—Siento que me veo demasiado cool con esto. —decía Jungkook, viéndose al espejo y sacudiendo su cabello un poco, con el fin de tener un look "casual".

—Las mascarillas hacen ver cool a cualquiera.

—Eso no es cierto. —le dio una leve mirada y sonrió orgulloso. —O tal vez sí, pero a mi más.

—Tienes tu ego muy alto, chico. —se burló Jimin desde la cocina, comiendo un par de donas a escondidas, siendo feliz por lo deliciosas que éstas eran.

—Solo digo la verdad, hyung. —terminó de halagarse a sí mismo y fue hacia donde la mayoría estaban reunidos. —¿Y bien, a dónde íbamos?

Namjoon soltó un suspiro, llamando la atención de todos. Jimin caminó hacia los demás con restos de dona en la boca y otro poco en su remera, pero nadie le prestó atención, todos estaban centrados en qué iba a decir el líder. Como nunca.

—Bueno, en realidad, no es nada importante. Solo vamos a hacer compras, ya saben... No hay nada en la nevera.

—Y ya no hay donas. —acotó desde lejos una voz aguda.

—Porque te las comiste. —regañó Yoongi. —Pero ya qué, ven aquí, te voy a limpiar.

—¡No soy un niño!

—Dejando de lado las donas —Jin hizo un ademán a Namjoon para que le preste atención. —, no hay nada para cocinar, ¿entiendes? ¡Nada! ¡Ni una papa! Y luego me reclaman cuando no cocino, malnacidos.

—Por eso iremos de compras, como los chicos independientes que somos.

Todos asintieron de acuerdo con el jefe, repartiendo la lista que había hecho Jin justo en ese momento, con solo las cosas importantes que necesitaban, claro.

Habían dos razones por las cuales Jungkook creía que, al estar ya en el supermercado, las personas aún no los reconocían. Primera: las mascarillas eran demasiado buenas. O la otra: la gente era estúpida. Además de ciega, pobrecitos.

—Tae, necesitamos plátanos, rábanos, duraznos, sandías, tomates, piñas, manzanas, leche, yogurt, helado, ramen, donas, papas, zanahorias, y solo eso nos tocó. —recitó leyendo lo que les había tocado comprar a ellos. Los demás tenían otras listas, y por alguna razón habían quedado ellos juntos.

Razón llamada Kim Namjoon alias shipper oculto del VKook.

—Primero vamos por los plátanos. —sugirió el mayor de ambos y caminaron hacia donde creían que estaban los dichosos plátanos.

Todo iba relativamente bien, solo estaban haciendo las compras como unas personas normales. Y luego apareció aquella chica.

—Disculpen...¿u-ustedes s-son...

No, no somos, holy shit.

—Soy Juan Pablo, y él mi novio Samuel. —Jungkook lo vio confundido, y al ver la mirada llena ayúdame con esto por dios de Taehyung decidió que le seguiría la corriente. Sino se armaría todo un lío.

—Hola señorita, mi novio y yo solo hacemos las compras porque el cerdo se lo comió todo y nos dejó sin nada. —la chica se baja estatura ladeó la cabeza, seguro dudando de su increíble actuación.

Maldita.

—¿Juan Pablo? ¿Samuel? ¿Son extranjeros? No lo aparentan...

—No somos extranjeros, solo que a nuestras madres se les dio por darnos esos nombres y nosotros no podemos ni queremos hacer nada al respecto, ¿verdad amor? —y en este punto es donde Jungkook quería reír hasta morir.

—Sí, de hecho soy un Samuel demasiado feliz con un novio demasiado guapo. Mi Juan.

—Siento que se están burlando de mi. —replicó la chica indignada.

—¿Piensas que no somos novios? —Taehyung repentinamente había tomado al menor de la cintura, tomándolo desprevenido. —Amor dile que somos canon.

—Somos reales no fake.

—Me voy. —y sí, se fue como alma que lleva el diablo. Con decir que casi se cae en plena huida la pobre.

Cuando por fin se fue, ambos estallaron en risas histéricas, siendo esa una nueva experiencia en su lista de locuras.

Oh man holy shit
-huye-