Capitulo 1

Màu nền
Font chữ
Font size
Chiều cao dòng

Ya han pasado 5 años desde el incidente. Mi hermana Lucy y yo hemos recorrido varios estados pero aun no hemos encontrado ningún superviviente. Simplemente cadáveres descompuestos por allá donde pasamos. Toda la vegetación marchita, ni un solo pájaro en el cielo, ni un misero sonido de algún animal o insecto. Solo muerte a nuestro alrededor. Hoy nos adentramos en una nueva ciudad. Allí podremos encontrar provisiones, ropa nueva y unos guantes nuevos, los que llevo empiezan a estar destrozados. Mis pantalones tienen algún desperfecto pero aun los podre usar un tiempo si me apetece. Lucy se encuentra empujando a Trasty, el carrito de la compra que lleva con nosotros mas de un año. Le pusimos nombre para intentar aliviar un poco la soledad que sentimos, pero poco nos ha ayudado. Debemos andar esquivando los diferentes coches accidentados y chamuscados de hace años, estos accidentes son los únicos rastros de desperfectos que siempre hemos encontrado. Ningún rastro de vandalismo, ningún lugar saqueado. Solo cadáveres en el ultimo sitio donde una vez paseaban o trabajaban. Solo es otra deprimente ciudad.

Lucy: Lincoln, ahí esta el supermercado. Pongámonos las mascaras.

Mi hermana, mi única compañera. Quien siempre ha estado conmigo. Ahí esta ella, con su sudadera gris con una capucha que asemeja las orejas de un animal y sus pantalones a rayas. Lleva cargada a su espalda la mochila rosa en forma de unicornio, solo que el cuernos hace tiempo que se desgastó y ahora solo son unos trozos de hilo sueltos. Nuestras mochilas llevan un pequeño kit de supervivencia con navajas, vendas, alcohol, encendedores y demás utensilios. 

Miro a mi hermana y asiento con la cabeza. Ambos sacamos de Trasty un par de mascarillas medicas. No es tanto como para evitar alguna infección si no mas bien para aplacar el olor. Aun con las mascarillas puestas el temible olor a descomposición nos golpea cuando abrimos las puertas. Varios cuerpos descompuestos se encuentran en el interior, al igual que muchísima comida podrida que en alguna época fue fresca.

Anduvimos por los diferentes pasillos buscando latas de conserva y productos que no caducasen, como miel, leche en polvo o cosas así. Poco a poco fuimos llenando a Trasty con los víveres que encontramos y cargamos todas las botellas de agua que pudimos. El agua era la peor parte siempre. Mucho peso, ocupaba demasiado y nos duraba poco.

Lucy: ¡Mira esto Lincoln!

Me acerco a ver que era lo que quería mostrarme mi hermana. Ella no deja de mirar fijamente una de las estanterías. Una sonrisa nostálgica se le nota bajo la mascarilla cuando me señala una caja de cereales Zombie Bran.
Aahhh. Que recuerdos. Eran buenos tiempos aun y las peleas que tenia con todas mis hermanas. Ambos las echamos de menos.

Lincoln: Si, eran buenos tiempos. Pero es mejor que sigamos a alguna tienda de ropa. Necesito nuevos guantes.

Lucy: Podrías quitártelos, estamos como a 29°C y estamos solos.

Lincoln: Sabes que no puedo arriesgarme, seria horrible si encontramos algún superviviente y no los llevase.

Los azules ojos de Lucy se entristecen nuevamente. Ya han pasado 4 años desde que la convencí de que usara una pinza para el pelo para que pudiese ver mejor sin el pelo en la cara, pero cada vez que la veía entristecerse mi corazón se llenaba de mas pesar.

Lincoln: Vamos, es posible que también encontremos una librería.

Se lo digo de  forma optimista para que piense en otra cosa. Tras el incidente no quiero volver a estar sin guantes ni ropa larga. Solo lo permito por las noches, cuando nos acostamos en un sitio seguro.

Lucy: También quiero que busquemos un sitio cerrado para dormir. Esta noche necesito tus caricias.

Diablos, ¿me esta leyendo el pensamiento?

Lincoln: Claro amor. Buscaremos un sitio seguro.

No hace falta que me miréis raro. Somos un chico de 17 años y una chica de 15. Y estamos completamente solos. Es normal que busquemos consuelo el uno en el otro, siempre nos hemos apoyado mutuamente desde pequeños y nos tenemos mucha confianza. Si alguno necesita contacto intimo nos limitamos a dárnoslo mutuamente.

Bueno, tomo a Trasty que se encuentra cargado hasta arriba y lo empujo fuera del apestoso supermercado. Fuera me quito la mascarilla y la guardo nuevamente. Lucy se acerca por detrás y hace lo mismo. El respirar sin sentir aquella peste nos hace sentirnos un poco mejor, pero debemos continuar el camino. Tras pasar un par de cuadras llegamos a una zona de pequeños comercios, el lugar perfecto para encontrar nueva ropa, en especial ropa interior pues apenas podemos lavar ninguna prenda si no tenemos cerca un río o un gran deposito de agua.

Lucy: Yo mirare en la librería. Consígueme algo de ropa a mi también y recuerda que mi talla de pecho es la 75.

Lincoln: Ok. Si encuentras algún mapa nuevo, guárdalo.

Y allí se va, a revisar los libros. Espero que esta vez los que traiga ardan bien. Yo por mi parte me pongo a revisar toda la ropa que hay. Me toca apartar un par de cadáveres para llegar a la sección donde esta la ropa de manga larga. Saco de mi mochila las diversas camisetas viejas que he estado usando y las dejo tiradas a un lado, lo mismo con la ropa interior y pantalones. Luego procedo a llenar la mochila con camisetas nuevas, pantalones y ropa interior. Acto seguido me hago con una bolsa de tela en donde procedo a meter calcetines, pantaletas y sostenedores para Lucy. Acto seguido tiro mis guantes desgastados y la ropa que llevaba puesta al suelo y me cubro con ropa nueva, unos pantalones oscuros, una camisa naranja de manga larga y unas botas de montaña. Me dispongo a salir de la tienda cuando veo en un maniquí un precioso vestido azul oscuro con ribetes negros. El maniquí parece de la estatura de Lucy, por lo que procedo a desnudar aquel cuerpo de plástico y meter el vestido en la bolsa con las nuevas prendas de mi hermanita. Seguro que le gustará.

Fuera de la tienda cuelgo la bolsa en el gancho de Trasty y compruebo que la brújula que le enganchamos con pegamento rápido seguía funcionando. Lo empujo para seguir el camino.

Lucy: ¡Lincoln ven! He encontrado un buen sitio.

Como le gusta chillar... De pequeña amaba el silencio pero tras tantos años apenas escuchando el viento ahora quiere aunque sea escuchar el eco de su voz cada poco. Bueno, tendré que ir.

Consigo meter a Trasty dentro de la tienda y Lucy me señala una puerta entreabierta. Parece que la sala de descanso del personal esta abierta, no hay ningún cadáver dentro y tiene una papelera de rejilla. Perfecto. 

Dejo a Trasty aparcado en la estantería de delante. Tomo nuestros sacos de dormir, una lata de comida, una parrilla metálica y una botella de agua. Mientras dejo las cosas dentro, Lucy va arrancando hojas de los libros y las va acumulando en la papelera. Cuando estiré los sacos en el suelo, ella ya estaba prendiendo fuego a la papelera.

Lucy: ¿Cual crees que deba ir primero?

Ella me mostraba 2 libros en sus manos. Uno era el Código deVenci y el otro Las perras del hambre. Le hice una pequeña sonrisa y alcancé el libro superior de una pila cercana.

Lincoln: Mejor este: Make America Great Again del Pato Donal Thrum

Lucy sonrió divertida, tomo el libro de mi mano y lo arrojó a la papelera ardiendo. Puse la rejilla encima de la papelera, después tome mi navaja de la mochila y apuñale la parte superior de la lata de comida. Después la dejé encima de la rejilla para que se fuese calentando hasta ver salir el vapor por el orificio que le había practicado.

Lucy: Mmmm. Judías con tomate. Hace tiempo que no las pruebo.

Lincoln: No hace falta ser sarcástica Lucy. Tenemos suerte que estas latas caduquen dentro de 100 años.

La comida como siempre resulta insulsa y  pastosa, pero con toda la vegetación muerta y sin animales es lo único con lo que podemos sobrevivir. Albóndigas enlatadas, garbanzos con verduras, sardinas, atún, leche en polvo que siempre acaba aguada... Lo único que podemos considerar suerte es que vayamos a la ciudad o pueblo que sea las tiendas siempre tienen cosas de estas.

Me encargo de deshacerme de los envases, nadie los reciclará, pero siempre ha sido una costumbre el separar para reciclar. Cuando regreso veo que Lucy ya ha apagado el fuego y guardado las cosas. Cierro la puerta de la sala y Lucy empieza a desvestirse. Cierto, ya no recordaba que me dijo que queria mis caricias. Una sonrisa triste se dibuja en mi rostro cuando me quito los guantes y me quito mi camisa de manga larga. Para cuando mee quito mis pantalones ella ya esta totalmente desnuda sobre los sacos de dormir.

Ya solo con mi ropa interior me situo detras de ella y empiezo a frotar su desnuda espalda y sus brazos. Noto como se estremece con mi contacto y beso su mejilla tranquilizandola. Sigo acariciandola unos momentos en los brazos para pasar a continuación a su parte delantera. Con cuidado paso mis manos por sus pechos masajeandolos con cuidado. 

Lucy: Aahhh....

Cuando empieza a gemir siempre gira su cabeza hacia mi buscando mis labios con su boca. Yo la correspondo mientras desciendo cuidadosamente mi mano. Ella se agarra con fuerza al saco de dormir que tiene debajo mientras continuo moviendo mis manos de forma gentil. Ante una señal de su cabeza empiezo a acelerar mi movimiento en su parte intima hasta que todo su cuerpo se pone rigido y ahoga un grito de placer con mis labios mientras una de sus manos sujeta la que se encuentra entre sus piernas. Cuando su cuerpo se relaja me retiro cuidadosamente sin incomodarla. Entonces ella situa su mano encima de mi ropa interior.

Lucy: ¿Tu quieres?

Simplemente la miro agradecido pero le comunico que no es necesario. Hoy mi cabeza esta dándole vueltas nuevamente al motivo que nos dejó en esta situación. Ella como tantas otras veces lo nota y no dice nada. Simplemente se recuesta sobre mi pecho y ambos nos estiramos sobre un saco de dormir y nos tapamos con otro. Ella no tarda en dormirse sobre mi, pero yo no puedo dormir. Sigo pensando en lo que pasó aquel fatídico día. 

Sigo pensando en el día en que lo arruine todo  y provoque la muerte de todo cuanto nos rodea. Si, todo fue mi culpa. Soy el único responsable de lo que ha pasado, ni zombies, ni virus raros, ni guerras, simplemente yo. Permitidme que os lo cuente desde el principio.

Todo empezó....

En otro capitulo, más :3

Espero que les guste el inicio de este nuevo fanfic. Pero ya saben, cuando mi mente tiene una idea en la cabeza la plasmo y según el apoyo la desarroyo mas o menos. Pueden hacer sus conjeturas de lo que pasó y de que les depara a la joven pareja.

Como siempre, gracias por su apoyo

Bạn đang đọc truyện trên: Truyen2U.Pro