—Escuchen todos— llamó el murciélago a sus compañeros —No sabremos que es lo que Luthor nos tiene preparado, ya nos hemos enfrentado a el y saben que no es un juego. Concéntrense y sigan el plan, sin importar que. La vida de esas personas y muchas del mundo está en riesgo. ¿Entendido?

—Si— asintieron todos.

—Si...— dijo por último el kriptoniano, soltando un suspiro de preocupación.

—Ya lo hemos vencido — dijo Queen para relajar el ambiente —Será sencillo, no se preocupen tanto.

—No te confíes— le dijo el millonario —Sigamos el plan y si algo sale mal, céntrense en el objetivo y en nada más.

——————

—Nos han informado la reciente e inesperada desaparición del famoso y multimillonario Bruce Wayne, aún no sabemos las razones, ya que la policía no quiere dar detalles y la familia Wayne se ha mantenido al margen— hablaba una voz masculina por la televisión —Tenemos varios mensajes de nuestros televidentes, preguntándonos qué a de pasar con el futuro de las empresas Wayne, ya que este era partícipe de la mayor economía en Gótica.

—Pues tenemos algunos contactos, que nos han informado que el cónyuge del desaparecido empresario tomará poder en la empresa, prometiendo seguir con los futuros proyectos de su esposo— relataba la noticia con mucho interés —Aunque nada es seguro aún. Los oficiales tienen sospechas de que pueda ser un posible secuestro.

La familia había puesto esa excusa a la policía, pues muchas personas habían informado la ausencia de su jefe y socio.

La vida, por mas hermosa que suene, nos hace sufrir hasta la locura

—Ahí estas...— murmuró Batman viendo desde el tejado de un edificio abandonado. Atrás de él estaba su pareja, Superman, que miraba con el ceño fruncido toda la transacción de la mercancía, pues no podían interferir de pronto. Se trataba de un arma nuclear muy poderosa y no podían arriesgarse a nada.

—Ya estamos en nuestras posiciones, Batman— avisaron por el comunicador.

—¿Logran ver a Luthor?

—No, solo podemos ver a unos hombres negociando y revisando mucho, pero mucho dinero.

—Está bien. Mantengan sus posiciones, si algo pasa procuren no acercarse ni dañar el producto, las consecuencias serían devastadoras— explicó cuidadosamente.

—Entendido.

—¿Cuantas personas hay?— se dirigió a Superman.

—Como algunas 400. Son muchas— dijo sorprendido —Esto es impresionante.

—Era obvio, un arma nuclear de tal potencia, no podían darse el lujo de tener pocas personas a su cuidado.

—¡Batman! ¡Batman!— llamaban desesperados.

—¿Que pasa?

—¡Quieren activar la maldita bomba! ¡Van a hacerla reventar aquí!

—¡¿Que?!— se alarmó. Volteo a ver a su esposo con el mismo semblante de preocupación —¿Puedes escuchar que dicen?

—No muy bien. Están hablando en otro idioma— respondió preocupado.

—Lo suponía— suspiro. Tomó otra vez el comunicador y los llamó —Escuchen con atención, tenemos que evitar esto cuanto antes.
Hay que intervenir ya, no importa si hay heridos, tenemos que desactivar esa bomba. Estos malditos, además de traficantes, son unos sadicos terroristas.

Dio el aviso —¿Listo, Clark?— le preguntó coqueto.

—Prométeme que te mantendrás a salvo.

—Si, si— se dieron un largo beso y salieron a la acción.

Y le rogamos tanto

—Papá..— sollozaba el pequeño niño en la puerta —Papi..— tocaba la puerta con insistencia, pues quería pasar tiempo con su padre.

Clark se apresuró a aburrirle a su hijo, lo vio debajo. Su carita roja y sus ojitos brillantes de lágrimas. En sus brazos, sostenía firmemente a un Batman con cariño. Junto a él una foto, en al cual salía una persona en especial. Su cabello algo revuelto y su ropa desarreglada, la había pasado durmiendo casi todo el día.

—Ven aquí, campeón— lo cargó en brazos —¿Estas bien, cielo?

El Niño lo miro a los ojos, con su mandíbula temblando y sus ojos volviéndose a empapar de llanto. Se aferró a su padre y se puso a llorar.

—Ya, ya..— acariciaba su cabeza, agradeciendo que su hijo escondiera su cabeza en su hombro y no pudiera ver el rostro de su padre a punto de colapsar.

—Lo extraño, pa— lloraba —Quiero a papá de vuelta ... — sollozaba —Quiero que este aqui, con nosotros.

—Yo igual...— aguantaba las lágrimas —Lo quiero de vuelta, lo quiero... de vuelta.

Para que nos salve de la muerte

—¡Maldición!— gritó un hombre furioso al divisar la capa roja —¡Tomen sus armas! ¡Ya! ¡Ya!

—¡Disparen!— ordenó otro. Al momento, numerosos disparos se resonaban en el lugar,
queriendo darle a uno de los tantos héroes.

—¡Aquaman!— llamó Bruce. Este con su cetro, levantó las aguas y se llevó con el unos cuantos hombres.

Pero para su mala suerte...

Y es esta misma la que nos lleva al limbo

—Que grandes heroes— se burlo un hombre detras de ellos. Al voltearse lo vieron con varias personas atadas, rehenes.

—Maldita sea— gruñó Bruce al ver hasta niños ahí.

—Supongo que no tengo que explicarles, pero de igual forma lo haré— dijo con burla. Pues este era nada más ni nada menos que Lex Luthor en persona —Hacen algo; los asesino, intentan matarme; los asesino, intentan detenerme; igual los asesino.

—¿Acaso crees que podrás con nosotros?— pegunto con discordia Green Arrow, listo para lanzar una flecha directo al craneo del enemigo.

—Ya lo creo...— chasqueo los dedos, capturando de inmediato a los integrantes de la liga, sin darles tiempo a reaccionar. Y de estos, tan solo Superman y Batman habían esquivado las armas. Pues el kriptoniano, por temor a que algo le pasara a su esposo, lo tomó y lo elevó en los aires con el, evitando ser encarcelado.

—Y el más listo se escapa, maldición— suspiro de irritación —Miren, no tengo mucho tiempo de hablar, ya que no quiero morir en esta pocilga, así que...— saco un arma del bolsillo y apunto a la pareja.

Ambos sabían que Luthor era muy listo, así que no debían dejarse engañar por esa arma, pues no sabía lo que pudiera contener. Al momento de escuchar el disparo, Clark reaccionó rápido; lanzando a Bruce a un lado, dándole a él.

La bala atravesó su hombro derecho, haciéndole dar una vuelta en el aire por el impacto y caer al suelo abruptamente. ¿Por qué ocurrió esto?

La bala estaba hecha de kriptonita.

—¡NO!— gritó el murciélago, gateando hacia donde su esposo ya hacía postrado en el suelo
—Despierta, despierta....— daba golpecitos en la mejilla.

—...¿amor?— lo llamó ronco, estaba bastante adolorido.

—Gracias al cielo estás vivo— suspiro de alivio, le dio un cálido beso en la frente.
Se puso de pie y se paró frente a su esposo, siendo como su escudo —Para esto ya, o me veré obligado a matarte— advirtió.

—¿A si?— se burló. Saco una especie de control de su pantalón, y amenazo —Me dejas ir o apretó este botón y todos nos vamos al infierno. Tú decides.— amenazo, al ver que sus hombres estaban inmóviles y que prácticamente se encontraba solo. Se sentía amenazado.

Bruce lo pensó, no podía dejar ir a Lex, pero si no lo hacía inocentes moririan. Y el ya sabía su deber —Bien. Te dejare ir, pero dame el control.

—Mmm...— lo pensó —No.

Sin dar tiempo a reaccionar, activo la bomba. Batman, al ver esto, corrió hacia el derribándolo. Después busco el aparato y trato de desactivar la bomba, al ver que era imposible, lo tiro a un lado.

Hora de ingeniar un plan, pues tan solo tenía 5 minutos....

Continuará...

_________________________________________________

Solo les voy a decir que este fic no es largo.

Entonces sus votos decidieran si lo termino rápido~

Jeje... los quiero xd

Bye~