O2O

Màu nền
Font chữ
Font size
Chiều cao dòng

CAPÍTULO VEINTE
pov's kim dongju

De camino a casa, no se apartó en ningún momento, me tomó de la mano mientras charlaba sobre sus problemas.

―... mamá se caso hace dos años con otro hombre después de divorciarse, se llevó a mi hermana menor con ella. Me dijo que podía acompañarla, en un principio lo pensé, sin embargo desistí a la idea porque su nuevo esposo no me agrada, me acostumbré a no recibir mucha atención de mis padres, me gusta estar sola de alguna forma, así que comencé a vivir solo después de conseguir un trabajo de medio tiempo. Mi padre... ¿Cómo decirlo? Él es un idiota, y SeoJun lo ama de verdad, están juntos hace dos años, pero cada vez que discuten ella se va de su casa y viene a la mía. Nos conocemos hace tiempo, es unos seis años mayor así que me ve como su hermano menor.

Oh... así que era eso. Jungkook hablaba con sinceridad, su familia parecía ser un tema delicado para él, y lo comprendo, para todos en algún punto puede llegar a serlo, aunque nuestras realidades son diferentes todos llegamos a vivirlo de una forma similar.

―Lamento lo del otro día. ―me atreví a hablar― No estuvo bien sentirme celosa, es la pareja de tu papá.

Sonaba absurdo ahora que lo escucho provenir de mis labios.

Una pequeña risa escapó del pelinegro.

―Está bien, cualquiera desconfiaria. No quería hablar de ellos en casa, no me gustaría hacer sentir mal a SeoJun, ella es mi amiga, y cuida de mi padre incluso cuando es tan tonto. ―nuestros pasos se detuvieron frente a la puerta negra― ¿No estás enojada conmigo?

―No ―negué―, no puedo.

―Me sentía muy culpable estos días, falte tratando de que SeoJun vuelva a casa de papá. 

―Está bien. ―sonreí― Puedes...

―¡Dongju!―la puerta de mi hogar se abrió, y de esta salió mi hermano mayor con su ceño fruncido y una mascarilla para la piel en su rostro― ¡Mamá, Dongju trajo un chico!

―¡DongJu entra ya! ―mi madre que también usaba una mascarilla se asomó por el pasillo.

―¡Mamá...! ―cubri mi rostro avergonzada, no puede haber un momento peor que este.

―Invita al chico, cariño, traje helado de cena. ―ahora papá se asomó con una infalible sonrisa en su rostro.

―Está bien. ―bufé, levantando la vista al pelinegro, quien sólo sonreía analizando la situación― ¿Quieres cenar helado con nosotros?

―Me encantaría.

Su mano tomo la mía y con toda la confianza se adentró a mi hogar.

Bạn đang đọc truyện trên: Truyen2U.Pro