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🐺📖

Jimin no había pegado un ojo en toda la noche, sentía su cuerpo pesado y su cabeza punzante. Había intentado hablar con Yoongi, pero no le había contestado, sabía que su pareja debía estar ocupada, así que solamente le dejó un mensaje deseándole buena noche y recordándole que al día siguiente iría a pagar la primera mensualidad de Sweet Dreams.

La primera razón de su desvelo fue la preocupación de cómo reuniría el dinero para apoyar con los pagos mensuales y no dejarle todo a Yoongi, mucho menos aquello que pertenecía a gastos personales y de su casa. Eso no le correspondía al alfa.

La segunda razón era el mal de estómago que le habían dejado las palabras de su hermano menor, ese escalofrío que sintió al escucharle hablar igual a su padre no tenía descripción, era simplemente horrible y terrorífico, algo que Jimin no había sentido desde que le habían echado de casa.

No pensaba pasar por lo mismo que tuvo que soportar con su padre, mucho menos con un alfa cachorro, eso era ridículo. Si Jihyun planeaba quedarse en su casa, cambiaría esa actitud de mierda, ya sea por las buenas o por las malas.

― ¡Jimin hyung! ―se escuchó el llamado del alfa menor en la casa, Jimin rodó los ojos y suspiró, dejando el sobre con el dinero para el primer pago en la cama, dando la vuelta para ver qué era lo que su hermano quería.

Abrió la puerta de su habitación y vio a su hermano con la pequeña mochila que tenía el día que le encontró en la calle, su celular en mano y ropa para salir.

¿A dónde piensa ir?

― ¿A dónde vas a ir? ―le preguntó Jimin con una mirada analizadora, haciendo que el alfa se sintiera ligeramente incómodo. Se rascó el cuello y miró a Jimin, quien esperaba una respuesta con la ceja alzada.

―Necesito que me des un poco de dinero, tengo que ir al instituto aún―Jimin abrió los ojos, sabía que su hermano estaba estudiando, pero se le había olvidado ese detalle al llevarlo a casa.

Jimin se sintió apenado, no quería negarle el dinero a Jihyun si era para la comida en el instituto, pero en ese momento no tenía más que el pago de Sweet Dreams y no podía perder nada. Lo de los gastos extra los había pagado con anticipación.

―Lo siento, Jihyun. Hoy tengo muchos pagos que hacer y no me ha quedado dinero...―Jimin se mordió el labio ante la vergüenza y miró como su hermano miró al lado, bufando ligeramente―Puedo prepararte comida, si es para lo que necesitas el dinero―Jimin caminó hacia la cocina, dispuesto a cocinarle a su hermano algo que pudiera ayudarle a aguantar en el instituto, pero sus ganas se esfumaron cuando creyó escuchar una risa sarcástica a sus espaldas.

―Le debo dinero a un amigo que me vendió un videojuego, no quiero tu comida―Jimin se mordió el labio para no contestar de forma brusca y dejó el delantal que iba a colocarse para cocinar, viendo de vuelta a su hermano―Vamos, por lo menos debes tener algunos wones.

Jihyun vio cómo su hermano le miraba muy molesto, tomando el delantal de nuevo y dirigiéndose a la cocina sin decir nada más, dejando al alfa solo en la sala de la casa.

El alfa bufó y despeinó su castaña cabellera, dirigiendo su vista al cuarto de su hermano.

Miró a la puerta de la cocina y se aseguró de que Jimin no saldría de ella.

Caminó a la habitación y entró sigiloso, mirando todo a su alrededor. Cuando vio en la mesita de noche un cuadro donde salía la familia, sonrió nostálgico, él ni siquiera existía cuando esa foto fue tomada, pero el ver la sonrisa de todos en la foto, le hizo sentir bien.

Cuando despegó su vista de la foto enmarcada, pudo ver en el colchón un sobre blanco algo relleno, lo que le dio curiosidad, suficiente como para examinar su interior. Cuando Jihyun vio ese sobre lleno de dinero, frunció el ceño.

Con que no tenías dinero.

Pensó con molestia y sacó una buena cantidad de dinero, suficiente como para comprarse algo de comer y pagar el videojuego que compró. Dejó el sobre en la cama e intentó que no se notara la diferencia, el sobre se notaba menos relleno, pero a simple vista se veía como antes.

Salió de la habitación en silencio y se encaminó al comedor para desayunar.

―Te dejo un poco de comida en el refrigerador por si vuelves antes que yo, si tienes algún problema puedes llamarme―Jimin dejó el plato de comida frente al alfa y este comenzó a comer, asintiendo a las indicaciones con la cabeza.

―Está bien.

Jimin miró los platos en el fregadero y suspiró, ese chico podía ser su hermano menor, pero no le toleraría una mala actitud de nuevo, no se había mudado para estar lejos de su familia por nada, después de que todos le dieran la espalda, Jimin había soltado esos sentimientos fuertes que tenía por ellos, dejando una simple nostalgia en su lugar, por lo que cualquier intentó de sobrepasarse de su hermano, lo llevaría a la casa de sus padres sin pensarlo.

―Quiero advertirte una cosa, Jihyun―Jimin habló en voz alta sin dejar de ver el fregadero, haciendo que el alfa parara de comer―Yo no soy tu sirviente ni mucho menos, soy un adulto independiente con su propia casa, en la cual tú eres el invitado y yo el dueño...―Jihyun se estaba sintiendo molesto por esas palabras, pero prefirió que el mayor terminara―Si haces algo que me haga perder la paciencia, tendré que llevarte a casa de nuestros padres, aún eres menor de edad y cualquier cosa que hagas es responsabilidad de ellos, no mía. Y si no quieres ir donde ellos, tendré que llamar a un trabajador social para que nos ayuden con la denuncia y tendrás que estar con ellos mientras las cosas se resuelven.

Cuando el omega terminó de hablar, al no escuchar respuesta de su hermano, siguió lavando los platos usados.

―Soy tu hermano ¿Cómo puedes tratarme de esa forma? ―Jihyun se levantó de la mesa sin terminar su comida, mirando a Jimin con el ceño fruncido y los puños apretados, poniendo al omega en alerta―Por eso nuestros padres te echaron de casa, porque jamás respetaste la jerarquía, los omegas no deben negarse a los alfas, hermano.

Jimin tomó su celular discretamente, por si tenía que llamar a algún número de emergencia.

―Precisamente por esto te dije esas cosas, tienes esa actitud de superioridad que nuestro padre tiene y es eso lo que me hizo no querer volver a casa―Jimin miró con determinación a su hermano, intentando no mostrarse débil ante él, para que no pensara que tenía poder sobre él.

Jimin marcó el último número en sus llamadas recientes, comenzando a llamar a Yoongi.

―Lo que mi padre me enseñó es lo que estoy demostrando, porque él tiene sus razones―Jimin pudo escuchar suavemente la voz de Yoongi, le bajó volumen al celular, para que su hermano no le escuchara.

―Entonces que nuestro padre te golpeara es algo que tiene sentido para ti―afirmó Jimin sin flaquear la voz, haciendo que su hermano se extrañara por no generar temor en el omega.

―Él lo hizo porque me iba a acostar con el hijo de su jefe, con quien estaba llegando a casa ese día―Jimin abrió los ojos, asombrado por la declaración, su hermano le había mentido en su rostro sobre aquello, incluso que había considerado el demandar a sus padres por ello.

Sí, es igual que nuestro padre, pero él no le había golpeado porque sí.

Jimin asintió con el ceño fruncido, dispuesto a cumplir con lo que debía hacer.

―Nos vamos a casa de nuestros padres―Jimin se escapó del extraño acercamiento que su hermano había dado, comenzando a caminar hacia la habitación de invitados y tomando la pequeña mochila de Jihyun.

No―Jimin se tensó al escuchar la voz de mando, su cuerpo siendo incapaz de desobedecer. Jimin tembló cuando su hermano se acercó a él y le arrancó la maleta de su mano, lanzándola a la cama―No iré de nuevo allá, me quedaŕé aquí contigo.

Jimin estaba a nada de llorar de frustración, tenía miedo que su hermano se diera cuenta de que estaba en una llamada con Yoongi, al menos esperaba que este no hubiera colgado.

No te muevas de aquí―Jimin tragó duro y vio de reojo cómo su hermano salía de la habitación, sin notar que el celular estaba en su mano.

Jimin acercó el celular a su oreja con miedo, rogando que Yoongi estuviera aún en la llamada.

―Y-Yoongi―habló en susurros, entrecortado, con la esperanza de que el alfa le contestara.

―Jiminie, tranquilo, Taehyung va a tu casa con algunos policías, llegarán pronto―Jimin suspiró cuando escuchó la voz alterada del alfa, irónicamente transmitiéndole tranquilidad.

Colgó la llamada de inmediato, ya que había escuchado los pasos de su hermano cerca y ahora que sabía que irían a ayudarle, podía respirar mejor.

―Me voy al instituto―dijo Jihyun, entrando a la habitación como si nada y comenzando a guardar las cosas en su mochila.

No, no, vengan rápido.

Jimin rogó cuando su hermano guardaba los cuadernos. Como si sus suplicas fuesen escuchadas, en la puerta se escuchó el sonido de las llaves ser introducidas, ya que Taehyung tenía una copia.

― ¿Quién es? ―preguntó el menor con el ceño fruncido, dejando su maleta en la cama y caminando rápidamente a la sala.

―No se mueva, por favor, tiene que acompañarnos―escuchó la voz de un adulto a la lejanía, seguido de un sonido metálico, lo que intuía eran las esposas.

Su hermano no era alguien peligroso, aún.

Taehyung llegó corriendo a la habitación, aliviado de ver a su amigo bien y entero. Los oficiales hablaron con Jimin, se llevarían a Jihyun a la casa de sus padres y les explicarían todo lo sucedido, no podía llevar un castigo mayor por ser menor de edad, pero con tener a su hermano con sus padres, se sentía tranquilo.

Le pidieron a Jimin su identificación y corrió a su habitación para buscarla, no percatándose que el sobre con dinero estaba menos relleno que antes, llevando la identificación sin más.

Cuando se llevaron a su hermano suspiró, Taehyung había ido a su habitación para acostarse mientras Jimin le llevaba un poco de comida, ya que el menor había llegado en pijama y recién levantado.

―Jiminie―Taehyung caminaba con el ceño fruncido hacia la cocina, contando el dinero que estaba dentro del sobre― ¿Por qué faltan cien mil wones? ―Jimin dejó la comida en el fuego y miró a Taehyung con el ceño fruncido. El dinero tendría que estar exacto.

Ugh, Jihyun de mierda.

―Uh, Jihyun debió tomarlos cuando le dije que no tenía dinero para darle―Jimin restregó sus manos sobre su rostro, demasiado estresado por todo lo sucedido en pocas horas.

Cuando Jimin estaba nada de llorar por la impotencia, sintió su celular vibrar en su pantalón de pijama, haciendo que recordara que Yoongi debía estar muy preocupado por la llamada y todo lo sucedido.

Respiró hondo y tomó el celular, contestando la llamada.

―Jiminie ¿Qué pasó? ―Jimin sonrió ligeramente al escuchar la voz de su pareja, notando la mirada que Taehyung tenía sobre él, dejando la cocina sin decir nada más.

―Y-yo, se llevaron a Jihyun a casa de mis padres, ya está todo en orden―Jimin no quería contarle la parte del dinero, porque no quería que Yoongi se preocupara de más, teniendo sus propias responsabilidades en Seúl, también porque la idea de comprar Sweet Dreams había sido de él, no quería molestar por algo que fue su decisión en primer lugar.

Yoongi estuvo callado por unos segundos, se escuchaba el movimiento del celular, pero Jimin no comprendía lo que estaba haciendo.

―Jimin.

El rubio se sobresaltó al escuchar la voz dura de Yoongi, no entendía por qué le había hablado así de la nada, después de estar completamente preocupado a lo que parecía que había cambiado por enfado.

― ¿Qué sucede? ―preguntó Jimin con incertidumbre, no entendía el cambio de su pareja.

―No me gusta que me oculten cosas, menos mi pareja―Jimin se estremeció al escucharle molesto, cómo pudo saber Yoongi que tenía algo oculto, luego analizando que Taehyung pudo contarle en ese momento de la falta de dinero, sintiéndose avergonzado por eso.

― ¿De qué hablas? ―Jimin contestó tembloroso, sabía que no debía esconderle cosas a Yoongi, menos en algo que les concierne a ambos como la compra de Sweet Dreams, pero jamás le había gustado que las personas sintieran lástima por su situación, le gustaba salir delante de forma independiente.

―De verdad Jimin, no me gusta que me escondan cosas y menos que se hagan los desentendidos―Yoongi suspiró y calmó su voz dura, no tenía sentido hablarle así a su omega― ¿Tienes todo el dinero para pagar el mes? No me mientas, por favor.

Jimin se mordió el labio y sintió sus ojos picar, no estaba llorando por ser descubierto, era simplemente todo el estrés del momento, el no tener el dinero para pagar, el que su hermano lo engañara y robado en su propia casa y el hecho de que le estaba mintiendo a Yoongi.

―Lo siento―susurró con la voz ahogada, respirando hondo para dejar de llorar o al menos lograr controlarse un poco―No quería que pusieras más de lo acordado, pero no logré recaudar mi parte y quería conseguirlo por mí mismo, el hecho que Jihyun se llevara dinero, hizo que me sintiera muchísimo peor.

―Jiminie, no llores―el omega suspiró cuando la voz de su alfa se volvió suave―No creo que la transferencia llegue tan rápido, pero podemos decirle a Taehyung que te lo preste y se lo envío a él, así sales del apuro. No te angusties, cariño―Jimin se limpió las lágrimas y asintió, a pesar de que sabía que Yoongi no le vería.

―B-bien, te llamaré cuando tenga una respuesta de Taehyung ¿Sí? ―Jimin respiró hondo una vez más y sonrió―Te quiero mucho, Yoonie.

Yoongi sonrió en grande cuando escuchó las palabras de su omega tras la línea, sintiendo unas ganas dolorosas de tenerlo a su lado.

―Yo te quiero mucho más. Esperaré tu llamada―Jimin sonrió y sintió su pecho llenarse de un calor reconfortante, su alfa era el más dulce de todos y lo quería demasiado.

Jimin cortó la llamada y limpió las pocas lágrimas que quedaban, dispuesto a encontrarse con su mejor amigo y darle una amistosa patada por decirle las cosas a Yoongi, pero después le haría un postre por ayudarle.

Caminó a la habitación y vio a su amigo acostado en su cama con su celular en mano. Jimin tomó su peluche de gato y lo lanzó al estómago de su amigo, haciendo que se sobresaltara.

―Eso es por decirle a mi novio las cosas sin consultarme―dijo con una sonrisa y se lanzó a la cama junto a su amigo, abrazándolo―Y esto por ayudarme.

Taehyung sonrió y devolvió el abrazo de su amigo, sintiéndose feliz que Jimin pudiese hablar con su pareja sobre ese tema.

―Por cierto, ayer llegó a Sweet Dreams una colaboración para ti―dijo Taehyung, levantándose de la cama para tomar su mochila y sacar un sobre azul, tendiéndoselo a Jimin. ―No estoy seguro de quién lo llevó, pero está a tu nombre y tiene un mote como donador.

Jimin miró el sobre y no logró encontrar el nombre de la persona que lo envió. Frunció el ceño, extrañado, pero agradecía el hecho de que alguien le ayudara en ese momento, sólo esperaba que fuera dinero y no una broma.

Abrió el sobre y encontró sesenta mil wones dentro. Sonrió enternecido por la ayuda, aunque no era lo que necesitaba, significaba una gran ayuda.

―Creo que tendré que agradecerle a esta persona de alguna manera, ojalá colocara de quién es―Taehyung asintió y sonrió ante las palabras de Jimin.

Después de desayunar y bañarse, se encaminaron a la casa de Taehyung, ya que este le prestaría sus ahorros para cubrir lo del pago mensual y luego se le pagaría. Llegaron a la casa de la nieta de Sunmin y ella firmó el comprobante, llegando a los minutos un mensaje de la mujer, confirmando que su nieta le había informado del pago, haciendo que sintiera un peso menos en su espalda.

Cuando regresaron a la casa de Jimin, ambos omegas habían caído dormidos en la cama del mayor, ya que se habían levantado temprano y al día siguiente tenían que ir a dar clases.

Pronto Sweet Dreams será de Yoongi y mío, nuestro negocio.

Jimin sonrió entre sueños al pensar en su primer proyecto junto a su alfa, sabía que esto sólo era el comienzo y estaba dispuesto a luchar contra todo junto a su media luna.




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