Su historia

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Jennie y Lisa se conocieron hace 12 años cuando por distintas circunstancias fueron llevadas a una escuela militarizada.

Una vez que cumplieron el ciclo de la escuela, fueron invitadas a seguir formando parte del lugar, Lisa en el área de enfermería y Jennie en el área de entrenamiento.

Ambas se encontraban muy cómodas en sus puestos ya que Lisa es era apasionada por la enfermería y Jennie... bueno, Jennie disfrutaba atemorizar a los recién llegados.

Un año después de ser ubicadas en cada área, en el cumpleaños 21 de Lisa, Jennie la sorprendió con un anillo de compromiso y en el cumpleaños número 22 de Jennie, Lisa la sorprendió con las llaves de su nuevo departamento.

Un día de Mayo del 2017, solo unos meses después del compromiso decidieron llevar a cabo una pequeñísima ceremonia para celebrar su casamiento, no sabían de sus respectivas familias desde que las dejaron en el internado, por lo que solo sus mejores amigas y compañeras de trabajo, Rosé y Jisoo, fueron invitadas.

Fueron solo ellas cuatro celebrando en un bar la reciente unión hasta que una extraña peliazul se metió en la pequeña celebración y luego de algunos chistes y unas cuantas rondas de cervezas ya no pudieron ni quisieron alejarla del grupo.

Un mes después del casamiento decidieron alejarse del campo militar al darse con la noticia que esperaban su primer bebé.

A la tailandesa le aceptaron retirarse, pero no de manera definitiva, sino por su embarazo. Lo de Jennie sería más complicado.

Un pequeño conflicto entre dos países de Asia fue la razón por la que Jennie tuvo que viajar a petición del comandante, quien no le dio lugar a negarse, pero sí le prometió que una vez estuvieran de regreso, su renuncia sería firmada dejándola totalmente libre.

Casi 3 años fue el tiempo que le tomó a su ejército resolver el conflicto. Tiempo suficiente para perderse el embarazo de su esposa, el nacimiento de su hija, su primer cumpleaños, su reciente segundo cumpleaños y muchas cosas más.

Jennie sabía desde cómo cubrirse en el medio de la nada ante un ataque hasta cómo desarmar una bomba, pero no sabía absolutamente nada sobre ser padre.
La pequeña Haerin Kim-Manoban con sus ojitos gatunos y cabello castaño claro era un misterio para la surcoreana.

Al regresar, luego de un mes juntas, Jennie podía decir que algo había avanzado, claramente podría cuidar a su hija... Siempre y cuando Lisa esté presente para indicarle que lo está haciendo bien.

Y así fue hasta que Lisa fue llamada para ayudar con los nuevos integrantes del grupo de enfermería en el campo militar durante cuatro semanas, tarea que solo aceptó con la condición de que al finalizar también firmaran su renuncia, dejándola totalmente libre.

Jennie puede afirmar que en sus 25 años no conoció el miedo hasta que perdió de vista a su esposa entre los pasillos del aeropuerto dejándola inmóvil entre las personas del aeropuerto mientras cargaba a una pequeña y muy, muy enojada Haerin en sus brazos.

Cuatro semanas.

Nini como papi, Lili como mami (no sexualmente).

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