Hay toques de amor, dulces y con parsimonia
Hay toques un tanto peculiares llenos de picardía.
Hay toques suaves y llenos de alegría
Cómo también hay toques de dulce compañía
Hay toques un tanto lentos con un poco de
cobardía

Pero también hay toques sensuales repletos de placer, que, por lo que ve, disfruta también usted.
Hay toques pequeño bribón, que desearía no haber sentido, ni el mismo ser haber tenido.

Existen toques, que tocan el alma.
Cómo también hay toques que ensucian el aura.
Hay toques que dan todo a su Merced, pero también los hay sin pizca de fé.
Hay toques un poco agrios, sin dulzura y llenos de mentiras.
Pero también los hay frescos, saciados de ternura.
Habrán toques, señor lector, que sin saberlo; a su corazón harán de una forma descomunal reventar y crear un mundo lleno de emoción.

Lea bien y no me tome por alguien terco que solo habla sin sentimientos.

Crear toques, querrá usted, más sin embargo caerá al tanto de amores pecaminosos, que arrancan más que solo ojos.

Hay toques que vienen directo del corazón, sin mucha atención, solo con amor
Otros más contienen lujuria, que sin rodeos te llevan a la luna.

Hay toques primorosos, solo con el roce de sus labios

Pero también hay toques más que primarios.
Hay toques un tanto apacibles que sin sentirlos saben que existen.
Aunque también hay toques que sin ojos puedes verles. 

Existen toques, mi querido Adonis, que en sueños tristes alegran con voces.

Hay toques mentales con choques raciales
Los hay también sin tantas maldades
Y también los hay de galaxias infernales.

Hay toques violentos, llenos de arrepentimientos
Por eso también los hay, llenos de sentimientos.
Hay toques agridulces, que solo con la caída de una hoja pierden todo y se enojan.

Hay toques llenos de ira, de amantes y sin salida.
Cómo los hay también de augurios, sin ser precavida.

Habrán toques de luz, con brillo nato en la "U"
Aunque también los habrán de icebergs sin sentido y más que fríos.

Habrán toques calurosos recitados en prosa y verso.
Y también los habrán de aire, que sin pedirlo, un espiral creen en tu cuerpo.

No olvide usted, toques de edades que al pasar tiempo crean verdades de estrellas y cimientos.

Hay toques de toques, que apaciguan el alma llenando la risa de burbujas y sonrisas.

Existen toques, más que simples toques que usted señor lector no querrá vendar...

Hay toques infernales, de suavidad extrema.
Existen toques tales... Que a su vereda no dejará estela.

Pequeño grande Adonis, existen toques.