Sí, así es, así que todos tranquilos, chicos, que Mark y yo haremos un anuncio muy importante. Pidió Luna y entonces se calmó la tensión.

Hubo calma después de lo ocurrido, Mark y Luna se levantaron de la mesa y permanecieron un buen rato en silencio, mirando a cada uno de sus parientes, los cuales estaban callados.

- ¿Sucedió algo?. Preguntó Ruth y entonces llegó la respuesta, ambos chicos se tomaron de las manos.

- Sí, esto es lo que pasó: ¡Mark y yo nos vamos a casar!. Dijo Luna con emoción, cosa que ya sabían sus padres y hermanas junto con los amigos, debido al concierto de Mick, pero sus parientes permanecieron helados, como si les hubiera caído un rayo encima de ellos y los dejara a todos paralizados, menos al Abuelo Loud, el cual se levantó con emoción y lágrimas en los ojos, abrazando a su nieta rockera y al futuro esposo.

- Dios, qué emoción, jajaja, me tomaron por sorpresa, les deseo lo mejor para todos ustedes. Dijo el peli blanco, para volver luego al asiento que tenía al lado de Ruth, la cual quedó con la boca abierta.

- Alexander y yo también tenemos algo que decir. Dijo Leni y se levantó con su amado Ángel de la Muerte.

- Así es: También nos vamos a casar. Añadió el Teniente del Este y besó a su amada novia en los labios.

- ¡Seré la Emperatriz del Este, ¿no es emocionante, Tía Ruth?!. Preguntó Leni con emoción en su voz y eso fue el segundo golpe.

- Jajajajaja, ¡Qué día de emociones y para que lo sepan, Mi Niño, Mi Amado Pavel y yo también nos casaremos!. Exclamó Luan y ese fue el tercer impacto.

Lincoln y Lynn permanecían callados, había algo que deseaban compartir pero sabían, a la vez, de las severas consecuencias que tendrían ellos, fue por entonces que ambos se levantaron de sus asientos y en medio de los festejos, el muchacho y la deportista llamaron la atención de todos.

- ¡Eh, esperen, esperen, que Lincoln y Lynn tienen algo que decir!. Pidió el Señor Lynn, quien detuvo los festejos.

- Bueno, nosotros dos...Iba a decir Lincoln y entonces suspiró hondo.

- ¿Pasa algo, Lincoln?. Preguntó su padrino.

- Bueno, es que...Volvió a intentarlo.

- Vamos, Linky, tú puedes. Le animó Lana.

Volvió a tomar un respiro.

- Hijo, ¿pasa algo?. Preguntó su padre y vio lágrimas en sus ojos.

- Sí. Respondió el adolescente peli blanco y los abrazó con fuerza  y luego Lynn los separó.

- Cometimos algo malo, muy malo. Dijo ella y ya se estaba empezando a sentir el aroma de la tensión en el aire.

- ¿Qué...Qué pasó? ¿Qué hicieron?. Quiso saber la Señorita Rita.

- Mama, Papa, pero antes, que las más pequeñas se tapen sus oídos. Pidió Lincoln.

- Lincoln, ¿estás bien?. Fue la pregunta de Lily, quien tenía once años.

- Por favor, vayan hasta la planta alta y esperen en sus habitaciones. Pidió Lynn con su hermano.

Una vez que acataron la orden, quedaron solo los mayores.

- Mama, Papa, Lincoln y yo tuvimos sexo. Fueron las palabras de Lynn y entonces todo el sitio quedó sumergido en un acto silencio de tumba, igual al de un Cementerio, los chicos, quienes estuvieron implicados en aquella fiesta que hicieron en la Casa Loud, estaban callados, fingían asombrando, Alexander simplemente sonreía pícaramente y hacía la Señal de la Cruz ante la pareja.

- ¿Cómo?. Preguntó el Señor Lynn, quien sentía su pulso acelerado y Rita le tomaba la presión.

- Tuvimos sexo Lynn y yo, entiendo que está prohibido pero...tenemos algo en común...Ella, después de todo lo que pasó con el asunto de la mala suerte, se disculpó conmigo, se sentía horrenda cuando me maltrató y puso a toda la familia en mi contra, pero ahora...ahora siento algo mucho más que un amor de hermanos, sino que es un amor de verdad, puro. Si quieren hacer algo con nosotros, háganlo, pero no voy a dejarla. Juró Lincoln, quien enfrentó a su familia y tomó la mano de Lynn y ella lo abrazó, protegiéndolo con todas sus fuerzas.

No hubo respuestas, pero en aquellos momentos, Ruth se levantó de la mesa junto con los demás parientes.

- La verdad que me decepcionas, Rita, dejas entrar a tu casa a Demonios, Pedófilos, Raros y ahora tienes a dos hijos incestuosos, creo que ya vi demasiado y tomaremos las medidas correspondientes: Primero, ni Luna, Leni y Luan se casarán. Advirtió la mujer.

- ¡¿Qué?!. Estallaron las tres en furia.

- Lo que oyeron, no se casaran con esos europeos del Averno y con Lincoln y Lynn, deberían mandarlos bien lejos, ellos no son mis sobrinos. Añadió la mujer.

- ¡No puedes hacer esto, tú nunca te preocupas por nosotros, ni siquiera por el abuelo, si yo me quiero casar con Mark, me casaré con él!. Alzó Luna la voz, mientras que sus primas la empujaban al suelo y Mark fue al rescate.

- ¡¿Qué les pasa por la cabeza?! ¡Ella y yo ya lo decidimos, nos amamos y no nos importa la diferencia de edad o la procedencia de países, yo amo a Luna y nos casaremos!. Advirtió Mark, quien ayudó a su bella rockera a levantarse del suelo y miraron desafiantes a Ruth y sus primas.

- A ti lo que te tendrían que dar es una temporada en la cárcel junto con ese Demonio que tienes de amigo y al raro con acné. Contra-atacó la hermana de Rita.

- ¡Y a usted la deberían mandar a bajar de  peso, gorda de mierda, ¿qué se viene a meter donde no le llaman!. Exclamó Pavel, harto de los maltratos.

- ¡Mejor cierra la boca, ruso de mierda!. Dijo uno de los primos y éste empujó a Pavel al suelo pero el médico se levantó y le dio un golpe en la cara, causando que cayera al piso y perdiera dos dientes.

Enseguida vinieron otros dos a ayudar a su pariente, pero Luan les espantó con el truco eléctrico que tenía, protegiendo a su niño.

- ¡Con mis amigos no se meta, hija de puta, las ganas que ansío de arrojarla a usted y a sus familiares al Infierno son demasiado grandes!. Sentenció Alexander, mirando con furia a los parientes.

- ¡Tú no te metas, huérfano de mierda!. Le advirtió el padrino de Lincoln, pero Alexander le dio un golpe en el pecho varias veces, los cuales casi lo mataban pero Leni lo detuvo.

- ¡Son unos malditos!. Les gritó Pavel, mientras que iba a ver a sus amigos y a las chicas, las cuales estaban molestas con sus parientes.

- A esto es lo que me refería, Rita, tienes un montón de chiflados en tu casa, deberían largarse, ya. Respondió la mujer.

En aquellos momentos, Luna se hartó y se fue corriendo hacia las escaleras, llorando.

- Lo arruinaron todo, son los peores familiares, igual que cuando Alex se quedó el año pasado aquí y lo trataron como basura. Dijo la rockera, quien se encerró en su habitación, Mark no dijo nada y fue para verla y ayudarle a pasar el mal trago.

Todo el comedor quedó en silencio, Rita y su marido miraron con furia a sus parientes, el Abuelo Loud se unió a ellos, mientras que se calmaba la tensión pero ésta permanecía un buen rato más en el aire.

- En cuanto a ustedes dos, más tarde hablaremos al respecto. Dijo su padre con un tono serio hacia Lincoln y Lynn.

- Esperarán los dos en el cuarto de Lincoln, ¿queda claro?. Advirtió su madre.

Luan se fue con Pavel afuera, se sentía totalmente molesta con sus parientes y Leni lloraba a mares, recostada contra el pecho de su Ángel de la Muerte, el cual sentía la sangre hervir y a punto de querer lanzarla contra esos desgraciados.

[En la habitación de Luna y Luan]

La rockera se hallaba llorando, tenía su cabeza hundida en la almohada y en ese momento tocaron a la puerta.

- No quiero hablar con nadie. Dijo ella, totalmente abatida.

- Soy yo, Amor. Dijo Mark afuera de la puerta.

- Pasa, Corazón. Le autorizó ella a entrar a su novio, el cual abrió la puerta y se  dirigió hasta donde estaba la rockera, quien tenía el rimel de sus ojos corrido por las lágrimas.

- Tus parientes son lo peor de lo peor, iguales a una víbora. Dijo Mark con furia por todo lo que le habían dicho a ella y a él.

- Lo sé, los odio, repitieron lo mismo que le hicieron a Alex en el Pasado cuando le faltaron el respeto a su familia asesinada en Sarajevo durante la guerra. Remarcó Luna y en ese momento abrazó a su novio con fuerza, llorando a más no poder y él le acariciaba los cabellos.

- No nos van a alejar. Juró el chico y ella lo miró a los ojos.

- Deberíamos irnos de aquí, empezar nuestra vida juntos, alejados de Ruth y los demás. Sugirió ella.

- Sí, he estado viendo en Internet que hay un sitio en el Norte, en Ottawa, Canadá, en donde las parejas se pueden casar, sobre todo las que no son aceptadas por los parientes. Le contó Mark sobre ese sitio y fue entonces que Luna dejó de llorar, se levantó de la cama y buscó su maleta, en donde guardó su guitarra y demás pertenencias.

- Agarra tus cosas, Amor, nos vamos esta Madrugada. No me importa si no tenemos dinero, nos iremos de aquí a pie y llegaremos. Juró la rockera, quien recibió un tierno beso por parte de su amado Sargento kazajo y de ahí éste salió a buscar su maleta.

- Siempre estaré a tu lado para amarte y protegerte. Le hizo esa promesa, mientras que se dirigía al Cuarto de Huéspedes y sacaba su maleta, donde guardó sus pertenencias, incluyendo sus uniformes de gala.

[A su vez, Lincoln y Lynn esperaban a sus padres para que fueran a darles el castigo respectivo por lo que habían cometido, pero en ese momento, Pavel pasaba por allí junto con Luan, ella dormiría con él en el cuarto de huéspedes, era mejor así, ya que Luna necesitaba su tiempo para desahogarse por la rabia acumulada por culpa de Ruth y los demás parientes.]

- Pavel. Le llamó Lincoln al médico.

- Ya vuelvo, Mi Payasita. [Pidió el peli marrón a su novia que esperara y de ahí fue hasta el cuarto de Lincoln, en donde se encontró con el peli blanco] ¿Qué ocurre?. Preguntó el médico.

- ¿Tienes algún equipo de embarazos?. Fue la pregunta del peli blanco, cosa que dejó confundido al ruso judío.

- ¿De qué hablas?. Sí, tengo un aparato de ecografías, ¿por qué?. Quiso saber.

- Dentro te lo diremos, solo tráelo. Fue la orden de Lynn y el joven la acató.

- Ok, ya vuelvo. Fue su respuesta y rápidamente trajo aquel instrumento.

[Una vez dentro de la habitación del albino]

- ¿Me pueden decir qué está pasando?. Fue su pregunta, mientras que la conectaba y encendía el aparato.

- Creo que Lynn está embarazada. Fue la respuesta de Lincoln.

- ¡¿QUÉ?!. Preguntó Pavel, quien lanzó un grito casi fuerte, el cual casi se escuchaba por toda la casa pero le taparon la boca.

Una vez que lo soltaron, vendrían las respuestas.

- Desde hace dos semanas que no tengo mi período, he estado teniendo antojos, en especial por la noche y cambios de humor, yendo al punto de que creo que estoy embarazada. Contó Lynn todo lo que le estaba pasando, el peli marrón se llevó las manos a la cara y las bajó lentamente, sabía que esa noche no podía ser peor y más cuando se trataba de los parientes que estaban todavía reunidos allí.

- Vamos a ver. Pidió Pavel, quien inició con la prueba, le pidió a Lynn que se recostara en la cama, a Lincoln le ordenó que cerrara la puerta con llave y de ahí le aplicó el gel especial sobre la panza de la chica, donde comenzó a pasar el aparato para ver si había alguna señal de embarazo dentro de su vientre.

Pasaron los minutos y ambos jóvenes estaban un tanto nerviosos, cosa que finalmente llegó la respuesta tan esperada.

- Sí, estás embarazada de tu hermano. Fue el diagnóstico final de Pavel, el cual apagó el aparato y se dispuso a llevarlo a su sitio de regreso.

- ¿Cómo? ¿De cuánto?. Preguntó Lincoln con Lynn.

- Dijeron que hace dos semanas, bueno, ese es el tiempo que empezó, tienes un embarazo de dos semanas, Lynn, necesitaré hacer otros estudios más tarde, para dentro de uno o dos meses para averiguar sobre el género del bebe y ver si está bien de salud. Espero que sepan que tienen ahora una gran responsabilidad en sus manos. Dijo con cada lujo de detalle sobre lo que tenía que hacer y luego mirar a ambos hermanos con seriedad.

- Pero esto...¿esto me afectará en el deporte?. Quiso saber Lynn al respecto.

- Por ahora no, pero cuando empieces a tener la panza hinchada por el embarazo, ahí sí te lo prohíbo: Cero deportes, pero por ahora disfruta todo lo que quieras. Fueron las palabras finales de Pavel, pero en el momento que estaba por salir, se encontró con el matrimonio Loud, los cuales habían llegado para hablar con sus dos hijos.

- Pavel, ¿eso es...?. Iba a decir el Señor Lynn.

- Sí, es un aparato de ecografías, es oficial: Lynn está embarazada de Lincoln, he estado viendo las primeras imágenes y el bebe, cuyo género no sabré hasta nuevo aviso, está en perfecto estado de salud, no hay nada de qué temer. Fueron las palabras esperanzadoras del médico, quien se retiró hacia su habitación para descansar.

Ahora era el turno de ellos para hablar:

- Hijos, lo que hicieron es algo que está muy mal, ¿acaso no saben lo que es el incesto? ¿No saben que esto nos puede afectar a todos?. Preguntó el Señor Lynn, podía sentirse en su voz que estaba molesto con sus hijos, enojado, pero a la vez, no parecía mostrarlo hacia ellos.

- Nos tendrían que haberlo dicho antes, ¿por qué no lo dijeron?. Preguntó Rita.

- Teníamos miedo, creí que me separarían de Lincoln. Fue la respuesta de Lynn, quien lo abrazó con ternura al peli blanco.

- Ronnie Anne y yo nunca fuimos pareja, cuando intenté declararme con ella, me dijo que mejor quedáramos como amigos y además empezaba a sentir que me sentía atraído por Lynn, se que sonará asqueroso, pero es así. Fueron las palabras del muchacho, las cuales eran pura verdad.

- Mama, Papa, nosotros cuidaremos al futuro niño o niña que tendremos, no lo pienso abortar, eso jamás. Se negó Lynn a cumplir eso.

- Recuerda, Lynn, que en todo el Mundo se prohibió el aborto por orden de Alexander y el Reich. Le hizo recordar Rita, quien abrazó a sus hijos con lágrimas en los ojos.

- Está bien que quieran descargarse contra nosotros, pueden hacerlo, nos lo merecemos, pero siempre hemos usado protección, al parecer...al parecer uno de los condones vino fallido. Alegó Lincoln, quien se sentó al lado de Lynn y puso sus manos sobre el vientre de su futura esposa.

- ¿Eso quiere decir que también se van a casar?. Preguntó su padre.

- Sí, así es. Respondieron ambos a la vez.

[Mientras tanto, con Mark y Luna, ambos se hallaban terminando de empacar y se irían cuando nadie los viera, pero en ese momento, el kazajo recordó algo muy importante y fue para la habitación de donde estaba Alexander con Pavel, Luan y Leni.

- Mark, ¿pasa algo?. Preguntó Alexander, quien estaba organizando unos pequeños frascos con unas pócimas.

- Quisiera pedirte un favor. Pidió el peli negro.

- Dime. Dijo Alex.

- Necesito que me des algo que me haga vivir eternamente con Luna, no quiero que la gente diga que se casó con un anciano, tú ya sabes que estoy casi llegando a los 30 años, por eso te pido que me des algo para impedir el crecimiento de mi cuerpo. Fue el pedido del kazajo.

- Tengo algo por aquí que te servirá. [Pidió Alexander y comenzó a buscar hasta que sacó un frasco que tenía grabada la Luna encima y unas letras japonesas] Aquí está: El "Elixir de la Luna", esto me lo dio una de mis Maestras, Fujiwara no Mokou de Gensokyo, con beber esto un poco, el Tiempo para Luna y para ti, lo mismo que para tu descendencia, se va a detener para siempre. Dijo el bosnio, mientras que le entregaba aquel frasco y se bebía la mitad, pero sin sentir nada.

- No pasó nada. Respondió Mark.

- El secreto es ese: Tú sientes que el Tiempo no te está pasando factura, no sientes ningún cambio físico ni nada: Eternidad por siempre. Dijo Alexander.

- Gracias, amigo, te lo agradezco muchísimo. Finalizó Mark y se fue a dormir con Luna un rato, en donde la besó en los labios y el "Elixir" de Alexander también ingresó en el cuerpo de la rockera.

Poco a poco fue pasando el tiempo, los parientes se estaban por ir.

- Espero que las cosas se solucionen, Rita, pero quiero que sepas que cuentan conmigo con este asunto. Dijo Albert, mientras que se despedía de su hija y miraba con seriedad a la otra, a Ruth.

- Gracias, papa, esta debía ser una noche tranquila de reunión familiar,  pero terminó siendo una maldita guerra. Se lamentó Rita, quien lloró y su padre la abrazó.

- Ya, ya, hija, tranquila, todo se va a solucionar, te lo prometo. No quiero que llores, debes ser fuerte, piensa en tus hijos y en el Futuro que tendrán. Le animó Albert a su hija, mientras que dejaba de llorar.

- Eso espero, papa, eso espero. Rogó la rubia y de ahí se despidieron padre e hija.

Pronto llegó la hora de acostarse, la tensión hacia los familiares Loud se sentía todavía y en aquellos momentos, cuando todo quedó desierto, era la señal para que Luna y Mark se fueran de allí hacia Canadá.

- Bien, andando. Pidió la rockera y ambos salieron de allí con rumbo hacia la escalera, donde antes se despidieron de sus hermanas dormidas, de Pavel pero Alexander no estaba por ninguna parte.

Y en aquellos momentos, cuando estaban por irse, apareció el Teniente del Este, el cual había ido al baño y escuchó ruidos en la puerta.

- ¿Mark, Luna? ¿Qué hacen?. Preguntó su amigo y éstos le taparon la boca.

- Alex, fue un placer haberte conocido. Fue la despedida del kazajo.

- Sí, te voy a extrañar a ti, a mis hermanas, a Linc y a Pavel, lo mismo a mama, papa y el abuelo, pero esto es lo único que podemos hacer. No quiero que Ruth se siga metiendo donde le incumbe. Adiós, Hermanito Alex. Fue la despedida de Luna, quien le dio un beso en la mejilla y un último abrazo, dejándolo helado.

Pronto, la puerta se cerró y con ella, los chicos se fueron para su destino: Canadá.

A su vez, Alexander, tal vez pensando que estaría soñando, se fue a dormir con Leni en la Habitación de Huéspedes.

- No...¡No estaba soñando! ¡Dios!. Gritó Alexander de golpe y se levantó corriendo hacia el cuatro matrimonial, donde anteriormente despertó a Leni, Pavel y Luan.

- ¿Qué pasa? ¿Ya es hora de despertarse?. Quiso saber la comediante.

Alexander salió corriendo a toda prisa, tropezándose con la alfombra varias veces por el sueño y de ahí llegó hasta la habitación de los Señores Loud.

- ¡Señor Lynn, Señorita Rita, por favor, todos despierten!. Llamó el joven peli blanco-plateado y se despertaron todas las demás hermanas y Lincoln.

- ¿Qué pasa?. Son las 2 de la mañana. Quería saber Lily, quien se refregaba los ojos.

- Más le va a Alexander que no esté de broma, porque literalmente ya estoy de mal humor. Pidió Lori que las noticias fueran buenas.

- ¿Quieres buenas noticias? Te las diré: ¡Mark y Luna no están!. Fue la respuesta del Oficial bosnio, quien dejó a todos los presentes helados y empezó el caos.

- ¡¿Qué? ¡¿Cómo que no están?!. Pero si hace unas hora estaban...aquí. Dijo Lori y al abrir la puerta se encontraron con la cama de Luna sin abrir, su guitarra no estaba ni tampoco la funda junto con un par de cosas más.

Pavel se levantó y miró que en la cama de la izquierda tampoco estaba el kazajo.

- ¿Qué está pasando? ¿Por qué tanto griterío?. Quería saber el médico.

- ¡Pavel, Pavel, Luna y Mark no están!. Le alertó Lisa, cosa que era extraño ver a la pequeña científica de la familia mostrar sus emociones.

- ¿Cómo? Esto...Madre de Dios. Dijo el joven salió disparado junto con Luan y Leni de la cama, yendo hacia el pasillo, en donde los Señores Loud ya estaban despiertos.

- ¡Chicos, tranquilos, por favor, calma!. Pedía el Señor Lynn, viendo que todo estaba descontrolado.

- ¡Esto es culpa de Ruth y de los parientes que tenemos! ¡¿Para qué mierda tenían que invitarlos a esa reunión?!. Preguntó Lynn molesta.

- Estoy de acuerdo con Lynn, ¿para qué invitarlos? Los trataron siempre a los tres como basura, lo mismo a nosotros, solo llaman para ver cómo está el abuelo y se sabe bien que es por la herencia. Alegó Lincoln, quien estaba indignado por todo lo ocurrido.

Abajo, Rita había ido a llamar al número del Cuartel General de las Fuerzas Coloniales del Reich, en donde le atendió Bobby.

- Por desgracia aquí no lo hemos visto, Señora Loud, no sé en dónde podrían estar. Le comunicó el ya ascendido Sargento Bobby Santiago a la madre de los chicos.

- Gracias, Bobby, cuídate y avísanos si sabes algo más. Pidió la mujer rubia y colgó el teléfono.

[Al volver a la planta alta]

- ¿Qué pasó, Querida? ¿Algo?. Preguntó su marido pero nada.

- No saben adónde pudieron haber ido. Dijo ella, quien estaba al borde del llanto.

Por su parte, Pavel registraba la habitación con Luan y en aquellos momentos encontró sobre uno de los amplificadores de Luna una carta que estaba escrita por ella y por Mark.

"Querida Familia: Lamento que cuando reciban esta carta, Mark y yo ya nos habremos ido, iremos a Ottawa, allí hay un sitio donde el amor florece y podremos casarnos en paz, sin que Ruth y los demás de nuestros parientes se metan en nuestra vida, siempre los vamos a amar y nunca los olvidaremos. Perdonen por todo y por desaparecer, pero tal vez sea esta nuestra única  salida.

Los queremos mucho.

Atte: Mark y Luna".

Ese mensaje de despedida significaba que ellos ya habían tomado su decisión, Pavel y Luan salieron corriendo para llevarles la nota a los Señores Loud.

- ¡¿A Ottawa?!. Quedó el Señor Lynn sorprendido.

- Sí, es cierto eso, hay un sitio donde las parejas pueden casarse cuando los parientes son una carga. Contó el médico sobre ese sitio.

- ¿Cuánto tiempo habrá pasado que se fueron?. Quería saber Rita.

- Ya debió ser como una hora. Anunció Alexander.

- ¿Máximo?. Preguntó Lincoln y el bosnio asintió con la cabeza.

- Ok, andando, ¡familia, de prisa, nos vamos a Ottawa, rápidamente!. Ordenó el Señor Lynn, mientras que se iban preparando rápidamente para partir hacia la frontera y detenerlos rápidamente.

Mientras que algunos se vestían y otros iban con lo que tenían puesto, o sea sus pijamas, Alexander se encontraba revisando a toda prisa en su escritorio un asunto que necesitaba tener a la mano.

- ¡¿Dónde está?! ¡¿Dónde está?! ¡DIOS!. Quería saber el joven Emperador.

- ¿Estás bien, Alex?. Preguntó Leni.

- No te preocupes, Palomita Mía, estoy buscando un documento muy importante que...¡aquí está! ¡Vamos!. Pidió el muchacho, mientras que agarraba aquellos papeles y salían a la calle.

- ¿Podrás localizarlos desde el aire?. Le encomendó Pavel esa misión.

- Haré todo lo posible. Prometió Alexander.

- Bien, nos veremos en la frontera, no es tan lejos. Acordaron reunirse allí.

- Yo voy con Alex. Pidió Leni y sonrojada le tomó de las manos al Emperador del Este, el cual desplegó sus Alas Blancas, mientras que la rubia alegre se aferraba a él y salían volando hacia los Cielos.

La "Vanzilla" encendió sus motores y partió desde Royal Woods hacia la frontera con Canadá, en donde allí se encontraba Ottawa.

[Por su parte, ya los parientes Loud estaba enterados de todo y salieron disparados para detener a Rita y a los demás, mientras que Mark y Luna descendían de un bus que los había llevado hasta allí y estaban listos para cruzar hacia el otro lado.]

- Aquí estamos, la frontera, ¿estás listo para hacer el gran salto, Amor?. Preguntó Luna y Mark le tomó de las manos.

- Por supuesto que sí, vayamos a cumplir nuestros sueños. Respondió el Sargento y se prepararon para presentar sus papeles y documentos en el Puesto Fronterizo, pero en aquellos momentos, un vehículo frenó de forma brusca y con ello causó estupor en las fuerzas de vigilancia, las cuales apuntaron hacia los ocupantes pero luego desistieron, ya que no eran hostiles, sino que eran civiles y eran conocidos de aquella pareja,

- ¡Mark, Luna, gracias a Dios que están bien!. Fueron Rita y su marido para abrazarlos a ambos con fuerza y llorando de la emoción.

- Mama, papa. Dijo la rockera, la cual fue recibida por los demás de sus hermanos y amigos, los  cuales se mostraban preocupados.

- ¿Por qué lo hicieron, chicos?. Quiso saber Lincoln.

- No se puede uno casar en paz sin que gente indeseable como Ruth y los demás nos vengan a tildar de que somos chiflados, ¿acaso no entienden de que nuestro amor es puro?. No, nunca lo entienden, solo quieren que nosotros nos sigamos peleando por pavadas cuando vamos a visitarla e insulta a todos, por eso nos hartamos, queremos casarnos y punto. Dijo Luna con su posición sobre el matrimonio que deseaba tener que Mark, pero en aquellos momentos llegaron Ruth y los demás, deteniendo los coches.

- Y es por eso que los seguimos hasta aquí, ahora aléjense los dos, no se van a casar. Intervino la mujer con sus parientes.

- Yo no escucho a una yanqui ignorante. Se negó Mark a obedecerla y besó a Luna en los labios.

- Y es por eso que yo intervengo. Escucharon una voz y desde los Cielos bajó Alexander junto con Leni.

- Y hablando de anormales, llegó el Demonio Escarlata. Agregó una de las tías.

- ¡Más respeto, que están ante el Emperador del Este!. Exclamó Leni con furia y en aquellos momentos, Alexander sacó el documento que llevaba en sus manos.

- Yo avalo el Matrimonio de Mark y Luna. Dijo el muchacho, dejando a todos sorprendidos.

- ¡¿De qué mierda hablas, Demonio?!. Preguntó el padrino de Lincoln pero el Teniente del Este lo miró con una severa mirada, la cual lo dejó helado.

- Más respeto que estás ante el Emperador, no ante tus amigos del bar: Mark, Luna, yo, Alexander I El Inmortal, avalo su matrimonio, ya que como Emperador del Este y como EEUU es parte de mis Dominios Imperiales, como la máxima autoridad política y que tengo a cargo la protección de la Iglesia Católica y Ortodoxa, bajo mi poder, declaro que la "Bendición Imperial" los protegerá a ustedes y les da permiso de poder contraer matrimonio, lo mismo va para Pavel y Luan, Lincoln y Lynn y hasta para Leni y para mí. Dijo Alexander, mostrando su documento y de ahí dio el gran paso para hacerse respetar como el Emperador del Este.

- Aún así, seas el Emperador, no me importa, ellos no se van a casar. Advirtió Ruth y recibió el apoyo de sus parientes.

- ¡¿Cómo se atreven a hablarle así al Emperador?!. Preguntó Leni hacia sus parientes.

- Contigo y con tus hermanos no les vamos a responder. Respondió su tía.

- Hum, ¿así que me hablan mal de mi persona? [Sonríe Alex] ¿Qué les hace pensar que no seré severo a basuras como ustedes? ¡Insectos, serán castigados por su impertinencia, los aplastaré y arrojaré al Infierno para que aprendan a respetar mis ordenes!. Dijo Alexander con severidad en su voz y miró a los parientes con furia, mientras que se dirigían los soldados hacia ellos.

- Qué ingenuos son ustedes. Dijo uno de los Generales hacia Ruth y los demás.

Y de ahí brilló la Luna Escarlata.

- ¡Serás tú quien se vaya al Infierno junto con tus amigos!. Se hartó el padrino de Lincoln y con sus hijos golpearon a Alexander, haciendo que cayeran gotas de su sangre al suelo e intentaron separar a Mark y Luna, lo mismo a Lynn y Lincoln, Pavel y Luan.

- Ja, ¿con que se te atrevieron a levantar su mano contra mí? ¡Alexander, el Emperador del Este, la máxima autoridad de estas Colonias! ¡Ahora les enseñaré el verdadero poder del Imperio!. Exclamó Alexander y se elevó en los Cielos, mostrando y señalando hacia los Soldados para que procedieran, éstos obedecieron y sus ojos brillaron de un intenso color escarlata.

- ¿Qué...Qué está pasando? ¡¿QUÉ HACEN?!. Preguntaron los parientes al ser detenidos.

- Son órdenes del Emperador y del Reich, ustedes serán castigados con la "Reeducación" en los gulags de Siberia, ¡andando!. Ordenó uno de los Generales de los puestos fronterizos y apareció un helicóptero negro.

- ¡Basta, no, no me harán...!. Pidió Ruth.

- Allí serán educados como deben ser, su estupidez yanqui será borrada y se convertirán en personas de bien que nunca se volverán a atrever con levantar su mano o a desafiar mis Actas Imperiales. Sentenció Alexander y chasqueó los dedos, haciendo que los soldados obedecieran y se llevaran a los culpables para Siberia.

- ¡Esto no se queda así, voy a...!. Juró Ruth pero Luna le cerró la puerta del helicóptero en la cara.

- Denle un calmante a la ballena, está histérica. Jajajaja, adiós, Tía, te mandaré una postal cuando me case en París con Mark. Se despidió la rockera y con Mark les hicieron el gesto con el dedo del medio a sus parientes, los cuales fueron llevados hacia Siberia.

Y pronto volvió la calma, la familia estaba unida y solo quedaba una última cosa por hacer.

- Bueno, ahora que todo se ha solucionado, creo que podemos dejar olvidado todos los incidentes, así que, ¿Qué opinan, chicos?. Preguntó el matrimonio Loud.

- ¡Nos casaremos!. Respondieron las parejas, decididas.

Y era cierto, Mark y Luna se casarían en París, Francia, Luan y Pavel en Moscú, Rusia, Leni y Alexander en Sarajevo y por último, Lynn y Lincoln en Royal Woods, Michigan. Todo estaba listo, la primera boda se llevaría a cabo en unos meses, ya que debían preparar todo y las invitaciones para la gente, en especial para los colegas de los chicos y a la Familia Loud, los cuales irían a todas las bodas de sus invitados.

[Y a partir del capítulo que viene se vienen las bodas, el epílogo de esta historia, pero tranquilos, muy pronto se vendrá la secuela :3]