Elena POV

Mi móvil suena en mi bolso, lo tomo y no me extraña ver en la pantalla fuera de área; solamente una persona me puede llamar de un teléfono fuera de área, por lo que respondo.

-Dime Victoria o debo decir hermana Victoria- Ella fue compañera mía en la secundaría. Le conozco varios trapos sucios que no quiere que salgan a la luz por eso me ayudo a desaparecer a la hija bastarda de Carla, mi hija.

-Tengo malas noticias-

-¿De que mierdas hablas?- Esto ya no me gusta.

-Desde que Anastasia cumplió los diez años, hay una mujer que la ha seguido. Ella cree que Anastasia es su nieta perdida. Razón por la que estuvimos mudándonos de orfanato hasta que hace una semana nos volvió a encontrar, la mujer manda a su asistente personal, no conozco a la mujer ya que ella nunca ha venido. Pero hace días se presentó con la policía y todas las autoridades que podrían intervenir. Por lo que no pude evitar que se la llevara. Me han estado haciendo preguntas. Te informo que voy a desaparecer no puedo permitir que nos descubran-

- ¿Quién es esa mujer que tiene tanto poder como para quitarte a Anastasia y tu atada de manos? - Preguntó con rabia contenida.

-Ella se llama Olivia Miles. Ella es de la alta sociedad británica y según dicen esta emparentada con la casa real. Por lo que no pude hacer nada cuando se llevaron a Anastasia-

- ¿Sabes dónde vive? - Necesito es información para seguirla.

-Exactamente no, pero aquí en Londres todos saben donde ubicarla. A, Elena al no estar Anastasia bajo mi custodia, nuestra relación profesional se termina- Y cuelga la muy desgraciada.

Busco en la web información de la vieja que se llevo a la bastarda, encuentro muy pocas fotos de ella. En busca de información me desplazo por el móvil buscando algo que me sea de utilidad.

Encuentro un reportaje de hace casi quince años un accidente automovilístico donde murió su hijo y nuera. Hablan también de que un bebe desapareció. Sigo leyendo y al final comprendo por que cree que es su nieta, las dos nacieron el mismo día.

Tal vez si la vieja la hace feliz no decida buscar a Carla y Raymond, no obstante, no me fio tendré que mandar a alguien a investigar quien es esta gente. Y si la mocosa esa quisiera buscar a sus padres o tal vez se crea que realmente ella si es su abuela y no los busque, pero la verdad es que no me puedo confiar.

Tendré que hablar con Jack, el tienen familia en Londres que nos podrían ayudar a acercarnos a ellas, sin causar sospechas.

Le marco a Jack, dos, tres tonos y contesta.

Olivia POV

Tener a Anastasia aquí me crea sentimientos encontrados, todavía esta la duda de si será mi nieta o no. Llevo diez años buscándola y cinco de perseguirla por toda Europa hasta que la encontré aquí en Londres, muy cerca del centro de la ciudad.

He decidido investigar y vigilar a esa maldita monja. Desde que se enteró que buscaba a Anastasia se estuvo mudando de orfanato en orfanato hasta que tuve que acudir a mis influencias y amenazarla para que me diera a la niña. No lo pensé dos veces a acudir a mis influencias ya que la maldita mujer siempre que se enteraba de que iríamos por Ana cambiaba de orfanato, algo oculta, los sé, por eso la tengo vigilada.

Hasta donde sé el día que llevaron a Anastasia al orfanato siendo recién nacida, también llevaron a otra niña, también recién nacida, con documentos, pero en ellos no figuraban los nombres de los padres, ni el de ellas, pobres niñas.

Mi nieta pago el precio de un desgraciado ambicioso, quien quiso apoderarse de los bienes de mi hijo, pero el debió haber sabido que su vida estaba en riesgo y me dejo a cargo del fidecomiso de sus bienes y si a mi me pasa algo todo irá a las fundaciones benéficas que la familia patrocina.

También me inquieta el querer saber ¿quién será la persona o personas que alejaron a Anastasia de su familia? Y si ya sabrán de su adopción, es por ello por lo que contraté los servicios de Josh.

El estado en que la encuentra Camila es deplorable, en efecto la quieren hacer sufrir, pero eso ya se acabo. Me he prometido que si Ana no es mi nieta y estoy tan segura de que no lo es, no puedo permitir que la sigan maltratando. Sólo espero que, si la prueba de ADN resulta negativa, que Dios me de fuerzas para seguir en la búsqueda de mi verdadera nieta.

Deje que Ana descansara y se amoldara a su nueva vida, le cuesta confiar en las personas y la entiendo, ella sólo ha recibido malos tratos de las personas que debían cuidarla. Juro que si logro encontrar pruebas contundentes de que esta mujer esta en algo turbio la refundiré en la cárcel; podría hacerlo, pero Anastasia se niega a contar lo que esa mujer le hacía.

-Señora Milles, el señor Thatcher y el doctor Johnson la buscan- Mi ama de llaves María me saca de mis pensamientos comunicándome que el investigador y el doctor me buscan.

-Hazlos pasar a mi estudio, dile a Ana y a Camila que también las espero ahí, María. Por favor- Afirma con un asentimiento de cabeza.

Ya es hora de salir de dudas, así si Anastasia es mi nieta o no. Por otro lado, yo seguiré buscando a mi nieta, ellas podrían ser hermanas. Así mismo le pediré a mi investigador que rastree a los padres de Anastasia, quiero saber si en verdad la abandonaron o si fueron victimas de un plan desquiciado como el que llevo a la tumba a mi hijo y a mi nuera.

-Buenas tardes- Saludo a los hombres que me esperan en mi despacho.

Anastasia POV

Hoy exactamente hoy cumplo tres meses de haber salido de ese sitio infernal llamado orfanato, de donde me saco mi ahora madre, Olivia Miles.

Ella es una maravillosa persona cuando le dieron los resultados de esas tales pruebas de ADN y el resultado fue negativo, me dolió mucho realmente no ser su nieta, ambas hemos sufrido la maldad de las personas.

Ella porque le arrebataron a su familia, al menos ella sabe que su hijo y nuera murieron, su nieta esta por ahí aún viva; en cambio yo no se si mi familia vive o están muertos. Se que ellos no me abandonaron como me quisieron hacer creer, un día escuche a Victoria la monja hablar con alguien y le decía que yo aún vivía y que haría de mi vida un infierno.

Olivia me ha suplicado que le cuente lo que esa horrible mujer me hacía, pero me aterra recordar y esos momentos, todavía están frescos en mi mente y me duelen mucho, cuando este preparada lo haré, pero hoy no será.

Un día mamá Olivia me dijo que estudiaría con un tutor para en el futuro poder ir a la universidad; ella quiere que estudie administración y derecho para que me haga cargo en el futuro de sus empresas.

Eso es extraño pues yo no llevo su sangre, y si me está dando esa confianza, considero que no debo defraudarla, por lo he decidido estudiar lo que ella me ha propuesto, creo que es la mejor manera de pagarle todo lo que ha hecho por mi.

Descubrí que me gusta la lectura, por lo que Olivia me ha comprado muchos libros para leer, los cuales he ido leyendo. Mi ahora madre ha organizado fiestas en la mansión con sus conocidos para que socialice, pero me he negado a ello, la gente me da miedo; miedo a que me hagan daño. Por lo que he sido testigo a lo lejos de esas fiestas. Cuando me sienta preparada asistiré a alguna por ahora no lo estoy.

-Ana, estas aquí. Te buscaba- La voz de Camila me saca de mis pensamientos.

-Si, aquí estoy. ¿Puedo ayudarte?-

-No, yo soy la que te va a ayudar. Vamos a ir de compras, así que ve a cambiarte-

-¿A dónde vamos?-

-A las Tiendas y podrás comprar todo lo que quieras-

-Pero yo no sé nada de compras, nunca he ido a una tienda-

-Pues hoy aprenderás. Yo seré tu profesora, Axel, Tom y Josh nos acompañaran-

- ¿Quiénes son ellos? - Pregunto con miedo.

-Tu seguridad personal cuando quieras dar un paseo ellos estarán contigo, ¿Te he dicho que tienes un auto? Si algún día quieres ir a dar una vuelta por la ciudad ellos te llevarán y protegerán- Comenta con una sonrisa.

-No los conozco y no sabía que tenía un auto. Sabes que el exterior me aterra – Le recuerdo.

-Bueno si no aprendes a relacionarte o a interactuar con las personas nunca las conocerás. Ana sabemos por lo que has pasado y es doloroso; no obstante, no puedes esconderte de la sociedad, debes superar ese miedo. Deja de permanecer en el suelo, si te caes te levantas de nuevo y la vida continua. ¿Qué harás cuando vallas a la universidad? Tendrás que lidiar con la crueldad de los jóvenes universitarios, enamorarte y desilusionarte. Todo eso es parte de la vida, tu madre y yo estaremos ahí para guiarte, ya no estas sola. Ahora vamos a gastar tu dinero – Me entrega algo plástico.

-Dame tiempo Camila. ¿Esto que es? - Miro la tarjeta con curiosidad, tiene mi nombre en ella, con el apellido Miles. Anastasia Miles, sonrío.

-Te lo doy Ana, entiende esto. Ni Olivia ni yo estaremos para siempre. Ahora ve a cambiarte y esa tarjeta es tuya, con ella pagarás todo lo que compres- Y lo hago, tengo que ser fuerte y aprender a salir de mi caparazón, soy como una tortuga.

Cuatro horas después de visitar varias tiendas exclusivas según Camila, estamos cansadas, con hambre y sed, por lo que vamos a un restaurante, durante este tiempo he estado cerca de Tom, Axel y Josh, bueno ellos han estado cerca de mi, son serios y muy callados, solamente hablan si Camila les dice algo, ellos me intimidan.

-Señorita, Miles hemos llegado- Dice Axel quien manejaba el auto y ahora Josh abre mi puerta para que salga y lo hago mientras Tom le abre la puerta a Camila.

-¿Qué hacemos aquí Camila?- Mi miedo vuelve a florecer cuando estoy en un lugar desconocido.

-Bueno después de caminar tanto imagino que tienes hambre y sed. Este lugar es un restaurante y muy bueno por cierto. Tu madre viene a qui algunas veces-

-Está bien entremos, debo hacerlo- Así lo hacemos, Camila menciona el nombre de mi madre y el hombre que nos recibió nos guía a una zona alejada de la puerta, el lugar nos permite ver la ciudad y a la vez nos da cierta distancia de las demás personas. De pronto veo unas personas con cámaras tomando fotografías hacia nosotros.

-Camila, ¿Por qué ese hombre me apunta con su cámara?- Ella vuelve a ver hacia donde le indico y mira a los hombres con enojo.

-Esos son sanguijuelas o como se conocen paparazis. Parece que se ha corrido la voz de que Olivia Miles, Duquesa de Yorkshire ha encontrado a su nieta perdida, por lo que ahora eres objeto de curiosidad y titulares de encabezados de revistas de chismes- Comenta entre dientes.

-Pero yo no quiero eso y tu sabes que yo no soy su nieta biológica- Le recuerdo.

-Si, pero esos detalles sólo lo sabemos pocas personas- Lo dice despreocupada.

Mientras nos sirven la comida voy al baño, me levanto y me dirijo donde me indicaron bajo la atenta mirada de mi seguridad. Mientras camino sin fijarme choco con alguien, al casi caerme me agarra de los brazos y me sostiene mientras me mira detenidamente.

-Mira lo que trajo la marea. ¡Hola, Anastasia! ¿Cómo has estado? – Lo miro aterrada.

Un frio recorre todo mi cuerpo, a este hombre nunca lo he visto, sin embargo, él sabe mi nombre por lo tanto debe conocer a mi familia.

-Suelte a la señorita Miles – La voz de Josh suena a mis espaldas. Para luego tomar al hombre de su brazo.

-Tranquilo hombre. La chica es despistada y choco conmigo. Es así, ¿verdad? – El hombre me mira con odio, por lo que asiento sin quitar mis ojos de él.

-Vamos, señorita. La acompaño - Me despego del hombre y camino al sanitario con Josh a mi espalda. Al salir lo escucho terminar una llamada, camino de regreso a nuestra mesa.

- ¿Ha visto a ese hombre alguna vez? ¿Por qué sabía su nombre? – Interroga mi guardaespaldas.

-En verdad, no sé quien es. Jamás en mi vida lo he visto. Ni en el orfanato – Le digo aterrada.

-Tendré que informarle a la duquesa – Me informa.

-Has lo que debas hacer, Josh –

De aquí en adelante mi seguridad se convertiría en mi sombra.

Comemos y regresamos a la casa. Josh se reunió con mi madre, lo más seguro informándole mi encuentro con el extraño.

Días después viajamos a Estados Unidos, ya que mamá se reuniría con un empresario de eses país.

Al arribar al aeropuerto ya nos esperaban varios vehículos. Cuando llegamos al hotel Camila se dirigió a un mostrador le dio el nombre de mamá y sólo le dieron las tarjeras, las cuales me explicaron son para abrir la puerta de la habitación. Como llegamos adentrada la tarde decidimos descansar, cenamos en el hotel, para acostarnos temprano, bueno al menos yo lo hice.

No había querido venir, para no atrasarme en los estudios, no obstante mamá, quería hacer este viaje conmigo, no podía negárselo. Por la mañana visitamos varios lugares que llamaron mi atención, luego dejamos a mamá en lujoso restaurante ella insistió en que me quedara, como no logró convencerme de que la acompañara, Camila me llevo a un cine donde vimos una película. Me encantó, luego de dos horas mi madre llamó para que la recogiéramos y así lo hicimos.

Al llegar al lugar miro por la ventana, mi madre sale acompañada de dos hombres. No obstante, la mirada de uno de ellos me hipnotiza y me pierdo en su profunda mirada. Escucho un carraspeo, al levantar la mirada, veo a mi madre muy seria.

-Ana, eres muy joven aún y esos dos son mujeriegos por naturaleza – Habla seria, mi madre.

-Olivia, Ana. No sabe de lo que le hablas – Advierte Camila.

-Lo sé. No obstante, no podemos negar que los jóvenes Grey son muy guapos y aunque mi niña no lo sepa, uno de ellos ha llamado su atención. Mírala se ha sonrojado – Toco mi rostro mirándome por el retrovisor. Mi cara está roja.

-Lo siento- Le digo a ambas, más no sé porque lo hago.

-No te disculpes hija, es parte de la naturaleza y en algún momento tendremos una charla madre e hija con respecto a la sexualidad y a los chicos – Ella me sonríe, me da un beso y luego miro como Camila pone los ojos en blanco.

-Tienes que aceptar que a nuestra niña algún día se va a enamorar, Olivia y también podrías llegar a ser abuela, esa es la realidad de la vida – Dice Camila a mi madre.

El recuerdo de los ojos grises del hombre de cabello cobrizo me hacen viajar a un mundo de fantasía, desconectándome de la conversación de ambas mujeres.

Aquí termina el maratón, actualización marte o miércoles.