Taehyung y Jungkook eran un feliz matrimonio, nada les faltaba, solo eran ellos dos amándose y disfrutando de su vida de casados. Pero en algún punto las cosas comenzaron a tener otro rumbo. Taehyung al enterarse que podía quedar embarazado no dudó en pedirle a su esposo intentarlo. Jungkook aceptó queriendo complacer a su esposo pues luego de cinco años casados algo más les faltaba para ser completamente felices.

—¡Dio positivo! —Taehyung gritó alegre al notar las dos rayitas que daban el resultado positivo.

Jungkook tomó el aparato notando las dos rayitas. Pronto tomó la cajita que reposaba encima del lavabo. Leyó las instrucciones como tres veces para caer en cuenta de que era real, Taehyung estaba embarazado. Su mirada buscó la de Taehyung que lloraba alegre. La felicidad pasó por todo su cuerpo, abrazando a su esposo para llenar su rostro de besitos.

—Seremos padres —susurró mientras apretaba más fuerte el cuerpo de Taehyung entre sus brazos.

—Lo seremos —dijo, acercándose para besar sus labios.

Las semanas pasaron realmente rápido, el primer mes de embarazo de Taehyung se cumplió, las náuseas aumentaron al igual que los mareos, pero con ello llegaron nuevos acontecimientos. Jungkook tenía los mismos síntomas de Taehyung, al grado de tener que sostenerse de algo sólido para no caer de lo mareado que se encontraba. En las mañanas el primero en levantarse era Jungkook corriendo a vomitar, luego era seguido por Taehyung.

—¿Podemos ir por un helado? —Taehyung miró a su esposo con súplica.

—¡Si! —gritó Jungkook entusiasmado. Tenía tantos antojos y entre ellos se encontraba un gran helado de diferentes sabores.

—El bebé quiere helado, amor —dejó un besito en su mejilla para caminar hasta su armario y colocarse algo cómodo.

Y vaya que Jungkook sabía cuánto el bebé quería comer helado. De hecho, se podría decir que tenía ganas de comer uno antes de que Taehyung se lo propusiera. Ansioso y con la boca haciéndosele agua tomó sus llaves y la mano de Taehyung para salir de casa con destino a la mejor heladería en Corea.

El matrimonio se había dispuesto a saborear de sus helados cuando la lluvia comenzó caer nublado el cielo y despejando el parque. Taehyung miraba a las personas desapareciendo del lugar por el diluvio que había fuera de la heladería mientras Jungkook suspiraba y miraba las gotas caer con tristeza.

—¿Qué sucede? —le preguntó mientras acariciaba sus mejillas con cariño.

Jungkook lo miró con los ánimos por el suelo para después acercarse más a su mano y a su cuerpo.

—Me siento triste —le dijo mientras en sus labios se formaba un puchero.

—Tranquilo amor, es solo lluvia —acarició sus cabellos con cariño, dejando un besito en estos.

—Pero la lluvia es de lo más deprimente, además quería ir con mis bebés a caminar por el parque y ahora ya no podemos.

—Claro que si podemos, Kookie —Taehyung sonrió grande al saber el motivo de la tristeza de su pareja. Amaba demasiado a Jungkook—. En cuanto pare de llover podemos ir a caminar. Te prometo que ni la lluvia arruinará este día tan hermoso.

Jungkook salió de sus brazos para mirarlo muy feliz. Nuevamente su buen ánimo regresó. Sus labios se unieron con los de su esposo, saboreando el helado de chocolate que anteriormente Taehyung se encontraba degustando.

No podía esperar el momento en que parara de llover para salir corriendo de la mano de Taehyung y caminar por el parque.

Taehyung claro que sabía a qué se debía ese cambio de ánimo tan repentino. Semanas antes de cumplir el primer mes Jungkook había comenzado a comportarse extraño, con náuseas y vómitos, incluso los cambios de ánimos que él ya conocía muy bien. Todo se lo contó a su madre, ella le dijo que Jungkook podría haber desarrollado un síndrome llamado "Síndrome de Couvade" Que sucedía en padres primerizos, también cuando mantenían una relación verdadera donde ambos estaban tan enamorados y unidos, como era la suya con Jungkook. Eso le dio mucha ternura, Jungkook había desarrollado ese síndrome prácticamente por lo fuerte que era su relación, también porque sería padre primerizo. Ahora estaba un poco más tranquilo y lo entendía, aunque se sentía mal porque Jungkook pasara por lo mismo que él. Iban a ser unos largos y cansados nueve meses, pero estaba feliz y agradecido de tener al "embarazado" Jungkook a su lado.

¡Hola!

Espero que sea de su agrado, esta no será tan larga pues es conforme a los meses de embarazo

Voten y comenten si les está gustando y si quieren que la siga💕

¡Adiós!

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